El Incubo del Internado – Sangre Nueva 17
Finalmente llega la Fiesta de Halloween, con todas las delicias eroticas y peligros que por lo general trae, lo que esperaba Brat….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…
17
No sería tan agradable, pero el mendigo espectro que llegó a mi cuarto dejaría escuchar un par de lamentos horrendos, carajo, se me quedaron los cabellos blancos de la impresión, en serio, no estoy jugando, a la mañana siguiente le comenté a la señorita Maron que vino a verme, también se llevó a Leila que durmió conmigo, fue delicioso despertar con ella desnuda sobre mí, quería volver a metérsela, su coñito seguía escurriendo cuando se levantó, mirándome sonrojada, como sea, me advirtió que no debía burlarme de las cosas ahí, de hecho luego iría con el jefe Jay, quien me dijo lo mismo, pero cuando se enteró que todo fue porque seguro este quería ahora usar a Leila en sus planes, le calmó. Eso me gustaba, el director no me decía tanto por eso, satisfacer mis deseos sexuales, me hablaba abiertamente, soy de fácil comprensión, me aburren las clases, sin embargo escuchar a otros y entenderlos, es sencillo, empezaba a comprender que ocurría en platicas ajenas, prácticamente un espectro de una secta, la que invocó al incubo seguía ahí, pues no lo hizo bien, era un tarado, desató la maldición del incubo, misma que sigue hasta nuestros días, se que faltaban datos, pero eso me daba a saber cosas, además no se quejaban porque me estuviera cogiendo a mis compañeras, creo que era porque el mismo jefe tenía a su harem ahí dentro, cogiéndose a cada maestras cuando le diera en gana, haciéndole tanto como quería, no era un hipócrita, además ahora se le quedaba pegada Brandy, quien quería seguramente quedar preñada cuanto antes.
Bien, entonces esta vez atacó 2 veces, mm, pobre infeliz, pero no podrá liberarse nunca, está condenado para toda la eternidad, carajo, provocó demasiados problemas, bien, te encargaré que sigas con lo tuyo, como dijiste, eres de los que trabaja aquí, no eres guardia, pero justificas tu existir, bien, solo no abuses – me decía el jefe un tanto incomodo, pero yo estaba contento, pues me estaban tomando en serio.
No se preocupe, y digo, la fiesta empezará más tarde, así que voy a arreglarme, aunque este cabello ahora me ayudará, no es permanente ¿cierto? – decía al ver mi pelo blanco.
No, nunca lo es, a menos que tengas más de 60 años, en una semana se recuperara, ahora empieza a revisar que sucede, algunos amigos tuyos vendrán ¿cierto? Seguramente muchos invitados podrían acabar muy mal – dijo el director mientras sonaba la puerta de la oficina.
Muy para mi sorpresa, encontraron a Peter desnudo, durmiendo fuera de los edificios, algo le estaba pasando, pero no sabía que, era una locura, y ahí, al preguntarme, como si aclararan algo, les recordaba que Veronica estaba tramando algo, como estaban más pendientes de los fantasmas dentro no le hicieron caso a la mini-bruja, así que mandaron al culo-gordo a una unidad médica militar fuera, y a mí de regreso al internado para seguir vigilando. Cabe decir que estaba aprovechando los pasillos del fisgón, de hecho era una red de túneles que me permitía verlo todo, si quería podría ver los patéticos intentos de Milton por ligar, mintiendo cuando podía, aunque de alguna manera lograba besarse con varias chicas, Ned por otra parte le gustaba ocultarse detrás de unos arbustos para cogerse a las chicas, los bravucones por otra parte usaban un baño para planear sus trampas, hasta Randal, era tan mezquino para inventarse algunos fraudes y lograr chantajear a las chicas, estas lo descubrían en el engaño y lo cacheteaban, mas cuando la prefecta estaba cerca, en serio nada de eso le iba a servir, carajo a mi tampoco, es que unas salieron lesbianas, otras muy pervertidas.
De cierta forma creo que me volví una especie de chismoso, aunque cabe decir que el director no estaba interesado en nada de las cosas que harían, trampas o abusos, debía buscar lo oculto de los demonios o fantasmas sobre la actividad sexual paranormal de la escuela, notando solo poltergeist o como los mas perdedores como Scott llegaban a tener algo de pegue con las compañeras, que no dejaban de estar casi ofreciéndose a cualquiera, notando que empezaban a usar tangas que se veían deliciosas, o se inclinaban dejando ver mejor sus tetas, hablaban de manera cachonda, casi sugiriendo ellas cosas para tener las vergas de mis compañeros dentro, era una locura, pero no encontraba en nada a Veronica, sin embargo pasaba a segundo plano, cuando los fantasmas movían cosas como faldas, acosando a las alumnas, aunque pudiera haber algo más, pues una vez en el baño una sentía que la estaban masturbando y se corrió entre gemidos, otra en las regaderas que se le hizo tarde, se vio como si le agarraran las tetas, era increíble ver como se le movían como si las pellizcaran por manos invisibles, otra creo que estaría tragando una verga fantasma, y lo más impresionante es que acabaría llena de alguna clase de plasma espectral, y supuse que era el incubo, que iba haciendo de todas unas rameras.
Estaba en eso, trabajando en los pasillos del fisgón, cuando escuché a miss Kim preguntar por mí, era con Alison, una de las tantas chicas, pero no sabía nada, parecía que tenia visitas, eso me hizo fijarme en la hora, no era tan temprano, así que salí de mi escondite, fui a verme con la prefecta, carajo, estaba usando un vestido como el del can-can, pero todo en negro, con detalles de bruja, se le notaban unas medias negar y tacones, se veía preciosa, aparte que las tetas daban la tentación de tocarlas, ella me avisó que debía ir a la puerta, pero en el camino me seguiría diciéndome en voz baja.
Viste algo muchacho – curiosamente me preguntaba como si fuera parte de todo.
Lo usual, mamadas, agarrones de chichis, sobadas de coños, a las alumnas, y los chicos cogiendo en cualquier lugar, lo mismo que los últimos días – le dije como si fuera usual.
Cielos, parece que las cosas no cambian, es lo mismo desde hace años – decía la prefecta mientras llegábamos a la entrada y ahí estaba mi mamá.
También estaba el culo gordo de mi padre, pero ese no se bajó, la última vez puso cara de baboso cuando vio a una de las maestras, y no era para menos, las tetas de Miss Holly son las mejores, cualquiera querría tenerlas en la cara, aunque al verlo de lejos, se estaba comiendo con la mirada a la prefecta, pero dejando de lado eso, sucedería:
Mijo, que bueno que apareces, ya se nos está haciendo tarde, espero no te moleste, pero nos urge que nos cuides a tus hermanas por unas horas, tesoro – decía mi madre de manera dramática, como si fuera el fin del mundo, y salían Lizy y Meg del carro, donde se acomodaron a su lado, ambas usaban sus uniformes, parece que fueron a una fiesta escolar, tenían confeti encima, traían unas maletitas cargando, seguro eran sus disfraces, porque sería imposible pasar Halloween sin vestirse de algo.
