La Gordibuena Paty
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
El pueblo al que fuimos… Es un pueblo muy pintoresco llamado "Cerro Alto". La idea principal de ir al pueblo, era visitar y conocer a la familia de Adrián pues mi mama pronto se casara con él. Allí conocimos a sus papas, sus 3 hermanas, sus cuñados y sobrinos.
Cuando llegamos, nos presentaron a la familia y ellos ya habían organizado una parrillada en el rio. En el rio conocimos más a la familia… Cuando nos metimos al rio mi hermana y yo, no tuvimos mucho contacto con los sobrinos de Adrián, pues son niños de entre 5 y 10 años. Así que solo nos sentamos a platicar y a disfrutar del agua. Pero al estar en el rio me di cuenta del gigantesco tamaño de las tetas de la hermana menor de Adrián, Paty… ella es una total y completa "Gordi Buena" Ósea, gorda pero con unas tetas gigantescas, un culo, unas caderas y unas piernas enormes.
Obviamente al percatarme de su delicioso cuerpo, llamo mucho mi atención y no pude dejar de verla.
Pero no era algo qué a mí me llamara la atención o no al menos hasta antes de ese día… Ella es una solterona de 34 años, piel blanca, cabello negro, largo y lacio, ojos verdes y como ya les dije. "Gordi buena". Aparte, traía puesto un short súper corto y pegado y una playera blanca qué le quedaba muy pegada.
Al meterse al rio, me di cuenta que no traía brassiere, pues sus pezones se marcaban claramente… yo no pude dejar de verla y en especial a sus gigantescas tetas. En ese momento yo no sabía si la miraba por simple morbo o por qué realmente me excitaba y la veía por lujuria.
Pero por alguna razón… Yo no podía dejar de mirarla, aparte, sus piernas ¡¡eran preciosas!! Pues a pesar de ser gorda, no tenía celulitis ni nada, ¡¡eran perfectamente lisas!!
Después de un rato, mi hermana se acercó a mí.
Y me dijo: Ya deja de ver a Paty… Te la vas a acabar…
Yo le respondí: ¿A la Gordita? ¡No manches…! La veo por qué… ¿Qué onda con su ropa?
Y ella me contesto: ¡Ay ajaaa…! Si ya me di cuenta como la vez…
Yo le pregunté: ¿Cómo?
Y me contesto: Pues si te preocupas por su ropa… ¡Pero por quitársela…!
Yo me sonroje y le dije a mi hermana: ¡Claro que no! ¡No es cierto! Y ella solo se rio…
Después de tanto mirarla, ella se dio cuenta que la miraba, pero no hiso nada… Y yo tampoco… Solo la seguí mirando, a pesar de ella se había dado cuenta de cómo la miraba.
Era un juego de miradas, que a mí… ¡Me excitaba mucho!
Ella dio el primer paso y me sonrió. Yo le conteste la sonrisa…
Después ella se acercó a mí y me pregunto: ¿Quieres una cerveza?
Y yo le conteste: ¡No gracias!
Entonces me pregunto: ¿No tomas?
Yo respondí: Si… Pero delante de mi mama, no.
Y me dijo: Ahh… Pues si… Después me pregunto: Como vez… ¿Te gusta el rio?
Yo conteste: ¡Si! Esta bonito… pero está muy bajito… En ese momento ella se sentó a lado de mí y comenzamos a platicar de muchas cosas… Claro sin mucha importancia…
Hasta qué le pregunte: ¿Por aquí no hay una zona más onda?
Ella contesto: Sí… Más para allá, pero nos ponemos por aquí por mis sobrinos…
Yo conteste: Ahhh… ok
Y pregunto: ¿Tú sabes nadar bien?
Yo conteste: Sí…
Entonces me dijo: Pues si quieres vamos a la zona más onda… Yo te acompaño
Yo le dije: Bueno… Vamos…
Así qué fuimos a la parte onda, solo ella y yo, pues mi hermana no quiso ir…
Cuando llegamos ella me dijo: Mira… Desde esa piedra la gente se avienta clavados…
Así que le dije: Me voy a aventar uno…. y lo hice.
Después de que me lo avente, ella me dijo: Órale… ¡¡Estuvo muy bien tu clavado!!
Yo le pregunté: ¿Tú no te vas a aventar uno?
Y ella me contesto: ¡¡No Papi!! Es que no sé nadar muy bien…
Y después me dijo un poco apenada: ¡¡Perdón por decirte papi…!! Es que estoy acostumbrada.
