Maestro de rondas infantiles – parte 2

Continuamos con los siguientes pasos.
Después de mi primer día de ensayo con las niñas de primero de primaria del colegio particular mi vida cambio por completo, pues nunca antes había tenido novia ni mucho menos una ronda de sexo oral que me hicieron esas chiquillas, algo en mi había cambiado y por supuesto acepté seguir como maestro y empezar a hacer de esas niñas mis putitas, pero debía tomar todas las precauciones debidas para evitar que nos sorprendan en pleno acto, y mi plan implicaba usar a esa niña Carlita como ayuda para que las demás aprendan a ser como ella.

Al día siguiente me levanté temprano para ir a mi escuela donde estudiaba para ser maestro de educación física, pero por lo general las horas no son muy largas en ese lugar y podía salir temprano para que me dirigiera al colegio particular, una vez que llegué me recibió el guardia y sin más fui al salón de música donde ya me estaba esperando las chiquillas.

-Muy bien niñas vamos a ensayar y recuerden que si lo hacen bien tendrán su recompensa-

-SII- todas gritaron de alegría.

En ese momento empezamos con las clases de baile para que aprendieran a sentir el ritmo de la música y pudiéramos ensayar bien los pasos, debido a que mi hermana y yo no tenemos los mismos gustos en cuanto a música se refiere, decidí hacer algunos cambios a la mezcla que utilizaría para ensayar la ronda por lo que le di un pequeño toque a mi gusto que a mi parecer quedó mejor que como estaba antes ya que mi hermana siempre le gusta la música en inglés de artistas como Bey once, Lady GAGA, Kathy Perry y similares, yo le di un toque de K-POP mezclado con ritmos orientales y siento que le va muy bien, además quiero que las niñas conozcan esta música ya que hay mucha gente que no sabe apreciarla. (aclaro solo me gusta por el ritmo de la música más que por la apariencia de los artistas o por la letra ya que ni siquiera entiendo el coreano)

Primero escuchamos la música para que se acostumbraran al ritmo, luego ensayamos los pasos y finalmente vino la mejor parte, recompensar a las pequeñas por su esfuerzo y para esta parte nadie mejor que Carlita para que les enseñara lo que íbamos a hacer.

-muy bien niñas ya hemos ensayado lo suficiente, tomaremos un descanso para darles su premio-

-Si que bien- gritaron todas al mismo tiempo que casi me dejaron sordo.

-muy bien Carlita acércate por favor-

-si- obedeció la niña.

En cuanto Carlita se puso junto a mí, mis manos tocaron ambas piernas descubiertas ya que todas traían falda, la niña se dejó hacer puesto que no opuso resistencia alguna, las demás chiquillas miraban atentas a lo que estaba haciendo, subí la falda de Carlita para ver que ropa interior traía puesta y grande fue mi sorpresa al ver que traía una especie de tanga hecha a su medida y resaltaba sus pompas y por delante se podía apreciar muy bien su vagina ya que parecía transparente, con mis dedos le hice a un lado su tanguita y empecé a lamer esa delicia de rayita infantil, no me importó que las demás nenitas nos vieran puesto que ayer aprendieron a mamar verga y esta vez yo quería chupar sus rayitas infantiles.

Carlita gemía del placer que mi lengua de daba con cada movimiento que incluso puso sus manos en mi cabeza para que la chupara más fuerte, las demás solo miraban en silencio y llenas de curiosidad por saber lo que se siente, los gemidos se hacían más rápidos y más intensos hasta que me separé de ella y soltó un orgasmo que casi la desmaya.

-Carlita se hizo pipí- gritaban las demás

-No niñas, no es pis, es orgasmo y eso sale cuando te chupan la vagina, es una forma de decir que les gustó-

-Si, eso mismo me dijo mi papá- me comentó Carlita.

-Bien niñas las voy a ir llamando de una a una y se van a bajar sus calzones para que les chupe sus vaginas-

-si maestro- dijeron las demás niñas sin pena alguna.

