no podia creer lo que vi pero me encanto 5
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por pepeiyo21.
El domingo me di yo un viaje al pueblo para ver a mi suegra y pasar el día con mi mujer, volví tarde y los chicos ya estaban acostados, el lunes me llamo mi cuñada para llevarse a Tamara a un cumpleaños y pedro dijo que había quedado con los amigos, asique Sara me dijo que porque no la llevaba a ver una peli de dibujos de Disney.
– Si te llevo ya sabes que te pediré algo a cambio
– Papi no hace falta que me des cosas para pedirme lo que tú quieras
– Lo se amor, pero me gusta pensar que estas en deuda conmigo y que así puedo cobrármelas
Nos fuimos al cine, era lunes las 5 de la tarde y no había prácticamente nadie, un grupo de chicos, 5 o 6 y otro de chicos y chicas 8 o 9 otro tipo de unos 50 o 60 años y nosotros, cuando abrieron la sala fueron pasando los jóvenes que se colocaron por en medio unos y otros por delante, nosotros nos fuimos a la 4 fila por atrás, cuando estaba por empezar la película entro aquel tipo que se sentó en la última fila un poco hacia la parte izquierda, Sara también estaba sentada a mi izquierda así que cada vez que la miraba veía a aquel tipo por el rabillo del ojo, cuando llevábamos como 20 minutos de película me incline sobre Sara, hasta ese momento habíamos comentado la película por encima, ahora ya quería algo más, me incline sobre ella ya que su cabeza apenas salía por encima del respaldo de la butaca y la bese, le cogí su carita y estuve jugando con mi lengua dentro de su boca, de cuando en cuando miraba y veía que el tipo no nos quitaba vista, eso me calentó aún más, un momento después me saque la verga y le dije a Sara que me hiciera una paja, la hable al oído y le pedí que me la chupara
– Sara hija, chúpamela por favor
– Si papi
Se agacho y empezó a chupármela, mire con disimulo hacia atrás y le vi echado hacia atrás sin quitar la vista ni un momento, fue fácil adivinar que se estaba haciendo una paja, después de unos minutos donde pensaba que me correría en la boquita de mi hija la levante y le hable
– Sara hija, si le digo a un amigo que se acerque le harías lo mismo?
– Si tú me lo pides si papi, ¿pero ahora?
– No sé si vendrá pero sí, quiero verte de cerca como se lo haces a otro mi vida
– Vale papi
La volví a inclinar la cabeza para que volviera a chupármela y mientras lo hacía me gire hacia el tipo aquí, le hice señas con la mano para que se acercara, con sorpresa me dijo por señas que si se acercaba y le dije que sí, indicándole que se sentara al otro lado de Sara, al momento se presentó allí quedándose viendo como me la chupaba, hice que Sara se incorporara y la hable al oído
– Ese es mi amigo, ha venido, déjate hacer lo que él quiera amor
– Vale papi
Se volvió y miro a aquel hombre que la cogió por la cabeza y empezó a besarla con morbo, un momento después estaba besándola y metiendo mano por debajo de su vestido, se echó hacia atrás e hizo que ella le cogiera la verga, no hizo falta que la dirigiera, ella empezó a movérsela de arriba abajo, un momento después el hombre tiraba de su cabeza para hacer que se la mamara, su verga como de 15 o 16 cm no era muy gruesa pero si estaba bien dura recibiendo las caricias y las chupadas de Sara, Sara se la metió en la boca y empezó a chupar mientras yo acariciaba su culito levantándole el vestido para dejárselo a la vista de aquel hombre, la cabeza subía y bajaba, el hombre gemía y Sara solo retorcía la cara a un lado y a otro para darle más placer, después de unos minutos el hombre la levanto la beso de nuevo y la dijo algo, luego la dirigió su cabeza a las butacas de delante haciendo que apoyara su pecho sobre ellas, entonces le subió el vestido, le bajo las braguitas y se agacho a lamerla la rajita, un momento después era Sara la que gemía, le abría las cachas del culo y pasaba su lengua de arriba abajo metiéndosela en ambos agujeros, en el culito apenas metía la punta y jugaba pero en su rajita la metía toda, lamia y metía la lengua como si de un falo se tratara, Sara gemía a punto de tener un orgasmo y yo tenía mi verga en la mano pajeandome despacito viendo lo que estaba pasando, cuando Sara estaba al máximo él se incorporó, se cogió la polla y empezó a restregarla arriba y debajo de su rajita que se abrió dejando entrar el capullo, la cogió por las caderas y empujo metiendo la mitad dando Sara un pequeño grito por la sorpresa, tal como la tenía cogida hizo fuerza metiéndola del todo, la levanto en vilo girándola hacia mí, unas lágrimas salían de la cara de mi hija mientras hacía muecas de dolor evidentes, la apoyo sobre mis piernas y se inclinó por encima de ella para hablarme.