Yo conteste: No te preocupes…
Entonces me pregunto: ¿No te ofendes?
Yo le dije: No… está bien…
Entonces me dijo: Bueno, entonces que no te extrañe si te vuelvo a decir así…
Después le dije: Si quieres aviéntate un clavado y cuando entres al agua… Yo te agarro y te llevo a la orilla…
Ella me pregunto: ¿Enserio?
Yo respondí: Si… Claro…
Y me dijo: Qué lindo papi… pero prométeme que me vas a agarrar, ¿Eh?
Yo le dije: Si… ¡¡Te lo prometo!! Así qué me avente primero y me quede ahí esperándola y cuando ella se aventó… Toda su blusa se levantó y pude ver perfecta y claramente sus ¡¡enormes pezones rosas!! Cuando entro al agua… inmediatamente me acerque a ella y la agarre, ella me abrazo y sentí sus gigantescas tetas en mi pecho… No se soltó de mi hasta que llegamos a la orilla y llegando ahí… Me dijo: ¿Nos echamos otro? ¡¡Se siente bien padre!!
Yo respondí: Si… ¡¡Claro!! Pues… La recompensa de sacarla del rio… Me la llevaba yo… Pues en la mayoría de los clavados que ella se aventó, pude ver y sentir sus enormes tetas.
A ella le encantaba aventarse y a mi también me encanta qué lo hiciera.
Estuvimos en el rio hasta las 7 de la tarde, que fue a la hora que obscureció y tuvimos que regresar a la casa.
Cuando íbamos de regreso a la casa, ella no dejaba de platicar conmigo… Resulta que a ella también le encantaba el cine igual que a mí… Así que platicábamos de nuestras películas favoritas y resulta que teníamos gustos muy parecidos.
Cuando llegamos a la casa, nos metimos a bañar y después estuvimos en el patio todos conviviendo y tomando unas cervezas… Yo y mi hermana no tomábamos por qué mi mama estaba ahí, pero como a las 11 de la noche mi Mama y Adrián se fueron a dormir.
Entonces mi hermana, yo y las hermanas y cuñados de Adrián nos quedamos tomando, en ese momento comenzamos a tomar mi hermana y yo.
A las 2 de la mañana ya estábamos cansados y nos fuimos a dormir.
La casa de los papas de Adrián, es una casa muy grande. Es una hacienda vieja… con un patio grande en medio y los cuartos alrededor… era de 2 pisos y tiene muchísimos cuartos, así que cada quien durmió solo en un cuarto.
Yo estaba un poco borracho y me lleve unas cervezas a mi cuarto… pero no podía dejar de pensar en Paty y después de pensarlo mucho me arme de valor… y como a las 2:30 salí de mi cuarto y fui al cuarto de Paty… Ella seguía despierta, pues vi luz en su ventana.
Al llegar a su cuarto, me asome y vi a través de las cortinas de su ventana que ella estaba leyendo un libro.
Y sin pensarlo mucho… suavemente toque la puerta de su cuarto… Ella se levantó, abrió la puerta y cuando me vio…
Inmediatamente me dijo: ¡Papi! ¿Qué haces aquí? ¡Pasa…!
Así qué entre y le pregunte: ¿Qué haces?
Me respondió: Leyendo un libro… ¿Y tú? ¿Qué paso? ¿Qué haces por aquí tan tarde?
La mire… Y ¡¡wow!! Se veía súper sexi… Traía un camisón de encaje color blanco y todo se transparentaba, podía ver perfectamente qué no traía brasier… Solo un calzón y el camisón.
Y le dije: Es que… No puedo dormir…
Ella me dijo: ¡¡Yo tampoco!! Entonces me pregunto: ¿Quieres una cerveza…?
Yo le respondí: Si… Pero solo si tú me acompañas con una.
Y ella respondió: Sí… Espérame aquí, voy por unas a la cocina, ahorita regreso… no te vayas a ir… ¿Ehh…?
Y yo le respondí: Aquí te espero.
Entonces se fue por las cervezas… me di cuenta que encima de su cama había un brasier enorme, lo agarre y me puse a verlo. Al ver la talla vi que era "38 F" era una talla qué yo nunca había visto. Me quede mirándolo y no escuche cuando ella regreso. Al verme con su brasier en las manos no dijo nada… Solo entro y dijo: Ya vine.
Yo le respondí: ¡Ok! Qué bien… y solté el brasier. Ella traía un “Six-Pack” de cervezas…
Y me pregunto: ¿Cómo vez? ¿Nos alcanzara con este? ¿O traigo otro?
