RINA…Una mujer en cuerpo de niña.
Un abuelo y su pequeña nieta llegan a un campo en busca de trabajo y cobija, pero con ellos biene un secreto, una venganza que no dejara vergas paradas..
RINA…Una mujer en cuerpo de niña.
El sol brillaba sobre las praderas de Campo de Oro y sobre cuyas suelos muchos campesinos trabajaban en la faena del cultivo del trigo , entre ellos el capataz Ruben Cifuente, un hombre de unos cincuenta años de edad , de una piel quemada y arrugada de tanto tiempo dedicado al trabajo de la tierra y expuesto a las condiciones climáticas y tambien al exceso del alcohol y de una vida de juergas, mujeres y juegos, de unos inmensos bigotes que resaltaba con sus gruesos y grandes labios de rubí y sus ojos color pardo, como también de imponente porte y de modales toscos y abrutado, una condición necesaria para poder dirigir a toda esa cantidad de hombres, que acudian como cada año a la siembra y a la recolección del trigo.
Despues de una ajetreada mañana y una buena productividad se acercaba la hora de la colación, tiempo imperdonable para los trabajadores, en la mayoria hombres sobre los cuarenta años, muchos de ellos jefes de hogares , venidos de otras partes del país en busca del sustento familiar y quienes durante esa temporada podían hacerse de un buen capital y juntar para poder subsistir en tiempos de las vacas flacas , como decian los mas viejos.
Cuando la mayoría ya iba rumbo al galpón, que servía como comedor y como alojamiento para los que venían desde afuera, algunos de ellos a la pasada de sus trayectos se encontraron con un hombre mayor, de unos sesenta años, de cabello y una incipiente barba blanca , el cual humildemente preguntaba con quien se podía hablar por asunto de trabajo; Pero lo que más llamaba la atención a la mayoría de esos hombres era aquella acompañante qué venía con él.
Una niña que en su esencia no representaba más de diez a doce años, pero con un cuerpo escurpido a mano y aunque vestía modestamente sus rasgos faciales decían otra cosa; Su rostro angelical y su mirada entre inocente, juguetona y coqueta era lo que cautivaba a quienes a la pasada se topaban con aquella diosa en miniatura.
Una vez que el anciano fue conducido junto a su nieta por uno de los trabajadores hasta donde se encontraba el capataz, este tampoco quedo indiferente ante la belleza y los encantos de esta niña, quien al preguntarle su nombre y edad, respondio al nombre de Rina y de apenas once años, pronto a cumplir los doce y así como ella, Ismael tambien se presento como el abuelo de la muchacha y tambien el unico apoyo para ella, porque un año después de haber venido a este mundo su bella nieta, una terrible tragedia le ocurrio a su hijo y a su nuera, que ahorita no vale la pena contarlo y menos delante de la niña, pero que a su devido tiempo lo sabrá y él aunque viudo hace muchos años, jamás volvió a rehacer du vida, todo por cuidar y proteger a su mas apreciado tesoro.
Desde entonces su nieta lo ha acompañado a donde él va , por eso necesita urgente ese trabajo.
Mientras Ruben escuchaba al forastero, de reojo observaba a aquella mujercita en cuerpo aún de niña y se percataba que al parecer tan inocente e ingenua no era, puesto que a varios colaboradores que pasaban por el lugar y que se quedaban viéndola como hipnotizado por sus encantos, ella les sonreía coquetamente y hasta en algunas ocasiones con más de alguno se le desvío la mirada a sus entrepiernas.
Ruben contemplando que algunos de sus empleados estaban algo alborotados con la presencia de esa jovencita, trato de separarlos del paso de los trabajadores, llevándoselos a un lugar mas privado y lejano, en donde se presentó como el capataz de esas tierras, saludando a Ismael y a su nieta con un apretón de mano, cituacion que ella muy despierta y coqueta le indico que esa no era la forma de saludar un caballero a una señorita según lo que le enseñó su abuelito.
