Halloween y la noche del terror
De cómo a mi novia y a mi nos violaron sin piedad un halloween.
Alessia se había preparado realmente rápido ese día. Para ser un chico de solo 18 años bastante tímido, delgado (y si confieso, por mi retaguardia redonda y mis muslos firmes, algo femenino) tenía una novia muy guapa. Bajita, de cabello castaño casi rubio y ojos dorados, carita tierna y unas nalgas rosadas y duras que ya había tenido el gusto de probar.
Nos preparabamos para salir de Halloween, y aunque nuestros amigos nos habían cancelado planeabamos salir de todas formas. Yo iría vestido de asesino adolescente, como en un Creepypasta, y mi novia con unas medias altas y falda de cuero al estilo EGirl.
Al llegar a la discoteca todo iba bien, la verdad estábamos bailando y bebiendo mucho, incluso por momentos nos poníamos a cachondear, nos rosabamos y besabamos fuertemente. Cuando se nos acabaron las cervezas fui a por más, pero en la barra me percaté de unos tipos que molestaban a mi novia. Llegué rápido a dónde estaba y les pregunté si había algún problema, pero solo se fueron sin quitarnos la vista. Eran unos tipos de muy mal aspecto, de piel oscura, altos y a juzgar por sus rostros, mayores que nosotros; quizá pandilleros.
La cosa empezó a torcerse cuando una chica me llamó para hacerme preguntas random, cosa que molestó a Alessia, quien salió corriendo de allí creyendo que le había vuelto a ser infiel (antes lo había Sido y ella temía que volviera a suceder).
Salí corriendo tras ella pero en su embriaguez corrió hacia un callejón bastante poco iluminado. Al doblar mi novia discutía con unos pandilleros que le cortaban el paso, los mismos tipos de la discoteca, pero ahora con más personal. Uno tomo a mi novia y la cargo en sus hombros, diciéndole a los otros: te dije que la perrita tenía un culo precioso, mientras reían, cuando llegue uno dijo: mira, ahí está el marica valiente que intento hacerse el machito en la disco, mientras me soltaban un bofetón que me dejaba tumbado en el suelo.
Me desperté con las ropas de mi novia, como si fuera una putita, y todos aquellos machos rodeandonos a ambos. Uno de unos 50 años con un pollón enorme de unos 20 cm me la hundió en la boca, mientras a mi novia la hacían chuparse una verga igual de enorme, atragantándose con ella. Me ensartaron por mi culo virgen sin piedad, sacándome las lágrimas y haciendo todo tipo de comentarios sobre mi figura afeminada y el culazo rico que tenía, mientras se follaban el anito y el coño de mi noviecita.
Esa noche recién empezaba para ambos…
Y? CÓMO SIGUE???._