Futako: Salvando Kupferdis

Mi nombre es Kintama Futako. Tengo 26 años. Pelo corto color violeta, mido 1,70 m y mis medidas son 101, 57, 98. Mi pene mide 18 cm y erecto 28 cm. Si tengo pene. Soy una futanari, se podría decir que soy una mujer con pene y testículos. No soy la única de mi tipo, pero no es algo muy común. .
Mi nombre es Kintama Futako. Tengo 26 años. Pelo corto color violeta, mido 1,70 m y mis medidas son 101, 57, 98. Mi pene mide 18 cm y erecto 28 cm. Si tengo pene. Soy una futanari, se podría decir que soy una mujer con pene y testículos. No soy la única de mi tipo, pero no es algo muy común. 

Nací en este país, la Republica de Kupferdis, donde la calidad de vida es alta y casi todas las necesidades están cubiertas, incluso desaparecieron las ETS. Pero con el paso del tiempo, la gente dejó de tener sexo, y eso derivó en que las futuras generaciones se vuelvan infértiles 

Con mi condición de futanari, también nací con varias bendiciones. Puedo “contagiar” la fertilidad. Para este país que poco a poco va muriendo por la baja natalidad puedo ser la salvación, pero tengo que ir cambiando su mentalidad sobre el sexo, y prácticamente tengo que hacerlo con cada habitante de este hermoso lugar. 

También, es que no puedo envejecer más, así que nunca voy a tener las tetas caídas, y mi pene siempre va a estar duro como el concreto y mi vagina va a parecer virginal como si tuviera 12.  

Otra “bendición”, es que tengo una libido insaciable. Así que soy la indicada de cogerme a todos, digo, de sanar a todos. 

¿Mis sueños y metas? Tengo muchos. Todos son referidos al sexo 

Primero es salvar de la infertilidad a todos. 

Segundo, tener sexo en cada lugar posible y en cualquier situación 

Tercero, armar un grupo de futanaris, y realizar show en vivo 

Cuarto, poder tener una orgia al aire libre, en medio de un lugar público, y que la gente se una a ella. 

Hoy es viernes y recibí una llamada del director de la Escuela Secundaria de Barren, al parecer les gustó mi curriculum vitae y quieren contratarme. ¿Qué raro? No recuerdo enviar mi CV a una escuela. Bueno, si me pagan voy a poder seguir comprando mis juguetitos 

 

“Señorita Kintama, bienvenida.” Me dijo el director mientras me abría la puerta de su oficina. “Por favor, pase.” 

“Señor director, muchas gracias.” Entro a la habitación, mientras miro la decoración de la misma. Se puede observar varios cuadros de los anteriores directores de la institución en la pared de la derecha, mientras que, del lado opuesto, se encuentra una vitrina con varios trofeos de distintas disciplinas.  

«Se preguntará cómo es que tengo su CV, ya que nunca lo envió a esta institución. Y la respuesta es que me recomendaron contratarla de parte del Centro de Desarrollo para la Fertilización.” 

El Centro de Desarrollo para la Fertilización, o CDF, se creó por el problema de infertilidad y falta de sexo de la población. Intentaron distintos medios para contrarrestar esta dificultad, pero hasta ahora no tuvo muchos resultados positivos. El CDF ya se había contactado conmigo, porque son los que descubrieron que tengo este poder “curativo” 

“Vaya, me podrían haber preguntado por lo menos si quería enviarle mi CV.” Dije ofuscada. 

“Por favor, Señorita Kintama, por lo menos antes de que se enoje, deje que le explique sobre el trabajo que le estoy ofreciendo y los beneficios que este le va a generar. No es simplemente un trabajo de profesora o bedel.”  

“Bueno, está bien. Lo escucho, soy toda oídos” 

“Cómo sabe, estamos en un momento en que el principal problema de la población es que no hay suficientes nacimientos debido a la falta de sexo y la infertilidad.” 

“Si, soy consciente de eso.” 

“Perfecto. Por eso, por parte del CDF y el gobierno, junto con las distintas instituciones, estamos buscando que eso cambie, por lo que empezamos a impartir distintas estrategias para incentivar la reproducción y que la crianza de sus hijos no sea una carga monetaria. Pero por lo visto no fue suficiente.” Dice esto mientras se para de su asiento y mira a través de la ventana que da al campo de la escuela. 

