Sofía Ardiente Volcancito, Cap. 4.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sexigaleno.
Después de más encuentros privados entre estos dos personajes cada semana, y de los juguetitos eróticos que compró don José, para Sofía, esta chiquilla comenzó a utilizarlos en la privacidad de su recamara por las noches, hasta que por fin llegó a insertarse bien un dildo delgadito y largo en esa pequeña hendidura y así cada noche lo hacía, primero fue con esfuerzos y después ya pasaba libre ese juguete, por lo que se dio a la tarea de buscar un reemplazo ya que veía que este ya se deslizaba sin lastimarle internamente, hasta que encontró en la recamara de la sobrina de don José, un envase de desodorante que estaba en el cesto de la basura de la recamara de esa sobrina, el cual lavó muy cuidadosamente y se lo llevó a su cuarto, para continuar por las noches haciéndose maniobras de introducción.

Posterior a esas sesiones ese envase ya corría casi libre en el conducto vaginal de Sofía, el cual ya insertado correctamente se lo dejaba puesto por largos minutos, luego por horas y por ultimo ya una noche, se lo dejo insertado hasta el amanecer, el cual al retirárselo salía impregnado de la savia íntima de esa doncellita que al igual destilaba al exterior mojándole exquisitamente su panty, ya Sofía había logrado por fin, después de varias semanas de ejercicios penetrarse con algo similar al grosor del pene de don José, hasta que un fin de semana llegó como de costumbre ese hombre a su hogar y fue recibido por su princesita que estaba en un baby doll muy sugestivo y zapatillas altas, obviamente con su respectivo interior tierno de lencería.

S.
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Papi, qué bueno que ya llegaste, ¿quieres algo de comer o que quieres hacer.
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?

J.
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Ah, que linda te pusiste hoy, no, ¡no quiero comer, te voy a comer a ti!

S.
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Ay papi, calma, espera no me aprietes así, auchhh, me das miedo papi, ¿qué quieres hacerme?, ¿Por qué me volteas?

J.
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Ahh, ¡es que mejor te voy a dar carnita en el culito!, ahh, así me vas a tener todo en ti, ahh, por eso te di vuelta, lo tienes bien paradito ¡¡¡y por ahí te lo voy a meter hoy!!!

S.
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Noo, papi, por ahí noo, como crees ayy me aprietas mi pancita, ayy, no seas brusco papi, mejor vamos a tu cuarto te tengo una sorpresa, ayyy, suéltame papi, suéltame, ayyy

J.
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Bueno vamos a la recamara, ahh, quiero ver esa sorpresa que me tienes, mmm

S.
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Vente papi, súbete a la cama, quiero que me hagas como siempre despacito y ya veraz

J.
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Sí, ya voy nada más me quito la ropa, tu quédate así vestida me excitas más de verte así

S.
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Ah, bueno, ay papi estas muy brioso hoy, desde que llegaste te sentí en mi cola tu coso muy duro, ahh, papi, noo, noo, por atrás noo, papi, no me voltees, hazme como siempre

J.
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Ahh, estoy caliente por verte así, ¡ahh, bueno pero ya sabes cómo lo hacemos, abre las piernitas!, eso es, ahhh, que rico hueles mami, ahh, ¿te mamo la conchita, o no quieres?

S.
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Ay papi, ya sabes que si me gusta que te bebas los juguillos que me salen, ahhh, ahhhh, que rica lengua, ahhh, ahhhh, papi, papi dame más lengüita, ahhh, adentro, ahhhhhhhhh

J.
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Que deliciosos tus juguitos mami, ahhh, aummmm, ammmm, ammmm, te gusta que te mame la puchita, mmm, ammmm, ammmm, dame más jugos, ammmm, ammmm, amm

S.
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Ahhh, ahhhh, papi, de donde quieres que saque más, si te los bebes todos, ahhh, ahhhhhh

J.
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¿Quieres brochita, verdad?, pero te mamo los chuponcitos antes amm, amm, mmm, que ricos, ya los veré crecer y te los voy a morder, ammmm, ammmm, ¡abre las piernitas!

S.
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Ahh, sii, papi, dame brochita ahhh, ahhhh, ten el gel aquí lo puse, pónmelo, ahhh, esta calientito, ahhhh, dame más brochita, ahhh, ahhhh, mucha, muchaa, brochitaaa, ahhhh

J.
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Ya va, ya va, uy que rico ya entre un poquito ahhh, otro cachito, ten, ahhh, ahhh, ya hasta ahí, nada más, ahhh, ahora muévete como culebrita, ahhh, ahhhh, eso es, eso es, ahhhh

S.
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Ayy papi, tienes bien gordo el capuchón ayyy, pero ya lo aguanto más, ayyy, ayyy, mete otro cachito papi, ayyy, ayyyyy, más, masss, ayyy, ayyyy, mas, masss, ahhh, ayyyy, ayyyyy

J.
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Ya con eso, ahhh, ya hasta ahí, ya te metí más que otras veces, uy que calientita estás

S.
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Ayy, papi, yo quiero que me lo metas más, ayy, quiero más, ayyy, adentro, mas, ayyyyyyy

J.
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¿Pues ahora qué?, ya casi entre todo en ti, ahhh, que apretadita se siente tu cositaaa, ahhhh

S.
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Ayy, ayyyy, papi esa es la sorpr….
, ayyy, creo aguantarte todo, ayyyy, mételoo, metelooo,

