Salgo a Exhibirme y termino con el hermano de mi Amiga. Pt. 2 [Final]
Continuación de una historia que comencé hace poco más de un año.
Ahora si, estaba bien mojada y me dieron ganas de darle una buenas mamadas, su pene entraba todo en mi boca, hice l0 mejor que pude con mi lengua, creo que lo estaba haciendo muy bien, el gemía más que yo. Al parecer le encantaba como pasaba mi lengua de arriba hacia abajo, el va a su ritmo, No sabe mamar culo pero hace lo mejor que puede.
Gerardo levántate!, le dije. Lo senté y yo me arrodillé enfrente de el, quería divertirme viendo sus muecas de placer, o al menos eso parecía. Comenzé lamiendo sus pelotas (más grandes que su pene jijiji) era placentero para mí, semejantes testículos entrando y saliendo de mi boca me provocaban una calentura espectacular, estaba con la vagina ardiendo en llamas. Con mi mano izquierda sostenía el pene de Gerardo y con la derecha me metía los dedos bien hasta dentro. Con los ojos entre abiertos de placer me veía Gerardo, su mirada llorosa y sus gemidos casi agudos, el chico la estaba pasando increíble.
Quería más, así que maniobré rápido como pude, contra mi talón seco restregaba mi vagina, mi clitoris estaba en el paraíso. Ahora con ambas manos jugaba con los pezoncitos duros de Gerardo y proseguí a mamarle el pito. Tenía el escroto rojo e hinchado y con cantidades obscenas de preseminal escurriendo de la punta, me detuve un momento antes de continuar. Subí por su cuerpo sintiendo su pecho sudado y al llegar a su rostro lo ví a los ojos y lo besé. En ese momento no me importó lo torpe que el lo hacía, el intercambio de saliva era tal que a ambos teníamos el cuello y el pecho húmedos por no decir mojados. Le mordí el labio, gimió de dolor pero no le molestó. > Si no te importa seguiré con lo mío, le dije. Literal, le di mamadas para tragarme ese jugo tan rico que salía de su cosita. Lo chupaba suave y “amablemente” Gerardo se encorvó para alcanzar mis chichis y me dijo: >Putamandre Lizbeth! Tienes unas tetotas bien ricas. Este chico es muy directo jajaja. La cosa seguía a mil por hora, en eso Gerardo me toma de la coleta, y me empuja duro contra su pubis, primero fue lento y luego lo hizo rápidamente y con fuerza, Aún podía respirar, parecía que se iba a venir dentro de mi boca pero aguantó bien.
Lo noté algo cansado, así que de nuevo le pedí que se levantara, esta vez me senté y le dije: Gerardo ven, sientate en mis piernas. Algo extrañado lo hizo, lo tenía sobre mi. Le pedí que me mamara los pezones y gustoso lo hizo, Lo hacía con relativa fuerza, estaba hipnotizado mamando. Su erección había bajado un poco y así lo dejé un rato. Luego de casi diez minutos, los pezones me ardían y me dolían, los noté algo morados. Vaya que Gerardo tenía antojo de tetas.
Ambos estabamos casi rendidos, pero aún no le daba a Gerardo lo que quería. Bajé el nivel de la luz de la sala y encendí las luces de mi pecera, Gerardo estaba algo asombrado, sabe que algo sucedería… Camine hacía el, las luces tenues, azules y moradas iluminaban mi cuerpo, hacían brillar mi vagina mojada, mis labios húmedos y mi maquillaje corrido. Gerardo me veía de frente, sin palabras y solo un suspiro. Era como una Diosa para el, hasta ese momento no me cabía en la cabeza lo que comenzé con este chico, El pensar que estaba teniendo intimidad con un Adolescente era un estallido de emociones y sensaciones, un sueño hecho realidad para mi y una fantasía para el.
Lo tomé de la mano, lo levanté hacía mi. Estabamos frente a frente, yo húmeda y el bien erecto. Instintivamente me tomó de la cintura y me acercó lentamente a el, nuestas pieles desnudas estaban juntas, nuestro calor era demasiado. Nos besamos, mientras, lo tomé de la verga y comenzé a masturbarlo, le dije: Anda, hazlo. Me tomó de la espalda con la mano izquierda y con su verga en la mano derecha, estaba intentando meterla. Sentir su escroto duro y caliente entre mis labios y pasando por mi clítoris fue sensacional! Su pene estaba dentro, y empezó el coito. > Estás bien calientita y muy mojada. Dijo Gerardo. Yo gemía de placer, tenía los ojos en blanco, Gerardo lo estaba haciendo bien, metía y sacaba su verga con delicadeza, yo quise hacer lo mismo, ahora yo me movía, adelante y atras. Me tomó del culo y me toqueteaba, le pedí que me metiera los dedos por el culo, que rico se sentía, parece que sabe lo que hace. ¡LLEGÓ EL MOMENTO! Gerardo me dijo: Lizbeth, creo que ya me voy a correr!!!. Yo estaba tan caliente que me movía más salvajemente, sacó los dedos de mi cola y me abrazó fuertemente, se sujetó de mi con coraje y… Eyaculó dentro de mi. Su Leche caliente se sentía tan bien, estaba temblorosa y sin aire. Me tiré al piso mientras veía a Gerardo en el sillón, exhausto y agotado, con un hilo de semen escurriendo de su pene.
