La enorme verga de don Rogelio (segunda parte)
Soy una pelirroja muy coqueta, la cual siempre he disfrutado del sexo….
Hola queridos lectores… soy Ary, esposa de Pepe y quiero platicarles la segunda (y espero que no sea la ultima) parte del relato que mi marido les conto… La enorme verga de don Rogelio.
Pues mi marido ya me describió en el relato anterior, pero para quienes no lo han leído les cuento… soy una pelirroja muy sexy, coqueta, risueña y muy, pero muy morbosa. Mi atractivo son mis labios, y piel blanca… ok, a quien quiero engañar… mi atractivo son mis tetas… tengo unas poderosas tetas 34D, naturalitas, y unos pezones muy traicioneros que mas de una ocasión me han dejado en vergüenza por que se me ponen duros a la primer provocación y me hacen sentir caliente… es una sensación que no puedo evitar: cuando siento mis pezones duros instintivamente inflo mis tetas y saco la cola en plan perra callejera (jajaja) y necesito desahogarme de alguna manera… ya sea pellizcándolos, o dedeándome, o cuando mejor me pasa, cogiendo.
Aunque nuestra vida sexual siempre fue muy buena y con mi marido tuve todo lo que siempre quise tener, mi morbo siempre me hacia sentir caliente. Cuando recién nos casamos cogíamos todos los días, y en algunas tardes me sorprendia dedeándome para calmar mis ansias de mujer. Con los años, nuestro ímpetu se fue tranquilizando un poco hasta esa noche que vi la verga de don Rogelio… no podía creer que nuestro anciano vecino fuera dueño de semejante animal… verlo coger con su esposa y ver como sus labios devoraban esa tremenda verga me hicieron perder la razón y desde ese momento se convirtió en mi mas oscuro deseo que vino a ser llenado cuando cogimos los tres en el patio de su casa. No entrare en detalles porque lo que quiero platicar es lo que hicimos dos meses después de aquella memorable ocasión.
Don Rogelio nos pidió seguir con esta relación a cambio de nombrarnos como únicos herederos de sus propiedades… la verdad a mi no me interesaban las propiedades, yo lo que quería era seguir disfrutando de su enorme polla, pero hay que ser muy pendeja para dejar pasar una oportunidad así. El acuerdo consistió en que, cuando el quisiera nos mandaría un mensaje y yo iría a darle gusto, ya sea en su casa, o en algun lugar cercano siempre y cuando mi esposo y yo estuviéramos de acuerdo. Desde la noche que hicimos el acuerdo habían pasado 8 semanas y don Rogelio no me hablaba, no me dirigía la palabra ni siquiera había pasado a cobrar la renta… ya eran dos meses y no quería verme desesperada, pero le dije a mi marido…
– Oye amor, no hemos pagado la renta. ¿Porque no vas a ver que pasa con don Rogelio?
A lo que el muy cabron me contesto…
– Porque no vas tu bebe… igual y llévate este frasco de vaselina para facilitar el proceso (me dijo mientras soltaba una carcajada).
En ese momento volví a sentir que mis pezones se endurecieron y senti seca mi garganta… quería ir corriendo a donde estaba mi macho y comerme su polla como una loca, como la primera vez. Quería sentir su glande en mi boca presionando mis labios y abriendo mis quijadas como solo con el podía, quería entregarle mis pezones y ver como me mordía con desesperación, como sacudia mis tetas a su voluntad y me poseía como a una cualquiera… su verga llenando mi panochita, expandiendo mis entrañas y presionando mi vientre mientras veía sus ojos furiosos tomándome como su mujer… envistiéndome una y otra vez… ahhhhh, ahhhh, aaaaaaaaahhhh.
Como pude guarde las apariencias y fui a visitarlo, me acerqué a su puerta y, si ponía la suficiente atención, podía escuchar los latidos de mi corazón como si fueran gritos acompasados… gritos que reclamaban ser apaciguados con sexo, lujuria, salvaje erotismo. Llevaba puesto un vestidito de verano, blanco, holgado con un escote en V discreto, pero al ser mis tetas tan grandes, si se alcanzaba a ver el preciado canalillo entre ellas y la separación que sus voluminosas formas provocaban.
