DESPERTAR AL SEXO CON MI TIA
Decidido me acerque, la abrace y la volví a besar y en medio de las caricias nuestras toallas cayeron al piso y quedamos los dos desnudos..
Finalmente y gracias a la lectura de los relatos de sexo sin tabú he decidido escribir lo que me aconteció hace un tiempo. Con motivo del traslado de la familia de un tío a otra ciudad, la esposa me invito a que los acompañara en el proceso de la mudanza, con ella desde muy niño siempre existió mucha cercanía, cuando ella se caso yo apenas tenía un año y desde siempre fue muy cariñosa y especial conmigo por eso la confianza que siempre existió, para la época de los hechos ella recién había cumplido treinta y tres años y mi tío mucho mayor que ella ya contaba cuarenta años.
Cuando llegamos a la ciudad donde habían trasladado a mi tío por su trabajo, el proceso del trasteo lo atendimos prácticamente su esposa y yo, porque el se mantenía muy ocupado, salía muy temprano y llegaba tarde en la noche. Sus dos hijos de ocho y seis años llegaron directo al nuevo colegio, por lo cual la mayor parte del tiempo yo la pasaba solo con la esposa de mi tío.
Al cuarto día ya todo estaba organizado, por eso yo acompañaba a Julia la esposa de mi tío a hacer algunas diligencias, pero luego cuando regresábamos nos quedaba mucho tiempo libre y una tarde después de la merienda ella estaba acostada en su cama matrimonial viendo televisión y yo me senté a su lado y comencé a hacerle bromas y a juguetear con las manos y una y otra cosa nos fue llevando a mayores roces y sin saber cómo, nuestras mejillas se pegaron, luego se deslizaron y terminamos besándonos apasionadamente. Al detenernos espere una recriminación y que ella estuviera enojada, a pesar de haber sentido su aceptación, entonces lo único que recibí fue una sonrisa, por eso me acerque de nuevo para volverla a besar. Y continuamos así durante varios minutos hasta que ella decidió parar y me dijo… si continuamos, cuando llegue tu tío en la noche no tendremos una explicación sobre el porqué de nuestros labios pelados. Reímos y a continuación me fui a mi habitación a ver televisión pero no podía olvidar lo acontecido y miraba la pantalla sin entender nada.
Me quede dormido y desperté a media noche cuando todo estaba en silencio y de allí en adelante la pase despierto. En la mañana solo cuando mi tío y los niños se fueron me levante y fui a la cocina a tomar agua y allí estaba Julia, me miro y se sonrió. Me pregunto qué tal noche había pasado, le dije que me había despertado a media noche y no me había podido volver a dormir pensando en lo sucedido el día anterior.
Me dijo… no seas bobito, no ha pasado nada, entiendo que tus hormonas están alborotadas y si te puedo ayudar a calmarlas, lo haré. Entendí que ella estaba dispuesta a continuar en secreto. Desayunamos y hablamos de otras cosas y al final ambos nos fuimos a bañar y como ansiaba verla desnuda me las ingenie para entrar a su habitación con cualquier disculpa y la encontré envuelta en una toalla anudada a su pecho y yo igual pero anudada a nivel de la cintura. Decidido me acerque, la abrace y la volví a besar y en medio de las caricias nuestras toallas cayeron al piso y quedamos los dos desnudos.
No parábamos de besarnos y mi verga se irguió y pronto estaba en medio de sus muslos y más tarde rozaba su vagina, no me resistí y baje mi mano a su sexo y lo encontré muy lubricado. Le dije… estas excitada, me respondió claro no soy de piedra. Quería penetrarla pero lo dude al pensar que la pudiera embarazar, pero ella dirigió mi verga a su vagina. Le dije que podía quedar embarazada, me dijo… No, no hay problema sigue adelante. Entonces mi verga se deslizo dentro de su vagina y pronto nuestras pelvis estaban pegadas al igual que nuestros labios.
Como no fue cómodo tener sexo de pie la recosté en su cama y me subí sobre ella y mi verga volvió a penetrarla, ella me miraba sonriente y pronto estábamos moviéndonos como locos y nuestras respiraciones excitadas expresaban todo lo que estaba aconteciendo entre nosotros. Yo esperaba que ella alcanzara su orgasmo para yo correrme y pensé que no aguantaría porque me sentia al límite, afortunadamente escuche su orgasmo y aproveche para dejar toda mi carga en su interior. Nos quedamos inmóviles y pegados hasta que mi verga se fue recogiendo, cuando estábamos en este proceso me dijo… estas muy bien dotado, no siempre llego tan rápido al orgasmo, me gusto tenerte dentro de mí. Por ahora ya debemos terminar. Yo quede muy satisfecho la vagina de Julia una maravilla, apretadita, se notaba que tenía poco uso.
Después ella me confirmaría que mi tío la buscaba de pronto una vez al mes y a ella le agradaba hacerlo con más frecuencia, por eso lamentaría cuando yo regresara a mi casa. Durante los días siguientes y hasta mi partida todos los días cogimos como locos y hasta dos veces en el día, ella probo por primera vez follar por el culo y le gusto tanto que ella misma me lo pedía.
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