Yo le respondí: Yo creo que con ese está bien…
Comenzamos a tomar las cervezas y a platicar… nos sentamos en la cama y ella se sentó alado de mí, y yo no podía dejar de ver sus tetas pues se veían claramente a través de su camisón. Ella se dio cuenta, pero no hiso ni dijo nada…
Cuando tomábamos la segunda cerveza y un poco más borrachos. Ella se acercó a mí y me beso en los labios… Yo le conteste el beso y de paso, toque una de sus gigantescas tetas…
Pero pocos segundos después, ella se separó de mí y me dijo: Perdón Papi… ¡Qué pena! Vas a pensar que soy una asalta cunas…
Y le dije: No te preocupes… está bien.
Después me dijo: No… ¡Esto está mal…! pues tu eres menor que yo… y antes de que terminara de hablar, yo me acerque a ella, agarre sus tetas y las comencé a besar… ella se recostó sobre la cama…
No me dijo nada, solo dijo: ¡¡Papi… Esto está mal!! Pero no intento quitarme ni nada…
Después sentí un poco de pena y deje de hacerlo y le dije: Perdóname… no sé qué me paso.
Y me dijo: No te preocupes… Y me pregunto: ¿Te gustan mis tetas, verdad?
Yo respondí: Sí… ¡Mucho!
Entonces me dijo: Desde hace rato me di cuenta que no dejas de verlas.
Y me pregunto: ¿Por qué? ¿Qué te gusta?
Y respondí: Pues… ¡¡Están muy grandes!! nunca había visto unas tan grandes.
Entonces ella ya borracha… me pregunto: ¿Quieres que te las enseñe? ¿Quieres que me quite el camisón?
Yo inmediatamente le dije: ¡¡Sí!!
Entonces se levantó de la cama y se quitó el camisón… ¡Yo quede impactado! No podía creer el tamaño de sus tetas… ¡Son enormes, gigantescas!
Entonces le dije: ¡¡Guau!! Están muy bien… ¡Muy grandes!
Y me pregunto: ¿Te gustan?
Yo le respondí: Si… Mucho…
Entonces se acercó a mí y me dijo: Haz lo qué se te antoje con ellas…
Yo le dije: Ok… Entonces comencé a tocarlas y a acariciarlas. No cabían en mis manos y después, Paty se sentó sobre mí, agarro mi cabeza y puso mi boca en sus pezones… Yo comencé a chuparlos y a acariciar su trasero.
Entonces me pregunto: ¿Viniste a mi cuarto… por esto?
Yo le respondí con el movimiento de mi cabeza… Qué sí.
Y después me pregunto: ¿Quieres coger?
Entonces deje de chupar su pezón y le dije: ¡Si…! Si quiero cogerte.
Entonces se levantó, se quitó su calzón y se acostó sobre la cama.
Y completamente desnuda y me dijo: Apaga la luz, quítate la ropa y ven conmigo a la cama… papi.
Yo hice exactamente lo que me dijo, pues moría de ganas de estar con ella. Cuando apague la luz, ella prendió unas lámparas de su cabecera… Me quite la ropa y tenía la erección mas grande que había tenido en mi vida… Ella la miro y me dijo: Ven aquí papi… ¡Quiero chupártelo!
Me acerque a la cama y comenzó a chupar mi pene… Lo hacía espectacular… Y con unas ganas, que se notaba qué tenía mucho tiempo sin probarlo. Yo creí, por lo bien qué lo hacia que inmediatamente terminaría en su boca, pero el efecto de las cervezas me había adormecido el pene y no tenía ganas de terminar… Así qué aguante un buen rato.
Después me dijo: ¡Ven papi!
Me acerque a ella y comencé a chuparle su gran vagina. Qué la tenía completamente rasurada… Ella gemía y apretaba sus gigantescas tetas de una manera… ¡Que yo me moría por penetrarla!
No deje pasar mucho tiempo… Y me subí a chupar y a tocar esas tetas qué me volvían loco y cuando yo chupaba sus tetas ella agarro mi pene y comenzó a masturbarme…
Pocos segundos después me dijo: ¡Métemelo Ya! Así que le hice caso y la penetre. Tenía una vagina muy apretada.
Yo nunca había estado con una gorda y debo confesarles qué era algo que estaba disfrutando al máximo… pues el hecho de sentir su gran cuerpo era muy excitante.
