La mamá de Sandra, mi putita de 12 (Parte 2)
Continuación de mi primer encuentro con la mamá de Sandra, que resultó ser menor que yo y con un gusto por los mayores también. .
Pueden encontrar los relatos anteriores para que sepan como llegue aquí en estos links:
Ahora si venía el momento de la verdad, la tenía de frente a mi, me estaba jalando la vergota con sus manitas y era riquísimo ver como con sus dos manitas no me cubría ni la mitad de mi reatota y no me la alcanzaban a rodear ni de cerca de lo gruesa que esta y en su mirada se veía que estaba muriendo por probarla, les soy honesto, en cualquier otra situación esa mujer no hubiera sido tanto de mi agrado, y tampoco me la hubiera querido coger, solamente le hubiera dejado que me la mamara, siempre soy asi, me cojo solo a quien yo quiero pero cuando alguien se humilla lo suficiente o me ruega por verga siempre les dejo que me la mamen, una mamada no se le niega a casi nadie jajajaja.
Pero a esta mujer yo estaba ansioso de reventarmela por el morbo de ser la mamá de la putita de 12 años que recién conocía, y verla tan sedienta de verga e impresionada con mi pedazote me dejaba muy en claro que esa mujer la iba a gozar como si fuera su primera vez.
Comencé a darle órdenes y a hablarle sucio, le hacía preguntas como:
«Tu esposo no la tiene así verdad puta?»
«Te encanta tanto la verga que engañas a tu marido y te coges al hombre de tu hija? Eres una pinche perra en celo»
Y ella no me decía nada, y eso no me gustaba para nada, se veía que lo que yo le decía le molestaba pero en ningún momento dejo de jalarme el pitote, entonces decidí verla totalmente humillada y le volvi a preguntar lo mismo, solo me contestó con un:
«Mi esposo la tiene chiquita y no se le para y a mi hija no la menciones en esto»
Yo solo reí y me dije:
«Tu hija es la razón de que estés aquí conmigo hoy, si no no tendrías oportunidad conmigo, solo te estoy prestando mi verga porque quiero ver si tu hija saco lo puta de ti, o si tu no sirves ni para coger bien»
«Orale pinche puta, ponte a mamarmela, pero a la de ya, y si no me convences te me vas a la chingada y yo me voy por tu hija para que termine de hacer lo que tu empezaste»
Ella solo me dijo que intentaría hacer lo mejor que pudiera, le metí una cachetada, le escupí en la cara y le ordene que abriera la boca lo máximo que pudiera y que sacara su lengua, le escupí en su boca dos veces más seguido de otra cachetada (todo esto mientras con mi mano izquierda la tenía agarrada del cabello para que no se me soltara), la tenía así porque le iba a meter la vergota hasta el fondo de la garganta de una sola vez, y asi fue, me puse de pie frente a ella y le deje ir la vergota por la boquita, muy apenas le entro de lo pequeña que esta la boquita y de lo gruesa que esta mi reatota, sentí como sus dientes raspaban mi verga cuando entraba y sentí como mi cabeza topo con su garganta, no entraba más, y ella comenzo a querer vomitar, se la saque y le volví a dar otra cachetada, y le dije que hiciera lo mismo, ella obedeció y me volvió a esperar con la boquita bien abierta, yo le volvi a dejar ir toda la vergota y esta vez con menos de media verga adentro comencé a bombearle, empecé a cogerle la boca y sentía como mi cabeza se iba abriendo paso hacia su garganta, ella intentaba quitarse pero yo más fuerte la agarraba y más duro le daba, se la sacaba de vez en cuando para que ella tomara aire y para verle la carita llorando donde evidentemente era demasiada verga para esa boquita.
Ella me dijo que no iba a poder comersela toda por la boca, ya aguantaba más de la mitad pero me decía que tenía ganas de vomitar, me dijo que me la Cogiera, qué por ahí si creía aguantarla toda, yo solo le respondí muy dominantemente con un:
«A ver pendeja, tu aquí no estas para pedir, tu haces lo que yo diga, y si no lo haces como yo digo te me vas a la verga qué tengo una putita mejor que tu esperándome, así que de una vez te digo, que no te voy a coger hasta que no vea mi vergota desaparecer en tu boca, me vale madre si me la vomitas o no, si no te la comes toda yo me voy de aquí»,
Ella lo más humillada posible solo me dijo: «Esta bien, pero hazlo tu porque no voy a poder sola, métemela hasta la garganta, intentaré aguantar.»