Bueno prefecta, le encargo a mis niñas, nosotros estaremos ocupados, seguro que no hay problema, es una fiesta general – decía mi mamá algo insistente.
También ustedes están invitados, pero el baile de los alumnos es a las 9, terminará a las 12, dentro de las instalaciones, así que tengan en mente eso – decía muy seria Miss Kim, pero se daba cuenta que no estaba en sus planes regresar, al menos no ese día.
Luego de ello se fueron ambos hombres, la prefecta me dijo que me disfrazara de una vez, pues la fiesta debía ser con atuendo, y necesitaba estar listo, podía dejar mis labores por el momento, además debía cuidar de mis hermanitas, yo acepté eso, aunque estaba ansioso por hacer de las mías con ambas, sabía que algo desataría el caos y podría cogérmelas a todas, eso era un delirio delicioso, pero obedecería tanto como pudiera. Me las llevé a mi celda, ahí se acomodaron y les dije que se cambiaran, pensando que tendrían sus atuendos, aparte quería verlas desnudarse frente a mí, mientras yo hacía lo mismo, así pronto saqué mi uniforme militar de soldado, uno en color negro, con una gorra de cuernos y en el cinturón estaba una cola de diablo, se que era ridículo, pero estaba listo para la guerra, jejejeje. Curiosamente ellas se me quedaron viendo, no hicieron nada, se quedaron nerviosas, y luego reaccioné con la idea de que era un juego y las fui desvistiendo, les saque las playeritas, revelando sus pechitos y no me pude resistir a morderlos, iba con ambas al mismo tiempo, y también sobándolas, sus cuerpecitos respondían a mis caricias, cuando les bajé las faldas, ellas mismas me mostraron algo delicioso, traían calzoncitos divertidos, Lizy uno rojito con un diablito en la vulva, y Meg uno como de calabacita que hacía ver más redondo su culito, pero no me importó, en segundos las dejé apenas con calcetas, como me hubiera gustado dejarlas en la cama para metérselas, solo que la fiesta era en menos de una hora, necesitaba estar listo, y como la prefecta me vio, debía llegar con ambas, no creo que me aguanten el cogerme a mis hermanas menores, seguro si me corren.
Oye hermanito, la verdad es que estamos en problema – dijo inquieta Meg llamando mi atención.
Si, papá por la falta de dinero no nos compró disfraces – aclaró Lizy dejándome sorprendido.
Pero si vi que se los compró, lo presumió en redes – le dije sorprendido.
Le fallaron las cuentas y los tuvo que regresar – me dijeron molestas.
Era lo que faltaba, en serio que ese hombre era un caso perdido, e iba a llamarle para reclamar, pero en eso me acordé, digo, tenía las cajas justo en frente, las de mis premios, por alguna razón que no supe, las chicas de mi “harem”, quisieron que eligiera en los eventos algunas de las cajas misteriosas, también en los tiquets me salieron algunas, así que fui a revisar, esperando hallar algo que sirviera, carajo, me fui a topar con unos disfraces diminutos, que al sacarlos, rápidamente gustaron a mis hermanitas, quienes no dudaron en tomarlos. Eran como mallas pero muy ajustadas, de tela suave, y fue una delicia verlas vestirse con ellas frente a mí, aunque disfruté de verlas desnuditas, así como varias veces les había hecho cositas, me dejaron verlas con toda claridad, incluso parecían querer que las viera, hasta se dejaron sobar levemente, sintiendo sus pieles tan suaves, que me resultaban irresistibles, quería romperles el coño, pero el tiempo no me lo permitiría, solo pude gozar de verlas desnuditas, listas para coger.
Espera tantito hermano, luego podremos hacer travesuras – me dijo ajustándose el leotardo Meg, notando que sus tetillas estaban bien marcadas en su tela, parecía que las fuera a romper.
Si, mas tarde podremos hacer de todo, mi cuquita quiere sentirte dentro – agregó Lizy con un tono de voz muy seductor, carajo, que ganas tenía de romperles los coñitos, de hecho la tela se le quería meter entre las nalgas, era delicioso.
Aparte de ello los accesorios zapatillas como de ballet, medias, les terminarían de darles un aire antojable, y curiosamente se pondrían algo de maquillaje, se notaba que Liz era más coqueta, pues supo ponerse sombras, labial, también a la menor, pero casi se nos acaba el tiempo, y es que durante todo el rato pude escuchar, como hicieron algunos arreglos en la plaza escolar, seguro llegaron algunos hombres a acomodar todo, y al salir, pude notar lo evidente, un grupo de chalanes estaban dejando mesas y sillas, todos con prisa, se notaban asustados, seguro era el miedo que provocaba la escuela. Les tomó una hora, salieron prácticamente huyendo, si acaso también acomodaron una especie de malla sobre nosotros para que se viera más oscuro o no nos diera el sol, dejando además un escenario ideal para que empezara el evento, mientras que los maestros hacían unos últimos acomodos. No tardaron en darnos lugares, parecía que un chico elegía la mesa, y sus invitados se les unían, en medio de todo aquello, llegaron algunas personas, carajo, se vieron a los padres de Peter, el hombre era como un cerdo, se quedó al lado de su hija junto a su esposa, también llegaron los de Benjamin y Grace, wow, el papá era todo un galán, pero la madrastra era demasiado sexy, aunque llevaba a 2 niños pequeños, mm, seguro el hombre querría darle verga cada que pudiera, se trataba de una súper belleza de cuerpo escultural, todo estaba en su lugar y la cara era de ensueño, mierda, que ganas de verla cogiendo por alguno de los espantos, chupando verga o dejándose clavar todo.
Luego de ello me acomodé en mi lugar, que curiosamente fue puesto cerca del escenario, creo que eran lugares según nuestros promedios, así que estaba bien acomodado, y mis hermanitas se sorprendieron, también durante eso fueron llegando más personas, los padres de Viviana, Jesie, los de Leila eran algo normales, pese a ser una gótica, ja, los papás de Shanon y Jimmy se veían tan refinados, de esos tipos que siempre parecen estar oliendo algo asqueroso, cuando todo se calmó, se harían algunos saludos, avisando que en breve comenzarían con un desfile de modas o parecido, las niñas danzarían con sus trajes y lo mejor de es que todas iban con prendas bastante sexy, no escondían sus encantos, casi como ofreciéndose de manera cachonda, yo apenas era una especie de soldado demonio, o lo que fuera, mis hermanitas un par de hadas seductoras, pero las demás, wow, se habían puesto de acuerdo para quedar como si estuvieran esperando verga, carajo, aunque antes el papá de Jesie llegaría conmigo diciendo:
Joven Bartolomeo, veo que realmente volvió, me dijeron que no estaba y eso me hizo sentir extrañado, que bueno verlo aquí, con las niñas, y su ¿papá? – me decía el señor Figueroa sin darse cuenta que los vestidos de mis hermanas no dejaban mucho a la imaginación.
