Iniciación anal.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por bvn1948.
Llevamos ya un tiempo fantaseando con aquellas escenas que vimos en aquel cine x en nuestro viaje a París, pero tenemos algo de miedo de que las cosas no nos salgan igual que a los protagonistas de la peli…
También tenemos claro que si no lo intentamos, nunca sabremos cómo nos va a nosotros…
Ahora me darás tu culito a mi… ponte al borde de la cama, tiéndete de espaldas y levanta las piernas hasta que las rodillas toquen tu pecho, yo me arrodillaré para empezar a lamer tu vulva y tu clítoris… ¡qué rico! , no tengas prisa, relájate, cierra los ojos y trata de sentir como mi lengua recorre todo tu sexo y baja para dedicar los primeros lametones a tu ano… aprieto un poquito con mi lengua y siento que te estremeces… Despacito lleno un dedo de vaselina y lo apoyo en tu ano, aprieto un poquito y se introduce una pequeña parte pero arranca en ti un suspiro… añado mas vaselina y ahora con movimientos lentos delante y atrás logro que entre en su totalidad… Tus ojos siguen cerrados y noto que tu respiración se acelera… sigo chupando tu sexo mientras mi dedo explora tu interior con suaves movimientos…
Te pregunto y tu me animas a seguir adelante… pongo mas vaselina y ahora lo intento con dos dedos, despacio, muy despacio… tu ano se relaja y no ofrece resistencia por lo que al cabo de un ratito decidimos probar con tres dedos… Ya es momento, me dices, de que lo intente con mi pene que lo está deseando y lo demuestra con una magnífica erección…
Nos ponemos los dos en la cama acostados de lado y yo, desde detrás de ti, lleno de vaselina mi pene y te pido que me ayudes a dirigirlo para que no se desplace demasiado rápido y pueda dañarte…
Lo apuntamos en tu ano y despacito, con muchas pausas, hacemos que se introduzca milímetro a milímetro… Por fin estoy dentro de ti, dentro de tu ano, y desde mi posición detrás de ti puedo acariciar tus pechos y tu cara mientras te digo lo mucho que te quiero… Yo no quisiera que esto terminara nunca pero tu quieres sentir como exploto dentro de ti y empezamos un movimiento que me lleva al séptimo cielo…
Nos quedamos quietos y abrazados hasta que mi pene se pone flácido y lo sacamos…
Me dices que te ha gustado mucho y que lo repetiremos con frecuencia… yo veo en tu cara que estás feliz y esto es lo que me importa.
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