Fui lentamente a recoger mi ropa, y me fui al baño. Me senté en mi silla, limpiaba mi cara primero, me desmaquillé, con un paño húmedo limpié mi pecho, Me ví en la necesidad de abrir las ventanas pues la calentura no bajaba, lavé mi vagina por dentro y por fuera, sin embargo no me bañé, salí vestida con la misma ropa que usé en la tarde cuando salí, pues tenía otros planes con Gerardo.
Caminé hasta la Sala, tomé la ropa de Gerardo y se la pasé, le dije: > Andando, vamos a salir un rato.
confundido me preguntó: iremos a Cenar?, a lo que yo le respondí: > No, mejor aún.
Eran ya las 20:30, estando afuera Gerardo no hizo muchas preguntas, ibamos tomados de la mano. Me dirigía al parque donde me encontré con el por la tarde. Estando allí fuimos a la banca donde estaba yo, y le conté a Gerardo mis intenciones, > Quiero tener tener un poco de tocamientos contigo. El se negó ya que le parecía una locura hacerlo ahí en Publico. Le conté de mi gusto por exihbirme y por qué hice lo que hice en la tarde. Así que sin más me precipité hacia su rostro y lo besé, tomé su mano y la lleve a mis tetas, él sin rechistar me siguió el juego, las tocaba muy rico. Noté algunas miradas, normalmente a esa hora no hay mucha gente y así fue, Un par de chicas mayores que yo pasaban, y nos vieron, las escuché reírse y murmurar, una de ellas nos gritó: Pinches cochinos! Eso me exitaba, me bajé el cierre del suéter y dejé mis tetas al aire, y la otra chica dijo: a la madre, que buenas ubres tienes amiga!, la verdad lo tomé como un cumplido, ellas siguieron su camino y Gerardo empezó a mamar y a mamar, le bajé el cierre y le saqué la verga para masturbarlo.
Yo estaba calientísima, me hubiese gustado que esas chicas se acercaran a vernos, pero no hubo más suerte, ya nadie pasaba por ahí, unas cuantas personas pero lejos de nostros. Me bajé los Shorts y el aire corría por mi entrepierna, Gerardo me quitó el Suéter, y oh Sorpresa! Cuando me dí cuenta ya estaba desnuda, el metal frío de la banca en mis nalgas y las hojas de los árboles cayendo sobre mí, era increíble, por su parte Gerardo era un puto maricón pues no quiso ni quitarse la camisa. El aire frío secaba el el pene de Gera, así que lo ayudé con unas mamadas, estaba recostada de lado chupándole el pene al chico, sentí sus dedos caminar por mi cuerpo hasta sentir un leve masaje en mi ano, voltee a ver a Gerardo y le dije: >Quieres probar Pervertidote?, me senté en sus piernas, y me hacerqué más a el, levanté un poco el culo y tomé su verga para metérmela por el culo y le dije: > Mi primer Anal! , él se rió por lo gracioso que sonó aquello. No necesité saliva pues su vega estaba llena de Preseminal, que entró fácil, así que le dí unos buenos sentones al cabrón, estaba gimiendo tanto, estaba comenzando a sudar, tenía los Pezones durísimos por el frío, Gerardo me pasó su teléfono y me dijo: > Grábate y enseñame como rebotan tu par te Tetas, Putita!, eso mismo hice, fue un pequeño video de menos de 15 o 20 segundos. Le enseñé al pendejo a respetarme, así que apreté fuerte el culo, el bastardo gemía bien rico, yo le daba sentones bien fuertes e iba moviendo el culo muy lenta y sensualmente para terminar. De nuevo se iba a venir, esta vez me desprendí de el y lo levanté, le jalé la verga muy duro, yo estaba agachada en el suelo, el se vino en mi cara, sacó un poco más de semen que la última vez, mejor para mi. Le dije; terminamos. Así que con lechita en la cara regresamos a mi departamento, le dije que llamara a Susana para que viniera a recogerlo, pero el me dijo que pidió permiso para ir “a casa de un amigo” , el chico es todo un hijo de puta, así que lo dejé quedarse conmigo. Nos bañamos juntos, pero esta vez no hubo nada, salvo por que me pidió tallarle la espalda jeje . Así que al final nos fuimos a dormir, yo con mi Pijama calientita y el solo con su camiseta y sin calzones. Fue una noche fría para el, pero en la mañana amaneció bien calientito con la verga bien Dura, nada mal ese chico.
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