Me puse de pie y le agarre el cabello con las dos manos, y empecé a cogerle el osico, el sonido de su boquita recibiendo mi vergota era riquísimo, toda la saliva que soltaba hacia que mi verga resbalara mejor en su Garganta, le estaba taladrando la boca tan fuerte que hasta mis huevos sonaban muy rico en su barbilla, y al fin pude, se la metí hasta el fondo, ella quería quitarse, no podía respirar, yo le estaba dando zapes en la nuca y me reía de ella al ver su carita llorando y luchando por tomar aire, veía como no paraba de salirle lágrimas de los ojitos y después de verla así como por 20 segundos la solté, ella tomó aire como nunca en la vida, y se tiro al suelo, estaba exhausta, y me dijo que algo mareada, yo solo la vi en el suelo y le dije: «Ahora si, te ganaste qué te rompa la panocha putita».
Le alcance a ver las nalgas por debajo del vestido y la puta no traía ropa interior, ya iba preparada para que le diera verga, la puse en 4 y ella me dijo que la dejara recuperar el aliento, que no iba a poder aguantarme así.
A mi normalmente me gusta calentar a las mujeres que me voy a coger, me gusta tocarlas y darles lengua para ponerlas más calientes aún, todo eso mientras les hablo sucio o las humilló, pero esta puta no se merecía eso.
Camine hacia ella que estaba en el suelo, le levante el vestido y la puse en 4, le abrí la panochita y ahí estaba, bien depilada, escurriendo de lo caliente que estaba, no aguante más y se la meti, ella tenía los ojos cerrados de lo mareada qué estaba y de lo rápido que respiraba, pero cuando sintió como mi vergota gruesa le iba abriendo todo por dentro abrió ojitos como nunca.
Comenzó a querer decirme 1000 cosas, su cara era de dolor evidentemente, pero la voz no le salía, simplemente su cara era entre mucho dolor, placer y algo de desconcierto.
Yo empecé a darle más duro hasta que se la meti hasta el fondo, y ahí se la deje adentro un poco, ella dio un grito muy fuerte, y la voz al fin le salio:
«Dejame descansar te lo ruego, me vas a matar»
Le volví a recordar que aquí las cosas no se hacen como ella quiere, le di dos nalgadas fuertisimas, le volví a escupir en la cara y me la empecé a coger ahora si muy fuerte, ella ahora si gemia mejor y yo solo le decia:
«No te la voy a sacar aunque llores y me ruegues que pare, querías probar mi vergota no? Pues ahora te aguantas pinché zorra»
Su dolor se convirtió en placer y ahora ya solo me decía que estaba riquísimo mi pitote, yo solo le decía que era igual de puta qué su hija, pero que su hija cogia mejor»
Trataba de hacerla enojar pero esa mujer ya ni siquiera prestaba atención a nada, se había vuelto ya esclava de mi verga y la estaba gozando como nunca antes en su vida había gozado algo.
La puse boca abajo justo como me había cogido a su hija en su litera recordando que así la hice venir a chorros y le hice lo mismo a ella, ahí en el suelo.
Ella me pedía que fuéramos a la cama y le dije que no se merecía ni que me la cogiera en la cama.
«Cuando has visto que a las perras callejeras se las cojan en una cama? Siempre es ahí, en la calle, en el suelo, tu eres menos que eso y te voy a coger aquí, pendeja de mierda».
No me dijo nada, solo paro las nalguitas para que le entrará mejor la verga, yo solo me reí y le dije que era una pinché puta asquerosa.
Me encanta como se humillan tanto por una vergota.
