Trallax (03)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por animal.
TRALLAX, esclavizado en el ambito cultural de una sociedad vikinga, similar a la del siglo V de la Tierra. Con resignacion, (¡zass):

– ¡Humm!, (¡zass), ¡humm!, (¡zass), ¡humm!.- enjaezado como animal de carga por su nuevo amo SVEN. Hijo genetico de tan solo 18 años, del reyezuelo del poblado vikingo Fardtuserkst. Juntos iban por primera vez al campo de labranza de este ultimo, el fuerte macho llamado KIRK, para ser instruido por el adonisiaco chico, (¡zass):

– ¡Auk!.- que lanzandole un nuevo correazo en la cuadrada espalda, le aviso:

– ¡Te aconsejo mulo, que cuando te haga labrar el campo, tires con todas tus fuerzas del arado!.- y es que, aparte de tratarlo asi, tambien lo llamaba con ese nombre, para distinguirlo del resto de los hombres.

Y de esa forma tan viril, el mas musculoso y fuerte de los dos, tratado como un animal de carga. Con un bocado entre sus fuertes dientes, con las manos por detras inmovilizados por fuertes cadenas:

– ¡Hummm!.- mostrando el espectacular pecho cuajado de abombados musculos. Indefenso al duro castigo fisico:

– ¡Hummm!.- mediante unas bridas que llevaba enganchada al bocado y a la argolla del collar que aprisionaba su cuello de toro:

– ¡Gira a la izquierda mulo!.- TRALLAX fue obligado a entrar en una pieza de labranza. Y clavando SVEN el hierro en la tierra, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- a latigazos dio comienzo la labranza. Tirando el potente culturista con todas sus fuerzas, demostrando que los gruesos aros de sus pezones indicaban que tenia el altisimo pedigri diez, (puntuacion solo alcanzando excepcionalmente por algun que otro esclavo). Ya que solo podian ser exhibidos por unos machos con una musculatura y fuerza tan impresionantes como la suya, o sea muy fuera de lo comun.

Aunque ahora, no debia de tirar con todas sus fuerzas, segun el joven SVEN, que muy cabron, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- le mando a su poderosa espalda una generosa tanda de latigazos. Muy injusta por cierto porque la mole de musculos tiraba del arado a rabiar y eso que el vikingo la clavo profundamente en la tierra, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- pero para eso era el amo ¿verdad?. Y asi, pasando las horas. El escultural esclavo, literalmente cubierto de azotes, iba arando el campo, con sus cada vez mas desgarrados y rotos pantalones de policia. No solo por el uso, sino tambien por los lacerantes golpes de estos ultimos meses, que aparte de contonear perfectamente el bello fisico del cachas, comenzaba a mostrar trozos de piel de sus formidables nalgas y poderosos muslos, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- y esa estampa tan animal de un culturista tan poderoso con el torax desnudo, sometido por completo, mantenia muy cachondo a SVEN, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- que sin motivo aparente, le regalaba con mas andanadas de latigazos solo por el placer de escucharlo bufar como un toro. Admirando el poderio fisico de este, que despues de transcurridos unas tres horas, chorreando la frente y sus musculos abundante sudor. Y con los dientes fuertemente apretados al bocado, cubierto sus labios de una espesa espuma blanca, similar a los toros bravos. Con paso tambaleante, marcando polla muy dura debajo del pantalon, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- sin reposo continuaba con la labranza. Hasta que pasadas un par de horas mas, termino su trabajo. Dejando la pieza de cultivo, totalmente arada en cinco horas. Cuando los anteriores esclavos que tuvo, lo hicieron en ocho o diez horas:

– ¡Enhorabuena esclavo!, ¡has trabajado muy duro!.- le felicito. Y cogiendo por sorpresa al hermoso boy:

– ¡Hummmm!.- le dio un beso que removio todas las fibras de su cuerpo:

– ¡Ahora a la cuadra a que reposes, esclavo!.- le dijo como premio SVEN. Y saliendo los dos de la pieza agricola, se dirigieron a los edificios de la granja. En donde, nada mas llegar, despues de ser liberado del arado. Se encontraron con el exigente dueño de la finca. Que nada mas verlos, con cara de enojo; se aproximo a los dos y cogiendo el corto latigo de cola de caballo, que siempre llevaba en el cinturon, (¡zumm!):

– ¡Aug!. ¡ por favor papa, no me azotes!.- castigando el fuerte torso del chaval; le pregunto:

– ¡Con que permiso has puesto a trabajar en el arado al nuevo semental!.- y alzando la armada mano, (¡zumm!):

– ¡Ug!.- marcandole mas profundamente ambos pectorales, le aviso:

– ¡El proximo fallo que tengas, te meto en el pozo negro y despues de arrancarte la piel a tiras, te vendo como esclavo!.- y dando la media vuelta, dejo solos a los dos bellos mancebos:

– ¡Que padre mas cabron tengo!.- y sintiendo SVEN como le escocia sus azotadas tetas; pagandolo con el fornido mulo, (¡zumm!):

– ¡Humm!.- le lanzo un correazo, como si este fuera el culpable de lo ocurrido:

– ¡Venga esclavo, camina!.- y la peluda mole de musculos, obediente entro en la cuadra. Y siendo liberado de los arneses y cadenas de sus brazos; con fuertes candados y con otra gruesa cadena en la argolla de hierro, que el rubio le puso en el cuello, dejo a TRALLAX encadenado a la pared.

