Con mi vecino de 60 años I
La simple puesta de una inyección, me llevó a coger con mi vecino de 60 años..
Esto me paso a finales del 1983, 3 meses después de que a mi vecino lo corrió su papá. Cuando nos tenían que poner inyecciones, mi mamá nos llevaba con una vecina que era enfermera, cuando no llegaba a estar nos llevaba con don paco, era un vecino que vivía a la mitad de la cuadra, era viudo tenía como 60 años, vivía solo. Tenía solo un hijo que lo iba a ver cada fin de semana, de piel blanca, un poco gordo, medía como 1.70 cm., todo el cabello blanco y se veía buena gente.
Como me enfermaba mucho de la garganta, me mandaron un tratamiento de inyecciones, tenía que ponerme cada 7 días una inyección por dos meses, ya llevaba 6 inyecciones, mi mamá me llevaba y así aprovechaba para platicar con la vecina y yo jugaba un rato con su hijo que tenía como 6 años, pero nos avisó que la siguiente semana salía de vacaciones y no iba a estar, mi mamá le dijo que no había problemas que iríamos con don paco, como mi mamá tenía cosas que hacer el día que me tocaba ir a inyectarme, me mando solo.
Toque el timbre y después de un rato salió el vecino.
Buenas tarde don Paco, me manda mi mamá para ver si me podía inyectar.
Si claro, deja te abro la puerta de la calle.
¿Por qué cierra la puerta don paco?
Por si un ratero se quiere meter, ya estoy grande y no oigo bien, mejor prevengo esa situación.
Ah bueno, me abrió y me dejo pasar, su casa olía a humedad y estaba casi a obscuras y tenía muchas cosas en sus vitrinas, algo de polvo, fue por alcohol y algodón, y le di la caja de la inyección, empezó a prepararla.
Estas son de las que duelen mucho.
Si ya me pusieron 7 y me faltan 1, le mentí, porque luego me dejaba una bola, y me dolía.
No te preocupes te la voy a poner despacio y te sobo mucho para que no te duela, termino de prepararla.
Vente a la recámara para que te la ponga.
Llegamos a la recámara y me dejo pasar, bájate los pantalones.
Me baje solo un poco, como con la vecina y me acosté.
No bájatelos más, hasta las rodillas, es para que te sobe mejor y no te deje bola.
Me levante un poco y me baje más los pantalones y me volví acomodar, con la mano que tenía libre me empezó agarrar las dos nalgas y a sobármelas, como viendo en cual me iba a inyectar.
Es que un lado es más sensible que el otro y duele menos, se pasó como dos min. mientras elegía en cual nalga me inyectaba yo me empecé a excitar un poco, ya tenía un poco más de 3 meses, que nadie me tocaba así. Por fin se decidió y me puso la inyección, como me puse duro, se me formo una bola.
Ya vez te pusiste duro y te salió una bola, pero no te preocupes ahorita te sobo bien y se te quita.
Me puso el algodón en donde me inyecto y me empezó a masajear lento, yo con este masaje me relaje, y en ese momento me empezó a sobar con sus dos manos.
Y me dijo, es para que no te quede nada de bola.
Yo no le dije nada, solo gemí un poco, me sobaba desde arriba de las nalgas en forma circular y cuando sus dedos pulgares se juntaban en medio de mis nalgas trataba de empujarlos hacía mi anito, pero no paso de ahí, a mí a esa hora me llegó toda clase de recuerdos con mi vecino y me empecé a excitar más, él se dio cuenta de esto porque sin poder controlar mi culo, se empezó a mover un poco.
Ya está, ya se te quito la bola, ya puedes pararte.
Salió de la habitación y le vi un pequeño bulto en los pantalones, y se fue para la sala, cuando me pare me di cuenta que había mojado el cobertor con mis líquidos pre seminales, me busque en las bolsas de los pantalones algún papel, pero no tenía ningún, para medio limpiar y no se diera cuenta, limpie lo mejor que pude con mi mano y me fui a la sala.
Cuando le debo don paco.
Espérame tantito, se fue para la recamara, regreso y me dijo, nada, yo me puse rojo porque note que se había dado cuenta de que había ensuciado el cobertor.
Es que mi mamá me dio 10 pesos para que se los diera.
No te preocupes y gástatelos, pero no le digas a tu madre, vienes la otra semana para que te ponga la otra inyección.
Cuando me lo dijo, vi en sus ojos, aquella lujuria que veía en los ojos de mí vecino.