– Hola don Rogelio, como esta?
– Hola Ary, muy bien y tu?
– Bien. Hemos estado con pendiente porque no ha ido a cobrarnos la renta. Ya tiene dos meses que no sabemos nada de usted, y pues quise venir a preguntar.
– No bebe… (me contesto don Rogelio, y al llamarme así, con su voz gruesa y tan profunda, senti que mi conchita se empezaba a lubricar como pocas veces lo hacia)… tenemos un acuerdo, estos dos meses he andado haciendo los arreglos para nombrarlos como mis herederos… recuerdas?
– Uhm… si. Si lo recuerdo… pero… yo pensé que ya se le había olvidado.
– ¿Por qué, chiquita?
(otra vez esa voz, esos ojos… y ahí estoy yo, como pendeja a mis 42 años, en el portal de mi vecino… mendigando su verga, pero sin atreverme a decir nada)
– Es que…
– Estas ansiosa? Me pregunto…
– No… lo que pasa es que ya no hemos vuelto a hablar y pues pensé que se había arrepentido.
– Como podría cambiar de parecer? Si nunca había cogido con una hembra tan rica como tu?
Escuchar aquellas palabras provocaron que mi ya encharcada vagina empezara a temblar de emoción… me sentía como una tonta parada frente a aquel macho…
– Como cree… seguramente usted a tenido muchas mujeres en su vida, le conteste.
– Pero ninguna me ha aguantado una cogida como tu lo hiciste… recuerdas?
– Casi no… menti. Claro que lo recordaba… y lo ansiaba otra vez… lo soñaba a cada rato y no había un solo día que no viera un pepino, o algun objeto que me recordara su falo porque sentía que mis entrañas lo reclamaban. Pero lo calle, y hubo un silencio entre nosotros para finalmente mirarnos a los ojos fijamente… sin decir palabra alguna, la tensión la sentía en el ambiente, mi boca semiabierta y mi respiración entrecortada eran un símbolo inequivoco de mi calentura… pasaron 2 o 3 minutos cuando su voz me despertó del trance.
– Tengo unos amigos. Luis, Pedro y Raul. Ellos son mis colegas de cuando trabajaba en la policía. He platicado con ellos de ti… obviamente no les he dicho que eres la mujer de mi vecino, pero si les dije lo increíble que estas y que eres mi nalguita… espero que no te moleste…
– Jajaja… como me dijo??
– Mi nalguita, eres mi nalgita…
– Jajaja… si, don Rogelio…
– Entonces no te molesta que te diga así?
– Claro que no… soy su nalguita.
– Háblame de tu…
– Soy tu nalguita papi… lo dije con el tono mas seductor que pude…
– Que rico se oye cuando lo dices tu bebe…Bueno, pues les dije a estos cabrones que me estoy cogiendo una nalguita bien rica… y no me creen… ¿puedo tomarte una foto para mandárselas por whatsap?
– Claro… le respondi… la calentura no me dejo pensar en los posibles riesgos, pero era su nalguita… no podía negarme.
– ¿Quiere que me quite la ropa o a
– Tu no necesitas desnudarte chiquita… esas tetas riquísimas se te ven a kilómetros de distancia me respondió.
Hice un par de poses sexys y el me tomo dos o tres fotos, la verdad no supe cuantas. El me dijo…
– No se la van a creer estos cabrones el mujeron que me estoy cogiendo.
En ese momento yo quería que me cogiera otra vez, pero entendí que el momento no era el apropiado, aunque si hubo muchísimos avances. Me senti muy satisfecha con lo que logre y le dije…
– Bueno papi… ojala les guste a tus amigos mi fotito…le dije mientras me daba la media vuelta.
– Espera… me dijo un poco desesperado. Ya me contestaron estos perros…
– Ahhh, tan rápido? Y que dicen?
– No creen que sea verdad.
– Pues si quieres nos tomamos un selfie, y se los mandas…
– Y como nos lo tomamos?
– Mmmmhhh… como se te ocurre, travieso? Le respondi.
