El spa exclusivo

Con algo de pena los interrumpo y menciono que debemos irnos, mi nena se despide de beso de sus amigos y partimos para arreglarnos… .
Este sábado desperté a mi princesa temprano, le dije que sería un día divertido ya que iríamos a nadar a un lugar especial, este lugar era un spa exclusivo al que recientemente me matriculé, un lugar para varones en donde se puede encontrar albercas recreativas, sauna y gimnasio.

Llegué con intención de usar la alberca recreativa y al acceder con mi nena el encargado la miró contento, me hizo firmar la entrada y acarició lo risos de mi pequeña.

Este es un espacio exclusivo para hombres, se puede acceder con los hijos de cualquier edad, pero las mujeres únicamente pueden pasar con su padre siempre que sean menores de 15 años.

Mi nena apenas tenía los 6 años así que era ideal, entramos a los vestidores para ducharnos antes de entrar a la alberca, el lugar olía a hombre y estaba lleno de vapor, pasaban diferente ejemplares masculinos de todas las edades con sus penes peludos colgando y rebotando al andar, comienzo a desvestirme con mi princesa sentada a un lado, ella observaba esos cuerpos grandes y extraños para ella, notaba esas virilidades pasear frente a sus ojos, algunos hombres le sonreían, otros se dentenían frente a ella para lucir su masculinidad, ella tímida voltea a verme y descubre que su padre también tiene un extraño órgano peludo entre sus piernas.

Hija – Papy, por que tienen eso entre sus piernas?

Yo – Amor es nuestro pene princesa, los hombres lo tenemos para hacer pipí.

H – ¿Por qué yo no tengo?

Y – Porque tu eres niña, las niñas no tienen, les falta amor.

En ese momento le doy un abrazo y beso su cabeza mientras mi miembro rosa su bracito. Entonces procedo a desvestirla para pasar a las regaderas. La paro en la banca y le comienzo a quitar la ropa, algunos hombres la observan, unos muchachos ven a escondidas mientras mi nena se siente algo cohibida pues ella es diferente. Ya desnudos los dos, pasamos a las regados que son comunales, no hay divisiones y están juntas, hay hombres de diferentes tallas, bañándose, hombres rectos y en reposo, algunos mean en la regadera, otros se acarician su virilidad, una pareja de varones se expresa su cariño al fondo mientras se abrazan y besan y otro joven masajes con la lengua el agujero anal de un maduro peludo.

Paso con mi princesa entre el grupo masculino a una regadera vacía entre un hombre de gimnasio peludo y un anciano que lavaba su miembro de manera ágil.

Me agacho en la regadera y comienzo a bañar a mi princesa mientras ella ve a los hombres a nuestro lado, ve al anciano como jala su miembro de manera rápida, en eso el señor grita un gemido y larga un chorro de espera que cae en la carita de mi reina, enjuaga su miembro y se retira satisfecho.

H – ¿Papy qué es eso?

Y – Es lechita de hombre amor, también nos sale de nuestro pene.

El hombre musculoso de al lado sonríe y me apoya a enjabonar mi espalda mientras mi nena lava el semen de su carita.

En eso llega otro hombre peludo desnudo y se coloca a un lado, yo lo observo bien ya que comienzo a besar al hombre musculoso, en eso siento que mi nena tira de mi vello púbico y me dice que volte.

H – Papy mira, el señor no tiene costa como tú.

Me extraña el. Argumento y veo que el hombre peludo de al lado en efecto no tiene pene. Me sorprendo pero reprendo a mi nena por hacer la diferencia notoria.

Y – Princesa eso no debe decirse.

Extraño – No se preocupe, así son los niños, y no, no tengo pene princesa, yo me lo quité, ahora me parezco a ti, tu tampoco tienen pene.

H – Mi Papy dice que los hombres hacen pipí por su pene, ¿cómo haces tú?

E – El. Doctor me dejo un orificio especial, mira.

El. Hombre alza una pierna y le muestra a mi hija un agujero por donde orina, en eso expulsa un chorro amarillo sobre mi princesa, con el que ella empieza a jugar.

Y – Mira amor él es como tú, muéstrale como orinas.

Mi nena obediente comienza a orinar y los chorros se combinan.

E – Qué linda nena, somo iguales, ¿quieres venir a jugar conmigo?

H – Papy ¿puedo ir a jugar con el señor?

Y – Sí amor, vayan, jueguen con cuidado.

El. Hombre sin pene toma de la mano a mi hija y salen rombo a las salas de vapor, en lo que el hombre musculoso comienza a urgar entre mis nalgas y me comienza a penetrar, me pone en 4 y me rompe el ano, mientras más hombres y jóvenes llegan más me penetran, me llenan de saliva, esperma y meados, después de un par de horas termino en el piso de las regaderas cansado y sudado, veo la hora y es tiempo de irnos, camino en busca de mi hija y la encuentro acostada siendo abrazada por el hombre musculoso que me habia penetrado al principio, su pene flacido orinaba la vagina roja y abierta de mi hija mientras el. Hombre sin pene pasaba su ano en la. Boquita de mi princesa.

Con algo de pena los interrumpo y menciono que debemos irnos, mi nena se despide de beso de sus amigos y partimos para arreglarnos, ya en la casa antes de dormir abro las piernas de mi hija y veo que está demasiado irritada, así que la lleno de crema para que duerma tranquila.

Danny J