Aleida Mini Ninfomanita XI. Final.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sexigaleno.
Llegados sus 13 años y meses, Aleida ya toda una pre-adolecente y próxima a ingresar a la secundaria, la cual no es por nada, pero muy bonita, llenita, bien definida en su cuerpo y con ese atractivo que a nosotros los hombres nos atrae de las damas, qué es su trasero muy bien levantado y puntudo, del cual don José celaba, ya que a su edad no faltaba maestro o algún compañero que le insinuara alguna invitación o algo de acuerdo a su edad, sencillamente era un cromo de niñota, proporcionada con unas piernas torneadas y gruesas, que eran un atractivo extra que le daba, a su caminar casi sensual, ya sus labios dibujaban el carmín, que sin labial alguno se notaba sexi y era aún una súper-niñota, a la que don José seguía mimando y consintiéndole los gustos que a esa edad exigía Aleida.
Se dio la casualidad un día festivo, en el que no hubo clases y don José fue recomendado recibir un paquete escolar a temprana hora, en la escuela y obvio fue a esa misión, pero fue invitado por la madre de Aleida a desayunar en su casa, después de que haya concluido su encargo, y en ese lugar estaba su princesita, a la que después de ese opíparo desayuno, la invitó a venir a la capital a dejar ese paquete que horas antes había recibido, para entregarlo a la directora de ese plantel, por lo que su madre no objetó nada y le dio el permiso, para que acompañara a don José, ya en el transcurso del viaje de 35 kms, a la capital, una plática entre ellos se daba de la manera siguiente:
C.
–
Aleida hoy te ves muy bella, no te había visto esa faldita que traes, ¡te ves bien piernuda!
A.
–
¡Papi, no me digas eso!, me da pena, es una que me compraste y no me la había puesto.
C.
–
Ah, pues te ves muy bien, ¡me gusta verte así!, aparte de lo buenota que estás, me excitas de verte, te voy a dar tus nalgaditas hoy, ¿o, no quieres?
A.
–
Ay papi, ya sabes que sí, ¿quieres que te enseñe algo que me puse hace rato?
C.
–
¿A ver qué es?, muéstrame.
A.
–
¡Ay papi, espera que pasen los carros que vienen de frente!, ¿mira, te gustan estos.
.
.
.
?
C.
–
¡Ay mi niña, que hermosa pantaletita te pusiste hoy!, y ¡qué bonito se mete en tu rayita!
A.
–
¿Papi, te gusta cómo se me ve entonces?, ¿quieres que me la deje puesta o me la quito? Y ando sin calzones en el carro.
C.
–
Déjala puesta, y mejor siéntate en una pierna y te volteas hacía mí, y así te voy mirándote debajo de tu faldita, ¿ya me imagino que has de estar humedita, verdad?
A.
–
Sí, creo que sí, ¿ya me moje un poco, haber me siento?, uff, si papi, ya estoy mojadita, ¿quieres probar mi juguito, te doy con mis deditos?, ¡mientras manejas!, sí.
C.
–
A ver mi amor, dame miel del panalito, mmmm, que rico, mmmm, ¡me voy a parar tantito, mejor me los chupo directo de esa cosita traviesa!
A.
–
Ay papi, ¡si te dije una probadita!, ¿no que me comieras mi conejito?, ahh, papi, ahhh, que haces papi, ahhhh, papi, ahhhhh, aquí no papiii, nooo, ahhhhh, me da miedo que nos vayan a ver, papi, para, para, para, ahhhhhhhhhh, ahhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhh, ahhhhhh
C.
–
Nadie nos ve mi amor, aquí no pasa gente, es muy tranquilo, aummmm, ammmm, te como ammmm, aummmm, que rico botas néctar mi amor, aummmm, ammmmmmmmm, ammmm
A.
–
Papi, me haces tan.
.
.
