Todos los hombres de Giovana
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por LaPamelaOriginal.
A la mañana, apenas una penumbra entraba por la ventana, sin dudas el despertador había sonado hacia horas pero ni mi marido ni yo lo habíamos escuchado. Estábamos molidos para ese momento. Pero ahora, a media mañana, y con un buen sueño mediante, nos recuperamos como nuevos, después de una ajetreada noche. Aunque aun dormíamos, cuando el sonido de la puerta del frente nos despertó. Era mi madre; y mi marido se dio cuenta de inmediato, quien mas podría tener llave de casa y entrar de forma tan escandalosa…(según el).
Nos levantamos casi de un salto mientras escuchábamos como dejaba paquetes en la cocina. El cuarto olía muy mal, sobre todo las sabanas, que estaban indescriptibles ja ja. No sabíamos que hacer si buscar ropa, o deshacer la cama primero. Mi marido a medio despertar tiraba de un lado mientras yo tiraba del otro por lo que no nos ayudábamos mucho, y al final desparramamos toda la ropa de cama por lugar. Por mientras ella ya subía las escaleras y estando a solo pasos de entrar en el dormitorio mi marido desaparece hacia el baño. Ahí me dejo sola, desnuda, toda pegoteada y con un montón de sabanas malolientes y manchadas en las manos.
Como es ya la costumbre, mi madre se abalanza hacia mi a darme un beso en la mejilla, y no pudo evitar darse cuenta del panorama general. "Que paso aquí" fue pregunta obligada, y la respuesta si que era difícil de dar en ese momento ya que ni siquiera había recapitulado todo lo vivido hacia tan pocas horas. Empece titubeando y sin poder explicar muy bien empezando por el final y muy torpemente. Ella ponía cara de no entender nada de lo que le decía. Así que mientras yo seguía juntando ropa de cama y nuestras prendas del piso, ella extendió una las sabanas… y miren que pericia tendrá; que de solo un vistazo me dijo que había estado con mas de un hombre.
Entonces paso su mano por mi cuerpo, mientras me decía que se me habían corrido por todos lados y hasta en el pelo tenia pegotes.
Por suerte mi marido no tardo en salir de la ducha.
-Ahí tienes al culpable. Le dije, dejando les a solas para que el diera la explicaciones del caso.
Para cuando salí del baño mi marido ya se había vestido, preparado un desayuno ligero y me esperaban en la sala. Baje con el peine arreglándome el cabello y me senté frente a mi madre que me dijo que no sabia si darme un bofe por puta o felicitarme por… puta también claro.
Hasta me sorprendió que luego de enterada no se quisiera sumar a la experiencia grupal, ya que suele ofertarse para estos menesteres ja ja (aunque yo tengo sospechas claras de que ya ha probado esa cantidad y tal vez mas). Pero mi madre ya con su experiencia nos soplo que nada es tan fácil como parece, y eso fue una premonición.
Almuerzo y largas charlas mediante nos logramos comunicar con todos los chicos. Para esa hora ya todas las esposas estaban enteradas de lo sucedido la noche anterior en casa. Y tal cual lo había predicho, los problemas no tardaron en aparecer. Era de esperarse que la joven novia de Roberto se asustara un poco y rehusara la idea de participar con tantos, sin embargo la que mas me sorprendió fue Laura esposa de Ivan, que mas bien se ofendió en el entendido que una cosa así debe ser consultada a todas la partes primero y a ella nadie le consulto nada, así que se niega de plano a participar.
A Pamela mi cuñada, hermana de mi esposo a pesar de ser muy liberal, también tuvimos que hablarle rato para convencerla ya que estaba mas dispuesta a solidarizarse con la causa de Laura. Al final acepto y hasta se emociono con la idea, por suerte, mi aliada que nunca me deja sola. Luego conocimos mediante mensajes y llamadas a Giovana y Luciana, esposa y novia respectivamente de Greco y Joel. Estas estaban en tesituras un poco dispares, una por una lado quería probar como era y la otra que también estaba dispuesta con todos pero ¡no al mismo tiempo!… en fin tuvimos de todas las reacciones y tal cual fue predicho el grupo quedo disgregado.