“De acuerdo con el informe del CDF, usted tiene una cualidad, y es que puede “curar” la infertilidad cuando tiene sexo con una persona, ¿es eso cierto?” Dijo mientras gira su cabeza hacia mi persona, mientras muestra una cara totalmente seria. 

“Solo puedo curarlos con mis fluidos, luego de varias sesiones de sexo, para que sea efectivo. No sirve si solo toman mis fluidos, ya que al poco tiempo pierden sus efectos “curativos”.” Le afirmo el dato que ya debería saber, toda esa información ya la tenía el CDF. 

«Entonces sabiendo eso, voy a detallar su trabajo. No tengo que decirle que es libre de rechazarlo, ya que sigue siendo un trabajo en blanco y abalado por el gobierno, el CDF y las instituciones educacionales del país.” 

“Lo escucho” Dije, intentando no sonar muy expectante. 

“El puesto, capas le va a sonar como una pérdida de tiempo con todo lo que le comenté anteriormente, va a ser de educadora sexual. Lo importante son las cualidades que tendrá con este puesto. Puede decidir el contenido como forma de enseñanza, el presupuesto para este proyecto es altísimo, así que podrá realizar pedidos de herramientas, materiales, salidas a lugares de interés, etc.” Mientras decía esto, el director me mostraba una tabla con el proyecto y el presupuesto. 

“Así que el presupuesto es de US$ 30 millones. ¿No cree que sea mucho?” Dije incrédula por la cantidad que me presentaron para este trabajo. 

“Creemos que sea poco, probablemente. Igual esto no es todo, también queremos que sepa, que tiene total libertad para usar sus cualidades “curativas”, en el momento que vea oportuno.” 

“¿Qué?” Dije aún más incrédula. 

“Así como lo oye. Queremos que, en algún momento de la enseñanza, usted vaya “curando” a sus alumnos, y dependiendo de los resultados veremos cómo seguimos avanzando con el proyecto.” 

“Déjeme recapitular todo esto, a ver si lo entiendo.” 

“Si por favor.” 

“¿Usted quiere que sea educadora sexual de alumnos de su institución, para que luego yo tengo sexo con ellos?” 

“Efectivamente, pero si queremos que el acto no sea un shock emocional, así que le vamos a exigir que anteriormente los prepare para ese momento” 

“…” No sabía que decir, internamente estaba saltando por todos lados de felicidad, pero mi conciencia me estaba diciendo que esto era una trampa o una cámara oculta. Miré de nuevo la cara del director, pero no veía otra cosa que una mirada seria, consciente de lo que dijo era todo verdadero. 

“No se apresure en responderme, sé que es algo delicado y no puede ser tomado a la ligera. Si quiere tiene toda la semana para responderme, pero le pido que tenga tomada su decisión en ese tiempo, ya que si no tomaremos otras medidas con el asunto.” 

“Así que una semana…” Con ese tiempo, podría poner en orden toda la información que me bombardearon. “Entonces le voy a dar una respuesta en estos días.”  

“Pero antes que se vaya, no vio su sueldo mensual.” Dice el director mientras señala un número en la tabla que me acercó anteriormente. 

Ese número me quito todas las incertidumbres, así que dije lo siguiente. 

“Acepto el puesto.” 

US$ 10000 al mes. Quien no aceptaría. Si es una trampa, será un problema de la Futako del futuro. 

“Me alegro de que aceptara. ¿Cuándo puede empezar?” 

“¡Cuando usted me diga!” 

“Entonces, el lunes de la semana que viene la espero a las 8 de la mañana, así la presento con el resto de la plantilla docente.” 

“Perfecto, el lunes a las 8 estoy aquí. ¡Muchísimas gracias!” Dije emocionada. “Me retiro.” 

“Hasta el lunes.” Se despide el director 

Salgo por la puerta y me dirijo a la salida. Mientras camino por el pasillo, voy mirando el futuro lugar donde voy a trabajar.  

Así termina mi entrevista de trabajo. 

Vuelvo a mi casa, y tengo la cabeza con miles de pensamiento sobre lo que paso hace unas horas. 

Son las 15 horas, así que tengo libre todo el fin de semana hasta empezar mi nuevo trabajo. 

“Bueno, me debería fijar que ropa voy a llevar al primer día” Digo esto mientras miro mi armario. “Aunque debería comprar algo nuevo, para empezar todo desde cero.” 