Señor, si tuve algunos problemas familiares, pero decidí volver al internado por meritos propios, este es el lugar al que pertenezco, señor – le decía con ese tonito porque sabía que le gustaba.
Mm, perfecto, dime, te molestaría mirar un poco a mi niña, se que podría ser una carga, pero no me gustaría que otro tonto se le acercara, tienes permiso de coquetearle, pero se respetuoso, entendido – me dijo el hombre y casi me reía por dentro, porque si este se diera cuenta de lo que le hacía a su hija, seguro me obligaba a casarme con ella, jejejejee.
Realmente no tenía planes, solo hacia las cosas porque sí, pero ahora debía pensar en algo, ya no estaba en casa, vivía bajo mi cuenta, se sentía extraño, creo que debía ponerme no tan tonto, aunque eso sí, no dejaba de pensar en hacer mis cosas, y tener a mis hermanitas de esclavas sexuales, mm, era un gusto que deseaba tener, pero eso solo era el comienzo, deseaba vivir como el directo, teniendo a todas las mujeres que quería, eso me gustaba, muchos lo creerían imposible, pero este lo hacía de alguna manera, y por eso seguiría dentro del internado. Hablé poco con Figueroa, quien parecía ofrecerme a su hija para que fuera su novio, incluso dijo cosas que no esperaba, era gracioso oírlo, hasta pensé que si me cogiera a su hija enfrente de este me aplaudiría, igual conocí a los padres de Leila, así me enteré que soy el chico que le gusta, y también a los de Benji como a los de Viviana, estos últimos me recordaban de la otra escuela, así que se sorprendieron al verme tan cambiado, igual me encargaron que “cuidara a su niña”, que buena broma, jajajaa.
Una vez que eso acabó, llegada la hora comenzaría el evento principal, la fiesta, que estaba llena de eventos especiales, competencias con diferentes premios, todos estaban emocionados, pues se notaba que los patrocinios de la escuela eran generosos, wow, pero daría inicio cuando sonara una canción, realizarían un número especial sorpresa, ahí se veían a todas las maestras, iban vestidas de brujas, pero con distintos estilos, era como un sueño, porque sus vestidos eran deliciosos, dejando ver la talla de esos pechos, ahí miss Holly sobresalía, aparte que una abertura en la falda por un costado dejaba ver que usaba un liguero negro, miss Sage no se quedaba atrás, su vestido estaba tan ajustado como si estuviera húmedo, y con su labial negro, muchos estábamos tentados a besuquearnos, Miss Kim también se veía deliciosa, pero ella usaba un atuendo como de Can-can, Maron por su parte traía puesto un traje más normal, pero tan escotado que se le veía el ombligo, y el de Sheyla se veía como si tuviera cuero, lo que le hacía ver sabrosa, luego se veía a la cocinera Nancy, quien usaba un atuendo holgado, casi se le veía una deliciosa tanga, que se tragaba su culo precioso, me daban ganas de tomar fotos, pero prohibieron las cámara de celulares, también aparecieron la consejera Jaqueline, que usaba un atuendo atrevido, parecía que se puso conos en las tetas, y no le cabían, aparte la enfermera Mia, usaba un disfraz que se veía de seda, wow, realmente estaba deliciosa, con ganas de romperle lo poco para violarla, si casi podía ver a mis compañeros, Jimmy, Ned, los bravucones, Milton, con ganas de cogérsela en un Gang Bang, que cosa tan sabrosa estaba viendo, en serio, finalmente se les uniría miss Brandy, quien iba mas recatada, aunque igual se veía linda, aunque no parecía muy contenta.
El director luego daría unas cuantas palabras, se veía como si fuera de general con unos cuernos imponentes, incluso traía un látigo y trinche, imponía, era el diablo mayor ahí, junto a su aquelarre, wow, su esposa se hallaba de lado con un vestido delicioso, como de dama de la noche, ajustado a su preciosa figura, jugaba con nuestras fantasías, a su lado unas sirvientas, las llamadas Drew y Michelle, quienes usaban diademas de diablitas, y colas, casi podía fantasear con que estas estuvieran pegadas a sus culos, cosa que podría ser verdad, también estaba Elizabeth, Lexy, wow, vestían de diablitas muy sexys, parecían traer lencería que resaltaba sus formas, aunque no eran tan voluptuosas, me fijaba mientras daba su discurso, el cual acabó en breve, genial, dando por comenzado todo, pero lo mejor sería ver el ¿desfile de las estudiantes? No me lo esperaba, las chicas saldrían por un lado, como en los arreglos prepararon un escenario serviría de pasarela, donde las chicas hicieron de las suyas para lucirse con los disfraces de Halloween, que bueno porque los nuestros (los chicos) eran muy sosos, mientras que los de ellas eran tan eróticos, todas saliendo como si esperaran que uno fuera a reclamarlas, empezando con brujas, diablitas, gatitas, momias, lobas, fantasmas, carajo, se nos ponían bien tiesas las vergas mirando todo eso, no solo yo, otros compañeros se veían igual de inquietos.
La primera en salir de quienes me acompañaran, sería Viviana, iba de momia, por decirlo de alguna manera, porque su trajecito parecían unas medias hasta los muslos con franjas y una micro falda con el diseño de vendas, solo sus tetas serian cubiertas por estas, aparte de los brazos, y por último se le veían algunas joyas de fantasía, que delicia, y me sonreía coqueta mientras presumía sus formas, luego de eso siguió otra cantidad de chicas, de donde vi coños apenas cubiertos o puntas resaltando entre las prendas, antes de que saliera Jesy, wow, en serio iba de vampira, y su escote era impresionante, la tela casi como una segunda piel, se le podían ver los pezones a la perfección, una falda que dejaba ver a los lados las piernas con medias y un liguero que le hacía ver irresistible, tacones, se maquilló perfectamente, no podía dejar de pensar en cómo me la iba a coger, y aparte joyería de fantasía. Cabe decir que mis hermanas no estaban contentas, me veían bien celositas, con ganas de pellizcarme o que yo les hiciera eso en sus tetillas, en especial porque estas pasaban cerca de mi tan coquetas, seguramente algo me dirían, ah, realmente el internado era un lugar de temer, porque me pareció ver a los hombres de sombra, aunque estuviera despierto, listos para atacar o hacer algo. Antes que me diera cuenta otra saldría con un trajecito extraño, tacones, medias hasta los muslos, una minifalda, una ombliguera, que apenas cubría sus pechos, de hecho la parte de debajo de las tetas se le veían su piel era tan blanca, sin contar que esta prenda era de color rojo, y tenía una capa como de telaraña, no entiendo que pasaba, pero no me quejé Leila se veía lista para gozar, además tenia de adorno muchas cosas de arañas, como otras le sonreía deseando que la hiciera mía, hasta me pareció ver su tanga mojada de su vulva, ah, entre todas salió Veronica, y debo decir, wow se veía de brujita bien sexy, claro que se me antojaba hacerle cosas, pero ella como de costumbre era una loca, no sé que tanto le pasaba por la cabeza, y por momentos quise ir a hablar con ella, pero no lo hice porque saldrían un grupo de chicas preciosas, Tamy y Sary, quienes iban de porristas que no ocultaban nada, llamando tanto la atención, pues provocaron unas fuertes erección, hasta Figueroa parecía querer jalársela viéndolas, eso me distrajo un poco, pero antes de hacer una estupidez, vería salir a Giby, quien iba de súcubo, usando un trajecito de cuero con botas medias short y top, todo con aspecto rudo, guantes y una gorrita militar, se veía bien coqueta, siendo lo mejor que iba a juego con la pelirroja, su prima Angie, que iba de payasita del terror, quien aparte estaba demasiado sexy usando casi un conjunto igual, carajo, que muchos queríamos saltar a buscarlas, pero se ubicaría en la mesa junto a la esposa del director, sabiéndolas imposibles de tocar.