Para el final de la charla llegamos a la conclusión casi obvia, de que las mujeres somos complicadas para ponernos de acuerdo y que dejaríamos a los chicos que se organicen como quieran, con las que estábamos de acuerdo en participar. Bueno yo en realidad ya había participado, pero para esa entonces no hacia ascos si me tocaba repetir o suplir a una amiga ja ja.
Según me cuenta mi marido, se pasaron horas y horas sacando cuentas, de que iban a hacer y como y cuando, en los siguientes días. A las mujeres no nos decían nada, y nos tenían es ascuas totales. Es que se supone que era sorpresa. Pero como dijo mi madre "en el sexo los grandes planes resultan en grandes desilusiones"… y es tal cual, siempre es mejor dejar que fluya y las cosas pasan si tienen que pasar.
Era miércoles, lo recuerdo bien porque me iba al gimnasio. Estaba con unos pantalones bien cortitos que apenas me tapan la cola y no muy tapada ja ja y arriba una camiseta sin mangas de esas de ejercitar, claro, ya saben gris, escotada, bien abierta a las lados. Se lo que están pensando… si así voy así por la calle, voy en el auto nadie ve así por la calle y en gim somos casi todas mujeres a esa hora…. menos los profesores hmmmm.
El caso es que estaba a punto de salir cuando llego mi marido con una visita inesperada, Greco y Giovana. Que sorpresa y que inesperado. Giovana es una mujer alta casi mas alta que su pareja, delgada, rubia (aunque se tiñe dos tonos mas oscuro que su pelo natural y le queda… mal). Nos saludamos todos de besos y ya note como a Greco casi se le van las manos conmigo… pero le deje. Mi marido aprovecho mi vestimenta para hacer notar mis atributos traseros ja ja lo que rompió el hielo y devino en una charla sobre glúteos y nalgas, ejercicios y sexo claro. Sexo sobre eso en realidad venían a hablar, Giovana es muy sexual y caliente y estaba como loca por saber mas de mi experiencia.. y claro, ser ella la siguiente. Lo supe apenas comenzó con las primeras insinuaciones tratando de llevar el tema hacia ese lado. Y hacia ahí fuimos.
No tardamos mucho en estar tratando el tema con todos los pelos y señales, haciendo cada uno un ejercicio erótico de memoria, hay que reconocer eso nos ponía… Ella no paraba de preguntar detalles y quería saber de todo, me encanto que fuera tan directa. Una de las cosas que dijo fue que su marido ya me "conocía toda" y que el mio aún la trataba como a una señora… Entonces Germán dice que no es tan así pues desde que paso por ellos y la vio con esa minifalda tan corta estaba deseoso de que una brisa se la levantara….
A lo que su marido agrego que podía ser una brisa o una mano y poniéndose Giovana de pie, él le levanta la falda mostrándonos unas bien formadas nalgas, atravesadas por una diminuta tanga que se pierde dentro de ellas. Mi marido casi estira la mano para tocarlas pero le detengo con una mirada de "esas"… lo deje incomodo unos instantes. Pero ya volvimos a nuestra caliente conversación, donde ella nos contó un poco sus experiencias con tríos e intercambios de parejas y alguna que otra chica lesbiana.
Dentro de la dinámica propia de la charla, y luego de ir por unas cervezas mi marido se sienta con Greco mientras ella termina a mi lado en el mismo sofá. Lo que da pie a los hombres a tomar unas fotos de las dos, con ese pretexto nos acercamos. Y luego de un par de tomas nos piden que no juntemos mas, un abrazo… y mostrar un poco. Ella se levanta la falda hasta que se ve su ropa interior y yo me quito el sostén deportivo para dejar mis pechos libres pero dentro mi camiseta de deporte claro que queda muy sensual a decir de mi marido.
Los chicos suben las fotos al grupo, y no demoran en caer respuestas… Para la siguiente toma teníamos que subir la apuesta, así que nos empezamos a besar y que cosa que me pone, es besar a una mujer… por primera vez; y Gio lo era nueva para mi.
