Una tarde de morbo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por nomasda.
Los dos cierran sus braguetas a la vez y se van hacia los wc, me había quedado solo en el aseo…, los veo meterse en uno, pero no cierran la puerta del todo, dejo pasar un minuto y la puerta sigue entreabierta, simbolo inequívoco de que no les importa ser vistos, así que me acerco con todo descaro, abro un poco la puerta para ver en su interior…, allí estaba el viejo sentado en la tapa del wc, con la polla del xaval en la boca dandole una muy buena mamada, los dos me hacen el gesto de entre y cierre.
La situación era de lo más morbosa, el joven recostado en la pared, con los pantalones y el boxer por los tobillos y muy empalmado, no era especialmente grande ni gruesa pero si se la veia muy dura, a punto de reventar…, el viejo sentado en la esquinita de la tapa del wc, y mientras con una mano se engullia la polla del chico y le sobaba los huevos con la otra se estaba marcando una fenomenal paja. La polla del viejo era corta, pero muy gruesa, de esas tipo "tapón de botella de champagne", se notaba al tio la mar de agusto, manandole al xaval, pajeandose él y que yo estuviese mirando la situación.
Evidentemente cualquier situación morbosa hace reacción directa en mi polla, así que a los pocos segundos sentia que mi bulto iba a reventar la bragueta, así que metido en situación no tuve más remedio que darle libertad, y me la saqué, noté la mirada apobatoria a mi polla del xaval y la del viejo.
Empecé a hacerme una paja, despacio, queria acabar con ellos, a la misma vez. Me acerqué a ellos tanto que mi mano daba golpecitos en la cara del viejo…
El chico comenzó a correrse, sus espasmos y sus gemiditos silenciosos delataron su corrida…, el viejo no sacaba la polla de la boca…, así que sin cortarme un pelo me acerqué mucho y empecé a correrme justo encima de la polla del xaval…, me fui corriendo despacio, derramandome sobre su polla, hasta que no me quedó ni una gota de leche. Aparté mi polla de allí y vi como el viejo usaba la polla del joven a modo de flauta travesera, dejandosela bien limpita de mi leche también.
La situación había sido de lo más morbosa, les dí las gracias por lo bajito, guardé mi polla y me dispuse a salir…, miré y no había nadie, así que salí deprisita del aseo para evitar cruces indiscretos.., cuando bajaba por las escaleras mecánicas, observé en mi zapato unas gotitas blancas muy delatoras…, era la corrida del viejo, él también se habia corrido con nosotros.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!