una sesión Inesperada III
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por carnaza21.
“Me has echado de menos puta?” Aquella voz lo sacó de aquel estado de semisueño debido al agotamiento intentando soltarse de las ataduras que lo inmovilizaban. Ante él estaba de nuevo aquel tipo, desnudo, con su polla erecta en su mano mientras continuaba masturbándose.
Aún podía sentir su leche sobre su cara, seca, pegajosa, mientras notaba la suya propia dentro de su boca, cubierta con aquel consolador enormemente hinchado que le hacía doler su mandíbula. Aquel hombre se acercó a el por detrás y se inclinó sobre él. Podía sentir su aliento sobre su nuca. “¿sabes que zorra? Me pones muchísimo así vestidita y preparadita para mi. Estoy deseando romperte ese culito tragón que tienes jejeje” Se agitó, intentando desesperadamente soltarse mientras él se reía ante aquella escena. Después enganchó un collar a su cuello, y agarró el mismo con una cadena, de la que tiró con fuerza. Su cuello fuñe forzado hacia atrás, hasta donde las ataduras le permitían doblarse “voy a tener que domarte un poco me parece ¿verdad? Jajaja.
Esto te va a encantar zorra, no te preocupes” Después sintió como un bulto se acercaba a su culo. Intento gritar con desesperación, con todas sus fuerzas, pero no salía más que un ridículo susurro a través de su mordaza. De repente, aquella inmensa polla comenzó a taladrarlo. La sentía entrar y salir con fuerza, desgarrándole sin piedad, mientras se sacudía debido al dolor. Su nuevo dueño no paraba de follarlo, azotando su culo dejándolo rojo mientras tiraba con fuerza de la cadena, echándolo hacia atrás. El podía oír sus jadeos de placer, su boca casi pegada a su oído “así puta, muévete para mi.
Vamos zorra….mmmmm…..que rico…..! La polla cada vez le llegaba más adentro, sentía sus huevos chocar contra su culo. Tras varios largos minutos sintió como un líquido caliente inundaba su culo mientras su Amo gritaba de placer…. AAAAHhhhhhhh!!!! Así me gusta perra, eres excepcional! Después se sentó en el sofá, justo al lado de él y comenzó a ver la tele, mientras la leche goteaba por su cara, por su culo y podría sentirla dentro de su boca. “creo que tengo una buena idea” Dijo. Se acercó al mueble y copio un móvil. Comenzó a sacar fotos de su nueva zorrita. “Voy a mandárselas a mis amigos, a ver si alguno quiere pasarse y disfrutar un poco más, ¿te apetece?)” Cogió su mandíbula y agitó su cabeza asintiendo “sabía que te gustaría la idea.
Cuando te canses no tienes más que decírmelo, ¿de acuerdo? Para eso te enseñaron a hablar” Rompió en una terrible carcajada. “Vamos, dime: No quiero más Amo, por favor, y lo dejaré todo” Intentó hablar con todas sus fuerzas, mascullar, pero lo único que consiguió fue una serie de ruidos ininteligibles, y que su baba se cayera por las comisuras de sus labios, colgando sobre el suelo.
“Jajajaja, eres patética zorra. Creo que dentro de poco volveremos a darle utilidad a esa boca tan tragona” Después se apoyó contra el respaldo, puso los pies sobre la espalda de él, y comenzó a ver la televisión mientras el se lamentaba por haber caído en semejante engaño que no parecía tener fin
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