El Harem 7: Vacaciones en Las Vegas I
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por lucius7.
Los tres veían aun el video en el cual estaba Anita en una habitación, la escena anterior había terminado y ahora se formaba una nueva.
Al parecer, ya Ana se había duchado pues aparecía limpia sobre una cama vistiendo un short de licra muy ajustado y un top que cubría sus nacientes pechos.
Mientras tanto, el flácido pene de Carlos había abandonado la cavidad vaginal de la pequeña Sara quien aún descansaba de espalda sobre su pecho.
El semen que salia, se escurrio hasta caer a gotas sobre los testículos de Carlos quien solo acariciaba el plano pecho de la nena sintiendo esos hermosos pezones que apenas se sentian inflamados.
La escena de la televisión ahora mostraba a Ana siendo desvestida por un hombre mientras la besaba.
Pronto quedó desnuda frente a él quien también lo estaba, acostado sobre su espalda seguía besándose con ella.
Poco a poco, Ana bajo hasta llegar al pene del hombre y comenzo a mamar como ella sabia hacerlo.
Siguió así mientras era tocada por la mano de su acompañante, le puso saliva en uno de los dedos y lo introdujo en su vagina.
Ana gemía con el pene dentro de su boca cuando un segundo dedo entro en ella, así durante varios minutos hasta que la niña se incorporo y subio encima de aquel hombre.
Por su propia cuenta, tomó el pene y lo dirigió hasta la entrada de su vagina y bajo hasta que sus nalgas sintieron la piel del hombre a quien montaba.
El solo la tomo de la cintura y ella comenzo a subir y bajar chocando sus nalgas con la piel de su amante quien gozaba con los ojos cerrados.
No pasaron más de 15 minutos cuando aquel hombre terminó por llenarle la vagina con su semen.
Acto seguido, aquel hombre se retiro, salió de escena y un segundo hombre apareció.
El hombre subió a la cama ya desnudó y tomó a Ana de las piernas jalandola hacia el borde de la cama.
Le abrió las piernas y la penetro sin pensarlo, Ana suspiro al sentirse invadida tan de repente pero la lubricación causada por el acto anterior facilitó la entrada así que no sintió dolor alguno.
El hombre bombeo por cerca de 10 minutos y soltó un gemido el cual indicaba que había terminado.
Saco su pene y se retiro para darle paso a un tercer hombre, este tomo a Ana y la giró para dejarla de a perrito y al igual que su predecesor, solo apunto a la vagina de la niña y la penetro.
Anita estaba con los ojos cerrados recibiendo las embestidas de aquel hombre quien la tomaba fuertemente de la cintura.
Las nalguitas de ana chocaban contra el vientre de aquel hombre haciendo un sonido muy excitante.
Aquel hombre duro casi lo mismo que los anteriores hasta que le lleno por tercera vez la vagina de semen a la pequeña Ana.
Un cuarto hombre entró y éste escogio el ano de la niña, Ana aun seguía en 4 sobre la cama así que aquel hombre se dedicó a lamer y chupar el rico anito de la nena mientras separaba sus diminutas nalgas con sus manos.
Abría las nalgas de Ana lo mas que podía para facilitar que su lengua pudiera entrar un poco dentro de su ano, unos minutos después, escupió sobre la punta de su pene y lo dirigió hacia la entrada trasera de su pequeña ninfa.
El esfínter de Ana se abrió al instante al sentir la presión del glande del pene que la invadía, casi de inmediato, la mitad de aquel largo miembro se alojó en el recto de Ana quien solo gemía de placer al sentirse llena.
Aquel hombre duro cerca de 20 minutos bombeando el hermoso y redondo culo de Ana quien solo aguantaba las nalgadas que le daba haciendo que sus glúteos se enrojecieran justo como a Carlos le gustaba.
Pasados los 20 minutos, aquel hombre tomó a Ana por la cintura jalandola hacia él empujando lo más que pudo con sus caderas para hacer que la penetración fuera mayor, bufo como un toro y terminó por llenarle el ano de semen.
Al retirar su pene, quien manejaba la cámara se acercó para grabar como el ano de la nena había quedado completamente abierto y rojo por las embestidas sufridas.
Sin importar esto, un quinto hombre entró y la penetro en el ano también, así pasaron varios hombres hasta que terminaron todos, Carlos pudo contar 15 hombres diferentes.
Ana quedó en la cama desnuda llena de semen por todos lados, su vagina y ano estaban completamente irritados y escurriendo de semen.
El hombre del inicio del video apareció en escena:
Hombre: Espero disfruten de este video al verlo al igual que nosotros gozamos al filmarlo.
La putita nos ha hecho gozar como solo ella sabe, en cuestión de 12 horas estuvo con cerca de 30 hombres diferentes, bebió el semen de muchos y recibió en el culo o en la vagina el de varios más, buenas noches y hasta la próxima.
El video terminó con una recopilación de fotos que se habían tomado durante la filmación del video.
Para este entonces el pene de Carlos ya estaba duro de nuevo y Carmen estaba de rodillas mamando mientras masturbaba a Sarita.
Carmen por fin se levantó y subió sobre Carlos metiendo su pene en su vagina quedando Sara entre los dos.
Carmen metió dos de sus dedos en la vagina de su hermanita mientras esta gemía y se besaba con Carlos, así duraron varios minutos hasta que Sarita tuvo un orgasmo que causó que Carlos se viniera dentro de Carmen con solo escuchar sus gemidos.
Los tres se ducharon juntos acariciándose, era toda una calamidad poder ver como Carmen y Sara se besaban apasionadamente.