– Ya se…
(en eso estábamos cuando uno de sus amigos, le mando un audio… en el que le decía que ni en mil años podría agarrar una vieja como la de la foto y que si una vieja así estuviera ahí con ellos, lo escogería a el antes que a don Rogelio)… Ese comentario me lleno de rabia, porque nadie iba a estar burlándose de mi macho… menos un vejete que tal vez ni se le paraba… pude notar que el se entristecio un poco y le pregunte…
– Porque te pusiste así?
– Es que siempre me han agarrado abajo. Me contesto
– Pues no te dejes… además, tu eres mas guapo que ellos… le dije
– Gracias Ary… pero es una historia muy vieja, desde jóvenes hemos sido amigos y ellos siempre tuvieron mucho pegue. Te acuerdas que te dije que ninguna me había aguantado una cogida como tu?
– Si… le respondi ruborizada.
– Pues cuando éramos jóvenes, mis amigos cogían con cuanta hembra se les atravesaba… y yo no. Alguna vez me anime a buscar alguna pero al ver mi aparato les daba miedo y no querían salir conmigo… eso a mi me traumo, pero nunca lo dije… por eso nunca agarraba vieja y ellos si…
– Espera… tus amigos no saben el animalon que te cargas ahí, papi? Pregunte…
– No… solo mi difunta esposa y ahora tu.
Era una rueda de la fortuna de emociones… sentía coraje por aquel trato tan cruel hacia mi macho y por otro lado mucho coraje por eso que estaba pasando y sin pensarlo le dije…
– Cuando ves a tus amigos otra ves?
– Este jueves (me respondió)… nos t oca el domino en la cantina del centro.
– Quienes juegan?
– Nomas nosotros 4.
– Pues tráetelos a tu casa… le ordene. El jueves yo preparare la cena para ti y tus amigos y van a ver que si es verdad que soy t u nalguita…
– De veras??
– Si papi…por ti haría lo que fuera
– Pero no le has dicho a Pepe…
– no te preocupes, el lo entenderá….le dire que es parte del trato.
Me abrazo muy contento y de la emoción me dio un pequeño beso… pude sentir su miembro en mi vientre y otra vez… mis pezones se endurecieron al estar cerca de mi macho… aaaaahhhhgggh
– Como quieres que venga vestida??? O no quieres que use ropa? Pregunte…
– Vente sexy, quiero que estos cabrones vean que mi nalguita es la mujer mas sexy que ellos nunca han podido tener…
– Muy bien… escogeré algo que los haga babear… a que hora llegan?
– Ellos llegan después de las 8.
– OK, a las 7 aquí estaré para prepárate todo…
Nos despedimos con un beso de amigos y me fui a mi casa… triunfante y feliz. Le comente a Pepe lo que había pasado e inmediatamente accedió al trato que t eniamos no sin antes pegarme una cogida de campeonato… me acosto en la cama boca abajo y, sin ningun preámbulo comenzó a penetrarme por el culito… ya lo habíamos hecho muchas veces por ahí, pero después de haber cogido un buen rato… nunca así, a la primera… y lo curioso es que no batallo, al contrario… me culito apretaba fuerte su verga y en 5 minutos lo hice acabar… pero yo quería mas… tuve que aguantarme con esa improvisada sesión de sexo.
El jueves llegó, la noche anterior no podía dormir imaginándome múltiples situaciones morbosas en las que podría estar… ser el centro de atención siempre me ha excitado y mas ahora sabiendo que mi macho me presumiría frente a sus amigos. Me di un baño en el jacuzzi, use un jabón de aroma tropical y me depile mi chochito… quería estar perfecta para la ocasión. Unte de crema todo mi cuerpo, poniendo especial atención en mis tetas… quería que brillaran y que fueran suaves al tacto porque estaba segura que habría mucho tacto… jeje… me pare frente al espejo y verme así, desnuda, desafiante hizo que empezara a crecer, por si eso fuera posible, mi excitación… me sentía una hembra plena y eso que aun nadie me veía… era una noche de verano por lo que use un vestidito de algodón… no llevaba puesto brassier ya que no necesitaba, y llevaba un cachetero color carne, el cual se podía confundir con mi desnudez. El vestidito tenia un discreto escote en corte redondo por lo que se podían apreciar toda la parte superior de mis tetas… unos tacones finos del 6 y una coleta sencilla en mi pelo rojo… mi esposo se iría al cine con mis hijas y yo me iba a ir con unas “amigas” por lo que no seria sospechoso… al menos para ellas… Pero había un problema… por mas que lo intentaba, mis pezones no lograban perder su inflamación, estaban desafiantes… duros, hinchados sabiendo lo que les esperaba. Fue mi hija Alejandra, la mayor quien me dijo…
– Mami, puedo hablar contigo?