Las niñas estaban formadas haciendo un círculo y yo estaba adentro de ese círculo, primero comencé chupando la vagina de Montserrat, esta niña blanquita se mostraba algo temerosa pero poco a poco se dejaba hacer, pase mi lengua se arriba hacia abajo y luego empecé a succionar con mi boca ese aroma irresistible de niña inocente, la pequeña se reía me decía que le estaba haciendo cosquillas y al cabo de unos minutos soltó ese orgasmo que estuvo rico, la siguiente fue Mindy quien al igual que Carlita puso sus manos en mi cabeza y me acariciaba mientras mi lengua hacía de las suyas en su partecita la cual también estaba sabrosa, chupe y chupe hasta saciarme y luego de ella siguió Flor, otra niña que también me invitó a disfrutar de su sabrosa vagina, la saboreé y la disfrute tanto como ella le gustó, luego siguió el turno de Denisse M. (para diferenciarla de la otra Denisse) ella igualmente tenía una vagina muy bonita y sabrosa que degusté con sus jugos de placer, luego siguió Evelyn que también gemía como las demás lo hicieron y lo que me gusta de ella es que me habla muy bonito con un encanto inocente que conservó hasta el día que fue desvirgada (ya contaré sobre eso más adelante), después de ella siguió Brenda quien también disfruto de ser chupada en su vagina, gemía y me decía que quería más y claro que le di más, luego siguió Adela quien tampoco se quedó atrás, su vagina estaba tan rica como las demás que había chupado, mi lengua paso una y otra vez recorriendo esa parte íntima y hermosa de las niñas que por supuesto no desaproveché.

La siguiente fue Olga, esta niña a igual que las demás compañeras (excepto Carlita) nadie le había chupado su cosita hasta que se la chupe, mi lengua primero de dio una sensación extraña que poco a poco le fue gustando y desbordó su néctar de éxtasis, después de ella siguió Martina, con ella tampoco hubo problema ya que desde que le toque sus labios vaginales con la punta de mi lengua empezó a gemir como angelita, me aferré a sus nalgas intentando saborear su néctar hasta que me llegó mi merecido premio, ella terminó algo cansada por lo que se sentó en el suelo al igual que las demás niñas que ya les había chupado su vagina.

Ya llevaba 11 niñas y aun me faltaban por chupar 21 vaginas restantes así que les resumiré el orden en que pasaron: Denisse S, ella tenía un bonito calzón rosa claro que escondía su preciosura de vagina que no solo estaba hermosa sino también sabrosa, lamí y lamí hasta que se vino; Sofia, esta otra niña de lentes también me dejo saborear su rayita de niña y vaya que le gusto pues con sus manos me empujaba lo más que podía para que le siguiera chupando; Catalina, ella ya se había quitado por completo su calzón blanco infantil e hizo que todas las demás lo hicieran y eso me hizo lamer su cosita con más ganas que nunca, chupé y succione sus labiecitos vaginales hasta que soltó su orgasmo; Julia, esta preciosidad de nenita como sus demás compañeras descubrió el placer del sexo oral y de cómo su vagina puede ser útil para sentir la lengua chupándola sin cesar; Juanita, esta niña es algo traviesa pero desde ese día se volvió algo más picara y atrevida pero sabe cuándo contenerse, le encantaba que mi lengua jugase con su puchita hasta que la hice venir; Dulce, que tiene una vagina tan dulce como ella lo lamí y chupe hasta quedar saciado; Leticia, esta niña que se veía a las que salían en las novelas de televisión también tenía una rayita hermosa, su tímida sonrisa le daba cierto encanto así que sin más saboree esa vagina sin ningún remordimiento, ella también gemía de gusto hasta soltar sus jugos, luego siguió Giselle, otra niña que sintió el placer de ser lamida en su partecita y la hice excitar de gusto, después le tocó a Verónica, esta niña sí que sabe gozar y su vagina muy rica por cierto su conejito no olía a nada pero no por eso sabia feo, al contrario sabia bueno tanto así que le lamí lo más profundo de sus labios vaginales hasta sacarle su jugo de placer, luego siguió Eliza quien me miraba curiosa por saber como se siente ser lamida en su partecita, la suya también estuvo rica, la siguiente fue María cuyas braguitas blancas reflejaban un aire de ternura e inocencia y cuando le puse mi lengua tembló un poquito pero cuando empecé a tomar ritmo en mis lamidas también se excito y me dio sus jugos.

