Mis experiencias. Parte 2.
Segunda parte de mis experiencias sexuales adorando el semen.
Aquí su humilde servidora nuevamente. Toca cumplir lo prometido: primero les daré algunos detalles de mi, para que se imaginen como soy: de puber y adolescente crecí como una chica que parecía timida. Bastante delgada, de piel muy blanca, ojos color negro ,vagina rosada, cabello largo, lacio. Y de baja estatura. Labios gruesos y intensos, tengo una boca y labios algo más grande de lo normal. Y segundo: continúan mis experiencias sexuales, ya como adolescente y luego como joven mayor de edad (línea temporal: desde los 16 hasta los 25) Si. Luego de haber sido cogida por primera vez por mi can, y habiendo logrado que esté se venga dentro de mi, y yo llegar al orgasmo gracias sobre todo a la cantidad de chorros de semen que pude sentir rellenandome, le fui tomando práctica. Mi primer adicción: creampies. (Acabadas adentro..) Me excitan y me excitaban tanto.. sentir esas descargas calientes dentro de mi. Haciendome cosquillas por dentro.. cubriendome de placer, invitandome a querer más y más. En esos primeros años de sexo, logré varias posiciones para coger con mi can 1..en 4, misionero, el 69, yo montandolo a el, dándole mis sentones . Y más. También empezamos a realizar el abotonamiento. Sucedieron dos cosas para sumar: 1) empecé a sumar al acto también a mi otro can. Tuve primero un poco de miedito por que pasaría, pero resulta que en poco tiempo ya estaba haciendo trío con mis dos perros bien seguido. Les hacía sexo oral a los dos a la vez si podía, los besaba por todos lados, los lamía mucho , tanto como ellos a mi. Besos en la boca. Logré chupársela a uno mientras el otro me penetraba y luego al revés. Y aunque quería hacer una doble penetración, no podía sola. Así que me conformaba con una verga por vez en mi vagina. Me tomaba mi tiempo. Ambos canes se habían acostumbrado bien a mi cuerpo, ambos podían cogerme a la vez sin pelearse ni nada. Así que por turnos, primero el perro más grande me cogia hasta descargar su última gota de leche dentro de mi, con abotonamiento y todo de por medio, y apenas terminaba el primero y sacaba su miembro de mi, ya estaba listo el otro perro, goteando su licor blanquecino, para introducirse entre mis piernas, ya sea a mi ano o vagina, con gran intensidad y emoción, cogiendome duro como me gusta, haciéndome sentir dominada entre sus 4 patas y su pelo súper corto. Esa era una parte de mi vida que tenía siempre dentro de mi casa. Por otro lado, las primeras vergas humanas empezaron a conocer mi vagina y mi ano por primera vez también. Mi primer novio a los 16, casi 17 años, era un flaquito dark apuesto, bisexual, sadomasoquista. Durante nuestro primer año juntos me dedique a vaciarlo hasta la última gota, probar nuevas experiencias sexuales y de vida, ver porno con el y pensar en más cosas que nos calentaban también. Imaginen como lo descargue. Nuestra primera vez juntos (la primera vez que cogimos) el no duró ni 3 minutos creo.. casi acaba primero en la previa mientras usaba mis manos llenas de mi saliva y mis fluidos vaginales. Me encanta hacer pajas. Y en unos segundos que agarre su pene erecto, de 16 cm de largo, casi explota. Apenas lo tocaba y ya goteaba su líquido preseminal con semen sin parar.. se suponía que el no era virgen. Pero al ver cómo goteaba fluido de su pene y las caras que hacía, pare rápido, ya que me dijo que no se podía contener. Así que tome el control. Le pase mis dedos y la palma de mi mano por todo el fluido tibio y pegajoso que cubría su verga, y aunque yo ya estaba super mojada, me frote todo su fluido en mi vagina y listo. Ahora, adentro. El se subió encima de mi, abrí mis piernas y lo atrapé con ellas, su pene entró deliciosamente, lentamente, y el al límite de eyacular. Aguanta todo lo que puedas le dije.. aguanta todo lo que puedas y llename de leche.. lléname toda. Así fue. Rápidamente, en unos pocos impulsos, el eyaculo grandiosamente por primera vez dentro de mi. Sentí como su pene, pese a ser considerablemente más pequeño que el de mis canes, tocaba cada centímetro de mi interior, y teniéndolo completo dentro de mi vagina, sentí bien como eyaculo. Mucha cantidad. Con potencia. Menor cantidad de semen que un perro, por lejos, pero aún así, mucha, espesa y dulce. Estuvimos 4 años de novios, oficialmente. Generalmente jugando a que el era mi hermano menor o mayor, dependiendo la ocasión, juegos de roles. Veíamos porno juntos de lo que sea casi, liberando así nuestras fantasías frente uno al otro, sin tabúes, excitandonos viendo mucho gangbangs, yo sobre todo elegis ver eso: horas de una sola chica siendo grabada por su novio, que la compartía con varios a la vez. Eso me calentaba bastante. 