Le metí la lengua hasta la campanilla y no es una metafora. Pero ella también hizo lo mismo y antes de que separáramos nuestras bocas ya había metido una mano dentro de mi ropa y se había hecho con mis tetas. Ella andaba con una blusa rosada muy suavecita y me pude rápidamente hacer con las suyas también, aunque chicas; tenían unos pezones duros y puntiagudos que me provocaron ganas de chuparle, pero su blusa era toda cerrada y no había forma de entrarle.
Para cuando terminamos nuestra cesión de besos nos habrían sacado unas veinte fotos como poco y por supuesto ya estarían circulando en nuestro grupo, porque los mensajes no paraban de caer.
Lo que si estaba a punto de caer era la blusa de Gio, porque mientras comentaban las respuestas yo se la desprendía desde atrás. Lo que `provoco una nueva ola de fotos, imagínense; que culmino con ella semi desnuda sobre el sofá y debajo mio. Mi remera también estaba a punto de caer cuando el timbre de la puerta nos sorprende y es que algunos de los chicos se decidieron acercar para verlo en vivo y no por el móvil. Los primeros en llegar fueron los mas inesperados justamente. Roberto y Anna, esta ultima para no querer saber nada con un grupal, pues hace todo lo contrario. Se había venido con una pupera blanca y sin brasier y abajo un jean cortado a la altura de las nalgas que dejaba parte de sus cachetes de fuera. Very sexy como dijo mi marido, y muy llamativa. Besos y mas besos de saludos ya que eramos cada vez mas y alguna mano indiscreta también. Los ojos de Anna al verme así no les cuento. Giovana se tapaba los pechos con la blusa, pero con mas ganas de dejarla caer que otra cosa.
Anna se ubico junto a su Roberto en uno de los individuales, ella sobre sus piernas. Greco quedo encantado de conocerla ya que no le sacaba la vista de encima. Mientras ellos nos contaban que venían en el coche mirando las fotos, y decidieron animarse. Así que sin mas que agregar le animo a mi contra parte a bajar su blusa, descubriendo esos hermosos pezones, que me lanzo a chupar por fin. Y que ricos!!!, ella me toma de la nuca y empuja contra sus pechos, mientras sus mano me sube la remera hasta dejarme también descubierta. Entonces es ella que se lanza sobre mi a comer mis tetas. Ahí puedo ver como a mi costado Anna ya tiene también las manos de su amante sobre sus pechos, y la ropa levantada hasta el cuello. Claramente esta muy excitada y Roberto aprovecha la circunstancia para ver hasta donde puede llegar. Los maridos nuestros tienen unas tremendas erecciones frente a nosotras y creo que ya no toman casi fotos. Tan solo se dedican a mirarnos con sus móviles en las manos. Y con la otra mano se tocan el bulto a cada momento.
De repente mi marido se levanta y se va hasta el frente sin dudas alguien mas ha llegado y el se adelanta para que el timbre no nos distraiga (vieron que es muy considerado). Era el novio de Luciana, que si han estado atentos se llama Joel. Joel entra tras mi marido lento y casi sin emitir sonidos pues no nos quiere interrumpir. Pero de todos modos lo logra, o tal vez sea yo que estoy muy atenta y conozco todos los sonidos de la casa. Saluda con gesto de como pedir permiso, no se algo tímido he inseguro, o al menos en apariencia. No sabe si acercarse o no, y opta por un saludo general.
Por mientras Gio y yo seguimos dejando caer nuestras ropas, o sea su minifalda y sandalias, mientras yo también me quedo solo de tanga. Annita nos mira aun con asombro y cierta excitación peculiar. Pero ahora su novio revela sus pechos, al dejar de cubrirlos con sus manos, mientras le besa apasionadamente y desliza su mano la parte interior de sus muslos. Ver gozar a una mujer es una cosa que me fascina por decir algo y ver una mujer como ella de solo 19 años, con ese cuerpo y ese carita, en pleno goce y descubriendo su propio potencial para erotizarce, es casi hipnótico. Sentía como sus pechos estaban al aire, y también sentía todas las miradas encima y eso la ponía cada vez peor. Cada vez mas arriba en el termómetro. Nosotras estábamos dando el espectáculo pero de repente ella se roba todas la atenciones.