– Si hija…
– Oye… perdona que me meta… pero se que iras con tus amigas… no te parece que vas muy sexy?
– Para nada… tu crees?
– Lo que pasa es que se te notan mucho tus pezones… me dijo sin titubear.
Ahhh… que decía? Como respondia aquello?
– Creo que tenemos el mismo problema…me dijo la chiquilla. Porque a mi tambien se me notan horrores… me dijo mientras guiñaba el ojo… lo raro es que a mi solo me pasa en las noches cuando estoy dormida y me despierto ansiosa…
– Es este bra que no me ayuda mucho… respondi
– No te preocupes, solo cuídate porque no ira mi papi y no habrá quien te cuide… y se fue riendo.
Se fueron al cine… mis pensamientos volaban a mil por hora pensando en lo que me esperaba y en el reciente descubrimiento de la sensualidad de mi hija… le abre heredado tambien lo caliente? Pensaba en silencio… me dirigi a la casa de don Rogelio y ahí estaba el… la casa a media luz y el muy nervioso…
– Hola papi… le dije mientras lo abrazaba…
– Que rica te ves mi nalguita… me dijo mientras me sobaba el culo por encima del vestido.
– Soy toda tuya y hare todo lo que quieras esta noche… todo… incluso si me pides un trio lo hare… quiero que esos cabrones vean que me tienes dominada.
Cuando dije esto, mi mano instintivamente fue hacia su verga y pude tocar lo enorme que era… recorri con mi mano su longitud cerrando mis ojos… quería que me poseyera en ese momento, pero todo a su tiempo. Prepare la mesa con las botanas y lo deje solo, me fui a un pequeño bar que tenia cerca de la piscina y me puse a esperar. Llegaron sus amigos, los clásicos viejos de 60 años… Luis era un viejo canoso con un poco de panza, se veía muy malo, Pedro era mas bien chaparrito y con los ojos muy lujuriosos y Raul era un moreno tirándole a negro, se veía muy fornido y era el mas atrevido de los 3… llegaron y le preguntaron por mi, yo alcanzaba a escuchar las platicas que traían los vejetes… empezaron a jugar y tomar, y a medida que tomaban las preguntas por la dichosa nalguita no se hicieron esperar… que como es, que si estaba bromeando, etc… Don Rogelio estaba muy tranquilo diciendoles que no estaba ahí que me había ocupado… yo no entendía de que se trataba el juego, pero… el les dijo… que otra ocasión seria. Me desconcerté un poco, pero en eso Raul le dijo… yo sabia que no tienes una mujer como la que dices… es puro pedo el tuyo. En eso don Rogelio se armo de valor y agarro el celular… me marco y me puso en speaker frente a sus amigos y me dijo… con su poderosa voz.
– Que estas haciendo chiquita?
– Aquí, atendiendo a la familia… conteste.
– Ven. Me dijo en tono seco
– Ahorita?
– Si. Deja lo que estas haciendo y ven. Me ordeno
– Ok, respondi sumisa.
No pasaron ni 5 minutos cuando toque la puerta… me abrió guiñándome el ojo mientras me besaba apasionadamente manoseando mis tetas… yo sentía morir de excitación… por fin podría coger con mi macho y lo haría para tumbarles el orgullo a esos cabrones.
– Pasa nalguita, me dijo.
Y me puso frente a sus amigos, quienes no daban crédito a lo que sus ojos veían… mis enormes t etas asomaban desafiantes por la parte superior del escote y los pezones amenazaban con romper la fina tela del vestido.
– Este cabron es Luis, aquel libinidoso es Pedro y este puñal es Raul… me dijo mientras reian los tres.
– Mucho gusto, señores… les dije mientras tenia tomada la mano de Don Rogelio… ya me había platicado Rogelio de ustedes.
– El gusto es nuestro chiquita… dijeron los tres pelados mientras me desnudaban con los ojos…
– ¿Qué te quieres tomar?