Sí, vengo la otra semana.
Bueno te espero, si quieres que te dé un masaje como el de hoy, invéntale a tu mamá algo para que tengamos más tiempo y me guiño el ojo.
Salió para abrirme la puerta y me salí corriendo y con el corazón latiéndome muy rápido, y con una sensación de excitación tremenda.
Llegue a mi casa y me metí al baño para masturbarme, salí y mi mamá me dijo.
Por qué te tardaste.
Es que me estaba enseñando unas fotos don paco, de cuando su mujer y él eran más jóvenes, ya vez que casi no sale, oye me dijo que te pidiera permiso para ver si me podía quedar a cenar la otra semana después de la inyección.
Pero ya regresa la vecina la otra semana.
Si ya sé, pero don paco está siempre soló.
Bueno si tú quieres adelante.
Como en ese tiempo (los 80’s), todos los vecinos eran de confianza o no había tanta inseguridad como ahora, o no se sabía, pues no se veía mal que yo me quedara solo con mi vecino. Toda la semana me la pase pensando en cómo sería nuestro encuentro y como tendría su verga, si conocería otras cosas, varias veces me tuve que masturbar pensando en cómo me cogería.
Por fin llego el día de la inyección, me la pase casi sin comer, me metí a bañar y solo me puse un pants y nada de ropa interior y una playera, como a las 6:00 de la tarde, le dije a mi mamá, que me iba a inyectarme con don paco.
Trata de no molestar mucho a don paco y no tardes mucho, vete con cuidado.
Llegue y toque, casi inmediatamente abrió don paco y vino abrirme.
Qué bueno que pudiste venir, si te vas a quedar un rato más.
Si le dije a mi mamá que me había invitado, a cenar.
Bueno pásate.
Entramos a la casa, y le di la inyección, se notaba un poco nervioso, le temblaban un poco las manos y estaba sudando un poco.
Ya está lista, vamos al cuarto.
Como ya sabía el camino me adelante, y le pregunte hasta donde me bajo los pantalones.
Hasta las rodillas, como la otra vez.
Agarre el pants y me los baje hasta la rodilla y me acosté en la cama, rápido me inyecto, pero con toda intención me puse duro para que se me hiciera la bola.
No te preocupes ahorita rápido te la quito.
Me empezó agarrar con sus dos manos las nalgas, con desesperación, y él empezó a gemir y me dijo.
Oye, mejor te quitas el pantalón, para que te pueda dar mejor el masaje y no se vaya a ensuciar, se paró.
Bueno, me gire y lo vi a los ojos, me los quito yo o usted me los quita.
No te preocupes te los quito yo, agarro el elástico de los pants, y me los empezó a bajar, y me comento no traes calzón.
Me reí un poco y le dije, es que se me olvido.
Me los quito, los dejo a un lado y fue para el tocador y agarro un aceite de bebé.
Con este aceite se quita mejor las bolas que dejan las inyecciones, se echó en las manos y empezó a masajearme.
En ese momento me di cuenta que sus manos eran más suaves que las de mi vecino, me imagino que como ya no trabajaba, por eso eran más suaves, pero sus dedos si eran muy gordos.
Me voy a subir a la cama, porque ya me canse de agacharme tanto, cierra bien las piernas, para que queden en medio de mí y no te lastime.
Cerré las piernas y subí un poco mis nalgas para que se excitara más. Así está bien.
Me dijo perfecto, no te vayas a molestar pero estas bien nalgoncito.
No supe que decir, después de un rato le dije gracias, empezó otra vez con el masaje, pero ya era más intenso, con el aceite resbalaban más sus manos en mí, empezó a intercalar sus manos y cuando el dedo pulgar de cualquier mano pasaba por el nacimiento de mis nalgas lo clavaba más y su dedo me tocaba mi anito, yo en ese momento estaba a cien, empecé a gemir hummm, hummm, me relaje y me deje caer bien sobre la cama.
Te gusta lo que te hago bebé.
Si me gusta mucho.
Quieres que pare o le seguimos.
No, no pare siga don paco, y empecé a mover mis caderas en círculos pequeños.
En ese momento pasaba su dedo pulgar por mi anito y lo dejo ahí intentando meterlo.
Yo apreté un poco para que notara, que era mi primera vez que hacía esto, y no pensara que era un maricon.
Estas muy apretadito, ¿nunca habías jugado con nadie así?
Le dije que no, que era la primera vez.