Fui a comprar al centro de compras de la ciudad, y decidí comprar ropa formal laboral, lo que si bien pegado al cuerpo, para que se vea todas mis cualidades, incluso mi bulto. Luego vamos a ir escalando mientras preparo a mis alumnos. Lo importante es la primera impresión 

Durante el camino de vuelta a casa, pasé por mi tienda preferida de juguetes, para ver si ya llegó mi pedido. 

Al llegar, el dueño de la tienda me recibe: 

“Hola Futako, que placer es verte de nuevo.” Dijo amablemente. “Siempre es un placer ver tu cuerpo privilegiado.” 

“Hola Dari. Me sonrojo cuando me decís eso.” Dari es un hombre mayor, nunca le pregunte la edad, pero aparenta alguien de 50 años. Solo recibo sus halagos, ya que no puede tener sexo, debido a una operación de próstata, pero sigue siendo alguien que le encanta los cuerpos sexis. 

“Pero si es la verdad, solo le digo piropos a las que verdaderamente se lo merecen.” Decía mientras me giña el ojo. 

“Entonces voy a recibir el alago.” le digo mientras agarro su mano y la acerco a mi pecho derecho 

“Imagino que estas por el juguete nuevo que reservaste.” dice Dari mientras se agacha, agarra un paquete y lo pone encima de la mesa. “Llegó hoy, no me diste tiempo para avisarte.” 

“Ay sí. Que emoción. ¿Te molesta si lo abro y lo pruebo?” Digo esto mientras hago una mirada cómplice a Dari. 

“Si, no te preocupes. ¿Queres que mire o me voy atrás?” 

“No solo quiero que mires, por favor te pido que me filmes con mi celular” 

Mientras le paso mi celular, voy desvistiéndome. 

Solo me quedo con mi sujetador y mi tanga, de la cual sobresale por arriba mi pene semi erecto. De su punta ya se puede ver una pequeña gota de pre-semen. 

Abro la caja, y saco su contenido. Es un masturbador con vibrador para mi pene, pero con dos mangueras, ambas terminan en dos consoladores con forma de pene. Al ver esto, mi pene se termina de poner totalmente tieso. Procedo a sacarme toda la ropa interior, y me recuesto en el suelo. Coloco los dos consoladores en mi vagina y en mi ano, y el masturbador en mi pene.  

“Estoy lista.” Le digo a Dari. Él se coloca adelante mío con mi celular en sus manos 

“Cuando quieras” Me dice 

Empiezo a masturbar mi pene con el masturbador, este tiene una textura que raspa suavemente mi glande, mientras que todo mi tronco es estimulado con un vibrador que tiene el juguete. 

Dari, mientras tanto, comienza a meter y sacar el dildo de mi vagina.  

Progresivamente me dejo llevar por el placer y largo los primeros gemidos. Con mi mano libre, copio a Dari y hago lo mismo con el dildo de mi ano. En ese momento escucho el ruido de la puerta abriéndose y veo a una pareja en la entrada. 

Al ver todo ese acto, rápidamente intentan salir disculpándose, pero les grito: 

“¡ALTO! ¡No se vayan!” Se quedan paralizados en la entrada. “Si no les molesta, pueden ver” 

En eso los dos se miran incrédulos, y ella mira con más curiosidad con la cara totalmente roja 

“¿Eres una futanari?” Me dice intentando no ver mis partes. 

“Así es. ¿Te interesa ver lo que estoy haciendo?” 

Ella mira a su novio y al intente dice: 

“Estamos buscando una forma para excitarnos como pareja, para buscar un hijo, pero fracasamos en cada intento” Mientras agarra la mano de su novio 

“¿Es posible quedarnos a ver?” Dijo un poco más ferviente 

Los miro, y mostrándoles una sonrisa les confirmo: 

“Pueden mirar, y si quieren, pueden filmar como lo está haciendo mi amigo. Si eso les ayuda a excitarse.” 

Entonces se acercan y sacan sus celulares, y empiezan a filmar el acto indecente. 

El tener más ojos encima de mi cuerpo, hace que me excite aún más, mientras me masturbo, voy dando miradas cómplices a mis espectadores y a sus cámaras mientras mojo mis labios con mi lengua. 