Entonces me doy vuelta y la toma la mano, la hago levantarse de las piernas de Roberto y sentarse a mi lado en el sofá grande. Su pupera se baja tapando sus tetas, pero apenas la tengo a mi alcance se la hago quitar y manoseo unas hermosas tetas bien duras y generosas. Gio también se anima a probar esas tetas pasando sobre mi, dejando su culo en pompa para que nuevamente los flashes de los móviles nos iluminen. Y ahora Anna esta mas encendida que nunca, pues nunca había estado don dos mujeres ni desnuda frente a tantos hombres. Nuestras manos se mueven ávidas de deseo y nuestras bocas buscan la piel de las demás, ya notamos como aún la poca ropa que traemos es un estorbo y pensamos en sacarla.
El enredo en el sofá es mayúsculo, Anna esta de espaldas y sobre ella me he lanzado por sus pechos, pero de alguna manera Giovana esta también sobre ella y sobre mi, besándola en la boca mientas con la otra mano no ha soltado mi tetas. Mis piernas están por debajo, encima tengo las de la chica creo… porque las de Giovana están una en el piso y la otra por sobre nosotras ja ja, obvio que nos movemos y la posiciones cambian a cada instante mientras nos recorremos como locas excitadas, y excitando a la platea.
Un "brrrrrrrrr brrrrrrrrrrrrr" continuo nos interrumpe ahora de nuevo, Anna se sale como puede arrastrándose entre medio de nosotras para lograr llegar hasta su cartera en el lugar donde esta su novio, la abre y atiende su móvil. Por mientras Gio y yo no perdemos tiempo, ambas solo de tangas ya nos estamos metiendo manos en los coños, y estoy a punto de bajar a comerle el suyo cuando Anna me murmura al oído que se tiene que ir porque su madre la llama en ese momento.
-Ok, yo te llevo si quieres – le respondí automáticamente. Comencé a buscar mis prendas, por lo menos la camiseta y los pantalones, y me arregle el pelo así nomas. Roberto ya estaba pronto también y los tres nos encaminamos a la puerta. Al mirar atrás recién caigo en que dejamos a la amiga sola con tres hombres, y que ahora ya la rodean. Pues bien vamos rápido que no nos queremos perder esto que esta por pasar – pensé.
Subí atrás en el coche, delante iban ellos sin parar de comentar lo caliente que estuvo recién, Anna estaba entre frustrada por lo que pudo haber pasado, pero no sucedió del todo, sorprendida por hasta donde llego de todos modos y enojada con su madre por haberle llamado, y a hasta agradecida por un "salvada por la campana". Y todo esto junto, llena de contradicciones, iba a necesitar tiempo para masticar eso…
Cada tanto me colgaba de su asiento para comentar algo, traviesamente le ponía una mano en las tetas o le daba un beso en la comisura de los labios, en este jugueteo el camino se nos hizo corto y llegamos al edificio en un santiamén. Entramos al ascensor los tres y una vez que cerraron las puertas, nos trenzamos a besarnos de nuevo sabíamos que solo nos quedaban unos segundos, pero fueron intensos. Anna me levanto la camiseta para hacerse de mis pechos mientras nuestras lenguas se se enroscaban de una boca a otra. Roberto nos abrazaba y unidas sus manos en ambas a la vez y por esos instantes todo estuvo permitido.
Pero de repente las puertas se abrieron y fuimos llamados a la realidad. Anna y Roberto salieron y entraron al apartamento, yo me quede en el pasillo al lado del ascensor acomodando mi pelo y ropa. Estaba muy, muy encendida entonces.
En casa, Joel, Greco y mi marido se habían quedado a solas con Giovana, apenas nos retiramos los tres hombres la rodearon, sus manos la exploraban por todas partes, mientras sus bocas se turnaban para besarle o comerle sus pechos. No demoro en estar completamente desnuda y tener a uno de los chicos comiéndole la concha, hundiendo sus dedos para llegar al punto G y darle un masaje casi al punto de hacerla explotar ahí mismo. Mi marido se había hecho definitivamente con su boca y la beso todo lo que quiso hasta que ella reclamo su pija y bajo sus pantalones para hacerse con ella. Su marido le comía los pechos y tocaba sus nalgas y todo lo que podía emocionado de re-descubrir a su mujer en una faceta desconocida. El también estaba tan excitado como ella y parecía que se correría solo de ver como su amada disfrutaba de otros hombres.
