AVENTURA 9 PARTE 2 CONFESIÓN Andrés
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Ay, mi amor, te cuento mi primer trabajo de puta, me pagaron bien cierto?, me sentí feliz, me gusta ser una prostituta de clase, que hagan lo que quieran conmigo, quiero ser todo lo que puede ser una mujer que le gusta el sexo con pasión, una libertina, libidinosa impúdica, obscena, deshonesta, inmoral, inocente, licenciosa, lúbrica, pornográfica, sátira y sensual, te gusta que sea así? bueno, te cuento:
Me fuí con Víctor y Tereza, los hice esperar unos minutos, pasé a nuestra pieza a arreglarme un poco y prepararme para este encuentro, me desnudé totalmente y me puse una capa negra que cubrió mi cuerpo, zapatos de tacón alto de 12 cm, que hacen ver mi cuerpo rico, monumental y nada más.
Salí y me uní a ellos en el ascensor.
Ya dentro, Víctor me tomó la cabeza y me la bajó, se había sacado el miembro y me dijo: -Mámame la verga, puta rica que me tienes caliente y para eso te pago, me introdujo su pedazo y se lo chupé uno o dos minutos que se demoró el ascensor, se lo paré duro y palpitaba en mi boca mojada con su sémen, lo sentí rico y me calenté, me pareció un poco depravado y me calenté con la fantasía que me produjo se mirada: iba a ser su esclava.
Llegamos a la pieza, que era grande con una cama en el centro.
De inmediato me quité la capa que llevaba y quedé desnuda con mis tacos altos ante los ojos de ellos, me veía como una excelente puta rica amante del sexo, sus miradas libidinosas mostraban la lujuria de poseerme y hacerme gozar con ellos todos juntos, Víctor destapó una botella de whisky, llenó los vasos y bebimos, Tereza me abrazó y me besó sensual y ardiente, se desvistió hasta quedar desnuda también, mientras Victor llenó de nuevo los vasos, quería que estuviéramos a tono con el momento de sexo que estábamos viviendo, bebimos de nuevo el ardiente líquido de una sola vez y sentí que ya estaba en condiciones para aceptar cualquier cosa, me sentía mareada pero feliz, un poco como loca, Tereza se mostró desnuda frente a mí, me vino un deseo de poseer su cuerpo hermoso, bien conformado, sus tetas eran redondas y sus pezones exquisitos, se notaba que estaba acostumbrada a estar con otras mujeres, nos besamos otra vez , Victor se acercó, tenía su verga afuera y me ordenó: -Mámame el pene puta libidinosa, muestrame que sabes ser puta!- me agaché y se lo mamé, me gustó más porque estaba ya duro y parado con sémen en la punta, pasé mi lengua por el prepucio, mamé su cabeza y mordí el tronco que era bastante rico y largo, estaba un poco loca con el whisky y sentí que me estaba gustando su verga, me tomó la cabeza y comenzó a culearme la boca hasta la garganta, sentía las vibraciones y latidos del miembro dentro de mi boca y veía que se estaba dilatando más y más, no me dí cuenta cuando acabó, lo sentí en mi boca echando todo su sémen, tragué su esperma densa pero de buen sabor, me llenó la boca con su orgasmo, me gustó su manera de adueñarse de mi, quería que fuera su esclava y su puta caliente, degenerada también.
Me levantó y me besó con pasión y lujuria en los ojos, me tomó de la mano y me dijo: -Ahora anda a ganar el dinero que pagué por tí, puta rica, anda a bailar para mí-.
Se escuchaba una música suave en la radio del hotel y comencé a moverme lentamente mientras ellos se sentaban en los sillones, Víctor se desnudó y Tereza le acarició el miembro lleno de sémen todavía, mientras me miraban con delicia y pasión.