Aumento el ritmo un poco y Dari copia mis movimientos. Eso hace que se me escapen más gemidos. 

En eso veo que el chico está con una erección que se veía bastante dolorosa a través de su pantalón y la chica intenta esconder que se está mojando como nunca en su vida. 

“Pueden masturbarse conmigo” Les dije, a lo cual ellos dudan al principio, pero después de unos segundos se empiezan a desnudar por la parte de abajo. 

Al instante que están por masturbarse, le digo: 

“Háganlo uno al otro” A lo que se miran entre ellos, asienten y empiezan a tocar tímidamente el sexo del otro. 

Al tener compañeros de placer, aumento aún más el ritmo. Ciento que mi pene va a explotar de placer a lo que empiezo a gritar: 

“¡SI, SI! ¡ME VENGO! ¡ME VENGO! ¡ME VOY A VENIR A DENTRO MIO!” 

A lo que me vengo, y mientras mi pene vacía todo el semen de mis huevos, hago un squirt que moja la cara de Dari. Es tanta la cantidad de semen, que empieza a salir por las mangueras y se empiezan a depositar en mi vagina y mi culo, llenándolos. Por el placer de tener mis agujeros llenándose, tengo otro orgasmo, con lo que sale un poco más de semen con lo que hace que el masturbador salga disparado. Mi pene sigue sacando ese rico liquido blanco, el cual cae por el tronco, y Dari se acerca y empieza a lamerlo.  

Mientras me recupero, veo a la pareja, y ellos estaban extasiados, mirando mi orgasmo, a lo que a los pocos segundos se vinieron los dos. 

Me levanto, y chorreando mi semen de mis agujeros, me acerco a ellos, y les pregunto: 

“¿Cómo se sintió? ¿Alguna vez sintieron esto?” digo esto mientras tengo mi pene aún erecto apuntando a sus caras. Ella no puede dejar de verlo. “Veo que estás interesada, puedo hacerte lo mismo que hice a este masturbador. Y tu novio puede cogerme mientras lo hago” 

Ella asiente, segada por la excitación. Se sienta el mostrador, y me dispongo a poner mi pene en su sexo. Antes de eso, su novio se acerca por atrás mío y sin pensarlo me penetra. Se me escapa un gemido: 

“No estes tan apresurado. Dediquémonos a disfrutar.” y meto mi falo en su novia. 

Entonces empezamos a sincronizar nuestros movimientos, y los gemidos empiezan a llenar el negocio. Dari sigue filmando, después de secarse mi venida en su cara. 

Mientras la penetro, la chica se tapa la cara de vergüenza, pero le agarro la cara y la obligo a mirarme, en eso el chico agarra mis tetas desde atrás, apretándolas, y hago que ella empieza a chuparme los pezones. 

Continuamos así, nuestros sonidos de amor se empiezan a escuchar en la calle, con lo que varios curiosos empiezan a acercarse a las ventanas, a lo que ellos se asustan, y les digo 

“Tranquilícense. No se puede ver desde afuera.”  

Aumento el ritmo de mis embates. Mi compañero me acompaña, pero empiezo a sentir que se va a venir, a lo que le digo que se venga adentro, que no puedo quedar embarazada y tampoco se preocupe, que no puedo embarazar a nadie. Cuando digo esto, ella se me abalanza y se agarra firmemente a mi cuerpo. Muevo aún más mis caderas a lo que él se viene dentro mío, yo sigo penetrándola. Pasa unos segundos más y al final me vengo en ella. Me quedo quieta y sigo descargando mi semen, así unos 30 s. Al final recupero el aliento, y retiro mi falo flácido de dentro de ella. La dejo en el suelo delicadamente.  

Los dos tenían una cara de felicidad en sus rostros. Me acerco a ella y le pongo mi pene bañado de lechita, y hago una seña para que me lo limpie. Ella accede sin rechistar, y me lo lame de arriba abajo, hasta dejarlo totalmente limpio. 

Paso unos minutos, ya todos vestidos. La pareja se acerca y ella me dice: 

“La verdad nunca tuvimos una cogida tan increíble. Casi que no podríamos tener algo igual de nuevo.” Dijo con una pequeña mueca de tristeza. A lo que él dice: 

“No sé si será posible que tengamos este servicio nuevamente?” 

