El inspector Menot , capítulo 9ª por Abel Torin

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
CAPÍTULO NOVENO

Estaban pasando un agradable fin de semana en la finca de Jack Menot . Éste había habilitado una zona donde había colocado una piscina climatizada que hacía las delicias de aquellas deliciosas mujeres . Allí estaba , tomando un poco de sol , con los cuerpos desnudos en las blancas hamacas .

Ya hacía casi seis meses de la trágica muerte de Louis Brendam . Aquel era un escondite secreto ideal para el descanso de aquellas mujeres que en los últimos meses habían tenido que hacer múltiples gestiones financieras con el desmantelamiento del imperio Judith.

Todos los trabajadores de la revista habían recibido de parte de Eva Stanny una suculenta retribución , más del triple de lo que le correspondía y estaban muy agradecidos . Algunos , los más jóvenes , incluso se habían quedado en la empresa que , sin cambiar el clásico nombre de Judith , sí que había cambiado de dueños.

Y Eve Stanny había recibido el suficiente dinero por la pujante empresa como para ser millonaria el resto de su vida sin necesidad de trabajar . Sus dos íntimas amigas habían engrosado sus cuentas corrientes con unas cantidades astronómicas que Eve , generosamente había dispuesto para ellas . Eve también quiso ser generosa con Jack Menot , pero éste se había negado a recibir cualquier tipo de compensación económica.

-Todo lo que he hecho ha sido porque he querido hacerlo . Además he ahorrado mucho dinero mientras he estado trabajando . Tengo dos pisos alquilados en París , aparte de mi casa también en París y esta finca. Vivo perfectamente de la pensión y de las rentas de mis pisos.

Las chicas se habían quedado boquiabiertas ante la revelación de las posesiones del exinspector Menot. Jack explicó que al ser soltero nunca había tenido muchos gastos y que , en su juventud , había hecho algunas inversiones acertadas cuyos intereses , a su vez , había destinado a la compra de sus bienes inmobiliarios.

– ¿Y quién heredará todo eso cuando te mueras , Jack? – preguntó Marie con curiosidad

-Bueno , no tengo familia cercana . Mi único hermano , mayor que yo , murió hace dos años , Quedan sus dos hijos , mis sobrinos , pero viven en el sur y casi ni les veo . Creo que les dejaré mi casa de París . Esta finca , en cambio , se la dejaré en mi testamento … a Jana – concluyó Menot mirándola a ésta amorosamente…

-Oh , gracias , Jack – Jana le abrazó cariñosa – Esta finca es una preciosidad . Pero es una pena que yo tenga que esperar a que te mueras para que sea mía…Mira hagamos una cosa . Tú haces el testamento dejándome todas tus posesiones , luego nos vamos los dos a dar un viajecito , por ejemplo al Amazonas donde ambos lo pasaríamos muy bien y luego …volveré yo solita…-añadió con picardía mientras Eve lanzaba una carcajada comprendiendo las intenciones de su amiga – ¿qué te parece?…

Jack sintió una oleada de calor interior . Jana estaba contando parte del argumento de la segunda de sus películas…Viaje al Amazonas. El argumento era muy simple: Una pareja de recién casados decide viajar al Amazonas . Allí son capturados por una tribu salvaje , gobernada por una hermosa mujer a quien encarnaba la propia Eve Stanny .

Las dos mujeres se habían hecho muy amigas y , al final , habían decidido comerse al pobre novio , en una fiesta ritual . En la última escena , la novia volvía a la civilización , no sin antes prometerle a la jefa del cotarro que volvería.

– Por mí no hay inconveniente – dijo Jack – Es más , ya que de todas maneras tengo que morir , me encantaría que fuera a tus manos , aunque supiera que mis últimos momentos no serían muy agradables…

-Oye , oye – protestó Eve , siguiendo la broma – Eso no es justo…nosotras también quisiéramos participar en eso…aunque solo fuera como espectadoras…

-Claro – añadió Marie – Además , fijaos que a Jack parece que la idea le entusiasma…

En efecto , la erección de Jack era notable a través de su pantalón corto de baño…Las chicas rieron divertidas…

-Oh , sí , vamos a planearlo bien que me encanta – pidió Jana con coquetería

-Lo primero que pienso – explicó Marie – es que sería muy sospechoso que apareciera en el testamento de Jack esa finca a nombre de Jana…

-Tal vez la podrías poner en venta discretamente a través de una inmobiliaria local…- sugirió Eve – Jana enseguida haría una buena oferta por ella y ya está .