– Pues lo que gusten… les respondi.
– Tomate mi leche… grito Raul.
– A ver compadre… mas respeto para mi nalguita…
– Perdón compadre… pero es que no creo que sea tu vieja.
– Y empezaron a reír mientras yo voltee y le di un beso largo y profundo en los labios a mi macho… mis manos empezaron a tocarlo suavemente y le dije al oído… retalos… retalos que ninguno me puede aguantar 5 mnutos…
Me llevo a un sillon de cuero y les dijo…
– Pues les apuesto lo que quieran que ninguno de ustedes le aguanta a mi vieja ni 5 minutos…
– Como crees? Empezó la discusión…
– Se los aseguro. Y empezaron las apuestas… como eran viejos de dinero, apostaron 1000 dolares cada uno a que si me podían aguantar 5 minutos…
Yo estaba que ardía de la calentura, pero tenia que esperar a que mi macho me diera la orden…
– Encurate! Me dijo.
– Si papi… pero apaga poquito la luz…le dije
Raul corrió a apagar bajar la luz de la sala… y se sentaron frente a mi. Empecé a bailar lentamente al sonido de la música y acercándome a ellos, podía sentir su mirada perversa en mi mientras retorcia mi cuerto e inflaba mis tetas… lentamente baje un tirante, luego otro… el volumen de mis pechos no dejaba que mi vestido cayera… les di la espalda y me empine muy sexy para quedarme solo en aquel cachetero… los gritos y silbidos no se hicieron esperar mientras todos me gritaban que me diera la vuelta… muy, pero muy despacio me di la vuelta tapándome las tetas, las piernas cruzadas y el color de mi cachetero hacían parecer que estaba totalmente desnuda… pero no… podía sentir que mi corazón se salía por la boca, nunca había estado en una situación similar y menos frente a tantos hombres… pero la calentura saco lo perra que había en mi y sin meditar mucho me quite el brazo de mis enormes melones… mientras bailaba, ahora semidesnuda, podía sentir como el peso hacia que el vaiven se convirtiera en algo mágico… hipnotizante.
Los viejos me miraban asombrado y a cada cierto tiempo caminaba a donde estaba mi macho para poner sus manos en mis tetas… el las amasaba con delicadeza y los otros tres solo saboreaban… en eso, me pare frente a ellos y les dije… a ver cabrones… ahora me van a enseñar sus pijas… los tres saltaron sobre mi, pero los detuve al instante… si no se encueran no podrán ni acercarse. Rápido se quitaron la ropa y pude contemplar aquellos aparatos. No están de mal ver, pero ninguno como la verga de mi Rogelio… el primero se acerco… tenia la verga totalmente tiesa y cuando me toco con su mano derecha una teta inmediatamente se vino… una descarga abundante y muy blanca… pero ni siquiera alcazo a tocarme… la risa y el mormo que yo sentía era increíble, yo era totalmente dueña de la situación. Paso el segundo y venia muy seguro de si mismo, su riata era mas larga que el anterior, pero muy delgada… cuando me acerqué para restregar mis tetas en su cara… se vino frente a mi… no h abian pasado ni cinco minutos y ha había hecho acabar a dos de los cabrones amigos de mi Rogelio… me acerque al ultimo, raul… mi panocha babeaba líquidos de tanta excitación, mis pezones me dolían de tanta calentura… acerque mi teta a su boca y me empezó a chupar con gran maestría… pero, no se le paraba. Empezó a tocar con su pulgar mi conchita y metió un dedo de golpe, pero no se le paraba… y así estuvo por 3 minutos y nunca se le paro… el tipo ya no podía…
Luego, sin decir nada me di la media vuelta y fui a donde Rogelio estaba… puse su mano en mi choncha y le dije muy sexi… mira papi, esto es por ti… empezó a dedearme con sus gruesos dedos frente a sus amigos y sin decir nada me arrodille frente a el y saque su enorme verga… sus amigos quedaron en shock al ver aquel animal y finalmente pude saciar mi hambre de macho…
Con mi lengua recorría cada centímetro de piel y chupaba lentamente su glande, de reojo volteba a ver su cara y sus ojos entrecerrados diciendo… siiiii, ssiiiii… aaaahhhhh, ahhhh, ahhhh…
Mis labios empezaron a hacer ruidos de mamadora profesional… la escena era erótica, candente… los sonidos y quejidos hacían que aquello pareciera una película porno… yo me olvide completamente de sus amigos y empecé a darme gusto como tantas ganas tenia…
El se sento sobre el sofa y me hizo la seña para que lo cabalgara… abri mis piernas y pude volver a sentir aquel miembro taladrar cada centímetro de mi panocha… se abría paso con cada embestida y yo jadeando y gimiendo sin parar…. Ahhhh, ahhhh, ahhhh, aaaaaaahhhhhh… mis gritos eran ahogados, luego sonoros, luego apagados… sentía que me partia y quería que nunca acabara… y por su parte me besaba, mordía mis tetas, doblaba mis pezones y yo me sentía en la gloria… que placer… su dedo empezó a perforar mi culo cuando estalle en el primer orgasmo… ahhhhhhhhhhhhh…. Pude sentir chorros de mis líquidos embarrar nuestros cuerpos mientras aquella ola de placer interminable me sacudia… ahhhh, ahhhh, aaaaaaaaahhhh… el me abrazo gentimente y me dijo con su poderosa voz…
– Ahora sigo yo.