“¿Servició? Yo soy una cliente también.” A lo que dejé perplejos. “Si quieren podemos intercambiar contactos, yo estoy dispuesta a hacer lo mismo otro día. Por cierto, me llamo Futako. Un gusto.” 

“Un gusto, mi nombre es Sae.” Dijo ella. 

“El mío es Ao. Qué raro presentarse luego de lo que hicimos.” Agrego él. 

“¡Ja, ja! Es verdad.” Digo mostrando una pequeña carcajada. “Los presento con el dueño de la tienda. Él es Dari. También es un amigo mío.” 

“Y sean bienvenidos a la Tienda de Dari. Si saben describirlo, puedo conseguirlo. Es mi lema.” Dijo orgulloso Dari. 

“Estoy conforme con el juguete nuevo. Por cierto, estoy bastante metida en estas cosas o más fuertes, si están interesados, ¿puedo llamarlos?”  

“No sé si estamos tan dispuestos a algo más intenso, pero si tienes planes, avísanos y te confirmamos.” Dijo Sae, mientras Ao afirma con su cabeza. 

Y así termina mi pequeña aventura de compras. Ya son las 18:30 h del viernes. Me despido de Dari y mis nuevos amigos sexuales. Les deseo que puedan continuar con sus planes de pareja. 

De camino a mi hogar, siento que mi leche y la de Ao se me está escapando, así que decido ir al baño público del parque.  

Me acerco y tengo que decidir a si ir al baño de hombres o de mujeres. Algunos dirán que es poco ético que no tenga un baño propio para futanaris. Pero tengo la posibilidad de ir a cualquiera. 

Decido ir al de hombres, me acerco al lavabo, me retiro la tanga y me levanto la falda, apoyo mi pierna izquierda en el mármol y empiezo a lavar el semen. En eso escucho el sonido de lo que parecen unas madres y sus hijos. 

Durante un momento, intento cubrirme, pero el morbo de ser vista pudo más, así que sigo con mi tarea, a lo que 3 niños entran al baño, y me descubren. 

“Ay! ¡Perdón señorita!” Mirando con asombro que una mujer con pene estaba en el baño de hombre. 

“No mi amor, no te preocupes.” Le digo intentando usar mi voz maternal. “No es tu culpa.” 

A lo que otro niño me pregunta: 

“¿Porque tienes pito si eres mujer?” Sin sacar la mirada de mi pija dormida. 

“Es que soy una futanari. Soy una mujer con pene.” Digo esto consiguiendo que mi morbo aumente aún más. “¿Quieren ver más de cerca?” Abriendo un poco más mis piernas para que sea más visible. 

“Mi papá no tiene un pene tan grande.” Me dijo el más pequeño. 

“¿Pero solo tienes pito, o tienes la rajita de las nenas?” Me preguntó el primero 

“Tengo las dos. Mira.” Y me levanto mis testículos, para que sea visible mi vagina. 

Esto generó más curiosidad a los niños, lo que se acercaron aún más, tanto que ya sentía su respiración en mis sexos, lo cual hizo que se pare mi pene, y mostrara mis 28 centímetros.  

“Wow! ¡Es aún más grande!” Dijo el más pequeño. “Mi pito va a ser igual de grande?” 

“Puede ser, pero lo importante no es el tamaño mi vida.” Dije eso con una excitación enorme. 

“Pero como lo hiciste tan grande?” Me pregunto el tercero 

“Yo solo hago esto.” Y empiezo a masturbarme suavemente frente a las 3 criaturas. 

Mi erección era increíble, mis pezones empiezan a mostrarse a través de mi blusa. 

Eso no pasa desapercibido por uno de ellos, y me dice: 

“Que tienes en las tetas?” Señalándome el pecho. 

“Son los pezones, son como los de sus mamás.” 

“Mi mamá no me deja verlos más.” Comentó un poco cabizbajo. 

“Si no dicen nada de lo que pase acá, les dejo verlo. ¿Me lo prometen?” 

¡Y los tres respondieron “SI!” 

Entonces, me dedico a desnudarme, mientras doblo mi ropa y la dejo sobre el mármol del lavabo. Solo que con los tacos que llevaba. Los tres niños se quedan mirando con una mirada atónita, no tardo en volver a masturbarme mi pene, entonces me pongo en cuclillas para estar a su altura. 