, Que me vas hacer que me hagaaaaaaaaa, ahhhhhhh, ahhhhhhhhh, que rico me haces, papiiiii, ahhhhhh, ahhhhhhh, ´ya casi, ´ya casi, llega, me llegaaaaaaaaa, ahhhhhhhhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhhhhhhh, tómatelos papiiiii, ahhhhhhhhhhhhhhhh
C.
–
Aummmm, aummmm, vente chiquilla, vente en mi boca, aummmm, aummmm, aummmm
A.
–
Ya, yaa, me estoy.
.
.
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Ahhhhhhh, ahhhhhhhhh, haciendooooooo, mmmmm, uff, Papiiiiiiiiii para, paraa, paraaa, papiii, ahhhh, ahhhhhhh, me dejasteee casi desmayada papiii, ahh, ahh, ah
C.
–
A ver, ¡abre las piernas, me acomodo entre ellas un poco!, ahhh, ahhhh, ahhh, mmm, mm
A.
–
No papi, noo, aquí nooo, me da miedo, nooo, nooo, mejor en otro lado, ahhh, ahh, sí porfis, ayyy, me machucas mucho, ayyy, papi, ahhh, ahhh, mejor en otro lado, ahh, ahhh
C.
–
¿Hoy quiero convertirte en mujer ya?, vamos a dejar esto y nos vamos a estar solitos toda la tarde, ahhh, ahh, acomódate la ropita y vámonos.
Una vez que don José entregó el mentado paquete a su superior, pasó a comer con Aleida unos maricos y de ahí se fueron a comprar a una tienda de conveniencia y de ese lugar partieron al encuentro, en el que don José haría mujer a Aleida, quien desde los 10 años, ya la venía preparando y este día sería a sus 13 y meses, el momento de hacerla suya completamente, una vez en la habitación de un hotel, y cómo un preámbulo previo a lo que vendría se tomaron unas bebidas alcoholizadas del momento y el ambiente se prestó, para quedar enmarcado en el más sublime encuentro y esperado por ambos personajes.
C.
–
A ver mi niña, vamos a quitarte está ropita, para que no se te arrugue, ¡súbete a la cama!
A.
–
Sí papi, ¿quieres que juguemos como en la escuela?, ¡mira ya estoy mojadita otra vez!, ¿quieres comerme mi conejito jugoso?, o ¿qué me vas a hacer?
C.
–
Hoy vamos a jugar diferente, vas a ver, y te va a gustar mucho, ¡acuéstate!
A.
–
Si papi, ¡pero también tu acuéstate conmigo!, uy papi, me da escalofríos, ¿me vas a cubrir con las sabanas o así me quedo desnudita?
C.
–
Eso se verá, pero tu quédate así, ya voy contigo, deja poner esto aquí en esta mesita, ¡ya está!, ahora sí, ya voy contigo, mmm, mmmm, estas muy caliente del cuerpo, mmmm
A.
–
Auchhh papi, ¿Qué me haces?, nunca me has besado mi cuello, ni mis orejitas, ahhh, papi, ahhh, ¿quieres mis chichitas?, chúpalas, ahhhh, ahhhhhh, ahhhhh, así papi, asii, asii, ahh
C.
–
Mmmm, que ricas mis volcancitos duros, mmm, aummmmm, te mamo esos pezoncitos aummmm, me los como, aummmm, están bien macizos de carnita, aummmmm, como tus nalgas bien frondosas, aummmmm, ¡voltéate! Te voy a comer ese culito carnoso, aummmm, aummmm, aummmm
A.
–
Síii, papiiii, ahhh, ahhhh, que rico me comes, ahhhh, ahhhhhh, ¿qué te gusta más de mí, papi?, ahhhh, estoy muy mojada papi, ahhh, ahhhh, pero siento rico, ahhhh, ahhhh, ahhh
C.