-¿Y si alguien de esta zona oferta más?-dijo Marie -Habría que pensar en ello

-Pues Jana hace una oferta mayor que cualquier otra – puntualizó Jack – La transacción la podemos hacer en una notaría de por aquí donde a ella no la conocen y el ingreso a mi cuenta de Claredon… para hacerlo todo legal . Esperamos a que el fisco se cobre los impuestos legales y más adelante saco el dinero y se lo devuelvo a Jana en metálico…

-Oh , es una idea estupenda – palmoteó Jana , excitada – Voy a ser aún más rica…aunque todo lo compartiré con mis amigas del alma…Gracias , Jack..eres un sol…te dejaré que me chupes el conejo por ser tan bueno conmigo…incluso hasta podría tocarte una pajita…- concluyó Jana mirándole burlona…

-¿No os falta nada que planear , chicas?-preguntó Jack – Aún estoy vivo…y se supone que Jana tendría que matarme…

-Es verdad – expresó Eve – Pero con este método no haría falta matarte…ya Jana sería la dueña de todo lo tuyo…

-Es que me hace ilusión pensar en ser su víctima…se pone tan bonita cuando se pone violenta…aún estoy pensando en la expresión de su cara cuando le dio la patada a Humbert Bertrand

-Pues si vieras la cara que ponía mientras le metíamos aquel pincho por el culo , te asustarías – añadió Marie – Ella es la más sádica de nosotras tres…aunque también Eve estaba preciosa cuando le rebanó la picha a aquel malnacido con tus tijeras de podar…es una pena que no la hayas visto…

-Bueno , Jack , si es tu gusto sigamos con el plan…- cortó Jana – Nunca se sabe lo que puede ocurrir en el futuro y así estaríamos preparadas…Primero hablemos del método a emplear…seguro que preferirás uno que sea lento…en otro caso me decepcionarías.

-Por supuesto, mi dueña…siempre quise ser el protagonista de tu primera película…pero nada de ficción…quisiera ser tu toro real y que me entierres hasta el fondo del corazón tu estoque con Marie y Eve de espectadoras aplaudiendo la belleza de tu faena.

-Pero si Jana te atraviesa el corazón ya no sería tan divertido , Jack – aventuró Marie…- la fiesta se acabaría demasiado pronto

-No tiene por qué ser así – terció Eve – Primero está la suerte de banderillas.

-Es cierto – dijo con júbilo Jana – pero las de toros no servirían . Tienen que ser más pequeñas y que no se entierren mucho pues si no la pérdida de sangre acortaría la fiesta…En la película estaba todo muy claro , pero en la realidad no sé como se podrían conseguir…

-No te preocupes , Jana – dijo Jack amablemente – De eso ya me encargaría yo si es que llega la ocasión…

-Y de todas maneras , Marie – terció de nuevo Eve con socarronería – el estoque no tiene por qué ir directamente a tu corazón, Jack …Jana podría apuntar un poco más arriba o más abajo…

-Claro – se animó Marie- Es una idea excelente . De esa manera la fiesta puede prolongarse un poco más…Hay un punto por aquí…- Y Marie se levantó , acercándose a Jack – Levántate , Jack , veamos…sería aquí…¿lo ves Jana?…hay un hueco entre las costillas…si le aciertas bien , el estoque le atravesaría el estómago y , con un poco de suerte hasta le saldría por delante , por la barriga…hasta podría marcártelo con una cruz antes de comenzar el juego para darte más facilidades cuando le atravieses…¿qué te parece?

– Es estupendo – exclamó Jana , arrebolada de placer – ¿Y a ti que te parece , Jack?

-Es una buena idea – contestó él – La estocada sería prácticamente mortal y sin un médico cerca yo moriría desangrado

-Lo siento , Jack , pero ese día estaré de vacaciones y no recibiré consultas – exclamó Marie con desparpajo. Las chicas y Jack soltaron una tremenda carcajada.

– Eres maravilloso , Jack – concluyó Jana – Creo que un día deberías explicarnos exactamente cómo se usa tu máquina de compost … por si acaso un día de me cruzan los cables y me animo de verdad…De todas maneras este método del toreo es un poco difícil para mí…Tal vez haya otras maneras tan excitantes como ésta.

-Por supuesto – observó Jack – Todo depende de la intensidad de dolor que deseéis darme.

-Imagina uno de lo más sádico y refinado – contestó Jana

-Pues sí…conozco uno que quizás podría servirte…- empezó a decir Jack.

