Tres colegiales primero y luego yo nos follamos a mi mujer.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
El relatar y compartir nuestras aventuras sexuales en esta pagina, nos da un morbo especial que nos anima buscar tiempo para ponernos delante del ordenador y comenzar a poner en letras las memorias de 25 años, que es lo que llevamos mi esposa Ana y yo practicando esta excitante dimension de nuestra vida sexual.

Hola soy Paco y a insistencia de mi mujer hoy os queremos contar esta aventura una de las que mucho le agrado a Ana.

Sucedio el invierno pasado en La Coruña visitando la historica torre de Hercules, en esta epoca del año son pocas las visitas que suelen ir por alli, a nosotros nos pillo de camino y no quisimos perderlo, lloviznaba un poco, luego de sacar unas fotos, nos animamos a subir al alto del faro.

Las escaleras eran interminables, un grupo de escolares -en ese momento no sabia cuantos-, tan bien escalaban las escaleras por detras de nosotros, decidimos cederles el paso ya que eran mas rapidos que nosotros, eran tres y de muy corta edad, al pasar por nuestra altura y debido a la estrechez de las escaleras nos pasaron rozando, Ana no se aparto en exceso obligando a que le rozaran las tetas.

Cuando nos pasaron y ya a una distancia prudente, escuche algun comentario sobre los tetones de mi mujer “Menudas tetas tiene la morena, casi no podemos pasar” Llegamos a la cima luego de parar un par de ocasiones para coger aire, los jovenes seguian alli, disimulando como que estaban admirando la panoramica.

Os recuerdo que Ana es rellenita se le notaba que la subida la habia agotado, se desabotono el abrigo, por debajo llevaba una falda corta y un pulover bien ajustado haciendo que le resaltaran las tetas, los jovenes descaradamente no dejaban de mirar mi mujer, ella era consciente de ello y la situacion la puso cachonda.

¿Que sois de por aqui? Les pregunto, si eran locales, que por lo visto decidieron faltar al colegio y eligieron aquel lugar apartado para matar tiempo, me comentaron, ¿Os gustaria ver unas tetas enormes? Mi pregunta los dejo sin palabras, comenzaron a sonreir mirando al pecho de Ana, ¿Que os da vergüenza, os interesa? “Si, si nos gustaria verlas”

Dijo el mas espabilado, “Ana alegrales el dia a los niños”

Ana lo estaba deseando y sin tener que repetirselo se alzo el pulover, y la camiseta, el sujetador solo le tapaba las tetas a medias dejando expuestas la otra mitad, asi se mantuvo por unos instantes, “Tu sacaselas de fuera” el espabilado se acerco a mi mujer y mientras que con una mano aguantaba el sujetador, con la otra le extrajo primero una teta y luego la otra, el frio hacia que los pezones los tuviese bien tiesos, eran enormes.

Primero uno tras otro le fueron sobando las tetas, “Vamos chuparselas” y asi hicieron con bastante torpeza pero lo suficiente para que mi mujer gozara, Ana se sujetaba las tetas mientras los chicos saboreaban su carne, termino con las tetas babeadas.

El lugar seguia sin mostrar señal de presencia de otros visitantes, yo tambien me encontraba excitado y a pesar que la intencion inicial era de que los chicos disfrutaran de los tetones de mi mujer, le dije “Ponte de espadas con las manos en el muro” delante de la atonita mirada de los jovenes le alce la falda de mi mujer hasta la cintura.

El conjunto que Ana llevaba era de lo mas sexy, unas bragas negras y medias igualmente negras que hacia que resaltara mas su carne blanca,

Le pido “Agachate y abrete de piernas” Los tres sin mediar palabra miraban atentamente lo que yo hacia, primero le meti las bragas en la raja del culo, exponiendo bien a la vista sus enormes nalgas, luego le baje las bragas a las rodillas dejando ver entre las piernas la mata negra de vello de Ana, le separo las nalgas para que los niños disfruten del ano de Ana.

Ana se dobla por completo para que le vieran con claridad el coño, yo se lo sobo y noto que esta empapado, dos de los niños se estan masturbando, el mas timido queda cerca de las escaleras para avisar si llega alguien, ¿Como te llamas? Pregunto a uno de ellos, mientras le saco las bragas a mi mujer “ Tono” contesto con la voz temblorosa “Ven metesela en el coño y follatela”

Era imposible que no acertada con el coño, la poya de Tono entro en mi mujer con suma facilidad, el chico comenzo a follarla, posiblemente su primer polvo, la corrida fue inmediata Ana apenas lo saboreo, aun el coño le chorreaba leche del primero cuando a invitacion mia la penetra el segundo en la misma posicion –el lugar es muy estrecho y no se puede hacer muchas maniobras-

Las tetas de Ana balancean a cada golpe del pequeño, mi mujer alcanza el orgasmo al tiempo que el niño se corre, el ultimo se acerca para ultimar el trabajo, su poya es muy pequeña, le separo las nalgas de mi mujer y le indico que se la meta por el ano, el niño penetra el culo de Ana, haciendola soltar un gemido de placer, el niño pompea a Ana por el culo por un rato, agarrandose con firmeza a sus muslos, hasta que afin se corre.

Sin cambiarse de posicion Ana, y para saciar mi calentura primero la penetro por el coño, mientras me la follo la agarro las tetas apretandoselas bien, cambio de agujero y se la meto por el culo, los chicos ahora estan atentos a nosotros sin mediar palabra, estan aprendiendo como se folla a un puton, puedo sentir en el culo de mi mujer la leche que le dejo el pequeño dentro.

Alcanza otro orgasmo Ana y al rato le inundo el culo, mientras la aprieto hacia mi agarrandola por la cintura, Ana se limpia, tiene que mear y sin inmutarse y ante la atenta mirada de los niños se pone de cuclillas y se echa una santa meada en lo alto de la Torre de Hercules. La leccion del dia habia sido completa, seguro que aprendieron mas que si fuesen al colegio.

Antes de despedirnos aconsejo a los niños, que vayan a un servicio publico y se laven las poyas, para que sus padres no perciban el olor del coño y culo de mi mujer.

Ana y Paco

Autor: Anonimo