Acto seguido fue el turno de Valeria cuyo sabor de su vagina me gustó mucho y con Lluvia me dio una lluvia de orgasmo delicioso, la siguiente fue Nancy cuya vagina irresistible lamí hasta quedar satisfecho, la siguiente fue Camila, quien después de observar lo rico que sintieron sus compañeras no quiso quedarse a tras y con sus manos me empujo lo mas que pudo para que disfrutara de su rayita que lamí muy contento, luego le tocó a Laura, esta niña inocente como sus demás compañeras aprendió lo que se siente que le chupen su cosita, luego fue el turno de Amalia, le puse mis manos sobre sus nalguitas y se las aprete ligeramente mientras me deleitaba con su dulce manjar llamado vagina, ella gemía y suspiraba más que las anteriores niñas y rápidamente soltó su orgasmo, a Rosita lo lamí lo más salvaje e impaciente pero sin lastimarla y ella me correspondió poniendo sus manitas en mi cabeza para que siguiera chupando a gusto, y a Clara se notó claramente que le gusta que le chupen la vagina, le daba y le daba con mi lengua hasta saciarme, Alma ya estaba algo cansada de esperar pero fue recompensada adecuadamente con una super chupada a su vaginita que le gustó y me dio sus jugos, Nadia ya estaba sentada sobre el piso desde hace buen rato creo que desde que estaba chupando a Dulce, en fin su vagina estaba tan rica que no quería dejar de chuparla pero aún quedaba la vagina de Luisa quien a pesar de haber sido la ultima de todas las niñas de la ronda infantil fue quien seguramente disfruto más que las demás pues con ella si me tarde algo más de tiempo puesto que no quería que se sintiera mal por ser la última, es más su orgasmo no sabia a orina ni nada pero estuvo rico, termine con la cara empapada pero por suerte siempre traigo en mi maletín deportivo cosas y artículos de limpieza por lo que les di un pañuelo a cada niña para que se limpiaran adecuadamente su vagina mientras me lavaba la cara para que no se me notara nada.

Después de que me limpie la cara todas las niñas ya se habían limpiado su partecita, se subieron sus calzoncitos tan lindos y eso me había dado una idea, les pedí que se agruparan en tres filas; la primera fila once niñas estarían sentadas en el suelo, la segunda fila estarían de pie y la última fila estarían paradas sobre unas sillas que estaban arrinconadas para que no nos molestaran al ensayar, en cuanto estuvieron agrupadas así como les dije les pedí que se levantaran sus faltas y me mostraran sus calzoncitos, todas lo hicieron y mi verga estaba al cien, saque mi celular y tome algunas fotos que decidí mantener en secreto pues podría ser arrestado si alguien lo supiera, y después les pedí que se bajaran sus bragas y me enseñaran sus vaginas, todas lo hicieron y mi verga ya no aguantaba más pero me resistí, igualmente saque varias fotos con mi teléfono celular para tenerlas de recuerdo.

Al final todas las niñas me dieron un besito y antes de despedirnos por el ensayo de ese día les recordé que no dijeran nada de lo que hemos hecho ni de lo que haríamos en los próximos ensayos si no querían que nos castigaran a todos, las niñas se asustaron y me dijeron que nunca dirá nada pero que les dejara chupar mi pene y ellas me dejarían hacer lo mismo con sus vaginas, les dije que mañana haríamos algo nuevo que Carlita ya me había dicho que hacía con su papa y lo quería hacer con todas las demás niñas, que lo sabrían mañana y ensayaríamos en serio para ganar el concurso de rondas infantiles que ya estaba a la vuelta de la esquina, no me preocupaba mucho eso puesto que las niñas me han demostrado que son muy buenas y estoy seguro de que ganaremos.

No se pierdan la próxima parte, denle sus likes y comenten si quieren la tercera parte.

Notas del autor: estaré continuando con la saga de «Maestro de rondas infantiles», la saga de «Celular extraviado» estará en descanso por un tiempo mientras la finalizo, estaré publicando muchos más relatos que espero sean de su agrado, dejen sus comentarios yo con gusto los leo, yo soy Neon y me gusta mucho compartir relatos eróticos.