-Por favor , Jana – se escandalizó Eve – Piensa que Jack es nuestro amigo . No deberíamos ensañarnos tanto con él .

-Bueno , al fin y al cabo es un hombre – sentenció Jana – Y el único fin de todos los hombres de este mundo es servir a las mujeres…

-Sobre todo a las mujeres guapas como nosotras – recalcó Marie.

-Por eso mismo lo digo – añadió Jana – Además él es el primero que se ofrece voluntario a morir por mi mano . Es él quien se empeña en ofrecerse para nuestra diversión – continuó virtuosamente – Y es una tentación demasiado grande para una chica tan sádica como yo…Yo lo único que hago es aprovecharme de las circunstancias…¿qué mujer no lo haría?

-Ya – dijo Eve – Eso me parece muy bien . Lo que no me parece tan bien es que quieras matarle de una forma tan brutal…Parece un método más apropiado para los enemigos…

-Bah – rió Jana – La diferencia estaría en un rato más o menos de sufrimiento…y os aseguro que , una vez que ya esté empezada la fiesta , os dará igual de quién se trate…de si es o no una víctima que ha caído a traición en nuestras manos o es un voluntario…en esos momentos solo pensaremos en destruirle alegremente por los métodos más divertidos…-Jana se volvió a Menot-Por cierto , Jack ¿cuál es el método del que me hablabas?

-Vaya…Lo siento , pero creo que se me ha olvidado totalmente – exclamó un preocupado Jack ante las risas de Eve y Marie. Jana puso los brazos en jarras y se le acercó , haciéndose la enfadada.

-Vamos , Jack , es imposible que se te haya olvidado tan pronto…me parece un tanto sospechoso…Anda , si me lo dices – añadió , melosa – es posible que después te permita que me hagas un servicio trasero… me están empezando a dar ganas de hacer una necesidad fisiológica…

-Bueno , entonces no me puedo negar por un premio así – se rindió Jack ante las sonrisas de la concurrencia…– Imaginad una plancha de hierro , como de un metro cuadrado y a una altura del suelo también de un metro . Debajo un brasero regulable que pueda ir calentando , poco a poco , esa plancha . La misma debe estar sujeta al suelo por unas sólidas patas , como para aguantar un peso de , al menos 96 kilos

-Ése es tu peso , Jack – interrumpió Eve riendo alegremente – me lo dijiste el otro día…

– En efecto , Eve…y ahora suponed que sobre la plancha , a un metro y setenta centímetros , hay preparada una horca regulable…– Las chicas dieron grititos de placer- Al reo se le coloca desnudo y descalzo sobre la plancha – Las chicas escuchaban , totalmente absortas, las explicaciones de Jack – Luego se va tensando la cuerda , pero lentamente , hasta conseguir que la misma quede prácticamente tirante…

– Es decir ni floja , ni tan dura que le impida respirar…¿Os imagináis lo que pasará cuando encendáis el brasero?…- Las chicas se miraron pensativas

-Seguro que te quemarás los pies – dijo Jana- Pero no me parece tan divertido…¿y luego te ahorco? – La cara de ella era como de desilusión…

-No , espera , Jana – terció Marie pensativa – Me parece que estoy intuyendo el plan diabólico de Jack – Cuando el hombre comience a sentir el calor en los pies intentará levantarlos para evitar quemarse…

-¡¡Por Diós!! – exclamó Eve – Es genial…si alza demasiado los pies , entonces el peso del cuerpo le echará hacia abajo y entonces la cuerda le estrangulará poco a poco…

-Uy , eso ya me gusta más…- ríe Jana – si levantas los dos pies a la vez te irás ahorcando tú mismo…pero no me imagino cómo terminará la cosa…

-Eso es lo más divertido – aclaró Jack – Como este experimento nunca se ha hecho , que yo sepa , no se sabe cuál será el final…Yo creo que hay dos opciones claras…ambas comienzan porque el propio reo aterrorizado por el calor de la plancha y no pudiendo aguantar más el dolor , alce sus piernas a la vez quedando estrangulado…

-Claro que al bajar de nuevo los pies volverá a tener apoyo con lo que podrá respirar durante una centésima de segundo , para volver a empezar a quemarse y así una y otra vez hasta que vienen las dos posibilidades . O muere asfixiado por la cuerda o le da un infarto antes…o ambas cosas.

Las chicas quedaron en silencio unos instantes . Jack advirtió que Jana y Marie se masturbaban suavemente , mientras Eve se acariciaba sus pechos , sin disimulo .