Casi de último saldrían Shanon, ella con un vestido de fantasma era ajustadísimo a su cuerpo, parecía que iba a romperse, además que se le dejaba ver el calzoncito al caminar, y era obvio que no traía nada arriba, se le marcaban las tetillas de manera tan rica, pensaba que de mojarse la tela se le vería transparente, lo que me daban ganas de chuparlas para ver si se pasaba, ella me sonrió coqueta, mientras caminaba a mi lado, alzando las nalgas que le lucían mejor gracias a los tacones, después salió la dulce Grace, quien usaba vestido de gatita, una minifaldita de holanes, medias, zapatillas de tacón corto, un top con guantes, de todas era la menos sensual, pero su aspecto aniñado me daban ganas de hacerle cosas traviesas, luego me enteré que su padre le consiguió ese disfraz (y este la veía como una niña pequeña), pues los otros los sacaron de las cajas de premios que les di, siendo un poco sorpresivo.
Luego de ese buen juego de vistas que dejaron a varios bien tiesos, empezaría el evento principal, el festival de la blasfemia, donde las maestras comenzaron con una coreografía, algo bastante bueno, pero nada sensual, parecía que lo practicaron en silencio, aun así ganaron varios chiflidos luego algunos maestros como el Saru hicieron algunos chistes, pero no faltaron que los lloricas salieran a quejarse, el Cabo se puso a contar historias de miedo, en su momento, el director hizo algunos trucos con los perros, en serio, era como si les hablara y estos entendieran, hasta una tipa de protección animal quiso quejarse, pero el mismo perro se orinó sobre ella, luego le ladró, la iba a morder, jajjajajajajaa. Después de eso se realizaron algunas competencias, ahí tuve que salir, tengo buena puntería, así que con dardos les gané unos peluches de fantasmas a Lizy y Meg, que seguían bien celosas por lo que veía, creían que las dejé para cogerme a las chicas ahí, una verdad a medias, pero dejando eso de lado muchos de mis compañeros hicieron de las suyas, respondiendo adivinanzas, o trivias, también haciendo clavadas de baloncesto, goles o demás pruebas, yo conseguiría muchas cosas buenas, en serio me estaba divirtiendo, en una de esas pude bailar con Giby para que ganara un premio, igual lo hice con las niñas.
Luego de esto seguiría el evento de los talentos, donde me pidieron de hecho que hiciera de apoyo, trabajando ayudando a algunas de las chicas en sus actos, ah, Milton quiso hacer un monologo, pero le salió tan mal, Ned por su parte hizo una demostración de karate, no sabía que lo practicara, le salió bien, yo no tenía nada, por eso apoyaba como “técnico”, aunque Matias haría un acto dramático que estaba aburriendo, según el mejoró a Shakespeare, yo le lancé unas uvas le atine en el ojo y la nariz, todos se rieron, le salvé de ser el chico ronquidos.
Ahora debo decir algo, el evento estuvo curiosamente tranquilo, a pesar de un aire erótico que estaba siempre presente, pues las chicas parecían estar seduciendo a todo el público, hacían gestos como si quisieran lamer vergas, o dijeran cosas lujuriosas, incluso una cantante se sobó la vulva con el soporte del micrófono, todo permaneció tranquilo, algunas actuaciones eran bastante sensuales, decían cada vulgaridad, un par de amigas, chicas que no conocían, decían de “sátira” como empezaron a coger al llegar ahí, una dijo que fue violada por el incubo, todo era cierto y a la vez falso, otra como los fantasmas la sodomizaron de forma vulgar durante su baño, el director estaba tomando nota, yo me memorizaba todo, yo estaba caliente, sentí la mano de Lizy sobre mi cosa, lista para salir, ella me miraba con ganas de hacer travesuras, incluso notaba como su conchita estaba empapada, pero no era el momento, carajo, eso también era importante, no había nada inocente en lo que se veía, cada acto era bastante morboso, lleno de perversión, querían coger cada una de esas guarras, mientras mis hermanitas parecían estar tratando de insinuarse, mientras veía algunas de las coreografías donde las chicas eran tan eróticas, como si buscaran con quien pasar la noche o las canciones que decían invitaban a coger con quienes estuvieran ahí, realmente estaba perdido en la locura sexual, donde el aire se llenaba de esa esencia de jugo de la pasión, pero me sacaron de esta repentinamente.
Reacciona muchacho – me dijo el director, ni lo sentí por ver como unas compañeras cantaban una canción casi quedando en bragas frente a todos, hasta se tallaban las tetas pasando sus dedos debajo de los sujetadores, wow.
Perdón jefe, ¿Qué pasa? Sabe que le sigo – le respondí un poco confundido, con ganas de seguir viendo las cosa frente al escenario, pero estaba en un pasillo al lado de la plaza principal.
Reacciona, parece que tendré que irme, un asunto importante, unas brujas están haciendo alguna aquelarre y debo ponerlas quietas, necesito que sigas vigilando, de todas maneras ya el evento se acabó, y tus hermanitas, se quedarán aquí o cuando llegan tus padres – dijo el jefe mirándolas, parecían perdidas viendo el escenario.
Ah, bueno, no creo que vuelvan, sabe que son unos desobligados, deben estar en la fiesta de la empresa, perdón – le dije algo nervioso, pero era cierto, muchos de los chicos despedían a sus familiares que se iban tranquilos.
Uf, bueno, yo tengo que salir con los míos, de todas maneras quedará la fiesta, el baile, ya es tarde, aún tienen bocadillos, todo está listo, así que no creo que algo más pase, te encargo que vigiles, aunque no estarás solo por si necesitas ayuda – dijo el director un tanto serio mientras llegaba su esposa a su lado.
Nos vamos Jay, no perdamos tiempo – dijo algo inquieta la jefa Tea.