El capataz algo asombrado, pero a la vez admirado por el desplante de Rina se arrodillo ante ella y tomándole la mano, hacercandola a sus labios le dio un beso en ella , como en un cuento de hadas, del príncipe a la doncella en señal de caballerosidad, según él, por ser una muy linda y despierta, siendo correspondida por ella con un beso muy cerca de la comisura de los labios de él, que sin esperarlo lo hicieron estremecer y ponerse de pies inmediatamente, nervioso y colorado como un tomate por lo sucedido.
Situación de la cual se percato su abuelo, quitándole la importancia, pero si fijándose de reojo que ese detalle del beso había provocado su efecto entre las piernas del capataz.
Ruben tratando de poner orden a sus dos cabezas y sus sucios pensamientos, le confirma que él es solo el capataz en esas tierras y no está muy seguro de que el patrón y sus hijos vayan a querer un obrero con una pequeña a cuesta, menos en un lugar en donde la mayoría de los trabajadores son hombres que vienen de otros lugares solo por la temporada de la siembra y cosecha del trigo.
El viejo Ismael le suplica que le de la oportunidad, el se preocupara de que su nieta no moleste, además ella es muy independiente y muy obediente, esta seguro que no se arrepentira y ellos en especial la niña sabran ser muy bien agradecidos.
Fue en esos momentos en que la pequeña Rina se poso con sus bracitos alrededor de la pierna del capataz, suplicandole qué ayudara a su abuelito, quedando su tierna carita a centímetros de su abultado paquete, logrando una vez más poner muy nervioso a este mastodonte de hombre ante el pequeño cuerpecito de esa criatura y haciendo a un lado a la niña para que no se percatase de lo que había provocado en él, le prometió ir hablar con don Geronimo el patrón, pero no les asegura nada, por ahora los llevará a su choza para que coman algo y ver que sucede.
Así fue como una vez que dejo al abuelo y su nieta instalado en la humilde y desordenada morada de un hombre solo , se dirigió hasta la casona patronal, encontrándose a don Geronimo Rivas, un hombre de unos cincuenta años , corpulento y de carácter fuerte, bebiendo en compañía de una mujer de unos 35 abriles llamada Rosario , la cual acudia una vez a la semana para dos funciones, hacerle un buen aseo a la casona patronal y prestar su servicio sexual al patrón, por ser tan generoso y permitir en darle trabajo a su esposo y a sus hijos varones en el campo; Cosas que no solamente hacia ella , sino que muchas otras esposas ,madres, hijas y hermanas en agradecimiento, claro eso si entre mucha reserva sin que susodichos trabajadores se enteraran de lo cornudos que eran y además también por llevar a casa algo extra de dinero.
De todo esto, este viejo abusivo y degenerado se aprovechaba, pues desde que su esposa hace unos veinte años atrás los abandono junto a sus dos pequeños hijos, Luis de diez y Carlos de ocho años en ese entonces, para irse con uno de sus trabajadores y no volver jamás, el hombre se juró qué volcaria toda su ira contra las mujeres y que solo servirían para él como un resumidero de semen, cosa que también le inculcó a sus dos hijos, hoy de treinta y veinte ocho años respectivamente.
El patrón teniendo al frente a Ruben y sabiendo que estaba ante un trabajador de años de confianza y secretillos , lo hizo pasar a su despacho, mientras le pedía a su querida de turno , esposa de algun cornudo que a esa hora estaba a todo sol en los campos de trigo, de que les sirviera unos vasos de whisky y una vez que esta mujer atendió a los dos hombres se sentó en las piernas de su patrón y amante a pedido de él, quien con una mano mientras le sobaba una teta por encima de la blusa , con la otra se tomaba su trago o se fumaba su puro ,mientras escuchaba atentamente lo que le venía a decir su capataz, sin poder mucho concentrarse ya que el patrón no dejaba de manosear a esa mujer y al parecer para ella parecía muy divertido, como si fuese un juego, minimizando su rol de esposa corneadora y puta.
Cuando por fin Ruben logro explicarle el asunto del forastero y de su nieta, Geronimo ya tenia metida la mano debajo la falda de esa mujer y por la expresión de ella, el viejo la estaba follando con sus dedos, porque al sacarlos se los llevó a su nariz ,diciendole a su capataz con una sonrisa maquiabelica si había conocido alguna vez una mujer tan cerda que se corriera con solo meterle un dedo , dándole una palmada en el culo y pidiéndole qué se fuera a lavar la concha y a ponerse lo que le habia dejado sobre la cama, porque todavía no terminaba con ella.