Comencé a bailar, ellos siguieron bebiendo whisky, acariciaron sus partes más íntimas, mientras bailaba ellos se masturbaron uno al otro, me moví más provocativa, quería calentarlos, que desearan mi cuerpo, les mostré todo, la cara con mi boca abierta, puse mis dedos en los labios, los sorbí, me acaricié los senos y apreté mis pezones, murmuraba palabras de placer, mis manos recorrieron mi cuerpo, tomé mi vulva y me masturbé, me dí vueltas y moví mi culo entero moviéndome al compás de la música, abrí las piernas y les mostré mi zorra caliente, metí los dedos entre los labios de la vulva y después los lamí para probar el jugo de mi propia concha, los miraba y les enviaba un mensaje de calentura y líbido, lujuria y entrega, les dije: – hagan lo que quieran conmigo!- , ellos siguieron bebiendo , cada vez que bailaba cerca de ellos, me tocaban en cualquier parte del cuerpo, me acariciaron entera, metieron sus dedos en mi concha , yo les mamé la zorra y la verga varias veces, seguí bailando, me ofrecieron más Whisky y me sentaron en el medio de los dos, comenzaron a besarme, mamaron mis senos, Tereza me manoseó la vulva y el clítoris, me dice: -Qué rica tienes la zorra puta degenerada, te la quiero comer y hacerte acabar con mi boca, la lengua y mis dedos, quieres que te la coma entera?, yo estaba super caliente, le contesté: -Sí, sí, cómeme la zorra mi amor, muerdeme el clítoris, soy tuya!- metió su cabeza entre mis piernas y chupó la vulva varios minutos.
Víctor, mientras tanto, tomó unas pinzas y apretadores y los puso en mis pezones, me besó primero en la boca, luego mamó mis senos y chupó mis pezones, los mordió suavemente y los apretó con las pinzas despacio, me dolió primero, él estimulaba las puntas de los pezones con su lengua, yo estaba gozando sintiendo dolor, apretó más y dije: -Oh! mi amor, qué rico me haces, qué dolor más rico, sigue, apreta más fuerte! oh! qué rico eres para chupar, eres un degenerado que me hace daño, sádico, sigue! apreta más fuerte! qué gusto, me estás provocando un orgasmo mi amor rico!-, Tereza seguía mamando mi zorra y el clítoris y lo mordía también, el placer era exquisito, le miré el miembro a Víctor, estaba parado goteando sémen, se lo tomé, estaba duro, le mamé la cabeza y lo introduje en mi boca chupándolo, así el placer era completo, Víctor apretó las pinzas otra vez y me hizo exclamar: -Oh, qué dolor más rico!-, me venía el orgasmo y los dos me estaban haciendo acabar, Víctor me gritó -Te duele, puta? te gusta ser masoquista? putita culeada, mama y acaba! Sentí un orgasmo fuerte y mi mente mezcló el dolor y el placer, mientras exclamaba: Qué rico el orgasmo! qué goce! Oh! mis amores , sigan, sigan!Sentí la verga de Víctor lanzando el sémen, acabó en mi boca, me la llenó, me poseyó, me maltrató y me gustó todo lo que me hizo, me trató de puta caliente y lo era, me sentí masoquista, me gustó ese placer.
Descansamos unos minutos y bebimos dos vasos de whisky que Víctor nos sirvió, Estábamos mareados por el alcohol y nos acariciamos con Tereza, juntamos nuestras lenguas con mucho ardor y calentura, en su boca estaban mis jugos que bebió, calientes, ardientes, yo quería seguir, quería mamarla, comerle la vulva, ella me hizo acabar con su boca experta, todo su cuerpo y sus besos eran divinos, llenos de lujuria.
Nos fuimos a la cama y nos recostamos, estábamos desnudas, se subió encima y me puso su zorra en la boca, quería que la mamara, se inclinó y comenzó a besar mi vulva, hicimos un 69 de inmediato.
Yo gozaba chupando esa concha tan rica que tenía, le pasaba la lengua.
mamaba y bebía de sus jugos vaginales, toda su vulva palpitaba y se movía en mi boca, estábamos en una cacha de zorra y boca, mientras ella ponía sus dedos adentro, mordía mi clítoris y lengueteaba toda mi zorra ardiente y deseosa de sentir miles de sensaciones.
Víctor no tardó en unírsenos, trajo un dildo negro de 30 cm.
para penetrarnos y un vibrador de cabeza cilíndrica, Tereza y yo estábamos en un estado especial mamándonos las vulvas, gozando de las lenguas y las chupadas ricas que nos hacíamos.
Víctor me besó y se puso a tocar mi cuerpo, deslizó sus manos por mis tetas y me pellizcó los pezones, -estás rica, me dijo- eres buena para el sexo y lo haces bien con mi mujer también- , después acarició el culo de Tereza y la besó, vió mi cara ardiente y me dijo: -te ves tan caliente que te voy a hacer caricias extras, mi puta degenerada!-, Tereza se hizo a un lado y él se adueñó de mi zorra, mientras ella tomaba mis senos y los acariciaba, yo recostada me dejaba tomar y hacer lo que ellos querían, al final me pagaban una buena suma de dinero por mis servicios, me sentía bien puta.