Giovana se arrodillo en medio de los tres y reclamo que todos se desnudaran y le dieran sus pijas en la boca. Se las comería a las tres juntas tal cual era su fantasía. Mientras la tocaban en los pechos o donde llegaran ella se metía de a una o dos en la boca, incluso llego a poner las tres bien juntitas para chupar los tres glandes a la vez aunque no llegase mas que dales una mojadisima lamida a todas. Apretaba a los hombres desde sus nalgas y les empujaba sus pijas dentro de boca tanto como entraran. Su lengua se escurría por debajo lamiendo y envolviendo sus falos, una viciosa del sexo oral, y no solo de eso.
Mientras ella se emocionaba dando lengua; Joel la penetra de forma profunda en su mojadisimo coño, se hunde hasta chocar con sus nalgas, cogiéndola con fuerza.
Roberto no tardo en dejar a Anna en casa. Descendemos nuevamente por el ascensor pero esta vez ya mas tranquilos… tal vez. Anna debió quedarse masturbando con lo caliente que le trajimos comente. Y al llegar al auto sin decirnos ni una palabra comenzamos a besarnos, fue mutuo, ya nos conocemos y sin titubeos ni vergüenza mi mando fue directo a su bulto y las de él a mi coño. El muy duro y yo tan mojada, no sabíamos si parar a coger en el primer callejón o acelerar para llegar a casa. Por lo pronto no pasaba ni una cosa ni la otra, tomamos por una calle de abajo poco transitada y manejando muy lento, nos dábamos de besos, toqueteos y manos por dentro de la ropa, con cuidado de que nos vieran, disimulando por momentos.
En casa los hombres se turnaban para penetrar a Giovana, que se había puesto en cuatro con el cuerpo apoyado en el sofá. Su marido le lamia y el culo y dilataba con sus dedos mientras mientras observaba sin perder detalle, como ella gozaba con las pijas con sus amigos.De su coño a la boca una pija y luego la otra. Sus propios jugos eran su afrodisíaco. Y cada chupada la hacia mas efusiva que la anterior. Hasta que tendió a mi marido sobre el piso (por suerte hay alfombra), y montándose en el, se lo clavo hasta el fondo, dandoce gusto hasta correrse en unos poco enviones, pero no cayo rendida ni mucho menos, apenas si bajo su ritmo durante unos instantes mientras se recuperaba para continuar…
Mientras nosotros estacionamos, todos los vecinos de la cuadra parecían haber salido esa nochesita, y yo casi sin ropa, toda desarreglada bajando del auto de Roberto les daría que hablar para que no se aburran. Igual no deje ni que estacionara y baje corriendo entrando por la cochera que estaba abierta por suerte. Roberto me siguió, pero demoro mientras trancaba el auto.
Yo ya estaba dentro mirando el show tan extrañada como excitada, cuando él llega por detrás mio tomándome de las caderas y recostándome su bulto contra las nalgas. No hacemos ruido para no interrumpir, pero sabemos que esta es la noche de ella y no la mía.
Despacio le tomo de la mano y le hago seguirme, hasta arrimarnos al grupo. Llamamos la atención de todos, pero no se detienen. Le quito su camisa y bajo sus pantalones con todo. Dejo saltar frente a mi cara su grueso miembro, su cabeza ya esta muy húmeda y me dan terribles ganas de hacerle la mamada de su vida. Pero de alguna forma me contengo, y lo preparo para el disfrute de ella.
Mientras le acerca su pija a la boca, ella en plena recuperación del orgasmo anterior no da crédito al pedazo de carne que tiene que hacer frente ahora. Lo mira como analizando si es real o no y en cuanto reacciona se mete de una en la boca. Detrás de Roberto me termino de desnudar, y estoy la verdad muy mojada.
Tomo una de las pollas que andan por ahí y le doy una furtiva chupada, luego me dirijo por detrás de ella para ver como mi marido le penetra y compruebo tocando y arrimando mi boca, mientras que por fin alguien me toca el coño detrás mío, no me importa si Greco o Joel me da igual, y mejor me daría si ya me penetran, pero no lo hacen, tengo que esperar.