Algunas de las maestras se fueron, no entendí porque, pero se quedaron Jaqueline, Mia, Saru, el Cabo y una maestra que no conocía, aunque si la había visto, era parte de las clases de las chicas, una tal Bonnie, otra rubia mas, pero de cuerpo ligeramente voluptuoso, creo que era la tutora de educación sexual, o algo así, como fuera el caso, estaba bien sexy la mujer, aunque tenía cara de viciosa, aparte que se quedó una de las cocinera Lola, una castaña de cuerpo sensual, como de costumbre, todas las mujeres del internado estaban para cogérselas, pero nada de eso les importó a los demás, la mayoría de las maestras se fueron, parece que irían a ver qué ocurría con las brujas del mercado, mientras que otros se refugiaban, imagino que Giby y Angie se fueron con ellos, era evidente. No sé porque pero un par de padres me saludaron, los de Benjamin, Viviana y Jesie, me pareció extraño, porque por momentos el señor Figueroa me hizo seña como que todo estaba bien para que le hiciera cosas a su hija, y me lo contó el jefe, nadie recordaría lo que sucedía esa noche, era lo usual, solo los que estamos más inmersos, pero pueden ser solo visiones de espanto o verdaderas orgias, quien sabe que sea lo que pase, solo que de cierta forma, ya estoy con permiso para romper coños, o eso me pareció, y se acomodaron las mesas para dejar abierto y convertirlo en pista de baile, todo listo, antes que me diera cuenta, donde me sentaba se convertía en punto de reunión: Jesie, Viviana, Leila, Shanon, Grace; llegaron mientras se ponía la música, quedando junto a mis hermanitas, siendo una sorpresa para algunos, había al menos 6 chicas siguiendo a Ned, quien se sorprendió, pero con algunos otros eran más, un tal Morris no entendía cómo pero tenía al menos 12 alrededor, no lo sabía tan diestro, era un llorica con cara de afeminado, Benjamin acabo con 15 (imagino que a muchos les gustó el papá), Scott por su parte con 4, Milton con misteriosamente unas 8 chicas, eso me sorprendió aun más, no sé qué cosas haría, pero había conseguido que muchas compañeras le hicieran caso, aunque debo añadir que Veronica no se veía por ninguna parte, y un tonto de nombre Rafa, un gordito de esos que tienen mamitis, tampoco se vio, aunque sabía que estaba ahí, creo que curiosamente yo era quien menos tenía de parejas con excepción del bobo de Scott.
La fiesta seguiría en un principio, música genial, algunos babosos tratando de lucirse, platicábamos, o hacían de cosas, las chicas coquetas, nada fuera de lo normal, mientras el Cabo vigilaba, se notaba con un radio en la mano, el tiempo pasaba, bien, aunque estuve buscando cosas con la vista, pues me daba cuenta que se movían las sombras, pensé que eran los seres de antes, no me equivocaba, porque era tal como sospeché, esas cosas estaban rodeando el edificio principal, donde está la dirección, y creo saber lo que buscaban, entrar al cuarto de los rituales, donde se invocó el incubo hace años, solo que nadie podía, al menos de la gente que planeaba eso, no sé que sería jejeje, bueno, moviéndome como gato, lo descubrí, estaban tratando de entrar, algunas de las tipas eran brujas, no creo que siguieran al jefe, aunque por precaución, me fui a asomar a la entrada que encontré antes, y decidí cerrarla con algunas piedras olvidadas que estaban ahí como parte de las remodelaciones de hace años, me tomó algo de tiempo, pero pensé que eso sería lo mejor, se me olvidó informarle de eso al director, luego me regresé a la fiesta, no quería que me descubrieran, y en eso se me acercó el cabo diciéndome:
Todo bien, estuviste fuera mucho rato, ya otros están mirando a tus chicas – decía el militar.
Todo bien, revisando el perímetro, cabo – dije algo inquieto divisando las sombras.
Oye, tú realmente crees en todas esas cosas de brujas, demonios y fantasmas, porque yo lo veo estúpido – dijo el cabo siendo escéptico.
Si, las he visto de primera cuenta, y si no me crees, apuéstame, busca a la bibliotecaria, no te digo que le coquetees, pero ella te podría dar algo para tener a la tipa que quieras en la cama – dije algo convincente para el tipo.
En serio, hasta la jaqueline, tengo ganas de romperle el coño – confesó caliente el hombre.
Mira que mejor sigue al jefe, si lo haces podrías terminar con un harem, porque crees que yo lo hago, si lo vi cuando se cogió a la cocinera – le confesé algo caliente.
El cabo se me quedó mirando, realmente no esperó esa respuesta, pero era convincente, así que me dio las gracias antes de seguir vigilando, carajo, creo que tenía dudas, aunque eso quedo de lado, en ese momento llegaba Tatiana, una chica que no conocía, era de piel caramelo, con cabello castaño, y ojos celestes, preciosa, me decía que me estaban esperando en mi mesa, querían bailar, a lo que me adelanté, carajo, no pude evitar verla, usaba un leotardo de ballet, y se le marcaba la concha, sus nalgas salían de la prenda por detrás, me daban ganas de sobarla, pero en eso se me aferraba Jesy, para jalarme a la pista de baile, empezando el juego, aunque no era tanto como danza o parecido, al contrario, solo querría que la estuviera manoseando, y yo contento con tenerla, mientras ella me besuqueaba caliente, dejándose hacer con todo, sentía su precioso culo entre mis dedos, sabiéndome afortunado porque sabía que todos la deseaban tocar, le masajeaba con un gusto que nadie me podría quitar, incluso tallaba su coño sobre mí, y en un arranque de locura le mordí la teta, haciéndola gemir, era delicioso, ella me sujeto de tal manera como si quisiera que eso siguiera así, mm, la piel de su cuerpo sabía tan sabrosa, me encantaba.
En eso se me ocurrió voltear a ver a otras partes, y pude notar algo Benjamin que estaba a mi lado, carajo, le estaban haciendo una mamada justo en frente de todos, una linda chica castaña se tragaba su modesto pedazo de carne con una gula que nadie aguantaría mucho, escurría por sus labios una mezcla de baba con semen, en eso llegaba otra de sus citas para besarle en la boca, no entiendo como lo hacía, pero aparte detrás de él, Milton parecía marcharse, necesitaba verlo mejor, así que me solté para darle la vuelta a Jesy, besándole el cuello, mientras mis dedos iban sobándola por encima de ese precioso vestido, me hacia fácil el poder tocarla, sintiendo su cuerpo con toda facilidad, una mano llegó a su pecho otra a su vulva, logrando que se rindiera a mis deseos, mientras revisaba alrededor, carajo, el 4 ojos se iba a su lugar donde las chicas que reunió se le abalanzaban, estaban dándole un tratamiento VIP unas devorando su chiste entre las piernas, mientras que otras se dejaban tocar, casi parecía que iban a montar una orgia ahí mismo por otra parte Ned estaba sobándole los culos a 2 de sus chicas, mientras que estas le jalaban su herramienta, la cual era más decente, si entre 2 la agarraban, pero este metía sus manos para alcanzar sus jugosos coños, haciendo que se calentaran mas, si en ese instante se correría hasta escurrir en el suelo. Yo apenas podía creerlo, pero en serio estaba con todo, cada uno de los chicos de la clase militar gozaban de algo así, en las mesas sentados eran rodeados de sus conquistas, quienes buscaban como satisfacerse, dejaban de ser mimosas para convertirse en hembras sedientas de sexo, mientras que los ubicados en la pista de bailes, igual se divertían, de hecho, un chico aparte, casi diría el NPC del juego, sería el primero en desnudar a su pareja para comenzar a coger abiertamente frente a todos, dejando a la chica solo con las orejas de lobo y dejando ver que su colita estaba pegada a su culo, wow, nunca esperé que eso se fuera a dar, pero me encantó, antes que me diera cuenta alguien me frotaba las tetas detrás.