3, 4, 5, 15, 20, chicos dándole a una sola ninfómana, que en total éxtasis, recibía creampie tras creampies múltiples. Sin parar. Yo veía esos vídeos y mi vagina se empapaba sola deseando sentir alguna vez, tantas vergas para mí sola, eyaculando una y otra vez en mi cuerpo suave. Mi mente se llevaba de imágenes de vaginas y anos siendo rellenadas de leche sin parar, vaginas chorreando cantidades de leche caliente y pegajosa de diferentes hombres, (o perros jeje).. quería penes mojados, lubricados, con hilos de fluido colgando, eyaculando en el fondo de mi garganta, dentro de mi boca, en mi cara, sobre mis pechos, sobre y dentro de mi vagina y ano, quería hacer eyacular sobre la palma de mis manos, y más. Y si. Empezamos con BDSM y tríos. Primero invitamos varias veces hasta que acepto, a un amigo de mi novio, que también era bisexual y que mi novio sabía que era virgen. Quería desecharlo y hacerle de todo con mi pareja, aunque sea virgen. Y así fue. Vino una vez a casa, y aunque muy tímido, se dejó atar a la cama y se dejó vendar los ojos. Así que mientras mi novio le ponía su pija en la boca, yo lo masturbada a su amigo, lentamente, con mis manos lubricados, luego de a poco con mis lengua.. este chico tenía un gran pene. Bastante más grande que el de mi novio y parecía que iba a explotar en cualquier momento. No habíamos llegado a la parte de la penetración, (solo habíamos pasado quizás, 15 minutos masturbando lo lentamente y estábamos empezando a usar la boca) cuando el chico en cuestión empezó a agitarse más y a ponerse nervioso por que se dió cuenta que en cualquier momento eyaculaba, y comenzó a decirnos, que paremos por que iba a acabar. Claro, que tierno. Eso es lo que nosotros queríamos. Mi novio le dijo que aguante. Que yo me iba a ocupar de hacerlo acabar.. al menos 2 veces.. así que pase directamente al plato fuerte. Me subí encima de el, y muy, muy lentamente, me fui sentando sobre su pene,(mi novio fue el que primero agarro el pene del chico y lo colocó bien en la entrada de mojada conchita. Una vez puesto, comencé a bajar, observando su rostro, sintiendo cm a cm de su verga, mientras el, atado, experimentaba su primera vez con una chica, mientras mi novio, pegado a nosotros, se excitaba más y sonreía. Sa..sar.. sali de encima, que voy a acabar, no aguanto más, empezó a decir, aunque mi novio rápidamente le dijo: «tranquilo. Podés eyacular y descargarte todo lo que quieras.. hacelo sin miedo, llenale toda la conchita de tu leche a Sara, hacelo.. » ya le habíamos sacado la venda. Seguía atado pero podía ver todo. «Dale bebé.. dame toda tu lechita, lléname toda la conchita. Quiero todo adentro.. adentro.. lléname ya!!» Le decía yo. Y paso. Una buena descarga de su leche fue liberada dentro de mi, estando yo encima de el en posición de indiesita. Sentí sus temblores al venirse. Mi novio se posicionó de cerca frente mi vagina y su pene, para ver la penetración y la eyaculación de cerca, aunque sea interna. Me quedé como 5 minutos recostada sobre el, aún con su miembro dentro de mi, que se negaba todavía a deshincharse . Mi novio mientras se tocaba, miraba de primer plano la acción y me decía: «uff.. está todo muy mojado. Pude ver bien como la leche se escapaba deslizándose, bajando desde dentro de tu vagina» «no te salgas hasta que hayas acabado todo, todo» y mi novio observaba ese pene aún erecto, bajando de a poco, aún metido en mi vagina y juntando un mini charquito de su lechita y mis fluidos entre las bolas y el ano del chico. Para resumir esa experiencia diré esto: luego dexesa primera vez, se hizo costumbre coger los 3. Mi novio y yo eramos más dominantes y el más sumiso. Una de las prácticas que más hicimos y que más nos gustaba era cuando mi novio me penetraba a mi mientras este chico lamía su ano, para luego penetrar a mi novio. Así mi novio se venía dentro de mi a la vez que obtenía súper orgasmos ya que mientras mi cuerpo complacía su pija, la pija o lengua de su amigo estimulaba su ano y punto g. Pero mi vicio favorito era la doble penetración y sobretodo, cuando se venían ambos dentro de mi vagina. Sii.. primero uno y sin dejar que se me salga la leche de mi cavidad, apenas acababa este chico, sacaba su pene y automáticamente mi novio me penetraba. Así coincidimos en otro placer/fetiche/práctica mas. Mi novio amaba meter su verga dentro de mi vaginita recién llenada de semen por otro. El metía lentamente primero su pene, dentro de mi vagina súper caliente, rellena de leche tibia y pegajosa hasta el tope. Cuando era de esa manera, hasta mi novio se venía rápido también. «Si mi amor.. mi bebé hermoso.. méteme tu hermosa pija en mi conchita inundada de leche.. metemela toda..mezclamos bien toda esa leche con tu pija..mezclamos bien toda la leche de ambos adentro mío..» le decía yo a mi novio. Y el, tomo ese vicio conmigo. El decía que Amaba sentir toda la leche espesa de otro en mi vagina. De hecho, si me cogia así, (con mi vagina rellena de leche) el se calentaba tanto que podía venirse dentro de mío varias veces seguidas sin parar. Bueno. Así arranco bien mi vida sexual con chicos. Pero por otra parte, mi pasión por la zoofilia y por mis perros no paraba. Y luego recién de dos años de novios con mi pareja, me animé a contárselo. Eso y mis ganas de probar con gangbangs, bukkakes y orgía. Sigue en la tercera parte
Muy excitante historia, me encantó