Extiendo todos los almohadones que tengo sobre la alfombra y acomodo a uno de los hombres sobre ellos, luego invito a Giovana a que se le suba, no sin antes dar unas lamidas a este otro miembro. No tardo en cambiar de pija y apenas termina de acomodar su cuerpo, su marido invita a Joel a que sea el primero en darle por culo. Ella no pude mas que decir: -"Dale, cógeme por el culo, dale!!!, dale!!!"-. Casi gritando, arqueando su cuerpo cada vez mas excitada.
Miraba por sobre su hombro como realmente había un hombre detrás de ella y otro debajo. Con sus manos hacia atrás lo tomaba de sus caderas y le acompasaba el movimiento, haciéndoles acelerar mas y mas. Los hombres para no correrse enseguida por el frenético movimiento que ella demanda se cambian de posiciones una y otra y otra vez, hasta que sobre la polla de Roberto y con su marido detrás estalla en un orgasmo que la hace convulsionar de placer. Mojando mis almohadones!!! (grrrrrr).
Entonces pide que paren por favor. Y le den un descanso, mientras que en realidad es ella la que no les ha dado pausa a los chicos. Por mientras tomo la posta y alguno de lo chicos me perfora en posición de perrito mientras yo masturbo a los demás muy suavemente, sus penes están todos hinchados y a punto de explotar. Su marido le da para que le chupe la polla y no demora en derramarse en su boca, esta bocanada de leche le recobra la lujuria y antes de que nos demos cuenta ya se esta montando de nuevo sobre otro. Gritando y pidiendo que la rieguen de leche por todos lados.
Mientras ella vuelve a las andadas, yo le chupo la polla ya un poco flácida a su marido.
Unos momentos después la veo quedarse quietita, ya no se mueve frenéticamente como lo hacia antes, sino que apenas si deja sea el cuerpo de Roberto que le marque el ritmo al sentir su grosor dentro de su culo. Su cara esta desencajada, pero no es de dolor, con lo mojada y excitada de la situación entro sin problemas y aun se mueve sin dificultad, es una cara de placer sin igual, es una cara de que se viene otro sonoro y mojado orgasmo. Mi marido mete su dedo por su coño llegando a su punto tal vez, y con el pulgar masajea su clítoris, mientras Joel presiona su bajo vientre con una mano y con la otra manosea sus pechos.
Giovana de nuevo recibe casi al instante unos espasmos de placer que hacen que Roberto salga despedido de encima suyo, mientras ella chorrea de nuevo su liquido cada vez menos, pero igual muy lujurioso. Los hombres se lanzan a chuparle todo, su culo, coño, piernas y todo donde hallan sus jugos.
La besan y comen sus pechos. Y ahora si, la follan como si nada, su cuerpo ya ni responde, pero se deja hacer a placer.
Fui a la cocina y prepare unos refrigerios, jugo, cervezas y algo recalentado en microondas. Para esa entonces ya serian como las doce la noche y mañana trabajamos todos.. pero un día es un día. Igual Roberto es muy responsable y es el primero parar. Movemos los almohadones y colocamos la mesa ratona en el lugar para comer entonces. De repente Joel ya se vistió y esta pronto para irse, Igual que Roberto quien busca sus ropas y le ofrece llevarlo también.
Que cosas yo quiero mi ración de pija porque quede un poco rezagada en esta cesión. Así que me uno a Roberto a llevar a Joel.
Mi marido se queda con el matrimonio en casa, los tres están desnudos, deshechos y cansados pero no se, tal vez sigan pasando cosas entre ellos esta noche.
Luego de dejar al amigo en su casa, dimos en el apartamento de Roberto donde literalmente me reventó a pija como hacia horas deseaba. Y luego de gozar un muy merecido orgasmo me quede dormida. Al otro día tuve que llamar a mi marido para que me fuera a buscar y llevar ropa para salir ya que apenas había ido con la camiseta y el short ni bragas llevaba. Estaba desnuda en su casa y podía llegar su novia en cualquier momento… imagínense!, que explicaciones le daría?
Esa misma noche seria la noche de Pamela mi cuñada, pero lo dejo para otra parte. gracias por la lectura y si te gusto no olvides comentar.
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