“Les gusta cómo me veo?” Les digo agitando un poco mi cadera, para que se tambalee mi pene. En eso veo que se hacen unos pequeños bultos en sus pantalones. Me alegro de que mi cuerpo les excite. Se que no tengo mucho tiempo. Así que decido tirarme a la pileta y les digo: 

 

“Veo que sus pititos se agrandaron. Yo puedo hacer que se sientan bien.” 

A lo que los tres asienten con la cabeza. Les indico que se saquen los pantalones y sus calzones, y veo sus pequeñas pijitas paradas, eso hace que mi vagina se moje por demás. Así que hago que se me acerquen y les digo: 

“Ahora voy a hacerlos sentir muy bien, a uno con mi boca y a los otros dos con mis manos, y luego vamos cambiando. Y no se preocupen, no les voy a comer el pito.” 

Así que desnuda en cuclillas, empecé a chupar y a masturbar sus pijitas, en un baño público de un parque a tres niños, mientras sus madres estaban hablando a unos metros suyos. 

Miraba sus caritas, todas rojas, mientras yo me deleitaba con sus pitos. De a poco voy saboreando su pene, lamo su pequeña glande y le doy unos besitos a sus bolitas. 

“Ahora te toca a vos.” Le digo al pequeño e introduzco su pito en mi boca. Estoy así unos cuantos segundos. “Y ahora a vos.” Y me “como” al último niño. 

Veo que los niños ya no pueden más del placer, así que les digo: 

“Ahora quiero que pongan los tres sus penes en mi boca, y se las chupo todas juntas.”  

Entonces acercan los tres sus penes y empiezo a chupar cómo si no hubiera un mañana. 

A los pocos segundos, los tres acaban, pero no sale nada de semen, aún no llegaron a la pubertad. 

Los tres quedan exhaustos. Yo aún tengo una erección descomunal y necesito descargar. 

“Cuando crezcan van a poder sacar esta leche de sus pitos.” Y procedo a acercarme al urinal y a masturbarme descontroladamente, y en poco tiempo me vengo manchando todo el urinal y el piso. 

“Eso blanco es leche como el del desayuno?” Pregunta uno de ellos. 

“No mi amor, esa leche se llama semen. Los generan los niños cuando crecen y se les agranda el pito más.” 

Cuando termino de descargar, me dispongo a limpiarme, y se escucha. 

“Takeru! ¿Ya terminaste?” era la madre de uno de los niños. “Ya nos tenemos que ir.” 

A lo que el niño llamado Takeru le dice: 

“Si mamá en un ratito salimos!” dijo el primero 

Le sonrió y le digo: 

“Así que te llamas Takeru. Mi nombre es Futako. ¿Cómo se llaman ustedes dos?”  

“Yo me llamo Taichi.” dijo el más pequeño. 

“Y yo Rito.” El último. 

“Que lindos nombres! ¿Les gusto lo que hicimos? Podríamos jugar otro día, pero no le tienen que decir a nadie.” 

“No le vamos a decir a nadie, queremos sentirnos bien de nuevo.” 

“Me alegro.” Dije con una sonrisa. “Si quieren les puedo pasar mi número para contactarnos otro día.” A lo que Takeru saca su celular, y nos compartimos nuestros contactos. 

“Esta semana no puedo, pero para la otra creo que voy a estar disponible.” Comenté 

“¡Si, queremos jugar de nuevo!” exclama Rito 

“La próxima ves vamos a jugar a otra cosa, así que prepárense.” 

“SI!” respondieron al unisonó. 

“Ahora vayan que van a preocupar a sus madres. Bye, bye!” 

Entonces se terminaron de vestir, y salieron del baño, reuniéndose con sus madres. 

Se escucha que una de ellas le reclamaba de porque tardaron tanto, pero al parecer no sospechan nada. 

Al final, me visto, y continuo mi camino a casa. 

Son las 7 h. Recuerdo que no tengo comida, así que paro en el conbini cercano. 

Compro varias comidas y bebidas, dos lubricantes extra large, 3 cajas de condones, varias servilletas descartables. 

Eso es lo necesario para el fin de semana. 

Finalmente llego a casa. Me dedico a desvestirme, y me voy a bañar.  