Una vez que la mujer escucho esa orden y se pudo reponer ,se levantó y observo el burto qué había ocasionado al invitado y su sonrisa reflejo como un triunfo para ella y se retiro del lugar contorneando su culo y sus tetas, cituacion de la cual se percato el patrón no poniendo muy buena cara y una vez ya ambos a solas Geronimo le hizo recordar a su capataz, los más de 30 años que trabajaba para él y todas las putas que se habían follado en ese tiempo, pero aunque le duela recordar y admitir, ninguna como su mujer, la madre de sus hijos, ella era un huracán, un torbellino en donde la pusieran y como la pusieran ,pero la muy zorra nunca estaba satisfecha, le gustaba vestirse provocativa y salir a calentar vergas a los campos donde se trabajaba, con el pretexto de ir a buscarlo; Muchas veces se percato que más de un trabajador se jalaba el paquete cuando la veían pasar moviendo el culo o casi enseñando las tetas, aún estando preñada no se le quitaba lo caliente y ofrecida.
Asi fue como entre copa y copa fuero haciendo alarde de quien se habia follado mas mujeres en Campo de oro y Geronimo se orgullecia de llevar el récord, pero por lo que ha sabido es que sus dos hijos estan por alcanzarlo, claro que en estos tiempos las putas por interes brotan hasta en el suelo mas árido, notando a su trabajador algo tenso despues de aquella conversación y aquel espectáculo que acaba de presencial con esa puta ofrecida, pidiéndole que lo disculpe, pero con esa hembras aunque ya tengan dueño, solo un maricon podría resistirse.Talves cuando se canse de darle pico a esa puta se la pueda prestar, total no será la primera vez que se come las sobras, golpeandole la espalda y diciendole qué se relaje que solo es una pequeña broma, se conocen muchos años y ha compartido mucho más que unas mujerzuelas, sus hijos lo quieren como un tio; Él les ha enseñado mucho más cosas que el mismo con respecto al trabajo y producción de esas tierras y con respecto a ese forastero le dice que solo lo contrate por el tiempo que dure la faena y que viva por mientras en la choza con él y sobre la mocosa que la mantenga alejada de las faenas y de los trabajadores, no quiere saber que ande calentando vergas , aunque es una potranca aun saben perfectamente que la gran mayoría se convierten en yeguas con muchas ganas de ser montadas y sacar leche a muy temprana edad.
En esos precisos momentos asoma la cabeza por la puerta del despacho la putita de Rosario, pensando que ya el patrón se encontraba a solas, pero este le dice que pase que no sienta vergüenza, que Ruben es de entera confianza y no va a ir con el cuento donde su marido el cornudo, ademas para que de su opinion sobre la lenceria que le regalo, claro que obviamente no podra llevarsela a casa para lucirsela ante el cornudo; Rosario se aproxima hacia el escritorio con un camison semi transparente atravez del cual se podia observar un conjunto muy chiquito de ropa interior, que dejaba ver perfectamente su parte delantera ,un triangulo , que mas que triangulo era un hilo que se metía entre esos dos labios vaginales ya brilosos por la calentura de la hembra.
Gregorio viendo como se ponia su trabajador, empinandose de un plantón toda esa copa de whisky, le pidio a su putita que se habriera el camisón y mostrara esa lencería que llevaba abajo, la cual ni lo dudo y como modelo de pasarela dejo caer esa prenda al suelo, quedando con su diminuta tanga y un brasiel que apenas cubrian los pezones.
La muy zorra se paseo asi , exibiendose como una mercancía para luego irse a sentar en las piernas de su patron sin dejar de mirar antes de reojo el tremendo paquete que habia provocado en el invitado , el cual no hacía nada por ocultarlo.