–
Toda me gustas Aleida, ahhh, ahhhh, pero tu culo me excita de vértelo vestido con las falditas de la escuela, lo mueves muy rico, ahhh, ahhh, ahhhhh, y tu panochita gordita, ahhh, ahhhh, y tus pechitos, tus piernotas, toda, toda estas buenota, y eres aún una niña
A.
–
Ayy, papi, me gusta que me digas eso, ahhh, ahhhh, me calientas con oírte nada más, ahh y me mojo mássss, ahhhh, ahhhhh, ¿no quieres juguitos de mi conchita?, ahhh, ahhhhhhh
C.
–
Claro que sí quiero, espera, ahorita me trago todo lo de tu frutita, ahhh, te acuerdas de ese jarrito atolero que te bebiste con mi semen, ahhhh, pues hoy quiero que lo tomes, pero directo del pene, y me lo dejes bien exprimido, ahhhh, ahhhhhhh, ¿quieres?, ahhhh
A.
–
¿Papi, quieres que te chupe tu pito?, ahhh, ¿dime, eso quieres?, ahhhh, ahhhhhh, bueno, sí, ahhh, ¡me gusta cómo saben tus espermas!, ahhhh, ahhhhhhh, ¿pero también quiero que me los eches en mi gordita?, ahhhh, ahhhhhhh, un poquito, ahhhhhhhhhh, ahhhhhhh
C.
–
Seguro que hoy te llevaras mucho semen en tu cosita, ahhh, ahhhhh, pero sí quiero que me la chupes, anda, ahhh, ahhhhhh, como si fuera una paletita redonda o un helado, ahhh
A.
–
Siiii, siiiiiiiii, te mamo papi, te mamo, ahhhh, shurp, shurp, shurppp, mmmm, shurppp, mmm, pajjpi, shurppp, mmm, está saladitos, shurppp, shurp, mmm, me gujstan ahh, shurp, shurpppp, cof, cof, cof, ay papi, no me lo empujes muy adentro me ahogas, ahh, cof, cof, cof, shurp, shurppp, shurppp, mmm, aummmmm, aummmmm, ya papi, yaa, ahhhh, ahhhh
C.
–
Ahhh, ahhhh, que rico me mamas la verga, ahhh, ahhhhhh, eso es, así, asii, asii, ahhhhhh, ahhh, me voy a venir, ahhhh, ahhhhhhhh, tomaaaa, ahhh, trágatelos, ahhhhhhhh, ahhhhh,
A.
–
Ayy papiii, cof, cof, cof, me ahogan, cof, cof, cof, son muchos mocos, ahhh, cof, cof, cof, ya papi, ya me los tragué, ahhh, ahhh, ¿ahora tú me la vas a chupar mi cosita?, ahhh, ahhhhh
C.
–
Sí un poco de juguitos, ahhh, ahh, mmmm, aummmmm, slurp, slurp, slurp, ahhh, ahhhh, que ricos, me mojan toda la cara, ahhhh, haber voy a hacerte caminito, ahhhh, al ombliguito, ahhh, ¿te gusta la lengüita?, ahora voy subiendo, ahhh, a tus pezoncitos, ahhhh, ahhh, a tus pechos aummmmm, aummmmm, ¡abre las piernas!, ahhh, y sigo al cuellito, aummmmm, y sigo, a una orejita, aummmmm, y ahora a la otra orejita, aummmm, y bajo a un pezoncito, aummmmm
A.
–
Ayy, papi ahhh, ahhhhhhhhh, me vas a hacer que ‘me´´, me’ haga de mi pipí, ahhhh, ahhhh, ¿papi me vas a poner tu coso, o lo vas a meter de la cabecita?, ahhh, ahhhh, como me haces siempre, ahhhh, ahhhhhhhh, uyyy papi está bien duro, ahhhh, ahhhhh, ayyyyyyy
C.