Cuando termino, voy al salón de estar. Es bastante amplio. Tengo un sofá de tres cuerpos, al lado una mesa baja, con 25 tipos de dildos y 5 masturbadores, uno de los lubricantes como el que compre, pero casi vacío. En el sofá, una muñeca de silicona tamaño real, muy realista, y al lado una igual, pero futanari. Son mis compañeras de habitación. En el piso, una bolsa llena de condones usados, que los uso para no ensuciar. Una televisión, mi pc en un costado. 

Luego pasamos a mi pieza, que tengo un pc para stream, en la cual hago directos gratuitos, pero solo tengo visualizaciones de otros países. Está mi cama, en mi mesa de luz unos cuantos dildos más. 

Me dispongo a ponerme una lencería erótica, que permite está al aire mis pezones, mi pene y mi concha. Prendo el stream, y empiezo a cabalgar un dildo doble de 30 cm cada uno, clavándolos en mi vagina y mi culo, mientras que me pajeo al frente de la cámara. Recibo bastantes donaciones, pero me alegra más cuando me dicen que tuvieron una increíble paja viéndome. Me vengo fuertemente y por suerte siempre pongo una protección frente al pc así no la mojo con mi squirt o mi semen. 

Me acuesto. Son las 23 h.  

Tengo 4 mensajes. 

El primero es de Dari: 

-Debo decir que el acting que tuviste hoy fue increíble, si alguna vez quieres hacer lo mismo frente a más público, puedo hacer publicidad. ¡Casi se me para! ¡Jajaja! – 

Le respondo: 

-Ahora empecé un nuevo trabajo, pero te tomo la palabra para hacer algo así en un futuro. Besos – 

 

Segundo mensaje, director: 

-Buenas tardes Sra. Kintama. Soy el director Uehara. Le envío este mensaje ya que durante la entrevista no le informé sobre la vestimenta que debe presentar en su primer día de trabajo. El mismo tiene que ser formal, pero dado su caso, si ve necesario tener algo más “revelador” tiene mi permiso para hacerlo.  

Un saludo 

Uehara- 

-Señor Uehara, le agradezco su mensaje para informarme del uniforme de trabajo. Tengo un conjunto formal para presentarme el lunes en su institución, pero no estoy segura si es de su agrado. Si desea le puedo enviar una foto vistiéndolo. – 

El director respondió: 

-Si no es mucha molestia, por favor envíemela por este medio- 

Así que me dispuse a vestirme. Me arreglé y me saqué la foto. Al envíasela, le agrego en el mensaje: 

-Espero que sea de su agrado- 

Tuve que esperar unos segundos para su respuesta. 

-Excelente. Muchas gracias- 

Al parecer lo dejé sin palabras. 

 

Tercer mensaje: 

-Hola Sra. Futako, soy Sae. Si no le molesta, puedo pedirle algún consejo para hacer que mi novio se excite más. Se que es algo repentino, pero creo que usted es la persona correcta para consultarle algo como esto.  

Muchas gracias- 

Le respondo: 

-Sae querida, no es necesario que me tutees. Llámame Futako solo. Como consejo, puedo darte la opción de sorprenderlo con ropa o lencería más reveladora, alguna situación más arriesgada. Deja volar tu imaginación. – 

Decía esto mientras recordaba que le chupé el pene a tres niños hace unas horas. 

Continuaba mi mensaje: 

-Y viví tu sexualidad sin miedo y sin tapujos hablándolo con tu novio. Mucha suerte- 

En eso me responde: 

-Gracias Futako. Voy a ponerlo en práctica. Saludos- 

 

Cuarto mensaje, de Takeru: 

-Hola Futako. Soy Takeru. Mis amigos y yo ya queremos jugar contigo. – 

-Yo también quiero jugar, pero van a tener que esperar unos días- 

-Pero mi pito no deja de estar parado- 

-Solo tienes que masajearlo como yo te hice. Hazlo en el baño, cuando no te vean. Lo que te puedo enviar es una foto mía, pero no se la puedes mostrar a nadie, solo a Rito y a Taichi. ¿De acuerdo? – 

– ¡Si, si! Envíame tu foto! – 

Entonces con mi ropa de trabajo, dejo al descubierto mis pechos y mi pene, me saco una foto y le agrego unos corazones como stickers, y le agrego al mensaje: 

-Espero que te toque pensando en mi mucho- 

Así termina este día viernes. Quedan 2 días para el comienzo de mi trabajo en la secundaria.  

Cómo verán no soy una persona moral, pero espero que les guste mis aventuras.