Abusada por sus vecinos
Una recién divorciada es vejada reiteradamente por sus vecinos .
Cuando Mariel se divorcio no tenía muchas opciones donde vivir, su ex un tipo adicto y violento era una amenaza. Cuando me contó de su caso le conseguí un departamento en plena ciudad y esperaba que pudiera reiniciar su vida. Ella tenía 30 años media 1,70 delgada pero bien proporcionada, su cabellera rubia y con rulos hacia que no pasara inadvertida. Todos los días nos comunicamos mediante el chat y si necesitaba algo le prestaba ayuda. Teníamos una amistad de 10 años y debido a la diferencia de edad, yo soy mayor, nunca la vi con otras intenciones. A veces nos quedábamos chateando hasta tarde y me contaba como había sido su día. Cerca de media noche nos despediamos, porque en aquel entonces yo trabajaba mucho y tenía que madrugar, muchss veces la ayudaba con sus gastos diarios hasta que se pudiera mantener. En una de esas noches y agobiada por el calor salió a la terraza y conoció a un vecino de unos 25 años. al principio su charlas fueron cortas pero con los días se transformaron en más largas. Una de esas veces él se ofreció a acompañarla a la puerta de su departamento y una vez ahí forzó su entrada la condujo a la cama y de inmediato se agregó un amigo de la misma edad. La desnudaron y tuvieron un trío lo cual no le pareció mal, pues ni era su primera vez con dos hombres y estos le parecieron atractivos, al cabo de unos minutos alguien golpeó la puerta, se trataba de un hombre mayor de unos 70 años, el cual era comerciante del barrio.El sujeto le resultaba desagradable y violento pero ya era tarde para resistirse. Entre los tres invadieron su cuerpo y taparon su boca para que no grite. No obstante siguieron llegando hombres hasta llegar a un total de unos 25 aproximadamente que la penetraron por todas partes y ella se convirtió en una muñeca para ellos. Ya no tenía voluntad y solo deseaba poder sobrevivir a esa situación y que eso acabara. Le hicieron todo lo imaginable había hombres de varias edades pero sobre todo mayores. Acababan en todo su cuerpo sin usar preservativos por lo cual al salvajismo se sumó el morbo de la leche acumulada en sus orificios.Le permitieron higienizarse un par de veces para seguir así toda la noche. ellos eran insaciables con su presa y ella estaba exhausta. Recién al amanecer se empezaron a ir prometiendo volver y amenazándola para que no contara nada. Ella se dio una ducha y trato de dormir. Ese sería solo el inicio de una experiencia que duro un largo tiempo y donde fue el juguete de todo el barrio. Este es un hecho real y se de los hechos porque me los relató recién cuando se pudo mudar .Si quieren saber más esperen la siguiente entrega.
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