– ¡Hasta luego, mulo!.- aterido de frio por la humedad reinante en tan sucio lugar.

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TRALLAX, rodeado por todas partes de vacas y cerdos, y de los excrementos y orina de estos. Estaba tan agotado, que medio desmayado, cayo sentado al suelo, y sintiendo humillado como las mierdas y orinas, le mojaba a traves del pantalon el esfinter, testiculos y semiempalmada polla. Como no podia hacer nada para impedirlo; derrotado por completo, (¡poff!):

– ¡Humm!.-se dejo caer cuan largo era, y sintiendo el refrescante roce de los grandes mojones de ganado sobre sus torturados musculos, apoyo la cabeza en sus brazos, y cerrando los ojos:

– ¡Ayyy!.- solto un sonoro suspiro de resignacion. Rememorando su pasado mas reciente:

Llevaria unos cinco dias andando por el desierto, alimentandose solo del aire que le rodeaba; cuando al fin, se encontro con un caudaloso rio:

– ¡Joder! ¡menos mal!.- en donde, contento por el hallazgo, se lanzo a sus refrescantes aguas con la intencion de relajar sus musculos. Comenzando a nadar lleno de alegria de arriba abajo durante un buen rato. Hasta que adentrandose en el rio unos 15 metros:

– ¡Joder, que suerte!.- diviso en la curva del rio una nave que por los libros de historia que estudio, era una perfecta replica de la epoca de oro de la navegacion vikinga. Que nada mas aproximarse a el, pensando que iba a ser auxiliado:

– ¡Pescad a ese macho!.- a la fuerza fue recogido con la ayuda de una red por sus tripulantes. Y tratado igual que un pez:

– ¡Soltadme, mamones!.- fue lanzado a una especie de cajon de madera; en donde fue encerrado.

Durante los 15 dias que duro el viaje, fue tratado como el peor de los esclavos de carga. Ya que, por negarse a ser sometido por ellos; solo por eso, su cuerpo fue azotado sin piedad durante dias, para bajarle los humos. Pero ni por esas y aunque al fin accedio a introducir y apilar la carga que iban recogiendo por los puertos en donde atracaron, siempre lo hizo con la ayuda de un buen latigo. Hasta que, debido a los continuos actos de rebeldia, tuvo la experiencia mas horrible que se pueda imaginar, con el macho cuarenton llamado KIRK capitan del navio; su actual amo.

Todo sucedio al treceavo dia de encierro en el barco, exactamente dos dias antes de ser llevado a la granja vikinga. Cuando encerrado en el estrecho cajon de madera, como castigo por su ultima desobediencia. Escucho la viril voz del capitan, que dirigiendose al centinela, le ordeno:

– ¡Saca de ahi a TRALLAX, llevalo a mi camarote y encadenalo al techo!. ¡Voy a continuar personalmente la educacion del musculoso boy!.- aclarando:

– ¡Estoy hasta los cojones de que no hallais sido capaces de domarlo!.- añadiendo:

– ¡A este me lo pienso quedar para disfrute personal y como macho de carga para mi granja!- y alejandose de su subordinado, continuo con la ronda de inspeccion del navio; dandole asi ademas tiempo a que cumpliera su encargo.

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Y nada mas entrar en el camarote, KIRK sonrio feliz:

– ¡Es todo un cabron!.- le gustaba como el centinela, siempre que le daba el mismo encargo, fuera el esclavo que fuera, lo encadenada con el fisico tan tenso, que con los brazos alzados, los obligaba a mantener los pies en puntillas. Para que tan bellos mancebos quedaran exhibidos para su complacencia y crueldad. Pero lo de este esclavo era tan inusual que jamas estuvo ni de lejos ni proximo de un semental tan espectacular como TRALLAX:

– ¡Veo que has sido agente de Policia en Ciudad Imperio!.- le pregunto por decir algo. Porque la verdad era que le importaba un huevo. Pero lo que si le molesto fue que no le respondiera. Por lo que, agarrandole por los anillos pezoneros:

– ¡Usss!, ¡aaah!, ¡que dolor!.- girandolos comenzo a retorcerle las mamas con sadica malaleche:

– ¡Ufff!, ¡aggg!.- hasta que arrancandole lagrimas a sus bellos ojos verdes, le comunico:

– ¡Cuando te haga una pregunta o me dirija a ti, quiero que me respondas!.- y liberandole los pezones. Despues de gozar con la vision de las tremendas y duras erecciones que las dos ricas protuberancias carnosas alcanzaron. Cabreado porque el musculoso ser seguia sin hablar; amenazante le dijo:

– ¡Ya veo que tendre que torturarte sin contemplaciones!.- y complacido porque por fin noto un temblor en tan fantasticos musculos. Para impedir que este; nada mas iniciar el tormento, de pura agonia, echandose marcha atras le pidiera perdon, jurandole que iba a ser obediente. Saco una correa con una gruesa bola de blanco marfil:

– ¡Hummmm!.- y taponandole la boca, la ato detras de la nuca. Retorciendose entonces el encadenado musculoso, arrepentido de no haber sido obediente, ya que comprendio las intenciones de su verdugo:

– ¿Ya te has dado cuenta chiquillo de tu error, verdad?.- y sacando de un cajon un pequeño infiernillo y un puñado de afiladas agujas. Aproximo una vela al recipiente, y dejando el carbon expuesto a la llama, coloco despues los finos hierros encima. Con la jodida intencion de que se pusieran al rojo vivo. Consiguiendo aterrar a TRALLAX, que comprendiendo de que iba el tormento:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- se retorcia y contraia sus musculos de puro miedo. Hasta que KIRK, cogiendo dos alfileres, se acerco a el y acariciando el formidable pectoral izquierdo del cachas, a la altura de los sobacos:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- le atraveso la teta y mientras se inundaba el camarote de un fuerte olor a carne quemada:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- le traspaso el otro pecho y mientras disfrutaba conque fuertes inspiraciones de terror se expandia tan herculeo pecho. KIRK cogiendo otros aceros:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- paso primero tan incandescentes pinchos por la puntas de sus tetillas, y escaldandoselas con sadismo, se complacio en observar como salian de ellas un fino humillo. Hasta que por encima de las argollas:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- le atraveso ambos pezones y gozando con los ojos vidriosos que puso el dulce latino. Agarro otros dos hierros y alzando ambas manos. Sin compasion torera:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- le atraveso de abajo arriba sus desarrollados deltoides. Y siguiendo la rutina que tanto se sabia; KIRK sin reposo, continuo; ahora con el trapecio:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- en donde a ambos lados del cuello se lo traspaso. Despues los biceps:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- traspasandolos lentamente, como gozando mucho con ello. A continuacion los triceps:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- de igual manera, logrando nublarle los ojos en lagrimas. Grandes dorsales:

– ¡Hummm!, ¡hummm!, ¡hummm!, ¡hummm!.- en donde le puso cuatro. Definidos serratos:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- que los dejo muy castigados. Pared abdominal:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- momento en que se percato que el esclavo magnificamente empalmado, habia eyaculado:

– ¡Cacho, puto!.- hasta que bajandole el ceñido pantalon. Como si de un toro se tratara, igual que si fueran banderillas:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- se los clavo en los gluteos:

– ¡Hummm!, ¡hummm!, ¡hummm!, ¡hummm!.- y media docena en los muslos, dejando para el final la gran verga que el chaval poseia; que salvajemente empalmada, apuntando al techo:

– ¡Hummmm!.- acababa de eyacular por segunda vez. Entonces cogio las cuatro que quedaban:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- y atravesado por la base tan grueso pene:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- volvio a clavarle el segundo en la parte central:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- y procediendo despues a traspasarle el glande. Con la mayor de las crueldades, con aberrante lentitud:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- le introdujo por completo el ultimo en el agujero seminal:

– ¿Duele, verdad esclavo?.- y alejandose KIRK un par de metros. Cogio el latigo de cola de caballo que siempre llevaba colgado de su cinturon, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- y azotandole, notaba como las tiras de cuero se enrollaban en los pinchos, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- y a tirones con fuertes dolores, se los fue arrancando, (¡zumm!, ¡ssplass!):

¡Humm!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- hasta que despues de quitarle todos y comprobar feliz que habia conseguido que el musculoso ser se hubiera corrido por tercera veces:

– ¡Ya esta!.- guardo el latigo y soltando las cadenas del techo; el cachas cayo de rodillas. Para despues:

– ¡Humm!.- perdiendo la consciencia, se desparramo inerte con todos sus torturados musculos sobre el suelo. Logrando el vikingo lo que queria de el, que a partir de ese momento, se comportara como un obediente esclavo.

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Y de esa forma tan diestramente domesticado, transcurridos los dos dias que faltaban por llegar; atracaron en el pequeño embarcadero de Fardtuserkst. En donde nada mas poner pie en tierra, el poderoso semental, conocio a SVEN. Y como no podia ser de otra manera, se quedo prendado del joven rubio.