Listo para la acción cariño, hoy me tienes para todo lo que quieras – decía Viviana mientras pegaba sus enormes tetas a mi espalda.
Ahora si cariño, vas a hacerme todo lo que quieras, vas a convertirme en tu esclava sexual – agregó Jesy mientras se corría entre mis dedos.
Jamás esperé escuchar eso, pero no me importaba, era una locura, la que tanto deseaba, ignoraba si el conjuro o lo que fuera iba a acabarse al amanecer, no entendía mucho de la brujería, pero yo lo iba a gozar, mas cuando vi a Vivi sacarme la chaqueta, además de sacarse las vendas que usaba para sentir directamente mi espalda, wow, hacia un gesto de puta que me encantó, así que me puse más inquieto, deseando sentir con claridad esas carnes deliciosas, que eran tan firmes, mientras que Jesie se desvestía para dejar ver como debajo traía una especie de lencería bastante rica, negra que remarcaba su figura adolecente, la cual se ubicaba a mi lado para dejarse penetrar. Carajo, no hizo falta que le masajeara, prácticamente se estaba corriendo por tenerme cerca, su cara de golfa era un sueño, me sacó los pantalones, y por segundos me pareció que ella estaba escurriendo, en verdad, estaba tan caliente que en cuanto vio mi punta arriba, se acomodó para que pudiera metérsela, aunque lo disfrutó un poco, se fue sobando levemente, así cuando entré ella se estaba corriendo, gimió un poco, pero me miró de una forma tan intensa, quería sentirse mía, o eso me decía entre besos apasionados cuando nuestras lenguas se alcanzaron, yo no pude resistirme, le sobaba los pechos, disfrutando de su forma, eran tan firmes y suaves, casi se arrancó el sujetador para que los tuviera a la mano, era una delicia, luego se aferró a mí, restregando su cuerpo, y le besé el cuello lo que le calentaba mas, nos movíamos en perfecta sincronía, los 3, porque seguía pegada a nosotros Vivi, quien me sobaba con sus tetas mi espalda, como si se masturbara con ellas.
Que delicia era eso, sentir aquellas masas de carne tan sabrosas dándome un masaje en la espalda, me encantaba por eso sentía que la verga se me ponía más dura, aunque no era el único, para ese momento veía a Ned darle con todo a una morena de cuerpo sabroso, le colgaban las chichis porque estaba de a perrito, mientras que sus nalgas hacían un sonido como de aplauso con cada embestida de mi amigo, quien le daba con todo, por su parte, Benjamin estaba tirado en el suelo, siendo montado por una preciosa pelirroja pecosa que no tenía muchas tetas, pero la cara que dejaba ver era una delicia, y el chico se veía algo sorprendido. Otros que no me la creía eran Matias, Randal y Scott, los 3 estaban con chicas preciosas que los abordaban para disfrutar del sexo, aunque casi los estaban violando, jejejeje hasta le metieron consoladores en los culos, haciéndoles tener un sexo salvaje, además les dejaban comer coño, corriéndose hasta casi ahogarlos, y una vez que terminaban, llegaban otras para seguir exprimiéndolos.
Por mi parte, me empezaba a correr dentro de Jesie, iba con unas ganas terribles, así que me corri abundante, llenándole el coño hasta dejarle los ojos en blanco, lo que le encantó, si parecía que eso la hizo explotar de calor, teniendo un orgasmo tan fuerte, que escurrió, aunque para mí fue como sentir que me la mamaran con la concha, dándome un placer que me hacia querer estar así por siempre, quedando rendida, pero eso lo aprovechó Vivi para hacerla a un lado se sacaba la falda, con todo y tanga, se le veía como su coño estaba escurriendo, y uso su mismo coño para darme un masaje bastante caliente, quería que me pusiera duro otra vez, lo cual poco me costó, tenerla así de lista, suplicando por que le diera con todo era suficiente, aparte tenía sus tetas enormes al alcance de mi lengua, si hasta las ofrecía para que las gozara, aunque en eso notaria algo, las otras chicas de mi mesa se estaban acercando, colocándose alrededor mío para seguir con el juego, me miraban un poco secas, frías, pero se iban desvistiendo, Leila se dejaba las botas, es que el suelo molestaba, todas dejaban sus ropas ahí para hacerlo más cómodo, luego la gótica, que era como esperaba algo culona me besaba, aunque antes la quitaría Vivi, que se encajó ella misma mi verga, sintiendo con fuerza como entraba, era una delicia como siempre, estaba tan mojada, moviéndose con un desespero caliente de tal forma que me parecía llegar hasta el fondo, quería darle con todo, ella se entregaba con total libertad, sus caderas se movían de una forma que no esperaba, como si quisiera jalarme hasta el alma, pero veía alrededor, la locura sexual seguía, todos parecían ansiosas por tener algo de placer, aunque eran tantas chicas que no había suficientes vergas.
Mis hermanitas se estaban desnudando, solo quedaban con zapatillas para dejar ver sus formas preciosas a mi alcance, sus coñitos lampiños, sus tetillas hinchadas, se iban sobando, igual que Shanon, quien se estaba tallando con el vestido puesto, algo pensaba, igual que Grace, quien se iba sobando con su traje de gatita, se miraba demasiado excitada, estaban escurriendo tanto que el suelo se mojaba, y gemían de manera que solo podía escuchar sus voces, mientras se llenaba el aire con su aroma de putillas en celo, mm, en serio que me encantaba. Aparte Vivi estaba desesperada, me besaba con ganas, mientras nos fundíamos en un encuentro sexual tan intenso que era difícil, dentro de poco se iba a correr, pues su cuerpo hervía en el placer, hasta nuestra saliva escurría llegando a sus pechos, los cuales se restregaban sobre mí, quería tocarla pero mis manos eran detenidas, mis hermanitas estaban pegadas a mi lado, sobándose para sentir algo de mí, en cierta forma ahora era esclavo de sus deseos, pero me dijeron.
Hermanito, no es justo, tienes muchas putas aquí – fue lo que me dijo Lizy caliente.
Nosotras también queremos tu verga bien dentro – añadió Meg con una vocecilla viciosa.