Bueno tendré que ocupar otro líquido para que resbale mejor.
Se paró prendió las luces y fue por un trapo, me abrió las nalgas y me limpio lo mejor que pudo y tiro el trapo, se hinco en el suelo y con sus manos me jalo de las piernas para que quedara mi culo en la orilla de la cama, con sus grandes manos me abrió las nalgas y se empezó a comer mi culo, yo di un gritito de gusto, eso, así me gusta más, humm, humm, sentía como su baba resbalaba por mis huevos y me dejaba todo húmedo, de la excitación se me olvido apretar mi esfínter y la punta de su lengua empezó a entrar.
Ya está listo dijo, puso su dedo medio en la entrada de mi ano, y empezó a empujar, yo gemí más fuerte como si me doliera.
Me duele, le dije.
Relájate un poco y deja que entre poquito, y ya no te dolerá.
Afloje un poco para que entrara un poco de su dedo, y se quedó quieto.
Dime cuando ya no sientas tanto dolor, ya veraz que cuando entre todo mi dedo en ti lo empezaras a gozar.
Siga metiéndolo, afloje otro poco, hasta que llego a la mitad, le dije pare.
Ya falta poco, solo otro poco más, él ya estaba todo sudado y se le cortaba el aliento.
Bueno ya métamelo todo, deje que entrara todo y apreté otra vez, se quedó quieto como un minuto, y empezó con el mete y saca de forma lento, y después ya más rápido, y sentía su dedo gordo dentro de mí, paro un momento y trato de meter otro dedo yo deje que lo hiciera ya estaba muy caliente y no me importo que supiera que no era mi primera vez, le costó un poco de trabajo porque tenía tiempo que yo no me metía nada.
Guau estas bien apretadito, pero mira ya como resbalan mis dedos, me puse boca arriba y me ayudo a levantarme con la otra mano.
Alza las piernas y apóyate en la orilla y ábrelas lo más que puedas, era la primera vez que veía entrar algo en mi culo, veía como entraban sus dos dedos hasta el fondo y cuando los sacaba se veía que mi anito también salía poquito, eso me calentó más, instintivamente como pude baje mi mano para poder tocarle la verga, pero no la sentía muy grande.
Me la puede enseñar.
Es que es muy pequeña.
No me importa la quiero ver, yo lo que quería era que me la metiera ya, me saco los dos dedos, se limpió un poco con el cobertor, se paró con dificultad, se empezó a desabrochar el cinturón y luego el pantalón se le cayó, tenía unos calzones grandotes y una gran barriga que tapaba un poco su verga, ya estaba toda húmeda por sus líquidos pre seminales, pero estaba toda flácida, se me quedo viendo un poco apenado, yo me pare.
Se la puedo tocar.
Si tú quieres.
Se la empecé a tocar por abajo, y poco a poco empezó a pararse, pero como su barriga me estorbaba, le dije.
Porque mejor no se acuesta, para ver si es más fácil, se sentó en la orilla de la cama, abrió las piernas y se dejó caer, yo me puse entre sus piernas hincado y si fue más fácil tratar de masturbarlo, se le empezó a parar inmediatamente, pero de verdad era pequeña, como de 12 cm. de largo, pero lo compensaba lo ancho que era, como de 6 cm., yo subía y bajaba su prepucio de forma rápida.
Si quieres le puedes dar un besito.
Bueno a ver como sabe, le empecé a dar solo besitos, uno tras otro, y esto hizo que se excitara más, pensaba que yo no sabía cómo mamar una verga.
Me dijo mételo en tu boca y chúpalo como si fuera una tutsi pop, pero no uses para nada los dientes.
Pero no creo que entre en mi boca.
Solo inténtalo.
Me costó un poquito de trabajo, pero nada extraordinario, y se la empecé a mamar de forma lenta.
Si bebé, sigue sigue, hummm, que rica boquita tienes.
Sin que se diera cuenta me puse en cuclillas y me empecé a meter 3 dedos, después de 5 min. mamándosela y meterme los dedos ya quería ver si entraría su verga en mi culo, así que me pare.
Le dije tratare de meterme toda su verga en mi boca, para que me viera haciendo esto y se calentara más.
Si bebé cómetela toda.
Se levantó un poco apoyándose en sus codos, y empecé con la tarea, la verdad fue facíl si tenía que abrir lo más que podía mi boca, pero rápido me entro no era comparable con los 18 cm. de mi vecino, llegaba hasta su tronco y la sacaba toda completamente, el sabor de su pre semen era diferente al de mi vecino, tenía un sabor más fuerte, se lo empecé hacer más rápido; me detuvo.