– No dejes que grite
Levante la cara de Sara y la hable al oído
– Amor aguanta, el la tiene pequeña y no creo que tarde mucho, si esto te lo hace juan será mucho más doloroso (juan es el portero de la discoteca)
– Me duele papi, que lo haga despacio por favor
Me dirigí a aquel tipo levantándome un poco
– Ella aguantara pero hazlo con cuidado y despacio, es la primera vez que lo hace completo
– Tranquilo que será despacio pero será largo
El tipo empezó a meterla y sacarla con lentitud pero saliendo hasta la punta y metiéndola hasta llegar con sus huevos al culo de mi hija, la tenía metida la cabeza en mis piernas con el culo levantado, la falda sobre su espalda y las braguitas en los pies, así fue dándole durante un rato que se me empezaba a hacer eterno cuando oí de nuevo gemir a Sara, metí un dedo en su boca e instintivamente comenzó a chuparlo de medio lado al vaivén de las embestidas de aquel tipo, gemía cada vez más fuerte, su coñito se había adaptado bien a aquella verga no muy grande y estaba disfrutando, me incline sobre su oreja y le pregunte
– Te gusta mi amor
– -si papi mucho ummmmm
Entre gemidos chupaba mi dedo, el tipo acelero un poco el ritmo y ella empezó a apretarme con sus manos mis piernas, se alzó un poquito y busco mi polla con la boca, empezó a mamarla, el tipo sacaba toda la verga fuera y volvía a meterla hasta el fondo una y otra vez, yo con el calor de su boca y viendo como el tipo la follaba no pude aguantar apenas nada corriéndome como un cerdo en su boca y su cara, ella seguía chupando cuando el tipo aquel empezó a follarla más violentamente diciendo que ahora le tocaba a él, empezó a moverse rápido y a dar fuertes golpes contra ella que se traducían en que se tragaba mi polla sin control entrándole alguna vez hasta dentro de la garganta asta que en uno de esos vaivenes la pudo soltar y empezó a gemir pero no de gusto sino de dolor, levanto la cara y me miro dándome a entender que ya estaba bien, que ya no podía entonces le hable a aquel tipo
– Tienes un minuto para correrte, si no lo haces sácala y te haces una paja
– Gracias papi ya no puedo mas
El hombre asintió pasando a cogerla más fuerte, con 4 o 5 embestidas atrayéndola contra él se corrió dentro de ella mientras a Sara se le escapaban unas lágrimas y unos pequeños sollozos, la aguanto contra él mientras se corría dentro y luego se la saco despacio cayendo en su asiendo con gran placer de lo que había disfrutado, Sara se echó sobre mí que la recibí en mis brazos limpiándola y acariciándola, le subí las braguitas y la deje que sentara sobre mis piernas mientras la hablaba al oído
– Ya está amor, ¿te ha dolido mucho?
– Dos veces papi, cuando me la metió al principio y ahora al acabar, en medio me ha gustado mucho, sentía cosas nuevas
– Amor, mejor con este hombre que tiene una verga pequeña que con juan o conmigo, cuando estés acostumbrada no te dolerá, pero hasta entonces sí, y es mejor con alguien así que con alguien que la tenga muy grande
– El próximo jueves aquí a la misma hora (nos dijo el tipo aquel que no nos habíamos dado cuenta pero ya se había colocado su ropa bien y estaba de pie para irse)
– No hay día amigo, esto ha ocurrido hoy y no tiene por qué volver a ocurrir, tampoco podemos decidir por anticipado que día podremos hacerlo
– Entonces tenga mi tarjeta y cuando quieran repetir me avisan, yo tengo siempre tiempo (el tipo me dio una tarjeta que cogí y se dio media vuelta marchándose)
Nos quedamos así, ella sobre mis piernas yo hablándola al oído y esperando que acabara la película para irnos a casa
– Te ha gustado a ti papi
– Me ha encantado amor, pero lo mejor es que ahora sentirás menos dolor la próxima vez que lo hagas, y lo importante es que te haya gustado a ti
– Sí, me ha gustado aunque al final me ha dolido pero antes, ummm que bien lo he pasado
Me miro con una sonrisa pícara y traviesa, me dio un beso en los labios y se sentó en su butaca, cuando acabo la película totalmente relajados
Que pajote me estoy haciendo…