Comencé a cogerla y ella gemía ¡como gata en celo! Eso a mí me excitaba mucho… Y mientras la cogía, chupaba sus tan deseadas tetas como un desesperado.
A ella le encantaba eso y me decía: ¡¡si…!! ¡¡Sigue así!! ¡¡Me encanta como me coges!! ¡¡Muérdeme las tetas!! Yo seguía cogiéndola… Después ella se giró y quedó de lado… Yo me coloque atrás de ella y la penetre.
La cogí de lado… Pero ella también se movía y todo su enorme culo chocaba con mi estómago. Su culo es perfectamente redondo y estaba delicioso…
Después ella me dijo: Acuéstate… Yo le hice caso y me acosté. Ella se subió encima de mí, agarro mi pene, lo puso en su vagina y comenzó a cogerme… Se notaba qué tenía tiempo sin hacerlo… Porque se novia de una manera como si lo necesitara… Y a mí, eso ¡¡me volvía loco!! Pero lo qué me extrañaba era que yo no sentía como si fuera a terminar pronto, a pesar de que esa gordita me estaba dando ¡¡la mejor cogida de mi vida!! Unos minutos después de estar encima de mí… Ella me dijo: ¡¡ahh!! ¡¡Sí!! ¡¡Me voy a venir papi!! Y después gimió como nunca nadie lo había hecho conmigo… Y se comenzó a mover más rápido, Yo solo veía como sus gigantescas tetas se movían de un lado a otro… Así que las agarre y las comencé a apretar… Después ella se inclinó hacia mí, puso sus tetas sobre mi cara y se movió más lento… Pero seguía cogiéndome.
Y me pregunto: ¿¿Te veniste papi??
Yo conteste: No… Todavía no.
Y me dijo: ¿Enserio? Por qué yo si…
Yo le dije: Ahora yo te quiero coger… entonces se quitó de encima de mí y la puse de perrito, arrodillada sobre la cama y comencé a cogerla por atrás… Ella gemía, cada vez más fuerte y yo seguía cogiéndola sin tener ganas de terminar… así estuve un buen rato cogiéndola y mientras lo hacía, apretaba su trasero y le daba nalgadas.
Y a ella le encantaba, pues decía: ¡Si…! ¡Así papi! Cada que yo la nalgueaba.
Después ella me dijo: ¡¡No mames…!! ¡¡Ya!!
Yo le respondí: ¡¡No!! ¡¡Todavía no termino!!
Y me dijo: ¡¡No manches…!! ¡¡Me voy a volver a veniiiir!! Y cuando dijo eso… Sentí como su vagina comenzó a moverse de una manera como si temblara… Y apretaba mi pene…
A mí me excito la forma en la que gemía y comencé a cogerla con todas mi fuerzas… A ella le encantaba y a mí también. Sentí que iba a terminar… Y le dije: ¡¡Ya voy a terminar!!
E inmediatamente me dijo: ¡¡Hazlo adentro de mí!! ¡¡Quiero tu leche adentro!!
Entonces termine adentro de ella y cuando lo hacia ella volvió a gemir…
Y me dijo: ¡¡No mames papiiiiii!! Estoy sintiendo como terminas… ¡¡Y se siente muy bien!!!
Y cuando termine de eyacular… me detuve y ella me dijo: ¡¡Sigue!! ¡¡No pares!! ¡¡Me voy a venir otra vez!!
Mi pene seguía erecto y al escucharla gemir me excite así que la cogí más fuerte y ella gemía como loca… Hasta que después de un rato me dijo: ¡¡Ya papi!! ¡¡Por favor!! ¡¡Ya para!!
Entonces saque mi pene de su vagina y al tener su trasero enfrente de mi comencé a acariciarlo… Ella suspiro y se acostó boca abajo sobre la cama y me dijo: ¡¡Ahhh no mames Armando!! ¡¡Me acabas de dar la mejor cogida de mi vida!! Me vine 3 veces… Eso es algo que nunca me había pasado…
Entonces, nos besamos en su cama y al poco rato me levante y me fui a mi cuarto… Cuando iba saliendo del cuarto, ella me hablo y me dijo: Prométeme que mañana lo repetiremos… ¿¿Sí??
Yo la bese y le dije: ¡¡claro!! No quiero dejar de cogerte…
Y ella sonrió y cerró la puerta.
Al día siguiente fue más emocionante… pero si quieren que se los cuente dejen sus comentarios… inclusive antes de que me regresara a mi casa me dejo tomarle una foto desnuda… para que no me olvidara de ella.
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