Te puedo meterte mi verga por tu culo.
Y si me lastima, es muy grande, parecía que se calentaba más si me hacía el inocente.
No, te voy a cuidar muy bien, ándale, déjame intentarlo.
Bueno pero tenga mucho cuidado.
Se levantó de la cama y me dijo súbete a la cama y te recargas en tus rodillas y tus manos (de perrito), me jalo a la orilla, pero con su barriga y mis nalgas, no llegaba su verga a mí ano, se desesperó un poco, se acostó él boca arriba y me trato de subirme a él, pero paso lo mismo su gran barriga nos estorbaba, aparte su erección empezó a bajar, se quedó como en shock.
Le dije cálmese, y mi mano fue a su verga para masturbarlo un poco y que se levantara su verga otra vez, lo bueno fue que si se le paro otra vez la verga, porque no me iba a quedar, sin meterme esa verga tan ancha.
Mire yo me pongo en la orilla de la cama, y usted trae unos cojines o almohadas para que su verga quede a la altura de mi culo, me acuesto y levanto mis piernas para que solo quede mi culo en la orilla, parecía poseído rápido se paró de la cama tiro las almohadas, yo me acosté como le había dicho y quedamos perfectos, una parte de su barriga quedo encima de mí, como pudo, acomodo su verga en la entrada de mi ano y empezó a empujar al inicio la entrada de su cabeza no me dolió, pero al llegar al final de su capullo empezaron algunos problemas, porque si era muy grande y tenía 3 meses sin meterme nada.
Esperece tantito mientras me acostumbro.
Agarro como pudo el aceite de bebé se echó en la mano me saco la verga y se la lleno de aceite, y me empezó a meter su dedos otra vez, primero dos y luego intento con 3, esto logro que me calentara y me dilatara mejor, otra vez se acomodó en la posición ideal y empezó con mete y saca lento y sin pasar de donde me dolía.
Métamelo poco a poco, quería sentirme partido por esa verga tan ancha, sentí como se abría mi ano, yo pujaba como si quisiera cagar, y cuando dejaba de pujar entraba un poco más, nos tardamos como 5 min. para tenerla toda adentro.
Espere un rato y le dije ya muévase, comenzó el movimiento lento solo sacaba poco y me la volvía a meter, después del dolor inicial me regreso la calentura, y baje mi mano para sentir como me entraba esa verga, esto duro bastante tiempo en el cual, don paco me decía.
Estas bien apretadito, siento como si quisieras comerte toda mi verga.
Y si, tenía contracciones en el culo, como las últimas veces con mi vecino, empecé a gemir duro y él se calentó por esto y me empezó a dar lo más duro que pudo, y se vino, dentro de mí, yo creo que tenía años sin coger porque me dejo lleno de semen, hasta se me salió del culo, todavía con él adentro.
Me la saco, y me dijo dame tú mano, me levanto un poco, me apoye con mi otra mano en la cama, me junto los dedos y me los empezó a meter en mi culo, entraban casi hasta mis nudillos, le dije no tiene un espejo para verme, como pudo se paró, temblaba al caminar y fue al baño por el espejo, me lo puso al nivel del culo y si me sorprendió lo abierto que lo tenía.
Yo creo vio mi cara de preocupación, y me dijo no te preocupes en poco tiempo volverá a su tamaño, si quieres báñate para que se te quite el olor a sexo, y descanses un poco, pero no te mojes el cabello, me quite los tenis los calcetines y la playera, y me metí a bañar rápido, salí y me dio una toalla, te prepare un sándwich para que te lo comas y leche, porque ya son las 7:30 pm. no había sentido que nos tardáramos tanto, rápido me comí todo, y le dije.
Gracias por todo.
No gracias a ti, espero que lo repitamos otra vez, cuando quieras ven a mi casa.
Si me recupero vengo la otra semana.
Bueno te estaré esperando, me abrió la puerta y trate de correr, pero si sentí un pequeño molestar, y mejor camine.
Llegue a mi casa y mi mamá pregunto.
Como te fue.
Bien, don paco me enseño un juego nuevo, pero luego te explico cómo era, porque tengo mucho sueño, me despedí y me fui a mi cuarto, todavía pude meter la punta de mis 5 dedos en mi culo y me masturbe.
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