Mis juegos con los condones.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sebas..
Les escribo este relato de cómo me gusta jugar con los condones.

Al estar en primero de secundaria tuvimos una clase de sexo por lo que a los hombres nos pidieron llevar un condón para conocerlos, así que le dije a mi mama que me compro un paquete con tres.

La clase la daba una maestra y antes de empezar dejo muy claro que el que pusiera desorden le bajaba puntos, nos hablo de las precauciones que uno debe de tener al hacer sexo, para no embarazar a las mujeres o contraer enfermedades sexuales, a los hombres nos hizo abrir el sobre del condón sacarlo para conocerlo y desenrollarlo en dos dedos, al terminar dijo que los tiráramos a la basura, unos lo hicieron y otros lo guardamos, a la salida los inflaos como globos y nos pusimos a jugar hasta con las compañeras.

Al regresar a casa me metí al baño, saque el condón de la bolsa y baje la ropa, ya tiene el pene muy parado, me puse el condón que no me ajustaba bien aunque ya me estaba desarrollando, mi pene era chico todavía pues tenía doce años casi trece, aun así lo deje y me masturbe hasta que me salió el semen quedando en el condón, al terminar lo quite, lo envolví en papel sanitario para que no se viera y lo tire a la basura.

A esa edad uno se masturba del diario, algunos días más de una vez según lo caliente que este uno, aun así no use los dos condones que quedaron ya que no me quedaban, pero paso el tiempo, ya con trece años una noche acostado me estaba masturbado y recordé los condones que tenia guardados y decidí probar si ya me quedaban porque el pene ya lo tenía más grande y grueso, me pare y saque uno del cajón, me acosté otra vez, saque el condón de la envoltura, lo puse en la punta del pene y lo fui desenrollando hasta que lo cubrió todo, solté el pene mirándolo enfundado en el condón sintiendo como el látex lo apretaba, lo agarre y empecé a masturbarme sintiendo diferente a cuando lo hacía sin condón.

Me masturbe acostado, sentado, parado y caminado en el cuarto hasta que me llego el orgasmo saliendo el semen acumulándose en la punta, seguía tan excitado que continúe masturbándome despacio y rápido hasta sacarme otro orgasmo llenando mas la punta con el semen, al terminar solté el pene que punzaba mientras me recuperaba, se empezó a hacerse chico por lo que la punta del condón colgaba por el semen, tenia sueño así que me puse la trusa dejando el condón puesto y no tarde en estar dormido.

Al quedarme dormido y el pene se bajo por lo se salió del condón, parte del semen se salió mojando la trusa, al despertar al otro día, como nos pasa a todos desperté con una gran erección, me destape bajando la trusa el pene salto parado, viendo que no tenía el condón, baje mas la trusa encontrándolo todavía con parte del semen dentro, lo agarre para ponerlo otra vez, al estar desenrollado me costó trabajo ponérmelo, pero el mismo semen ayudo a que se fuera deslizando, ya puesto empecé a masturbarme, no mucho porque escuche que mi mama me llamaba a desayunar, me subí la trusa, me puse shorts y playera para ir a desayunar, seguía muy excitado por lo que el pene enfundado en el condón punzaba atrapado en la trusa, al terminar me mando a hacer la limpieza de mi cuarto, mientras la hacía me sobaba el pene sobre la ropa, me puse mas excitado al estar tendiendo la cama puse una almohada sobre la otra me puse a lado bajando el shorts y trusa, el pene salto muy parado, me recosté en las almohadas metiendo el pene entre las dos y me empecé a mover como si las bombeara, sentí muy rico el masturbarme si agarrarme el pene, no pare de moverme hasta sentir como se me salía el semen, al terminar me pare viendo el condón con el semen atrapado, subí la ropa y continúe con la limpieza aunque el pene seguía punzado debajo de la trusa, por lo que me daba unas sobadas de pene y testículos sobre la ropa.

Al terminar de ayudarle a mi mama me metí a bañar, me desnude y empecé a masturbarme, por andar de caliente con el condón desde que me levante no había orinado, aun así continúe jalando el pene hasta que eche fuera el semen, me metí a la regadera y antes de abrir las llaves deje salir el chorro de orines inflándose el condón que por el peso colgaba, así que agarre el pene de la base para que no se saliera por el peso, entre los orinas se miraban las hebras del semen, continúe orinado hasta que el condón no aguanto reventando y esparciendo los orines y semen, abrí las llevar del agua y me bañe, al terminar saque el condón del pene que ya me colgaba, lo envolví en papel sanitario y lo tire.

Me gusto mucho hacer esas cosas con el condón, pero solo me quedaba uno y no le podía decir a mi mama que me comprara otros y a mí me daba vergüenza ir a la farmacia a comprarlos, por lo que pasaron unos días en los que me masturbe sin usar el que me quedaba, una tarde en la computadora miraba películas porno y me masturbaba, recordé que otras veces al hacer eso me llegaba el orgasmo antes de subir la ropa, salía el semen disparado cayendo en el teclado y pantalla ensuciando, así que saque el condón que me quedaba, me lo puse y mire porno sacándome tres veces semen si el temor de ensuciar y tener que limpiar el teclado, pantalla o piso.