Este era el chico mas hermoso de cara que habia visto, que de 1’90 de alto, con un corto taparrabo de piel de oso puesto, mostraba un fisico muy impresionante para un chico de tan solo18 años como el. De ojos azules como el cielo, con cabellera muy rubia que le llegaba hasta los hombros. Era blanco de piel, aunque eso si muy tostado por el sol. Que con graciles pasos, se aproximo al sometido gay:

– ¿Padre, de donde has robado un macho tan increible como este?.- le pregunto a este. Mientras el de forma muy sexy, le mostraba despreocupadamente a TRALLAX que tenia un potencial muscular aun en plena expansion. Porque de anchos hombros, mostraba unos grandes pectorales y dorsales muy trabajados que le daban a su torax una forma en V muy excitante, que solo con el fuerte esfuerzo fisico en la granja, se podia lograr en una cultura antigua como aquella. Rematando tan buen fisico aquel bonito culete que se adivinaba bajo el trozo de piel. Asi como, el paqueton delantero que mas tarde confirmaria TRALLAX, que en ereccion alcanzaba 26 cmts. Todo ello se mantenia erguido por dos desarrollados muslos y piernas, que parecian igual que los de TRALLAX, predestinados a machos de carga:

– ¡Lo pesque en el rio, hijo!.- le contesto por fin KIRK, que acordandose de lo puto y cabron que SVEN podia ser, le aclaro:

– ¡Quiero que te alejes todo lo que puedas de el!, ¡esta belleza es solo para mi!.- y tirando de TRALLAX, (¡zass!):

– ¡Ay!, (¡zass!), ¡auk!.- lanzandole dos correazos en el pecho:

– ¡Y tu deja de mirar a mi hijo!.- logro que el despistado esclavo apartara la vista del chico rubio. Ya que se quedo todo el tiempo mirando a SVEN. Al cual, demostrando que tenia muchos cojones, lanzo un beso. Yendo al momento detras del capitan para ser encadenado en las cuadras junto al resto del ganado.

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– ¡Joder!, ¡que mala persona fue el capitan conmigo!.- recordo TRALLAX cuando volvio al presente:

– ¡Pero el hijo puta del SVEN no se quedo atras!.- y girandose encima de la mierda con la intencion de disponerse a dormir. Justo en ese momento:

– ¿Quien sera!.- fue sorprendido por el inquietante ruido de los goznes de la puerta al abrirse:

– ¿Que querra este!.- viendo aparecer al joven rubio, que con sigilo se dirigia a el. E imaginandose que la visita de este era algo relativo a lo sexual, cerro los ojos con la intencion de sorprenderlo.

– Ufff!, ¡que "güeno" esta el tio!.- y como SVEN no se creia observado, con calma se quedo admirando el castigado cuerpo de TRALLAX. Hasta que envalentonado, se aproximo aun mas al latino y gozando con la excitante imagen de esos poderosos musculos cubiertos de latigazos, orin y excrementos. Deseo gozar de tan fantastico esclavo, y pasando de la amenaza de su padre; se puso junto a la perla culturista. Y cuando se agacho con la intencion de comerle la polla mediante una generosa mamada. Atacando TRALLAX lo sorprendio:

– ¿Que pretendes de mi, chiquillo?.- y tirando del taparrabos del chico, le obligo a ponerse de rodillas:

– ¡Ufff!, ¡sueltame!.- y atenazandole con una mano ambos brazos por detras, (¡plass!):

– ¡Auk!, (¡plass!), ¡ug!.- le estampo unas soberanas mistras en tan macizorros pectorales y marcandoles en ellos sus dedazos, se los dejo enrojecidos:

– ¡Por favor TRALLAX, dejame ir!, ¡que no pensaba hacerte daño!.- le rogo SVEN, incapaz de apartar la vista del excitante fisico del moreno, casi cubierto de heces:

– ¡Que yo solo pensaba chuparte la polla!.- y transformandose en un chico muy dulce, añadio:

– ¡Es que nunca he visto de cerca una verga tan grande y gorda como la tuya!.- consiguiendo que TRALLAX, despues de tanto tiempo, recuperara su vena sado:

– ¡Por favor, no me humilles!.- y llenandole al adonisiaco rubio de excrementos el interior del taparrabos, concretamente el recto, cojones y polla, le pregunto:

– ¡Si te permito que me comas el nabo, tendras que ser mi esclavo!.- logrando con esa propuesta que el guapo rubio, descubriera a su vez su vena masoquista y excitadisimo solo con la idea de ser disciplinado por un macho tan fuerte:

– ¡Bien de acuerdo sere tu esclavo!.- no obstante sonrojandose, le rogo:

– ¡Pero por favor, que no se entere mi padre!, ¡seria capaz de arrancarme la piel a tiras!.- y observando tranquilizado que, con un gesto TRALLAX se lo prometio. Relamiendose, vio que este, despues de soltarle los brazos:

– ¡Krom que grande es!.- le mostro la verga, dura, muy gorda en toda su extension, en sus 31 x 8 cmts de ereccion:

– ¿Te gusta, esclavo?.- y SVEN, disfrutando con la idea de poseerla:

– ¡Mucho, amo!.- como hipnotizado se quedo admirandola:

– ¡Cojones!, ¿Por que haces eso?.- cuando asqueado, observo a su amo, que recogiendo un mojon de vaca, se la unto en toda la superficie de la polla y dejando que se deslizara tambien sobre sus huevos; le ordeno:

– ¡Venga, chupa si tanto lo deseas!.- y agarrando por la nuca al bello rubiales:

– ¡Hummmm!.- forzo al infeliz a que se lo tragara con toda la caca que la cubria:

– ¡Sigue cerdo!.- y feliz por las arcadas que aquello provoco en el musculoso rubio, contento comprobo como este recuperandose:

– ¡Ohhhhh!, ¡si!, ¡si!.- comenzo una deliciosa felacion, arreandole unos ricos lametones a la polla que puso los pezones de su dueño duros como escapias. Y es que SVEN resulto ser un sensacional mamon. Porque se estaba comiendo la verga como si fuera la ultima de su vida:

– ¡Hummm!, ¡oooh!, ¡magnifico!.- de tal forma que le arrancaba sonoros bufidos a TRALLAX. Que aunque muy excitado, comenzo a preocuparse por el sonoro ruido que alcanzaban sus gemidos. Por miedo a ser descubierto por KIRK. Ya que de tanto gusto:

– ¡Aaaaah!, ¡sigue bonito!.- no podia dejar de gemir ruidosamente . Era mucho el gusto que el rubio le estaba dando. Por eso no pudo hacer nada cuando su nuevo esclavo:

– ¡Krom!, ¡que huevotes mas grandes!.- bajandole aun mas los pantalones, le saco los peludos testiculos y mientras le masturbaba:

– ¡Joder!, ¡que buen mamon eres!.- a lengüetazos se los fue limpiando. Hasta que observando el vellido y oscuro esfinter lleno de mierda de TRALLAX, se lanzo sobre el y tragandose las caquitas que lo cubria. Le regalo con un concierto de lengüetazos:

– ¡Ufff!, ¡usss!, ¡que placer!.- arrancandole al escultural latino unos gemidos que se debian de escuchar por toda la granja. Hasta que no pudiendo ser de otra manera:

– ¡Hummmm!.- y despues de que el cachas eyaculara:

– ¿Que esta ocurriendo aqui?.- entro KIRK. Que nada mas ver lo que estaba sucediendo:

– ¿No te habia dicho que te mantuvieras alejado del esclavo?.- cogio el latigo de su cinturon, (¡zumm!):

– ¡Umk!, (¡zumm!), ¡aug!, (¡zumm!), ¡humm!.- y castigando con fuerza al bello vikingo; forzandole a cubrirse el rostro, (¡zumm!):

– ¡Aug!, (¡zumm!), ¡ug!, (¡zumm!), ¡aggg!.- paso a azotarle otra vez los pectorales:

– ¡Por favor padre!, ¡que sere bueno!.- le rogo entonces el indefenso chaval. Que poniendose de pie, bajo sumiso la cabeza, a la espera de ser perdonado, (¡zumm!):

– ¡Ufff!, (¡zumm!), ¡humm!, (¡zumm!), ¡ug!.-, mientras sus musculos eran todavia latigueados. Hasta que su padre, complacido por su docil comportamiento; dejo de castigarle:

– ¡Sabes que yo siempre cumplo con mi palabra y ya te avise que te mandaria encerrar en el pozo negro, si te cogia con el!.- y colgando de nuevo el latigo en el cinto, le ordeno a su hijo:

– ¡Libera al esclavo y ponle la correa!, ¡pero antes le encadenas los brazos por detras!.- y nada mas acabar:

– ¡Ya esta padre!.- KIRK, cogiendo otra cadena, le inmovilizo los brazos igual que a TRALLAX. Y procediendo despues a ponerle un collar, lo sujeto con otra correa. Cuando nada mas verse SVEN asi, junto a su morenazo amo. Pasando de lo que su padre hiciera, se acerco a TRALLAX:

– ¡Te quiero, amo!.- y pegando sus fornidos pechos. Clavandose mutuamente ambos sus endurecidos pezones:

– ¡Hummm!, ¡hummm!.- se dieron un beso largo, excitante, que aunque puso muy cachondo a KRIK:

– ¿Conque quieres provocarme?.- este volviendo a coger el latigo, (¡zumm!):

– ¡Aggg!, (¡zumm!), ¡ay!, (¡zumm!), ¡ufff!.- a golpes los separo:

– ¡Esto lo vas a pagar caro, SVEN!.- y tirando fuertemente de las correas, obligo a los fogosos sementales a bajar por una oscura escalera. Accediendo los tres al cuarto conocido por el pozo ciego. En donde en sus cuatros paredes, habia unos caños, de los cuales no paraban de manar un chorro espeso de heces y orin de animales. Que procediendo de las viviendas, cuadras y corrales de la granja, caian en una especie de embalse que habia en el centro:

– ¡Por favor papi!, ¡no me cuelgues ahi, que me da mucho asco!.- le rogo el musculoso rubio, en un ultimo intento de ser perdonado. Pero al comprender que no lo iba a conseguir. Aterrado escucho a su padre que con voz grave, le recordo:

– ¡Ya te avise, perro!. ¡y tienes que hacer frente al castigo como un buen vikingo!.- por lo que mirando a TRALLAX en una ultimo gesto de socorro. Oyo sorprendido a este, que con dulce voz, le ordeno:

– ¡Obedece a tu padre SVEN, quiero verte cubierto en mierda con tu polla dura como la roca!.- y comprendiendo KIRK con esa respuesta, que el moreno cachas no iba a ser ningun problema, todo lo contrario:

– ¡Quiero que me ayudes, esclavo!.- le libero de las cadenas y correa que lo inmovilizaba. Observando complacido a TRALLAX, que acercandose a su hijo:

– ¡Ufff!.- le arranco el taparrabos. Gozando los dos con la vision del poderoso balanceo de la empalmada varga del chico entre sus fuertes muslos. Cuando, comprendiendo por fin el rubiales, que no tenia nada que hacer. Mirando con resignacion a su nuevo señor, obedecio:

– ¡Si amo!.- y abriendose de piernas, les entrego los brazos. Y siendo primero encadenado por los tobillos, para despues por las muñecas. KIRK y TRALLAX, a la orden del primero:

– ¡Uno!, ¡dos! ¡y tres!.- fueron alzando el cuerpo del rubio. Que al perder inicialmente el equilibrio:

– ¡Aggg!.- cayo dentro de la charca y cubierto por entero de pis y mierda:

– ¡Cuatro!, ¡cinco!.- mediante tirones de cadena; fue sacado de tan repugnante receptaculo. Apareciendo con los brazos y pies en aspas, ya que estaba firmemente sujeto por los tobillos al suelo:

– ¡Krom!, ¡que asco!.- con los musculos muy sucios, pero brillantes por el asqueroso pis. Marcando en terrible tension sus 26 cmts de dura verga:

– ¡Joder, que picotazos!.- sintiendo al momento, decenas de parasitos que comiendoselo vivo, comenzaron a chuparle la sangre. Sobre todo el pene que hinchado, estaba casi cubierto de sanguijuelas:

– ¡Por favor, sacadme de aqui!.- volvio a gritar el joven chico. Pero sus verdugos ni caso; e interrumpiendo KIRK tan excitante imagen de doma. Acariciando el macizo culete de TRALLAX, le participo:

– ¡Dejemos aqui a SVEN, para que aprenda la leccion!.- y complaciendose los dos con los gemidos de miedo que el rubio soltaba. Se dirigieron a la escalera:

– ¡Por favor, amos!, ¡no me dejeis aqui!.- y oyendo mientras subian las suplicas de SVEN:

– ¡Ahora tu esclavo!, ¡vas a tener que complacerme a mi y a mis hombres!.- TRALLAX escucho el siguiente trabajo que le tenia encomendado su amo. Y el como un buen entrenado esclavo, le respondio:

– ¡Si amo, lo que ordenes!.- y saliendo los dos al patio, andando con cuidado para no caer, porque ya era de noche, entraron en el edificio principal. En donde, tres fuertes empleados de KIRK, les estaban esperando:

– ¡Ven esclavo, acercate a nosotros!.- y TRALLAX, quitandose el pantalon, se quedo en bolas y mostrandoles su maravillosa ereccion de verga, fue tras ellos:

– ¡Cometela, esclavo!.- y mientras uno le forzaba a bajar la cabeza:

– ¡Ohohoh!.- para que se tragara su nervuda polla. Otro se apodero del nabo del latino y bien sujeto:

– ¡Hummm!.- comenzo con ella a regalarle con una felacion. Notando entonces el tercer invitado, que agarrandole TRALLAX el cipote:

– ¡Si puto, masturbame!.- empezo a pajillearlo:

– ¡Hummmm!.- mientras el era empalado analmente por la polla de KIRK, que impaciente, procedio a encularlo como solo un veterano lo podia hacer. Consiguiendo los cuatro que TRALLAX se sintiera la zorra mas grande del planeta:

– ¡Ufff!, ¡¡ufff!, ¡ufff!, ¡ufff!, ¡ufff!.- gozando como nunca. Notando a la vez; excitadisimo, el poder de aquella polla en su boca:

– ¡Si!, ¡si!, ¡asi esclavo!.- y como masturbando aquel recio cipote, vibrando como un volcan:

– ¡Uoooh!, ¡que gusto!.- eyaculo sobre su amplio torso:

– ¡Hummmm!.- mientras el se corria en la ansiosa boca del tercero:

– ¡Toma polvo, musculitos!.- hasta sentir la espesa leche de su amo invadir su calido conducto rectal.

Y asi, entre aquellos bravos y aguerridos machos. TRALLAX incansable, los fue complaciendo sexualmente uno a uno, o en grupo, con su culo, con su polla, con su boca, durante toda la noche hasta dejarlos derrengados y muy dormiditos.