–
Sí mi amor esta duro, porque quiere entrar en ese nidito caliente que tienes, ahhhh, haber deja acomodártelo bien, ¡mira cómo te hago brochita!, ahhh, ahhhh, que calientita estás,
A.
–
Síii, papi, siiii, ¡pónmelo adentro, la cabecita!, ahhh, ahhhh, ¡y te la exprimo, como te gusta!, ahhh, ahhhh, ¿ya entró?, ahhh, ahhhhhh, despacito, papi, despacitooo, ahhh, ahhhhh, ahhhh, pa’, paa’, papiiiiiiii’, arghhhhhhhhhh, arghhhhhhhh, ayyyyyyyyy, ayyyy, dueleeee, para, papiiii, para, ayyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy
C.
–
Ya pasó mi amor, ahhh, ya pasó, ahhh, ahhhh, ya entre en ti, ahhhh, ahhhhh, ahhhhhhhh
A.
–
Ayyyy, papi, ¿me abriste?, ayyy, que dolor, ayyyy, ¿me rompiste?, ayyyyy, ayyyyyyyyyyy, sácamelo, ayyyy, lastimaaaa, ayyyy, ayyyyyyyyy, ayyyyyyyyyyyyyy, papiiii, ayyyyyyyyyyy
C.
–
Ya mi amor, ¡tranquila, no te muevas, estate quietita!, vas a ver que el dolor pasa, en unos minutos, ahh, ahhh, yo también no me muevo, así me quedo, hasta que se te pasé, ahhhh
A.
–
Ayyyy, papiiii, sentí que me tronó algo, en mi hoyito ayyyyy, ayyyyyy, ¿y se pasa el dolor?, ayyyy, me arde, me ardee, ayyyy, ayyyyy, cómo que me baja algo calientito, ayyyy, ayyyyy
C.
–
Sí mi amor, ahhh, te trono tu telita, ¡bueno yo te la troné con mi pene!, pero no te pongas triste, ¡ya sabías que tanto como tú y como yo esperábamos este momento!, y llegó, ahhh
A.
–
Síii, ayyy, papiiii, pero duelee, ayyyy, ¡ya se me está pasando!, ayyyy, ¡ya duele y arde menos!, ayyy, hasta me hiciste llorar papiii, ayyy, ayyyy, ¿a ver tiento, que tanto me metiste de tu palo, ayyy, uyyy, ¿papi, sí sólo es un pedacito?, ayyyyy, ¿y me vas a meter todo?, ayyyy, me vas a matar papi, si con eso me haces gritar, imagínate todo dentro de mi conchita, ayyyy, ya noo, ya nooo, hasta ahí, no más papi, ayyyy, ayyyyyy, ¿mejor ya no?
C.
–
Ya vez, ya está pasando ese dolorcito de tu primera vez, ya de aquí en adelante, ya no te dolerá, y vas a sentir rico, y no vas a querer que te saque el palo de tu conchita, ahhh, ahh, pero estate quieta y no hagas por moverte, ahhhh, ahhhhhhh, hasta que te diga, que ya te muevas de a poquito, y yo también suavemente, hasta que te comas un buen pedacito de mi carne, ahhhh, ahhhhhhhhh, además tienes que llevarte mi leche en esa panochita, ahh
A.
–
¡Ayyy, sii papiii, síii!, ¿no papi, la leche dentro de mi noo?, me vas a preñar, pa’, no lo hagas, noo, ayyy, mejor afuerita, ayyy, no seas malo, papi, ¡no quiero bebé ahora!, noo
C.
–
Cálmate mi amor, no pasa nada, estas en días que no existe riego de que quedes preñada, apenas pasó tu menstruación hace tres días, y quiero que sientas y tengas mi esperma en tu vaginita, hasta que ya no le salga nada y veraz que te vas a sentir una mujercita más rica
A.
–
Ayyy, sii, papi, pero ¡ya no, me duele mi conchita!, ¡ya se me pasó el dolor!, siento ahora unas cosquillitas en mi lentejita, como que me brinca, ahh, ahhh, ¿ya me puedo mover?