Una vez sentada en las piernas de su jefe, sintio como este le desabrochaba el sostén y lo dejaba caer sobre el escritorio, para por detras abrazarla con sus manos y jugar con sus pezones, mientras se fundian en un beso ardiente y jugoso, todo esto en presencia de su trabajador estrella, quien a esa altura esperaba la invitación que nunca llego, puesto que cuando la muy condenada mientras jugaban con sus tetas dejo caer su tanguita y arrojarsela al capataz, el cual se la llevo a la nariz, aspirando ese olor embriagador;Pero esta vez el patrón castigaria a sus dos empleados, a ella por putita y querer dos vergas y a él por querer participar sin ser invitado, asi que respetuosamente le pidio que ya podia retirsrse, sabiendo que se iba con una tremenda calentura entre sus piernas y una vez a solas con su zorra de turno, arrojo todo lo que estaba sobre el escritorio al suelo y la puso en cuatro con su cabeza pegada a la mesa y sin previo aviso la follo por el culo sin compasion, por haberse comportado como una cerda sin su permiso y haberle querido ver la cara.
Luego se la llevo hasta el sofa en donde la tiro, haciéndola sentir una cosa y habriendola de piernas se lo clavo sin compasión, diciendole que la mandaría a casa bien follada y llena de leche para que el marido sepa la zorra que tiene por esposa, mientras además le comia las tetas y cuando la mujer sintio que aquel salvaje ya iba a culminar trató de liberarse , pero éste se afirmo de sus hombros y después de varios espasmos , deposito todo su semen en el interior de la vagina de ella, quedando un buen rato con su verga introducida, hasta que perdió su dureza.
Mientrastanto cuando Ruben llego a su aposento aún iba algo cachondo por lo sucedido en la casona patronal y ver a esa chica salir a su encuentro como si se tratara de su esposa o su novia ,dandole un besito cerca de sus labios y preguntandole como le habia ido, le hicieron tragar saliva y tener que controlarse de no tomarla entre sus brazos y apoyarla contra la puerta de entrada y comersela con su boca por todo ese cuerpo que desprendía lujuria y pasión.
Pero no solo esa sorpresa lo esperaba , sino que entre ella y su abuelo habian becho un buen aseo en la choza e incluso se habían tomado la atribuciones de prepararle una deliciosa cena y en agradecimiento Ruben saco el mejor trago que tenia para momentos especiales y mirando a la pequeña les hace entender que la noticia que les trae hace meritar abrir esa botella, porque el patron acepto que lo contratara, pero con la única condición que no quería que Rina anduviera por esos campos cuando esten trabajando esos hombres, no quiere que alguno se ponga grosero.
El viejo Ismael le agradece con un apreton de mano y mirando a su nieta la insta a darle las gracias al señor, porque no cualquiera hace esos gestos tan desinteresadamente , asi que de ahora en adelante tiene que ser muy agradecida y demostrárselo al señor Ruben en todo lo que le pida, mirando al capataz mientras se lo decia a su nieta, sintiendo este como si aquel viejo le estuviera dando permiso para hacer lo que quisiera con aquella nena.
La niña se abrazo al cuerpo del capataz y mirándolo hacia arriba le hizo saber que nada de lo que ella hiciera podría pagar lo bueno que es él y Ruben solo le sonrió e inertemente sus manos se posaron en sus nalgas,dandole una nalgada y reaccionado al instante muy avergonzado, pero con esa mirada de complicidad que venia de parte del abuelo, quien con esa sonrisa morbosa que se le reflejaba en ese momento interrumpio anunciado que se sentaran a probar lo preparado.
Después de haber cenado y haber dejado limpia la cocina, Ismael ya algo tomado agradeció nuevamente al capataz por lo bien que se había comportado con ellos y por darle cobija y trabajo a él
y su nieta, quien en ese momento estaba en salón estirada boca abajo, como si estuviera tomando sol en la playa sobre un cobertizo en el suelo viendo unas revistas de modas, en donde salian hermosas mujeres con diferentes tenidas .
Ruben tomando un sorbo de licor de su vaso y agarrando la botella se va sentar frente a televisor ,teniendo desde ahí una vista panorámica de la niña, que con cada ojeada del libro parecía habrir un poco más las piernas y restregar su cuerpo contra esa colcha .
