Sin quererlo me transforme en bisexual
Una noche de verano, unos tragos y la buena música hicieron creer que éramos tres amigas investigando nuestros cuerpos.
Era una noche de verano, en la playa de una ciudad costera, luego de un día de enero de mucho calor, me dispuse para ir a un baile en la playa, como no conocía a me aliste y salí, solo llevaba puesto un vestido con flores de y unas chatitas bien cómodas como para bailar toda la noche.
Cuando llegue había un montón de gente, la cerveza y los tragos hacían que todos bailaban entre si , se reían, cantaban, gritaban, así que de inmediato me sentí como una mas de todos ellos, pasaban las horas y el alcohol ( tres tragos y estaba casi borracha) comenzó a hacer mella en mi. A eso de las once de la noche conocí a dos hermanas, muy lindas trigueñas y note de buenas tetas, lo que me atrajo notablemente, por lo cual con un trago mas nos alejamos o me alejaron de los demás hacia un lugar apartado, la conversación se torno un poco intima y una de ellas al verme vulnerable apoyo su mano en mi cintura y acaricio mi muslo, cosa a la cual no reaccione y de inmediato me beso primero en el hombro, luego en la cara y después en la boca buscando su lengua a la mía, mientras la otra acaricio mis pechos lo que hizo que me calentara, para luego hacer la pregunta, quieres venir a nuestra casa, lo vamos a pasar bien.
Les dije que si y mientras caminábamos llame por teléfono a mi mama y le avise que me quedaría con unas amigas dado que era ya un poco tarde, cuando llegamos me ofrecieron algo de tomar pero de inmediato comenzaron los besos nuevamente, para llegar hasta una cama, me tendieron y estando totalmente mojada y desnuda una comenzó a chuparme la vagina y me succionó el clítoris, la otra se encargo de mis tetas , cuello, boca y así se hivan intercambiando , sus dedos literalmente me estaban cojiendo, yo prendida a sus bocas y tetas cuando me lo permitían. Cuando de repente en lo mejor de mi calentura una ellas me dice te gustan las sorpresas, yo estaba totalmente abierta y sin mas dije que si, entonces la que estaba arriba mio entre mis piernas se quito la pollera y pude ver una verga lustrosa, gorda y grande, era travesti!!!, la otra me dice no tengas miedo, lo vas a disfrutar, yo estaba impactada, yoqueada, no sabia que hacer, entonces el sacando sus dedos de mi conchita se a costo sobre mi y me ensarto de una, entro toda y empujo, sacando un gemido de mi cuando me entro, al instante la otra, la mujer, me beso y dijo tranquila amor, ya te entro y se alejo, dejándome con su hermana (hermano travesti) dándome a gusto, me tenia total mente abierta y me daba con fuerza, me tranquilice y comencé a gemir, que delicia y que placer sentir unos pechos sobre mis pechos y una verga dentro de mi, fue la mejor acabada sin dudarlo.
pero falta algo que te lo cuento en el próximo relato, comentáme que te pareció este relato – [email protected]
Que rico mmmm