Mientras esperaba mi almuerzo en la fila un viejo me invito a su mesa
Estaba de pie en la barra mirando el menú para pedir mi almuerzo, ya que no me gusta cocinar además que no me da tiempo uwu. En eso, un joven y muy guapo mesero me pasa una notita donde alguien me invitaba a sentarme en su mesa..
Estaba de pie en la barra mirando el menú para pedir mi almuerzo, ya que no me gusta cocinar además que no me da tiempo uwu.
En eso, un joven y muy guapo mesero me pasa una notita donde alguien me invitaba a sentarme en su mesa.
Di vuelta a ver quién me había enviado la tal notita y para mi sorpresa, era un hombre mayor, tal vez de 65 o más, con toda la pinta de viejo libidinoso y pervertidos. Me hizo señas para que me fuera a sentar a su mesa, rápidamente eche una ojeada al lugar y me di cuenta que no había mesas desocupadas, así, que, sin mas remedio, acepte y me fui a sentar a su mesa.
No me habían traído mi pedido y el viejo ya me estaba haciendo proposiciones indecorosas.
~Disculpe, le agradezco, pero soy casada~ le respondí queriendo ser amable y educada.
~Eso no importa bb, a las casadas también les encanta, no me lo vas a negar~
~Además solo te estoy invitando, ya depende de ti hasta a donde quieras llegar~
Yo me empecé a poner nerviosa, la verdad es que ese pinche viejo ya me empezaba a poner caliente con sus insinuaciones. Por más que le decía que yo era casada, a el eso le valía madre.
El caso es que finalmente acepte salir con el y el muy pervertido me llevo a un cine porno. Nos metimos y el escogió unos asientos algo discretos, sin mucha gente cerca.
Enseguida, paso un brazo detrás mío y me acariciaba. Al ratito ya me tenia una mano dentro de la blusa manoseándome un seno. Me daba pellizquitos en el pezón y yo ya estaba agarrando vapor ufff.
Yo me hice un poco hacia adelante para que no nos vieran (y también para ponérsela más fácil) je je.
Esa posición me llevo a tener que separar un poco las piernas, pero el viejo pensó que le estaba dando entrada, así que me las empezó a acariciar y poco a poco su mano iba más y más arriba.
Al poco yo ya me estaba retorciendo de calentura, mi sexo ya estaba bien mojado y los dedos del viejo me daban tremendo placer, haciendo que yo gimiera y jadeara.
En eso un wey se sienta detrás de nosotros y me empieza a manosear las tetas ufff, no manches, me puse como loca de caliente, así que no me importo nada, ni que nos vieran y me deje hacer.
Ya al poco, el chico se paso junto a mi y me la dio a chupar, no manches, tenia la verga ya bien parada y bien grande y dura.
Y pues a quien le dan pan que llore, así que me puse a mamársela hasta que se vino tremendo dentro de mi boca y sin más se fue.
Para eso, el viejo me estaba dedeando tan, pero tan rico que ya no me aguante y me vine tremendo, llenándole la mano de mis jugos.
El se chupaba los dedos y me los daba a chupar a mi también, así que los dos saboreamos mis jugos, luego me agarro y me beso en la boca, así que el también probo la leche del chico ufff.
Me agarro de la mano y nos salimos.
~Ya me pusiste bien caliente, vamos a coger al hotel~ decía mostrando gran excitación en su voz.
~No puedo señor, soy casada~ le decía, pero mi voz denotaba tremendas ganas de ir a coger.
~si, ya se que eres casada, pero también se que eres una puta caliente con ganas de verga~
~Bueno, eso sí, pero que dirá mi marido si se entera~
~Pues el también dirá que eres una puta caliente con ganas de verga, pero de seguro que eso él ya lo sabe~ continuaba diciendo el viejo poniéndome cada vez más y más caliente.
~si, lo sabe, pero creo no le gustara que me meta a coger con un viejo caliente y vergon como tu papi~ le decía ya con mas confianza y con mas ganas de que no se arrepintiera que otra cosa.
~Pudiste sentir mi verga bb?
Y como no si se la estuve manoseando bien rico.
~Si, la note~ le confirmaba, y mi voz mostraba ya señales de gran excitación, sentía como mi sexo se empezaba a mojar nuevamente y mi clítoris se estremecía y palpitaba pidiendo atención.
~Que te pareció? ¿Te gusto? ~
~Si mucho~ respondí sin detenerme a pensar en mi respuesta.
~Me agrada tu respuesta, te la voy a dar a mamar~
~Bueno~ respondí dando gracias al cielo ufff.
Ya en el hotel se encuero todito y se recostó sobre la cama y sin más, me acomodé junto a el y se la empecé a mamar, ufff, que delicia, que buena verga tenía el viejo ese.
El se las ingenio para meterme mano en el sexo y se dio cuenta lo mojada que ya estaba.
~Puta madre bb, estas bien caliente, mira nada más como estas ya de mojada~
Sin más, me acomodo y empezamos a hacer un delicioso 69 ufff. No saben como me encanta hacer eso, el condenado viejo se apresuró a beberse mis jugos y me chupo tan pero tan rico, que yo ya no me pude aguantar mas y me vine tremendo nuevamente en menos de media hora.
~Ahora si puta, ponte en cuatro~ Me ordeno.
~Pero que va a hacer usted? Le pregunte nerviosa.
~Te la voy a dar por el culo zorra~
~Ay no señor, como cree? ¿Qué ira a decir mi esposo?
~De seguro él ya sabe que te encanta que te den por detrás~
~Bueno si, pero solo mi esposo, y bueno, algunos de sus amigos nomas~
~Si te creo, eres una puta caliente, bueno pues tu esposo, sus amigos y ahora yo bb~
~Bueno~ respondí poniéndome en cuatro y parando las nalgas, ofreciéndole el culo como toda una buena puta.
El viejo pervertido se acomodó detrás de mí y ensalivándome me la dejo ir de a poco.
Claramente sentí como su enorme verga se iba abriendo paso dentro de mi culo, ensanchándolo con cada embestida, hasta que finalmente logro metérmela todita.
Entonces se empezó a mover de lo más rico, mendigo viejo, haciéndome poner mas y mas caliente, así que, al poco, yo ya estaba moviendo las nalgas a todo lo que daba.
Les confieso que ya tenia bastante tiempo que nadie me cogía de esa manera tan rico, el condenado viejo sabia bien como tratar a una dama, bien puta, pero al fin una dama.
Les confieso también que estuvimos cogiendo durante horas, me hizo venirme tremendo varias veces, condenado viejo, bien cogelon y bien aguantador, por eso prefiero a los maduros ufff.
En ese momento me dieron ganas de que el muy pervertido quisiera hacerme su puta de planta, lógico, yo encantada de aceptar.
Así que cuando el viejo me lo propuso, yo me hice un poquito la remolona, pero finalmente, como podrán suponer, acepté.
~Eres un zorra caliente y pervertida~ decía, ~ tal como me gustan.
~A partir de ahora te hare mi puta de planta~
~Ay, pero como cree señor, no diga eso, soy una mujer casada, ¿qué dirá mi marido? ~
~No creo que diga nada, porque tú no le vas a decir ¿verdad? ~
~Bueno~
Al otro día, mientras esperaba en la fila a que me dieran mi orden, el joven guapo del día anterior me pregunto con una sonrisa maliciosa, que como me había ido con el viejo, yo le respondí, bien, entonces él se animó y me invito a salir.
~Como crees, soy una mujer casada, ¿Qué dirá mi marido? ~
Venta de contenido
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!