Le dije:-quiero que me metas tu pedazo, mi amor, me gustó mucho cuando te lo chupé!-, No, -me dijo- te meteré este dildo y te daré gusto con el vibrador-, me abrió las piernas y metió sus dedos primero, me penetró fuerte, me gustó de inmediato, fueron tres al principio, con el pulgar me masajeaba el clítoris, exclamé: -así, qué rico, métemelos todos de una vez! quiero sentirte dentro de mí como sea!, la boca de Tereza comenzaba a hacer efecto con sus chupadas y mordicos en mis tetas pero necesitaba un pedazo de verga en mi zorra.
Víctor chupó mi zorra y sorbió mis jugos, tomó el dildo de 30 cm.
, lo puso en la entrada de mi concha y me lo pasó por el clítoris presionándolo en la entrada como si me lo fuera a meter, en su otra mano tenía el vibrador que probó de inmediato y me hizo estremecer de gusto cuando lo puso en mi clítoris, el gusto era fuerte, sentía a Tereza mamar y el vibrador me daba sensaciones exquisitas en mi clitoris.
Victor introdujo la cabeza del dildo en mi vagina mojada por la excitación, abrí bien mis piernas, el dildo era bastante grueso, me iba llenando, Victor lo metió un poco más y la verga entrando de a poco, -Oh! Victor, qué rico me haces, métemelo todo entero, lo quiero en mi!, estoy super caliente, oh! qué grande el pedazo, me abre entera mi conchita-, Tereza se aprovechó de mi calentura y subiéndose en mí puso la vulva en mi boca tomándome la cabeza y obligándome a chuparla y comerla, el dildo y el vibrador me iban produciendo ya el orgasmo, Victor metía el dildo cada vez con más fuerza y más rapidez, estaba mojada, me movía y me lo clavaba adentro, quería tenerlo entero, él se dió cuenta de mi pasión y lascivia y me penetró completa, sentí todo el dildo en mi zorra, grande, moviéndose, golpeándome, abriéndome, sintiendo que me venía un orgasmo exquisito, una verga así me penetraba, -Ah!- exclamé- qué tremendo miembro me metes, amorcito sádico, me rompes la zorra!-, casi no podía hablar
Tereza se movía cada vez más rápido en mi boca y Victor metía y sacaba el tremendo pedazo, el vibrador en el clítoris, no pude más y acabé en un orgasmo fuerte y maravilloso, me sentía plena, tenía todo el dildo metido en mi zorra, Tereza acabó conmigo, me llenó la boca con sus jugos ricos que emanaban de su vagina: -Oh! puta degenerada -decía- eres la mejor para mamar zorra, chupas rico mi amor, así, así, muérdeme los labios y el clítoris!, Victor tenía su verga parada y dura, quería seguir gozándome, yo estaba acostada y desnuda, las piernas abiertas, mostrando mi orgasmo exquisito, mi cuerpo vibrando todavía, se subió encima de mí y me introdujo su pedazo de verga, dura, mojada de sémen, parada total, vibrando en su mano, -Oh! mi amor, así así, qué rica es tu verga caliente, -exclamé- dame tu esperma rica, házme tuya para siempre mi sádico, soy tu esclava, tu puta, te pertenezco!- se movía dentro de mí, yo levanté las piernas, él tomó mis tobillos y metió más adentro su pene, causándome dolor, -Oh! Victor, qué dolor más rico siento en el fondo de mi zorra, culéame mi chulo putero!,
Moví mis caderas, mi culo y todo el cuerpo haciéndolo gozar, mis movimientos eran de locura, lujuria y deseo, me hundía en su verga, mi mirada era perversa e inmoral, lo hice acabar como la mejor puta, de su miembro, duro y parado al máximo, comenzaron a salir chorros de sémen que caían dentro de mi zorra, causándome otro placer más: -Dámela, dámela toda mi amor!- grité- que acabas rico!-
Nos bebimos el último trago de whisky, abrazados y besándonos los tres, fué una buena experiencia, además de una buena ganancia.
me comporté como una verdadera puta.
Fui a mi pieza y me arreglé para volver al piano bar, me estaban esperando.
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