Al terminar subí la ropa y lo deje puesto hasta que me fui a dormir y me masturbe para bajar lo excitado que seguí, me dormí con el condón puesto aunque se me salió otra vez, al despertar me lo puse y como la vez pasada antes de bañadme me masturbe y orine hasta reventarlo.

Ya sin condones, decidí comprar unos aunque me diera vergüenza, no fue fácil fui varias veces a la farmacia entraba y no me atrevía a pedirle a la empleada los condenes y salía comprándole solo un chocolate u otro dulce que vendían, un día fui decidido, llegue a la farmacia, las palmas de las manos me sudaban y el corazón me latía muy rápido por los nervios, me pare fura esperando que no hubiera otro cliente, estaba la misma señorita como de unos veintitrés años, había pensado mucho como pedirlos y decidí decirle que eran para la escuela, para mi mala suerte antes de que salir el cliente entraba otro por lo que no me atrevía a entrar, por fin tome valor, respire profundo entre y me pare en el mostrador, la señorita se paro frente a mi preguntado que quería, estaba muy nervoso con la mano apunte a donde estaban los condones
—–quiero unos de esos para la escuela—

Miro a donde apuntaba, me miro sonriendo, tomo cuatro paquetes diferentes y los puso en el mostrador
—–si son para ti, el tamaño chico es el que te queda, tengo el normal, de diferentes colores, con sabores o luminosos para la noche, todos casi tienen el mismo costo de cual quieres para la fiesta —-
Ella no me dejaba de ver con una sonrisa burlona al saber que tenía vergüenza, saque el dinero que llevaba y lo puse en el mostrado
—-me alcanza para todos—
Sin dejar de verme con su sonrisa burlona
—-si te alcanza, hasta te sobra para otro paquete o quieres el cambio—-
Le señale el de colores, tomo otro y los guardo en una bolsa, me cobro y me dio lo que quedo de cambio, cuando iba a salir
–nene, que te diviertas en la fiesta con los globitos—

Llegue a casa y me metí a mi cuarto, saque los paquetes, todos traína cinco condones a acepción de los luminosos que solo traína tres, en total tenia veintiocho condones para jugar con ellos, les busque una escondite y los guarde.

Una tarde al terminar la tarea decidí ver porno en la computadora, fui a mi cuarto, me quite el shorts y trusa, me puse solo el shorts, saque un condón de color verde y me lo puse en el pene que ya lo tenía parado, regrese a la computadora me senté y busque una página porno, mi mama estaba sentada en la sala mirando su telenovela pero me daba la espalda, abrí las piernas, por la entrepierna del shorts saque los testículos y pene, no podía jalarme el pene porque mi mama podría escuchar, así que solo movía y apretaba el glande sintiendo muy rico, de esa manera tarde mas en terminar sintiendo muy rico, seguía muy excitado y continúe mirando porno y jugando con el pene aunque tenía miedo que mi mama me descubriera, no pare hasta sacarme dos veces más semen acumulados en el condón, al terminar se fue bajando el pene así que me saque el condón, fui por papel sanitario lo envolví y tire a la basura.

Un sábado en la tarde llovía y no pude salir a jugar con los amigos, así que en la sala miraba una película con mi mama, al estar aburrido no tarde en tener el pene parado, fui a mi cuarto me quite la bermudas y trusa, solo me puse la bermudas, saque un condón rojo y me lo puse, regrese a sentarme a lado de mi mama, discretamente me apretaba el pene que levantaba la bermudas notándose, continúe haciéndolo hasta que el pene punzo y echo fuera el semen, mi mama ni se entero que tuve un orgasmo.

Al terminar la película se paro mi mama y fue a su curto a hablar por teléfono con mi abuela, ya solo desabroche y baje el zíper de la bermuda sacando el pene y testículos para masturbarme, lo hacía sentado y a veces me paraba solo estaba atento que no regresar a mi mama, al estar parado mire el respaldo del sillón que tenia separados los lugares por lo que en el respaldo estaba la separación de cada lugar, no lo pensé mucho me puse de rodillas en el sillón, baje la bermuda hasta las rodillas, agarre el pene y lo metí en la separación de los respaldos, comencé a mover las caderas haciendo que el pene entrara y saliera de la separación, sentía muy rico así que lo hacía lento y rápido hasta que ya no aguante me recargue fuerte en el respaldo y me dio otro orgasmo echando fuera más semen, apenas termine empecé otra vez a moverme, a veces sacaba el pene lo agarraba con toda la mano para jalarlo muy rápido por lo que el semen se movía en el glande, lo metía en el respaldo y continuaba moviendo las caderas, estaba tan metido que no escuche que mi mama ya no hablaba y salió de su cuarto me quede muy quieto recargándome fuerte contra el respaldo, fue suficiente para que el pene punzara y echara otra vez semen, al verme mi mama dijo
—que andas haciendo—
Ella desde donde estaba no veía que tenía la bermuda abajo
—-nada solo escuche ruido y mire que era—

Para mi suerte fue a la cocina así que saque el pene del respaldo y me subí la bermuda para sentarme, regreso mi mama y vimos televisión hasta cenar para ir a dormir.