El forastero viendo que el viejo capataz ponía sus ojos entre la película de la tele y las nalgas de su nieta, le pregunto si no era mucho problema dejar un rato ahí a su nieta ya que estaba tan entretenida viendo esas revistas y que apenas le diera sueño ella se iría acostar; Que le habían dicho a Ruben, quien sin dudarlo y con una sonrriza en la cara no se negó a las peticiones del perverso abuelo, quien sin antes de irse a su recamara le pide a su nieta de que no haga pasar rabia al patrón y se comporte como una niña agradecida por todo lo generoso que ha sido él, guiñandole un ojo, dejando a Ruben mas pensativo y caliente.
Una vez a solas, tanto la niña como el capataz continuaron en lo suyo, pero este sin despegar la vista entre el televiso y el culito de Rina, que para esa altura ya no solo habría sus piernas con cada ojeada sino que levantaba más el culito como ofrenda de pago por los favores recibidos.
Ahora el viejo hermitaño bebía de la botella y sin que la nena se percatase con cada movimiento de ella, él se sobaba la verga por encima del pantalón , qué ha esa altura parecía una carpa de circo y mucho más aún cuando vio girarse y quedar tendida mirando hacia el techo de la choza con su vestido blanco subido hasta la mitad de sus muslos, desde donde se podía divisar su calzoncito de encaje y semi transparente no apto para una criatura de su edad.
Pero lo que vino a continuación dejo al hombre con la boca abierta al percatarse como una muñeca aun pequeña podía tener unos labios tan marcados qué sobresalian de la tela y si no fuera porque estaba algo tomado hubiera hasta pensado en ese momento que hasta húmedo los tenia.
El hombre ya no daba más y pensando en ya irse acostar para hacerse la mejor paja le pidió a la niña que dejara esas revista porque ya era hora de dormir, pero la pequeña se levantó y sentándose a su lado con su cara angelical, le susurro su oído si podía dormir con él, ya que su abuelito ronca mucho y casi siempre la despierta a mitad de la noche, porque segun él ya no puede dormir porque se le acumula mucha energia, cosa que hizo estremecer al individuo , quien a esa altura trataba de ocultar el volumen de su entrepiernas.
Ruben le dijo que si estaba loca, aunque en el fondo deseaba llevársela como un pervertido a la cama,pero en un momento de razonamiento le indico que eso no era correcto, además eso no le gustaría al abuelo de que ella duerma con extraños.
Pero lo que él no esperaba , fue una confesión de los labios de esa hasta ahora inocente criatura, quien le dijo que muchas veces cuando su abuelo llevaba algún amigo a casa, él mismo le pedía que durmiera con su amigo porque debía agradecer los regalitos qué le traían y su abuelo ni cuenta se daba como dormían, solo que al otro día le preguntaba al amigo si ya no había deuda que pagar.
El capataz al escuchar esta confesión no hallaba si ir a la recamara y despertar a golpes a ese desquisiado abuelo y tirarlo a la calle o llevarlo a la policía, pero todo eso significaba ver a esa niña alejada del único ser que ha estado con ella aunque sea de esta manera y que sea llevada a un orfanato en donde tal ves halla un pervertido como su abuelo esperándola.
Ruben empino el último sorbo de la botella y dejándola a un lado miro a esa tierna e inocente niña y tomándola con su mano tosca y grade del mentón le preguntó si a ella le gustaba acostarse con esos hombres y la respuesta fue un sí rotundo, porque según ella esos hombres la trataban como una princesa, como le hubiera gustado que la tratara ese padre que nunca conoció.
El capataz estaba asombrado y no podía asimilar qué esas palabras salieran de los labios de una criatura de apenas once añitos.
Esos mismos labios que temblaban en los dedos de ese hombre , quien no tardo en acercar su boca y ponerla suavemente en sus labios para sentir el sabor más dulce y delicado jamás experimentado.
Fueron los brazos y las manos de la pequeña que al instante se enredaron en el cuello del hombre atrayendolo hacia su frágil cuerpo y fundirse ya no en beso de una simple inocencia, sino en un beso apasionado y caliente en donde las lenguas se entrelazaban, dejándolos por segundos sin respiración, mientras Ruben con sus manos recorría todo ese cuerpo qué parecía temblar cada vez que pasaba por debajo de esa falda acariciando por encima de su calzón esas dos nalgas tiernas, suaves y llenas de deseos.