Por eso, nada mas aparecer los primeros rayos de sol; el escapando de aquel amasijo de musculos y pollas, que formaban aquellos fuertes tios; se puso de pie y dirigiendose al exterior:

– ¡Agur, chicos!.- salio de la casa con el pantalon en la mano y con la polla apuntando al frente. Mas tiesa que el palo del mascaron de proa de un buque español. En busca de su rubio chico. Triunfante y feliz porque el solo, despues de ser follado y ahogado en semen por todos los residentes de la granja, incluso por KIRK. A peticion de ellos, se los follo y culeo tantas veces como quiso, regandoles los rectos repetidamente (¿seria el poder del elixir?), obligandoles despues a que se la chuparan hasta la extenuacion. Arrancandole aquellos pervertidos granjeros los orgasmos que quisieron. Hasta que agotados, le dejaron salir:

– ¡Joder!, ¡que potencial!, ¡es imposible que un tio por muy cachas que sea, pueda alcanzar el climax tantas veces y menos tan seguido!.- escucho TRALLAX orgulloso. Feliz porque KIRK como premio le permitio pasar el dia con su hijo. Por eso, cogiendo el mismo latigo con que le castigo este ayer mientras labraba. Se dirigio al pozo ciego.

Cuando nada mas entrar, fue testigo del repentino aumento de caudal que sufrio los caños de las paredes. Que lanzando sobre el musculado cuerpo del rubito decenas de litros y kilos de excrementos, lo cubrieron por entero:

– ¡Aggg!, ¡que asco!.- logrando que SVEN, sorprendido por tan inmunda inundacion, contrayendo sus musculos, encajara la asquerosa caca con resignacion. Hasta que descendiendo de nuevo el caudal, regresando la calma a su cuerpo, volvio a ser regado por los habituales chorros de orina y cacas, que durante toda la noche no cejaron en seguir ensuciandole:

– ¿Que?, ¿vienes ya a atormentarme?.- le pregunto entonces a TRALLAX, nada mas verlo. Que cogido de sorpresa, excitado por haber recuperado su vena sado, sin previo aviso:

– ¡Vas a vez perro!.- comenzo atormentar al adonisiaco rubito, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Umk!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡aug!.- encajando los primeros latigazos en ambos pechos, que quedando fuertemente marcados, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Aggg!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡ug!.- TRALLAX empezo a rodearle con la cortante lengua el torso, lacerandole la espalda sin compasion. Hasta que bajando el brazo, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Ufff!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- inicio una retahila de latigazos, marcandole los cojonudos gluteos, vientre, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Ug!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡umk!.- macizotes muslos y empalmada polla, que no se escapo del castigo:

– ¡Para!, ¡para, por favor!, ¡que me estas destrozando!.- le rogo entonces el vikingo. Y como a TRALLAX le atraia muchisimo, dejo de atormentarle y colgando la punitiva herramienta en el cinturon:

– ¡Joder, ya era hora!.- comenzo a bajar el torturado cuerpo del chico. Y gozando de como fue tragado por la repugnante masa de orina y mierda. Disfruto aun mas con el apuro que este paso, cuando despues de agarrarse al borde de la balsa, por fin surgio de entre los excrementos:

– ¡Cabron, estas empalmado a mi costa!.- le recrimino muy humillado a TRALLAX. Pero callando:

– ¡Krom!.- despues de echarle un detenido vistazo al espectacular fisico de este:

– ¡Cojones, amo!, ¡que callado lo tenias!.- se percato por primera vez de un detalle, que no presentaba señal alguna de los recientes castigos que padecio:

– ¿Tu posees los dones del magico elixir, verdad amo!.- le pregunto entonces; mientras procedia a ajustarse el taparrabos en su cintura.

Pero TRALLAX, en esos momentos no estaba en disposicion de responderle. Se encontraba muy excitado, observando sus musculos cubiertos con tanta suciedad. Y marcando cipote debajo del pantalon:

– ¡Ven para aca nene!.- se acerco al rubio y bajandose la bragueta, se saco la verga:

– ¡Ufff!.- y pisandole la cabeza a SVEN, apoyandola en el suelo, le alzo el masculino culo:

– ¡Ahahahah!.- y metiendosela de golpe, le vejo a conciencia:

– ¡Ufff!, ¡ufff!, ¡ufff!.- iniciando un mete y saca que estaba volviendo loco de gusto al vikingo. Que girando la cabeza, con los ojos le rogaba que no parara. Y como TRALLAX queria complacerlo, (¡plass!):

– ¡Auk!, (¡plass!), ¡usss!.- arreandole fuertes tortas en tan duras nalgas, continuo follandolo:

– ¡Aggg!.- hasta que clavandosela por completo, entre convulsiones de tremendo placer:

– ¡Hummmm!.- descargo semen a espuertas.