C.
–
Sí ya sentí que ya no te molesta, ¡ya dejó de apretar tu vaginita, mi miembro!, pero no, quédate así quietita, yo te lo haré, despacito y al ratito tú lo haces solita, ahora espera, ahhh, ahhhhhhh, que apretadita estás mi amor, ahhhh, ahhhhhhhh, parece una ventosa que me jala, para adentro, ahhhh, ahhhhhhhh, ¿te está gustando como te hago?, ahhhhh
A.
–
Ayyy, sii, papiii, ahhhh, ahhhh, ya no duele ahhh, ¿vas a meter más de tu carne en mi hoyito?, ahhh, ahhhhhhh, ayyyy, ayyyyyyyyy, despacitooo, despacitooooooo, ouchhh
C.
–
Sí mi amor, te voy a meter otro cachito, ahhhhh, ahhhhh, alza tus piernas a mí cintura y me jalas con ellas, hacia ti, ahhhh, ahhhh, eso esss, ahhhh, ahhhh, tomaaaa, tomaaaa, ahh
A.
–
Ayyy, ayyyy, despacitooo, ayyyyyy, me estas abriendo mucho Papiiiiiiiiii, ayyyyyyyyyyyyyy, me rompesss, ayyyyyyyyyyy, ya nooo, ya noooo, sacamelooo, sacameloooo, ayyyyyyyyyyy
C.
–
Ya mi amor, ya pasó ahhhh, ahhhh, ya hasta ahí no ‘mas, estas muy cerradita, ahhh, ahhh,
A.
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Sii, papiii, me rompiste mi cosita, ayyy, snif, snif, me duele otra vez, ayyy, buuuu, buuuu, pero siento snif, algo, snif, que me gusta, ayyy, ayyyy, papi, muévete despacitooo, ahhhh
Y así se fue dando esa desvirgación muy intensa por parte de los dos y con movimientos suaves de ambas pelvis, y yendo cada vez más e internando el aparato sexual masculino y horadando el interior de esa vaginita en crecimiento, misma que acepto perfecto ese acoplamiento que se veía desproporcionado desde cualquier ángulo que se mirara, sólo los ayes de placer y los intensos gemidos, así como esa habitación fueron testigos en ese momento de una penetración calmada, suave y muy dulce, la misma que duró el tiempo suficiente, para que don José disfrutara la desvirgación de esa pre-adolecente, a quien le vertió dos buenas dosis espermáticas en el uterito de Aleida, quien las acepto de buena manera y también ella alcanzo, según sus recuerdos alrededor de ocho orgasmitos intensos, que de manera simultánea los cuales, se venían en seguidilla, mismos que hasta la sabana de ese colchón quedó espesamente mojada y ella junto con don José estaban bañados de esa fluidez que emanaba Aleida desde el interior de ella misma, todo pasó como un sueño, ya que después de toda esa manifestación ardiente, ambos se abrazaron mutuamente, para después continuar esa relación misma que con el tiempo, se fue degradando poco a poco, hasta que Aleida dejó de buscar a don José, ya que estaba ella en secundaria y sus horarios ya no eran compatibles, pero ella se daba auto-placer sola y don José siguió trabajando normalmente, pero en su casa tenía a su otra chica que cumpliría sus quince primaveras y ella lo satisfacía los fines de semana de sus necesidades como hombre, pero esa es otra historia para otro relato el de Sofía, próximamente.
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F I N.
Bien amigos, mi comunidad, espero que este relato el cual fue escrito por un servidor, haya sido del placer de todos, un saludo a todos deja mi estimada amiga Aleida, quien prontamente se dará de alta en esta comunidad y así ustedes puedan platicar con ella en su perfil y quien agradece las distinciones que fue objeto en el transcurso de su relato.
Hasta Pronto.
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