J.
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Ahhh, síii, ábrete bien, ten todo de una vez, ahhh, ahhhh, que rico, que rica y calientita estas Sofía, ahhh, muévete, exprímelo, ahhh, ahhhhhhhhh, quieres lechita, ahhhh, ahhhh

S.
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Uyyy, ¡no te muevas papi!, ayyy, ¡no te muevas!, ayyyyyy, duele, duelee, ayyyy, ¡pero no lo saques!, ayyyy, quédate quieto ayyyy, ayyyyy, ¡¡¡qué grande eres papi, me matas con tu bicho!!! ayyyy, ¡me vas a mandar al hospital ahora sí!, ayyyy, que dolor, ayyyy, ayyyyyyyyy

Ya una vez en el acoplamiento total y después de permanecer ambos cuerpos quietos, y entre las sabanas, con unos suaves movimientos, pero con ritmo don José se dio a la tarea de profanar completamente a Sofía, quien entre ayes de dolor y de vez en cuando gemiditos, lograba esa doncellita una seguidilla de orgasmitos muy delicados quien los percibía don José por las breves y secuenciales contracciones del perineo de la jovencita, que no paraba de hacerlo, hasta que por fin don José no aguanto y se derramo copiosamente dentro del aparato reproductor de esa ninfa, quien los aceptó completamente.

S.
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Ahhh, papi, te viniste mucho, los sentí en mi pancita, ahhh, por fin los sentí bien adentro, ahhh, haber sino me preñas, papi, ahhh, ahhh, me gustó mucho, ahhh, ¿y a ti no papi?

J.
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Ahhh, si Sofía me gustó mucho, fue bueno lo de ese dildito tamaño dedito, ¿lo usaste mucho en mi ausencia, verdad?

S.
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Sí, todas las noches lo usé, pero este, fue el bueno, mira papi, ji ji ji.

J.
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Ah cabrona golosilla eso es casi mi medida de grueso, ¿pero cómo lo lograste?

S.
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Ah pues mira papi, el dildito ese que me trajiste, en dos noches ya me lo metía completo, pero encontré este y pues le di uso, es un envase de desodorante de bolita, uy me lastimaba al principio, pero después, que crees, ya me lo dejaba puesto toda la noche.

J.
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No pues sí, fue bueno, que lo hayas encontrado, ¿pero no te salió sangre?

S.
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No papi, para nada, sólo dolía, pero me acostumbre, es cortito mira, pero tu verga es larga, es el doble de tamaño, y esa si me lastimó ahorita, pero me siento bien, uy papi, a poco quieres más, ya te sentí que se te está hinchando dentro de mí, ayy, ayyy, ¿no me lo vas a sacar ya?, ayyy, ayyyy, me duele papi, ya no lo hinches, mejor sácamelo ayyy, ayyyyyyyyy

J.
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Yo no lo hincho mami, ¡tú eres la que hace que se hinche!, sino apretaras tan rico adentro ya me hubiera salido de ti, ahhhh, ahhhhh, que divino es ese agujerito, ahhhh, ahhhhhhhh

S.
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Ayy, papi, ¿te gusta mucho mi cosita?, ayyy, ayyyyyyyy, no lo cabecees tanto, ayyy, me lastimas, despacito papi, ayyy, ayyy, ayyyyyy, ¡ya se te puso duro otra vez!, ayyy, ayyyyy

J.
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Sí mi amor ya está duro, ahhh, ¡y ahí te lo voy a dejar sembrado toda la noche!, ahhhh, ¿o, no quieres?, ahhh, pero muévete, como hace ratito, ahhh, ¡me gusta cómo me exprimes!

S.
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Ayy, papi, ayyy, ¿así te gusta, como me muevo?, ayyy, pero me estorba adentro ayyy, ayyy

J.
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¡Claro que me gusta y mucho!, ahhh, que rico te mueves, eso así, asii, despacito, ahhh, me vas a exprimir otra vez, ahhhh, ahhhhhhhhhh, toma, tomatelossss, ahhhhhh, ahhhhh

S.
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Ayy, ayyyy, ¡papi, que calientes!, ayyyy, ayyyyy, ¡me llenan todo el huequito!, ayyyy, ayyyyy, mi pancita, ayyyyy, ¡¡¡los siento muy atolados y espesos!!! ayyyy, yaa, papi, yaaaaa, yaaaaaaaaa, me matas, ayyymmmm, sácalo ya no te lo aguantooo, ayyyyyyyyyyy

Entre un breve descanso y la plática que se llevaba a cabo, entre Sofía y José, en esa muda estancia de eróticos encuentros que se llevaban a cabo cada semana, él no se despegó de ella y así nuevamente volvió a erectarse por tercera vez, dentro de esa vaginita receptiva, misma que acuso recibo del efecto que se engrosaba dentro de su tierna vaginita ensanchando su intimidad, aunque ya estaba completamente lubricada por los fluidos anteriores que José vertió en ella, esa estrechez ya no soportaba en su estancia albergar más la hombría de su perforador, pero entre tanto se daba un vaivén muy intenso José, quien no tardo en volver por tercera ocasión en esa tarde-noche, vaciar el contenido espermático de una manera caudalosa, dejando el interior rebosante de esa chiqui-mujercita, quien por tanto esfuerzo y desgaste se quedó dormida en ese lecho copulatorio.

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C O N T I N U A R Á.
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