-Cielos , Jack – Eve fue la primera en hablar – Eres de verdad una persona increíble . La verdad es que me lo he estado imaginando y me estoy poniendo muy caliente…Me hubiera encantado usar ese método con nuestro amigo Bernard…Oye ¿ Éste no será un truco tuyo para que solicitemos los servicios de tu experta lengua para calmar las ansiedades que me están entrando?…

-Creo que el polvo que le voy a echar esta noche a Gastón cuando lleguemos a casa va a ser de categoría… estaré todo el tiempo pensando en ti ,Jack…y en tus ideas locas…- Él agachó la cabeza en señal de reconocimiento…

– Creo que deberíamos hacer el experimento , Jack , contigo de colaborador voluntario…– añadió Jana , mimosa – Aunque sólo fuera para el bien de la ciencia , y así descubrir de qué forma muere un reo en estas circunstancias .

-No creo que fueras a publicar los resultados de tu experimento– dijo burlonamente Marie.

-¡¡ Calla , tonta!! – siseó Jana , con tono de fingido enfado – Eso no tiene por qué saberlo él…Oye , Jack , parece que sabes mucho sobre los métodos que existen para torturar a los hombres…me parece un tema interesante de conversación…me gustaría que nos hablaras de los más refinados y lentos…Sólo es interés científico – concluyó Jana – Ya lo sabes…

-En efecto – habló Jack , en tono experto – Hay muchísimos…si queréis os pongo al corriente de los más…divertidos ¿con una ejecutora o con varias a la vez?

-Con una , Jack – pidió rápidamente Jana , al mismo tiempo que Eve y Marie decían a la vez-…Con varias, Jack…

-Lo ves , Jana – protestó Marie – Siempre serás una egoísta – Sólo piensas en tu propia diversión

-Deberías aprender a compartir un poco más – terció Eve

-Lo sé , chicas – dijo una extrañamente compungida Jana – pero es que a Jack le considero tan mío , que a veces sueño en su ejecución sólo a mis manos…de veras que lo siento… venga , Jack danos métodos…¿cómo dijiste?…para varias ejecutoras…

-El más simple , pero muy efectivo y muy barato pues no necesita de grandes gastos para su realización –comenzó Jack – es la lapidación… se pone al reo desnudo en medio de una hondonada y las mujeres alrededor , como a diez metros de distancia , en un plano más elevado…Habría que disponer , antes de empezar , que las mujeres tengan un número razonable de piedras apropiadas para este menester

-Sí , Jack – rió Marie – sería una putada quedarse sin munición a la mitad de la fiesta.

-En efecto –puntualizó Eve – Y sería lo más apropiado que la propia víctima colabore en el acarreo de las piedras.

-Es que cuando la víctima coopera con sus verdugos , la ejecución es mucho más fácil de organizar- apostilló Marie . Al escuchar la frase de Marie , Jack se la quedó mirando unos instantes , pensativo -…Lo malo es que no disponemos de un sitio lo bastante grande para hacértelo…anda , Jack , cuéntanos otro…

-El segundo método es el mismo que le hicisteis la primera vez a Louis…preparad una cacería como aquella…sólo que en vez de estaros refrenando…traéis la suficiente munición…y no os paráis hasta que yo haya muerto desangrado…

-Oh – exclamó Marie con desencanto mirando su reloj de pulsera – Fijaos en la hora que se ha hecho . Ya deberíamos ir pensando en arreglarnos para ir a casa.

-Sí – terció Jana levantándose con pesar – Todo lo bueno dura poco.

-Oye , Jana – siseó Jack – ¿No te olvidas de algo?

Ella le miró dubitativa y luego se echó a reir.

-Oh , vaya , lo siento , Jack…no deberías ser tan confiado . Lo cierto es que no tengo ningunas ganas de mear o de cagar…te lo dije porque sabía que no podrías resistirte a esa tentación…

-Eres una niña muy mala , Jana – la reconvino un cariacontecido Jack – Te gusta engañarme y burlarte de mí…

-Ya lo sé – dijo ella , mimosa – Y esa es una de las razones por las que te gusto…

-Si te da lo mismo , Jack – terció Eve , – esta conversación me ha dejado toda empapada y necesito una buena lengua que me lo limpie…y , además , me han dado unas tremendas ganas de mear…- Y Eve , sin esperar la respuesta que ella sabía afirmativa abrió aún más sus turgentes muslos ofreciendo a Jack el néctar de su femineidad…