En un momento de lucidez el capataz reacciono y se levantó pidiendo que mejor todo quedara así, que no estaba bien lo que había sucedido, pero esta niña que a esa altura más que una niña inocente parecía una ninfomana se le acercó y tomándole una de sus manos la llevó bajo su falda y la puso por sobre su calzón moviendola sobre su vagina, señalandole lo mojadita qué la tenia desde que lo vio en el campo.
Ruben no pudo controlarse y lentamente paso su mano por encima de aquella prenda asesorandose que efectivamente estaba húmeda y no tardo en hacerla a un lado con sus dedos para pasarlos por esos labios tan abultados para una niña de esa edad, volviendo a la realidad cuando un pequeño quejido le hizo ver que ya tenía uno de sus dedos haciendo camino en su interior.
Ya no había retorno para esa calentura que lo consumía y al ver que se le estaba dando en bandeja tomo a la pequeña al igual que se carga una esposa en su primera noche de boda llevándola a su recamara, pasando por afuera de la habitación de el viejo abuelo, quien se había quedado profundamente dormido.
Al llegar a su cuarto la sentó al borde de la cama y nuevamente arrodilladose frente a ella le planto un beso, pero esta vez fue un beso lleno de pasión y lujuria, para luego estirarla sobre esa enorme cama subir su falda hasta su cintura , habriendo sus piernas y oler aquello que lo tenía como un desquisiado.
Por varios segundo estuvo oliendo ese aroma que salía de su calzón como un perro sabueso, para luego seguir con su lengua mientras sentía como aquella mujercita comenzaba a retorserce de placer.
Así estuvo un buen instante cuando hizo ese calzoncito a un lado y antes sus ojos aparecieron dos hermosos labios brillosos por la excitacion y un clitoris qué no tardo nada en ser devorado por esa boca hambrienta de sexo y una lengua que al posarse entre la avertura fue introduciendose lentamente como en cámara lenta; Pero lo que aún más calentó a este hombre es ver a su pequeña hembrita cuando con sus propios dedos hizo sus labios a un lado como una ofrenda para la lengua de su macho.
Sin duda era todo una putita muy bien entrenada.
Ruben devoraba ese manjar como si fuese la última gota de agua del desierto y esa pequeña zorrita lo disfrutaba y no pensaba dejar ir muy fácilmente esa magnífica lengua, asujetando con sus dos manos la cabeza de su hombre.
Luego de unos 10 minutos de haber degustado aquel suculento postre, el capataz subió besando todo ese delicado cuerpo, subiéndole su blusita y mientras la pequeña cooperaba quitandosela sentía como el hombre ahora iba por sus tetas ,que para ser una niña estaban excesivamente muy desarrolladas , talves por el constante manoseo por parte de los amigos de ese viejo.
Ruben pasaba de una a otra, las lamias, las mordías, estiraba con su dientes cada pezon y las amasaba a su antojo, mientras la pequeña diablilla se esmeraba con su mano tratando de desabrochar ese pantalón y acariciar aquella hermosa herramienta que le luchaba por salir de esos bóxer .
Fueron cosas de segundo, cuando él ya solo se encontraba en camisa y calcetas y con una niña de rodillas lamiendo aquella verga y recogiendo los líquidos presiminal con su lengua, para volver a lamer desde la cabeza ,bajando por el tronco y recoger toda esa baba acumulada en sus dos enormes bolas oscuras y peludas.
De repente esos ojitos se detuvieron y miro hacia arriba y vio ante ella ese hombre de figura imponente dándole la orden qué abriera su boquita para recibir esos 23 centímetros de pura fibra y carne.
No fue fácil para la pequeña Rina introducirse ni la mitad de aquella descomunal verga, pero al sentir la presión de las fuertes manos de aquel hombre en su nuca , sintió como se hacía paso en su cabidad bocal y aunque las fuertes arcadas y ganas de vomitar venían constantemente eso no fue impedimento para luego de varios intentos tuviera todo ese falo culiandole la boca y dándole el mayor placer a su macho.