Y me volteo de frente y con su verga totalmente embarrada de mis fluidos me penetro de perrito, podía sentir su falo lubricado por mis jugos abrirse paso en mi cola… su tranca era enorme pero eso no representaba ningun dolor… no tardo ni 10 minutos cuando pude sentir como su verga se enrgosaba mas… quise voltear a que acabara en m i boca pero el me dijo que no… que quería acabar en mi culo.
Las embestidas aumentaron de fuerza y perdi la noción del tiempo mientras el poseía salvajemente mi cuerpo por todos sus orificios… mis gritos y jadeos debian escucharse a dos cuadras pero no me importaba… estaba en el cielo y eso era lo importante para mi… ahhhhh, aaaaaaaah,,,,, ahhhhhhh…
Cuando finalmente dejo de bombear, cayo sobre mi cuerpo sin sacar su verga, pude sentir su torso sudado en mi espalda mientras me acariciaba las tetas por detrás… gracias bebe… me decía despacito… gracias por esa noche… me has hecho el hombre mas feliz del mundo…
Yo estaba sin habla… había perdido la cuenta de los orgasmos y aun en ese momento final, su verga seguía tiesa en mi culo… la sensación era increíble, nuestros cuerpos sudados sobre el sillon de cuero era una imagen de lo mas erótica que hasta hoy conservo…
Cuando recobramos el conocimiento, sus amigos ya no estaban, solamente sobre la mesita había 3000 dolares por la apuesta que ellos habían perdido y que mi macho gano… el dinero me lo dio, porque según el, jamás alcanzaría a pagarme por aquel triunfo que lo hice pasar…
El reloj marcaban las 3 AM y discretamente me fui a mi casa… me dolían un poco las piernas al caminar pero iba satisfecha por la tremenda faena que habíamos tenido Rogelio y yo… quedamos de vernos el próximo jueves para repetir la ocasión… aunque esta vez, ninguno de sus amigos se atrevería a venir.
Cuando llegue a mi casa, entre sin hacer ruido y me fui a bañar, al abrir la puerta del baño ahí estaba Alejandra… mi hija, con sus tetas increíbles al aire, viéndose al espejo mientras me pregunto…
– Como le hago para que se me quite lo hinchado de los pezones mami???
Espero que esta historia les haya gustado, les mando algunas fotos mias y espero poder seguir relatando la tercera parte de esta historia… apenas la estoy viviendo… como le ayudo a mi hija a quitarse la calentura???
Continuara……..
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mmmm quiero ver como sigue
Está muy bien que tú escribas la segunda parte, pero ¿Cómo puedo localizar la primera? Me gustaría leerlas en orden, así la historia tendrá su ritmo natural. Promete ser una buena historia.
¿Con qué título y bajo qué autor se publicó?
Que exitante historia, me gustaria ver como te coje Rogelio con esa vergota y como lo cabalgas. Ojala que tengas historias de tu hija, ya que la inicies a cojer con Rogelio tambien.