No podía creerlo, pero las chicas empezaban a decirse cosas, sobre coger conmigo, parecían haber estado en acuerdo, todas estarían así, convertidas en esclavas sexuales, por lo que una vez que terminé corriéndome en el coño de Vivi, nuevamente se lo dejé bien lleno de mi leche, haciéndola gemir en un orgasmo que de seguro la enloqueció, me miraba de una manera extraña, pero tan excitante, como rogando que le volviera a dar con todo, esta se alejó para dejar que Leila tomara su lugar, aunque ella haría algo distinto, pues se dejaría ver a 4 ofreciéndome su culito, que era tan carnoso, y no pude evitarlo, quería ensártala por ahí, aunque ella misma me dijo:
Nada de las nalgas, me rompes el coño, quiero quedar escurriendo de ahí, sino lo haces esta será la última vez – no entendí porque, pero no me importó.
Le agarré de las nalgas, para aferrarme mejor, se las besé un poco por tentación, y al hacerlo sentía como mi miembro se recuperaba, aunque unas manos se sintieron tan calientes sobre mi carne, dándome la fuerza para abrirle el coño y de una sola embestida se la metí, carajo, en cuanto entró fue como si se hubiera orinado, sus jugos salieron a presión, nuestras piernas escurrieron, así que empecé a darle con todo, metiéndole verga hasta topar, moviéndome con una lujuria que jamás esperé sentir antes, una y otra vez, intentando llegar al fondo, aunque en un arranque de lujuria, la jalaría del cabello para poder besarla, sentir sus labios mientras le tocaba las tetas, que estaban bien formadas, aunque podrían crecerle más, estaba gozándolo, dejando que viera cuantas ganas le traía. Mientras que las otras alrededor se iban sobando, se notaban cada vez más ansiosas por sentir mi verga dentro, seguro el conjuro las convertía en esclavas de la lujuria, y por suerte serían todas mías esa noche, se movían acariciando sus cuerpos, dejando que las prendas fueran saliendo lentamente, si que se veían desesperadas por tenerme bombeando en sus coños, no tendrían nada aparte de la idea de coger conmigo, se mordían los labios al tiempo que sus dedos hurgaban sus conchitas aun con las tangas puestas y se podía ver, como estaban empapados, no sé como aguantaban, de hecho todo era una locura.
Alrededor los demás estaban cogiendo, era una orgia total aquella fiesta, se entregaban a la lujuria, una tan potente que no esperé ver nunca, aunque fui notando algo, había muchas chicas, no todas consiguieron pareja, éramos pocos hombres, por eso es que algunos no se daban abasto, el tonto de Morris prácticamente se lo estaban comiendo entre todas, y no podía hacer nada, gemía como zorra, siendo rodeado, será el niño bonito de la escuela, pero no tienen nada de hombría, algunas se empezaban a alejar frustradas, mientras que Ned hacia lo impensable, puso a 2 de sus chicas para frotar su verga en medio, siendo como si se cogiera a ambas al mismo tiempo, que delicia, estas gemían de manera viciosa, sintiendo sus coños arder, o al menos eso decían, mientras que Randal, Martin y Scott ya no podían mas, estaban rendidos, dejando que algunas chicas se quedaran en sus lugares tocándose a ellas mismas buscando desesperadas donde coger, como si su vida dependiera de ello.
Antes que me diera cuenta un potente orgasmo me llegaría, siendo compartido por mi gótica, quien gozaría del placer logrado, mientras le inundaba el coño, no sabía cómo, pero en verdad estaba imparable, haciéndole sentir como nuestros líquidos le llenaban dentro, así Leila se retiraba con su coño escurriendo, se veía complacida, una cara sonrojada que se veía perdida en un sueño pervertido, dejándole verse como una lujuriosa sin remedio que se salió con la suya, me daba gusto, aunque no era suficiente, algo me quemaba por dentro, pero cuando menos lo esperé, Shanon se acostaba enfrente mío diciéndome: Viólame; y en eso entendí su juego, me puse sobre ella, le arranqué el vestido, dejando su cuerpo a mi alcance, sus tetillas las lamí, las chupe, mientras su disfraz desgarrado quedaba fuera, dejando solo un pequeño calzón coqueto que apenas se mantendría fijo, saboreaba cada parte de su ser, mientras me miraba como si le cumpliera su más grande fantasía, lo jalé así mismo para comenzar a comerle el coño como si no hubiera comido nada, ella gemiría, retorciéndose de placer, sintiéndose caliente, me sobaba la cabeza con gusto, suspiraba perdida en sus ganas de que la cogiera, y carajo sus piernitas se veían deliciosas en especial cuando miraba esos tacones, le daban un aire tan sensual, además que su mirada era de esas que te incitaban a coger con ganas feroces, jejeje.
En eso pude notar como las otras se seguían disfrutando, enloquecidas porque el aire olía a sexo fuerte, se tocaban sus coños que escurrían, se tocaban por todas partes, pero era como si se sacaran con sus dedos todo para lamerlo, se sobaban de una forma que daba gusto, dejándome verles hasta lo más profundo de su ser, no había parte de su cuerpo que no les conociera, hasta algunos lunares que en mi vida les hubiera visto, y decían: que rico se siente, aunque ya te corriste, es como si siguieras cogiéndonos, no aguantaremos mucho, mmm.
Estaba en eso cuando me di cuenta que ya me ensartaba a Shanon, ni me di cuenta cuando lo hacía, pero lo disfrutaba, se la dejaba entrar hasta el fondo, sacándole un poco sus jugos, igual que varios gemidos, mientras notaba la vista de la gatita a mi lado, ella seguiría, me daba cuenta, aunque no entendía, como es que había estado embistiendo, cogiéndome a cada una de ellas, parecía imbatible, disfrutando de abrir esos coños sin descanso, estaba perdiéndome en sus cuerpos, como si saboreara puro filete de primera, aunque estos se me abrazaban de tal forma que podía deleitarme con sus formas, rozándose contra mí con tal fuerza que era, ah, delirante, disfrutaba de sus olores sexuales, sobando sus nalgas, incluso metiendo dedos en sus culos, escuchándolas pujar de tal manera que no podía calmarme, mi sangre hervía, y me estaba corriendo en cada una de ellas como si las estuviera marcando, si así lo haría en el coñito de Shanon quien pujaría como si el orgasmo le hubiera dado con fuerza, depositando una cantidad de semen como si me estuviera orinando, lo cual le asombró. Se quedó suspirando yo no podía creerlo, pero parecía que mi verga se quedó trabada, apuntando arriba, lista para la siguiente presa, estaba ansioso por continuar, aunque me había corrido, y en eso se me acercó Grace, se veía tímida, aunque sus manos cubrían su conchita, la cual me llamaba para que la volviera a hacer mía, eso me encantaba.
Me toca, pero me da pena – decía mientras mi rubia con ortodoncias se reunía con las otras, y se empezaba a manosear el coño para lamerse los jugos de su vulva.
Quieres que te desvista – le dije con cierta saña, ella asintió nerviosa.