El rostro del capataz estaba en extasis, mientras le daba la mejor cogida oral a esa mocosa, pensaba cuantas vergas se habrá comido para estar tan bien preparada y tan desarrollada, con unas tetas y un coño qué ya muchas quisieran tener.
Luego el hombre se sentó en una antigua silla de madera,cerrando sus gruesas y velludas piernas, apuntando toda esa majestuosa verga hacia el techo de la vivienda y dando un golpe cito en el respaldo de la silla, la pequeña entendió el mensaje , abriéndose de piernas ,poniendo una en cada extremo mientras se sujeta del cuello del hombre y soltandose de una de las manos y mirándolo a los ojos ,bajo aquella mano buscando ese mástil y una vez que se posiciono de el, lo guió por todo el contorno de sus labios vaginales húmedos y caliente como si fuese un lápiz labial, para finalmente levantar sus caderas y lentamente irse metiendo todo ese trozo de carne.
Esta chica estaba tan existada o tal ves era ya la costumbre que el dolor pasó a un segundo plano, porque ahora agarrada del cuello de su nuevo macho, arqueo su cuerpo hacia atrás y empezó con desenfreno sube y baja, mientras el capataz disfrutaba de esas dos tetas bien formadas .
Todo en esa habitación olía a lujuria, placer, a sexo y al parecer a ninguno de los dos ya les importaba que solo una pared los dividía del viejo abuelo qué dormía profundamente.
Después de estar como 10 minutos en esa posición y ruben sentir la humedad en sus piernas por el órgano provocado a la chica y pensando que ya había quedado exhausta y satisfecha, la vio levantarse de la posición en que estaba y dirigirse coquetamente moviendo sus maravillosas y apetecibles nalgas .para ponerse en cuatro al borde de la cama y pasar su brazo por entre su pierna y hacerse una rica paja con sus dedos qué incluían sus labios vaginales y ahora hasta el agujero de su culito, mientras desde su asiento y meneandose su verga Ruben observaba tan exitante espectáculo pensando en la gran puta que tenía ante sus ojos ,y como ella le estaba ofreciendo todos sus ajugeros ahora se la iba a culiar sin compasión y miramientos. .
Y así fue, se levantó y escupió su mano y la paso como un lubricante por su falo, para luego tomarla de las caderas ,atraer ese culito hacia el y escupir ese hoyito y con su dedo prepararlo para lo que venía.
Apunto su cabeza a la entrada y esta fue entrando sin mayor esfuerzo gracias a la colaboración de la mocosa y cuando ya tubo la mitad de esa verga en su interior, de un solo golpe lo metió todo chocando sus bolas con sus nalgas ; De ahí para adelante fue un desenfrenado meta y saca, mientras estrujada sus tetas o sus dedos jugaban con su coño qué sonaba como chapotear en un charco de agua.
Era increíble ver a esa niña tragarse ese gran trozo de carne y suplicar por mas, realmente era una auténtica ninfomana y pervertida sexual qué hasta para hacerlo acabar era una diosa del sexo, ya que al sentir que su hombre ya estaba por darle su ración de leche que tanto ansiaba se salio de aquella verga y mientras el se estiraba en esa cama con sus piernas abiertas y sus brazos detrás de su cabecera, se dejó regalonear a que ella hiciera sólita el último trabajo, ya que como un perrita en celo se aferro a la verga de su macho y entre tragadas, lamidas y paja pudo hacerlo acabar, soltando chorros de leche qué cayeron por todo el torso de ese hombre y una parte en la boca de ella, que no dudo en tragarsela y recoger con su lengua todo lo que había caído en el pecho del hombre hasta dejarlo limpiecito,para finalmente fundirse abrazados con un apasionado beso.
Así sin darse cuenta y agotados esta parejita se quedaron tendidos solo cubiertos por la sabana venciendolos el sueño, solo horas después fueron interrumpidos por una voz proveniente desde la puerta de la recamara, que les decía como habían amanecido los tortolitos, dejando a Ruben tieso en esa cama, sin poder justificar que hacia acostado y desnudo con esa niña de apenas once años.
CONTINUARA..
próximo capitulo..El patrón también va a querer disfrutar de los placeres de su capataz y ahora a falta de novios ya la chiquita tendrá dos y hasta con el consentimiento de su abuelo.
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