Me gusto tanto hacer eso en el sillón que muchas veces más me fui a masturbar en el con el condón puesto.

Un domingo que fuimos a la playa con el novio de mi mama, me puse un bañador tipo shorts pegado, y me puse una bermuda y playera , andaba excitado así que baje la ropa y me puse un condón amarillo, de camino en el auto al ir en el asiento de atrás desabroche y baje el zíper de la bermuda, baje el bajador dejado de fuera los testículos y pene, paje la playera para que me tapara y me masturbe hasta sacarme semen, al llegar a la playa me acomode la ropa antes de bajar.

Buscamos una de las sombras con mesa y sillas, me quite la playera y bermuda, en el bañador se notaba el pene parado así que lo acomode hacia arriba para que se notara menos, todos nos metimos al mar para nadar y jugar por un rato, hasta que mi mama y su novio se fueron a la mesa a tomar cerveza, me quede en el mar un rato mas, me metí hasta donde el agua me llegaba al pecho, con una mano baje el bañador dejado fuera los testículos y pene con la otra lo agarre y me masturbe, solo paraba si algún niño o niña se acercaban mucho, estaba muy excitado al hacer eso, acomode el bañador y me fui a sentar en la arena con las piernas abiertas, no había mucha gente en la playa, así que con una mano baje el bañador del frente, agarre el pene y me masturbe cuidando que nadie se acercara, en el condón ya se veía el semen que me había salido, no pare de jalar el pene hasta que sentí que terminaba lo solté y me puse de pie sin subir el bañador el pene punzo echando fuera el semen, al terminar acomode el bañador y puse el pene hacia arriba para que no se notara mucho y fui con mi mama para tomar una naranjada.

Al terminarla regrese a meterme al mar, vi que estaba un niño de unos ocho años haciendo un castillo de arena, me pare a su lado mirando que nadie estuviera cerca, metí la mano debajo del bañador y baje el pene para un lado por lo que al estar parada levantaba el bañador, el niño me miro y noto el pene parado le sonreí y empecé a orinar, el condón se empezó a inflar bajo el bañador haciendo un gran bulto hasta que no aguanto la presión se reventó mojando el bañador y escurriendo los orines por los muslos y piernas hasta la arena, el niño sonrió al ver, me toque el pene
—-me gano y me orine—

Me metí al mar y el niño continuo haciendo su castillo, me metí donde me cubría el agua, baje el bañador, saque el condón y lo deje en el mar, y me masturbe hasta echar fuera otra vez semen, hasta que me llamo mi mama para comer, al terminar regresamos a la casa, si novio como otras veces se quedo a dormir, así que ya acostado sabiendo lo que hacia mi mama y su novio, me desnude, me puse un condón de los luminosos y me fui desnudo a la sala a oscuras mirando el pene enfundado en ese condón naranja fosforescente, me puse de rodillas en el sillón metiendo el pene entre los respaldos para mover las caderas sintiendo rico imaginando como se lo hacían a mi mama, me dio orgasmo pero de caliente continúe sin parar hasta que otra vez me salió el semen, al terminar me senté para recuperarme mirando el pene punzar con ese condón, me fui a parar a la puerta del cuarto de mi mama, me agarre el pene con toda la mano y lo jale muy rápido sin parar, hasta que se me salía el semen pero continúe jalando el pene, sintiendo muy rico saliéndome mucho mas semen que otras veces, al terminar solté el pene y me metí a mi cuarto.

Empezó a bajarse el pene por lo que la punta del condón colgaba con el semen acumulado, me puse una trusa y me acosté a dormir, el pene se bajo por completo saliéndose, desperté en la madrugada al sentirme mojado, la trusa estaba tan mojada que parecía que me había orinado, me pare a cambiarle pero antes de ponerme la otra metí otra vez el condón luminoso en el pene que no lo tenía parado, pero al hacerlo no tardo en estar otra vez duro, me masturbe hasta quedarme dormido otra vez, mi mama me vino a despertar para ir a la escuela, al ya estar despierto e ir saliendo miro en el piso la trusa que me quite, la levanto poniéndola en la cama
—-llevas esa trusa también a la ropa sucia—

Cuando salió me pare y se sentía húmeda todavía por el semen, me bañe y lave el condón que me gusto mucho como se miraba en la noche, lo escondí en el cuarto, me puse el uniforme y me fui a la escuela.

En otra ocasión les escribo otras cosas calientes que hice con los condones.

Sebas.