Entonces fue, cuando despues de sacarle el nabo, por fin se digno en responderle:

– ¡Si, poseo los dones del elixir!. ¡Y a partir de ayer casi con toda seguridad tu tambien los poseas!.- y arreandole una fuerte mistra en el trasero, se puso de pie, observando complacido a SVEN, que acariciandose las nalgas para calmar el dolor, se quedo pensativo sin saber que decir por su aclaracion. Hasta que, poniendose tambien de pie:

– ¡Acompañame!.- junto a su amo, subio por la escalera y llegando a las cuadras:

– ¿Pensabas que habias acabado conmigo, amo!.- TRALLAX enjaezo a SVEN:

– ¡No perro, todavia te queda lo mas duro!.- y poniendole las mismas bridas, que este le puso el dia de ayer, le saco al exterior. Y enjaezandolo al pesado arado. Escucho al rubio que sobandose el paquete por encima del taparrabos, le pregunto:

– ¿Amo, piensas azotarme muy fuerte?.- respondiendole TRALLAX:

– ¡Sino tiras con fuerza si!.- y trotando el hermoso rubio por delante, tirando de los apeos de labranza. Alcanzaron la finca que tocaba hoy arar, y entrando en ella, TRALLAX clavo el hierro en el duro terreno, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Aggg!.- y restallando el latigo en el fuerte pecho del vikingo:

– ¡Arre mulo!.- lo obligo a obedecer. Y tirando este con todas sus fuerzas, empezo a sentir el cruel yugo de la esclavitud mas extrema. Porque al costarle tanto tirar del arado, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Umk!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡aug!.- su amo sin contemplaciones le latigueaba con violencia. Arrancandole trocitos de piel, consiguiendo poco a poco dejarsela en carne viva:

– ¡Por favor, amo!, ¡no me azotes tan fuerte!.- le rogo el dulce rubio, que sacando fuerza de flaqueza. Tiro con mas ganas del arado, pero como nada mas recorridos otros 200 mts, agotado bajo el ritmo:

– ¡Sooo!.- TRALLAX parando, se puso delante de el y cuadrando sus musculos, notandose el diferente grado de desarrollo muscular alcanzado por ambos, le pregunto:

– ¿Que pasa?. ¿Quieres ir mas despacio?.- cuando el dulce rubio abrazandose a la mole de musculos, le respondio:

– ¡No se, amo!, ¡la verdad es que me siento sin fuerzas, para labrar todo el campo!.- y enternecido TRALLAX por la inocente mirada del chiquillo, le participo:

– ¡Pues tienes que espabilar!, ¿Porque tu padre me ha ordenado que labres toda la pieza!.- le mintio. Pero SVEN haciendole pucheritos, le contesto:

– ¡Pero yo todavia soy muy joven amo!, ¡y me falta resistencia para conseguirlo!.- y admirando los desarrollados musculos que TRALLAX poseia, le rogo:

– ¡Amo, porque no ocupas tu mi lugar y asi acabaremos pronto la labranza!.- pero TRALLAX no estaba dispuesto a paralizar el proceso educativo y sonriendo le replico:

– ¡No chico, no!, ¡tu tienes que conocer lo duro que puede ser este mundo!.- y aunque estaba comprobando que SVEN no tenia fuerzas suficientes para acabar el trabajo. Tomo la determinacion de obligarle a que lo hiciera, aunque fuera a base de mas latigazos. Por tanto, volviendo a ponerse detras del arado:

– ¡Venga esclavo, continua tirando!.- alzando de nuevo el latigo, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Ug!, ¡perdon amo!.- castigo las fuertes espaldas del chico, que sintiendo el fuerte escozor que le produjo la lengua de cuero. Comenzo de nuevo a tirar del arado, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Ay!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡aggg!.- sacando su verdugo fuerzas de donde el no creia tener. Y es que, TRALLAX sabia por experiencia propia la resistencia que un esclavo podia alcanzar si se le sabia tratar, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Umk!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡aug!.- y poniendo ese potente cuerpo al limite de sus posibilidades. Consiguio que SVEN con un rictus de agonia, fuera avanzando, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Auf!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡humm!.- mientras sus musculos eran lacerados como unico premio. Hasta que trascurrido toda la mañana y despues de una corta parada para que el rubio y el se alimentaran:

– ¡Por favor TRALLAX, ponte tu!.- lo volvio a uncir al arado y comprendiendo el latino que sino le forzaba con mas latigazos no lo conseguiria. Sin pena alguna, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Umk!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡aggg!.- volvio a latiguearlo sin piedad. Forzando al chiquillo a contraer sus musculos. Y apretando con fuerza los dientes en el bocado, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Ahhh!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡uag!.- continuar tirando ya mas por orgullo que por otra cosa, y eso que estaba seguro que no lo conseguiria. Pero lo que no sabia SVEN es que cuando TRALLAX se proponia que un esclavo hiciera algo lo conseguia, (¡zumm!, ¡ssplass!):

– ¡Aug!, (¡zumm!, ¡ssplass!), ¡ufff!.- y asi fue, porque pasadas unas cinco horas mas. Cuando acababa de anochecer:

– ¡Por fin!.- SVEN cayendo en redondo al suelo acabo de labrar la pieza. Entonces TRALLAX enternecido:

– ¡Asi me gusta esclavo!.- lo desengancho de la labranza y cogiendolo en brazos le dio un beso, orgulloso de que su chiquillo lo hubiera conseguido.

CONTINUARA……

Autor: animal(trallax@hotmail.com)