la madre de mi novia y yo. ( Homongosaurio)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Era viernes por la tarde, llegue a casa de mi novia al entrar mi suegra me dijo que no se encontraba, pero que pasara y la esperara en la sala, me senté en uno de los muebles y allí sin darme cuenta me quede dormido.
Al despertar, me encontré en las piernas de mi suegra, me acariciaba la espalda, yo al sentir las caricias, intente entender el juego, entonces comencé a tocarles las rodillas, mientras conversábamos de lo mucho que tardaba mi novia.
Ella continuaba acariciándome la espalda, metía su mano bajo mi camisa, yo sobaba su pierna y di un giro a mi cuerpo colocando mi cara entre sus piernas, ella continuaba con el masaje, pero poco a poco fue metiendo su mano en mi interior y tocaba mis nalgas, entonces entendí que quería algo más de mi, la mire fijamente a el rostro y agarre sus manos.
Me arrecoste a la señora, colocando medio cuerpo encima de ella y mi cabeza entre sus pechos, comenzamos a besarnos, entonces me senté en el mueble a su lado, mientras nos besábamos, ella tocaba por encima de mi ropa mi verga mientras yo apretaba sus senos, metí mi mano entre su blusa y acariciaba sus senos tibios, ella masajeaba mi pene por encima de mi pantalón.
Nos besábamos y acariciábamos cada vez más intensamente, disfrutábamos de lo que hacíamos, ella apretaba cada vez más fuerte mi verga, yo metí mi mano entre sus piernas por debajo de la falda buscando su raja, besaba sus pechos; ella agarro con sus manos mi cabello, abría sus piernas para que mi mano entrara más profundamente, gemía al toque de mi mano, me levante, ella abrió sus piernas subiendo su faldita, yo me ubique entre sus piernas.
Abrí su blusa y le saque sus acostumbradores dejando sus pechos al descubierto, lamia sus senos, ella se movía, lamia la punta de sus pechos, nuestros cuerpos estaban lo más cerca que se podía por encima de mi pantalón y su panti, me saque la camisa, lamia y besaba su ombligo, ella gemía y sus mo0vimientos eran casi imparables.
Le saque la panti, descubriendo así su raja, la lamí y bese mientras ella gemía, ella se aferraba a los bordes del mueble, deje de besarla, desabotone mi pantalón y lo corrí hacia abajo, mientras me bajaba el box, ella metió su mano agarrando mi polla, con sus manos calentaba mi verga dándome un masaje.
Luego, se sentó en el mueble y con su boca saboreaba la cabeza de mi polla mientras su mano me daba una paja, estaba aferrada a mi verga, yo acariciaba su cabello, luego soltó mi verga y se tiro en el mueble, yo seguí su movimiento dirigiendo mi verga su raja, de una vez entro toda, el calor de su hueco invadió mi cabeza y toda mi polla, ella apretaba fuertemente mis brazos al sentir cada metida, luego agarraba mis costados y los apretaba, yo al no estar tan junto a ella, veía como mi verga se hundía en su interior, ella movía su cabeza mientras la embestía hasta lo profundo.
Follaba a mi suegra, le metía la verga hasta lo más profundo de su raja, ambos disfrutábamos de la embestida, la señora gemía y su respiración fuerte llegaba a mis oídos, en un momento se quedo quieta mientras yo clavaba mi polla en su adentro, gritaba al correrse por mi castigo a su raja, luego levanto sus piernas colocando sus tobillos encima de mis hombros apretando mi cuello con ellas, sentí como su raja se hizo más estrecha, mi verga quedaba ahora justa adentro.
Yo me apoyaba en el espaldar del mueble mientras seguía fallándola, ella agarraba sus piernas con sus manos y las cerraba para sentir mi verga más apretada por dentro; metía y sacaba la polla a mi gusto, la señora se movía aumentando el placer, gemía moviendo su cabeza, me apretaba los brazos con sus manos, sacaba mi polla y le frotaba la cabeza encima de la raja y luego volvía a metérsela.
Luego, cambiamos a la posición del perrito, al ver su enorme trasero la calentura me invadió por completo, las clavadas eran más fuertes, mi suegra gemía hasta quedar sin aliento, yo me aferraba en sus muslo para follarmela sin problemas, en el momento más caliente ella se acostó en el mueble dejando solo su trasero elevado par a seguir brindándoselo a mi verga, sentía y veía como mi polla entraba en todo ese hueco mientras me aferraba a sus senos.
Entre metida y metida, gemidos salían de ambos, hasta que comencé a correrme dentro de ella, mi leche pasaba a su interior, deje mi polla dentro mientras nos movíamos al mismo tiempo, me descargaba dentro de ella.
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