Me la empecé a coger bien duro, gritaba como loca, y yo le daba cada vez más duro, no me duró ni 1 minuto cuando empezó a gritar desesperada:
«No vayas a parar culero, dale así así así así así»
Obviamente me detuve, y ella se enojo, pare antes de que se viniera, y le dije que si quería que la hiciera venirse como nunca iba a tener que humillarse más aún, ella solo me vio con cara de odio y me dijo, esta bien.
Volvió a pararme las nalguitas y se la metí de nuevo, ella empezó a hablar:
«Soy tu puta, por favor cogeme»
«La tienes mucho más grande que mi marido anciano y a ti si se te para»
«Por favor dame duro»
Yo empecé a darle más duro y le decia:
«Me vas a dejar que me siga cogiendo a tu nena o si no te la saco»
Y ella: «Si dale a ella, pero ya no me dejes así»
Le empecé a dar bien duro y tuvo un orgasmo muy rico, pero no se vino a chorros, yo aun la traía durisima y estaba lejos de venirme, así que le seguí dando, ella sentía que no podía más, sentía ese cosquilleo por todo el cuerpo que sienten cuando acaban de venirse pero siguen metiéndola, estaba que se retorcía toda, y me pedía que parara, yo empecé darle con violencia una cogidota.
Sus gritos de que parara se convirtieron de nuevo en un «No pares» para después convertirse en un «Eres un cabron, no mames que rico coges, ya no aguanto, siento que me voy a orinar», sabía ya lo que se venía así que le seguí dando, le dije:
«Si sientes que te vas a orinar dale, no voy a parar hasta que mojes todo el piso, si no lo haces no te vuelvo a coger pinché estupida»
Ella no dijo nada, solo me decía que si con la cabeza, yo le seguí dando y al fin paso, era obvio que no era pipí, estaba teniendo un squirt, se la saque para ver el espectáculo en primera fila, sus piernas le temblaban igual que a su hija cuando se viene a chorros, y su cara se pone igual de roja qué la de ella.
Apenas estaba dejando de temblar y se la volví a meter, ahora si duro en verdad, como lo hace uno cuando ya se va a venir, estaba ella que no podía con su alma, yo la seguía destrozando y ella me decia:
«No tardes que ya no aguanto más, me arde mucho»
Yo le seguí dando y ella empezó a temblar de nuevo y a chorrearse otra vez, se intentaba quitar pero yo no se la saque, solo la agarraba fuerte de las caderas y le decia:
«A donde vas putita? Tu macho aun no termina».
Le seguí dando y ella solo me decía: «Eres un pinché cabron, que rico coges»
Yo me acerque a su oído y le dije:
«Te voy a llenar la cara de leche, ahorita que te la saque te volteas para recibirla», ella me decia:
«Si, dámela toda en la boca papito»
Sentí que me iba a venir y se la saque, ella intentó ponerse de rodillas para recibir la leche pero las piernas no le respondieron y solo se quedó tirada boca arriba en el suelo, yo me la jale para sacarme la leche y me vine en todo su abdomen, tetitas y cara, era demasiada leche y ella quedó encantada.
Me metí a bañar y la deje ahí tirada, salí de bañarme, me cambie y ella apenas estaba sentada en el suelo, no podía pararse aún.
Le dije: «Aquí tienes 500 pesos por la cogida, porque la verdad no eres tan buena, y ten 1,000 para que limpies el desmadre que hiciste pinche puta asquerosa»
Ella creo que no esperaba para nada eso que le dije y me miró entre enojada y desorientada y solo la vi como se tragaba el orgullo y me decía: «Muchas gracias, señor»
Le dije no tardes que te espero afuera, pues aun tenía yo la llave del departamento de mi amigo y necesitaba cerrarlo, la espere en mi camioneta y al fin salió después de 20 minutos, no se baño nisiquiera, solo me dijo que ya había quedado todo limpio y se fue, yo subí al depa y vi que todo estuviera bien, lo cerré y me fui.
Continuará…
Estuve recibiendo buena respuesta de ustedes en mi ig: jrtowers2
Algun@s ya quedaron encantad@s con mi vergota, los leo ahí cualquier cosa que necesiten 😏
Woooww, ese sadomasoquismo es muy grande jejeje!