No pude contenerme, así que me paré para comenzar a sacarle la ropa, había una buena diferencia de alturas, y por inercia la besé un poco, haciéndole sentir un poco más segura, su miraba se perdía, así que fui retirando las prendas y una vez desnudita, quedaría todo tirado a un lado, dejándome verle cada parte de su cuerpo, era una delicia, estaba bien rica, o eso me pareció, todo en vías de desarrollo, una mezcla de inocencia con erotismo, aunque me daba un morbo total, sus tetilla café en una piel blanca, un coñito que apenas tenía unos bellos, le fui sacando todo con una suerte de habilidad que no esperaba, dejándola desnuda, y así parado, se la fui a ensartar, haciendo que ella misma se aferraba a mi cuerpo, siendo un verdadero esfuerzo, me besaba con desespero, completamente entregada al tiempo que la iba embistiendo en el aire, con sus piernas aferradas a mis costados, mientras sus manos hacían lo necesario para estar enlazados en un beso profundo.
Dale duro, rompe a mi hermana – llegue a escuchar, era Benji, dándome ánimos para que me cogiera a su hermanita, lo cual me asombró, este seguía cogiendo, perdiendo la razón con una morenita, mientras yo me ensartaba bien duro a Grace, haciendo que se entregara por completo, abriéndole su precioso coñito, haciéndola gemir, todo frente a su sangre, sujetándole para darle más duro, lo cual era demasiado excitante.
Sin embargo las cosas no eran tan buenas, algo sucedía, muchas de las chicas que estaban ahí no se quedaron quietas, Ned hizo honor a ser de los mas rudos, igual que los bravucones, mientras que algunos no se quedaban tan atrás, Benjamin sorprendería aguantando al menos 5 corridas seguidas, era de respetar, pero antes que nos diéramos cuenta, uf, lo que estaba más iba a explotar, pues los fantasmas u hombres de sombras comenzaron a aparecer, cogiéndose a las chicas que estaban solas, todas esas que se tocaban para calmar sus sexos, las que estaban tan desesperadas por no tener con quien coger, siendo violadas entre varios, lo cual iban gozando, sus disfraces salieron volando para dejar ver tetas de todos los tamaños, formas y sabores, pero sus coñitos serían abiertos de golpe, dejando que escurriera su sangre virginal, si, no todas eran golfas cogidas, y creo que eso sería parte de lo que estaban tramando las brujas rebeldes, porque la sangre haría algo en el suelo, solo que estaba demasiado confundido como para darme cuenta.
Además, lejos de mi vista, un hombre hacia de las suyas, apenas lo veía, pero se trataba del cabo, quien se dejaba llevar por el fervor de la noche del diablo, se hallaba cogiendo de manera total, iba con una tipa, perdido en un deseo que lo convertía casi en una bestia, si acaso escucharía sus gemidos, por lo que me daba cuenta que debía estarle dando con todo.
Me estaba corriendo en el coño de Grace, quien se me aferraba hasta quedar afónica, sus gemidos eran una locura, iba llenándola como tanto quería, no sé cómo, pero igual le dejé lleno su coño con mi leche, ella me vería con una carita tierna mientras me daba besitos tímidos, se retiraba temblando, aunque no dejaba de unirse a las otras, sobando su coñito para sentir como sus jugos salían mezclados con mi leche, cuando pude notar a mis hermanas desesperadas, desnudas, creo que se habían corrido como 2 veces cada una esperando y no pudo contenerme, mas cuando indirectamente pude ver a las sombras acercarse, así que las tumbe sobre un mantel que encontré, y las penetré, primero a Lizy, quien gimió como gatita, luego a Meg que pujo un poco, pero ambas estaban contentas, luego les diría:
Ellas son mías, lárguense idiotas – gruñí furioso mientras comenzaba a embestirlas, las tenía a una acostada sobre otra, iba a gozarlo.
Dejé abajo a Liz, quien estaría moviéndose un poco a mi ritmo, sería muy rico verla recibiendo mis movimientos de cadera, moviéndonos perdidos en el ritmo de la música que seguía encendida, mientras que por un momento de lujuria, empezaron a besarse como si fueran novias, lo cual me dejó pensando ¿Qué pasaba con ellas? Era un gusto que me iba quemando la sangre, ambas mocosas salieron más putas, apenas las pervertí un poco, pero estaban entregadas a mis mejores fantasías, dándome ese gusto sexual incestuoso, aunque deseaba lamerle las tetas, solo que me daba la impresión que de moverme, las sombras me robarían a una de ellas, y cuando me corrí, no tardé en metérsela a Meg, quien diría contenta:
Si, por fin, dame con todo hermanito – lo decía mientras Lizy masajeaba sus nalgas como si quisiera que le viera el culito apretado.
Estaba dándole con todo, intentando llegar al fondo, carajo, me corrí como nunca, llenándole el coño, luego se lo llenaría a la otra, era como si me saliera semen de manera infinita, aunque finalmente me empecé a sentir cansado, de hecho cada uno de los otros caían rendidos, algunos como los grandes, cogiendo y corriéndose dentro de sus amantes, otros fuera de sí, creo que era el último, y me sentí ganador, porque terminé por llenarle el coño a mis hermanitas, lo cual esperaba con ganas, si ambas movían sus caderas de una manera tan rica, igual que otras se estaban empezando a beber los jugos, todas seguían haciéndolo, eran esclavas de la lujuria, eso me prendía como para seguir tieso, cuando sentí alguien en mi espalda.
Veo que no eres un putito sencillo, aguantaste – dijo Veronica con su traje de brujita.
Lo siento, pero tengo cupo lleno, quedas fuera – dije con un poco de fuerza mientras una chica que no supe quien era empezaba a lamerme la verga buscando placer, jugando con su lengua mientras me miraba con unos ojos rasgados.
Después de 7 golfas y sigues hablando, no eres normal, bueno, eso ya no importa, nada en verdad, por suerte nos ayudaste, lujuria, perversión, eso necesitábamos, no pudimos entrar al cuarto, pero la escuela está podrida, vamos a recuperar la gloria que teníamos – decía Veronica sin darse a entender, pero en eso alguien la golpearía en la nuca.
Idiotas, los tiempos cambian – diría finalmente Giby junto con Angie, quien cargaba un amuleto de protección.
En mal momento me daba cuenta que estábamos a mitad de un ritual, las tipas que se quedaron eran brujas rebeldes, querían hacer algo, no sé qué, pero en una pelea con la hermana del jefe entendería que deseaban invocar a un demonio o criatura peligrosa, no sé que sería, pero no me gustó, la otra emergencia era una distracción, y tras liberar tanta lujuria, lo iban a lograr, me daba cuenta que algo se dibujó con sangre de vírgenes en el suelo, todo se iba a ir al demonio, literalmente hablando, Giby se veía asustada aferrándose a su prima, jaja, veía que sus tetas se pegaban una a la otra, eso era delicioso, hacia que mi sangre hirviera, logrando que en medio de mi agotamiento, pues estaba perdiendo el conocimiento, pero haría algo, aunque no me acuerdo si lo logré o que, hice un esfuerzo moviéndome, entre gemidos de chicas que se estaban metiendo todo lo que podían en sus vulvas, perdidas en la lujuria, entregándose al un gusto sexual infernal que las convertiría en esclavas del placer, aun así creí que podría lograrlo, solo creo que me moví por inercia, pues todo se volvió oscuridad…
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