Si su madre supiera lo que hacen entre ellas, aunque Carlos estaba seguro que no le importaría mientras siguiera recibiendo dinero de su parte.
Así, los tres terminaron de bañarse y se vistieron.
Dias después, Carmen y Sara fueron a la tienda a comprar comida y cosas que se necesitaban mientras Carlos se quedo en casa haciendo unas llamadas.
Cuando Carmen y Sara regresaron de la tienda, Carlos aún estaba en el teléfono haciendo llamadas y les pidió que por favor no lo molestaran metiéndose a su oficina.
Varias horas pasaron hasta que Carlos terminó lo que tenía que hacer, se sentó en la sala al lado de Sara y la abrazo para quedarse con ella viendo la tele al lado de Carmen.
Llegó la noche y todos se fueron a dormir, por la mañana Carlos salió temprano dejándole una nota en la mesa con instrucciones a Carmen.
Al despertar, Carmen vio la nota sobre la mesa y decía que tenía que empacar maletas para ella y para las nenas para toda una semana, a ella se le hizo un poco raro pero igual obedeció pues Carlos sabía lo que hacía.
Carlos llegó como a las 2 horas con una camioneta familiar que había rentado, desayuno con sus tres mujeres y les dijo que irían de paseo a Las Vegas, que les tenía una sorpresa.
Obvio Carmen sabia mas o menos de que se trataba por la mirada de Carlos, pero aun así estaba emocionada de ir.
Todos subieron a la camioneta y por varias horas condujeron hacia la ciudad del pecado, Las Vegas.
Llegaron a un hotel muy elegante, Carlos bajo y le pidió a Carmen y a las nenas que esperaran, después de unos minutos, Carlos regresó y entró al estacionamiento subterráneo donde una mujer los esperaba.
Acto seguido, un maletero les ayudó a bajar su equipaje y lo llevó hasta el elevador donde entraron todos incluyendo la mujer quien era la gerente.
El elevador subió por varios segundos hasta que se detuvo en uno de los pisos superiores del hotel.
Gerente: Señor ……….
En este piso sólo hay 4 suites usted y su familia ocuparan la número 4, cuenta con tres habitaciones, sala familiar, bar, cocina y 2 baños.
Además de que por cortesía, este es el único piso del hotel donde no hay cámaras, por obvias razones.
La mujer le lanzó una mirada a Carlos y después a las nenas, en especial a Sarita.
La mujer continuó:
Gerente: Los demás invitados se alojarán en cada una de las otras 3 suites, este elevador solo funciona con esta tarjeta, y solo usted y otras tres personas, la tienen, obvio yo tengo una también por seguridad.
Sientanse libres de hacer en este lugar lo que ustedes gusten, el piso es a prueba de sonido así que no pierdan cuidado al divertirse.
Una vez más, miró a las nenas y esta vez a Carmen quien solo atino a sonreír y ahí fue que se dio cuenta que la gerente del hotel sabía de las acciones de Carlos.
Además, parecia ser que no solo ellos estaria ahi, vendrian mas personas.
La gerente los llevó hasta la puerta de su suite y se despidió.
Entraron y Carlos les dijo que se instalarán mientras el recibia una llamada.
Así lo hicieron Carmen y las niñas, al terminar fueron a la sala donde Carlos las esperaba y les dijo que tenían que bañarse y vestirse muy sensuales pues tendrían fiesta.
Un par de horas después, estaban los 4 en la sala esperando la visita que Carlos había dicho, las tres vestidas muy sensualmente.
Carmen, con una falda negra muy cortita que dejaba ver sus glúteos, debajo de esta solo una tanga del mismo color y una blusa de tirantes sin sostén dejando ver sus pezones por la tela tan delgada, pelo suelto y lacio.
Ana, traía puesto un vestido azul cielo pegado al cuerpo y muy ajustado, la tela era sumamente delgada lo cual causaba que el color semi rosado de sus pezones fuera visible, una tanga de un azul más oscuro resaltaba dejando ver sus nalgas a través del sexy vestido.
Su pelo en una cola de caballo que la hacía ver muy hermosa y sexy.
Sarita por su parte, traía puesto un short blanco de licra muy ajustado que apenas y le cubría sus tiernas nalguitas, aprovechando que esto era su mayor atractivo, Carlos decido vestirla de esta manera.
Una blusita de tirantes color rosa claro y unas coletas que la hacian ver mucho mas infantil de lo que ya era.
En verdad era una calamidad poder ver a las tres sentadas juntas, a los pocos minutos llamaron a la puerta.
Cuando Carlos abrió era la gerente del hotel, entró y mirando a Carmen y a las niñas en el sofá solo dijo:
Gerente: Perfecto, las tiene listas, los primeros invitados acaban de llegar.
Estarán en la suite 1, esta es la tarjeta para que pueda entrar, hay dos hombres armados a su disposición fuera de la habitación por si los llegara a necesitar.
Disfruten!!
Al salir la gerente de la habitacion, Carlos se dirigio a Carmen.
Carlos: Bueno, Carmen, tu y Ana irán a la suite 1, presentense y digan que van de mi parte, atiendan a los invitados como ustedes saben.
Mientras tanto, Sarita y yo nos divertiremos aquí.
Carlos tomó a Sarita de la mano y se la llevó hacia una de las habitaciones.
Carmen y Ana tomaron la tarjeta y salieron rumbo a la suite número 1, sabían lo que encontrarian, y sabían lo que tenían que hacer.
En verdad estas serian unas muy buenas vacaciones en Las Vegas.
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