Sexo a distancia

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Conocí a este muchacho por las redes sociales, hablabamos muy poco en ese entonces, pero solíamos mandarnos mensajes provocativos, una noche mientras estaba aburrida decidí conversar un rato con él. Nos saludamos y empezamos lo bueno. Solíamos decir lo que nos gustaría hacernos, siempre empezaba por los besos, aunque no le besara de verdad podía sentirlos, las caricias por todo el cuerpo, quitarnos la ropa poco a poco, él a mi y yo a él. Hasta que él interrumpió un momento.

–Disculpa la tengo muy dura.
–No importa.
–Michy (así me dice) ¿Quieres verla?
Sonreí, claro que quería versela, aunque imaginaba que no era mucho.
–Claro, envía la foto. Quiero ver tu pene.
Estaba un tanto ansiosa, a los pocos segundos mandó una foto y Dios.

Le medía unos 19 cm, un tanto grueso, estaba completamente parada, la punta se veia brillosa, con dos grandes bolas colgando, joder que se me hizo agua la boca.

–Me da pena.
–Tu pene es enorme.
–Calla, no digas eso tonta.
–Mi boca esta deseandolo, de verdad. No me imaginaba algo así.
(Y era verdad)
–Te toca
–¿Disculopa?
–Quiero ver tu vagina.

Discutimos un momento, pero era lo justo, debía hacerlo. Entré al baño y tomé una foto de mi vagina recién depilada (gracias a dios) y se la envíe. Al poco tiempo él mandó una foto. Su pene con gotas de semen saliendo. Mi vagina estaba explotando, estaba muy mojada. Sonreí al leer el pié de la imagen.

"Me encanta tu vagina, michy."

Pasaron dias, las fotos iban y venian entre los dos, subimos el nivel a audios gimiendo o vídeos masturbandonos. Era tan exitante, pero me faltaba su miembro dentro para venirme, su gran y grueso miembro dentro. Solía meterme marcadores gruesos pero no se compraban a lo que sentía que sería su pene entrando en mi frenéticamente. Me volvía loca imaginarlo.

Hablamos mas y mas, ya no era tanto con motivos sexuales, era como una platica entre amigos, teniamos gustos musicales parecidos etc. Un día, al recordar que no es de mi país, le pregunté de donde era.

–Es verdad. Soy de Argentina, amor. (En este punto nos decíamos así)
Debo admitir que me sorprendí
–Soy de Mexico. Me cago en todo.
–Estas muy lejos cariño.
–Supongo que no se nos hará nunca.
–No… Pero aún podríamos "hacerlo".
–G (asi le diremos) ¿Que planeas?
–¿Tenes skype?
–Veo a donde va esto, te veo ahí esta noche.

Estaba emocionada, jodidamente emocionada, me puse la ropa interior mas sexy que tenía, me arregle, aunque suene estúpido, queria ver su verga en vivo. Llegó la noche, llegó la hora, ambos iniciamos sesión, la llamada entró y salió la imagen, en cuanto le vi el rostro (no lo habia visto) se me calleron las bragas. Era un muchacho joven que parecía mayor para su edad, con un poco de barba, cabello café oscuro, ojos cafés claro, piel bronceada, fuerte y sobre todo tenía una sonrisa que haría que me pusiera en cuatro y rogarle que me penetre.
Lo vi un momento, atontada, el se rió un poco (su risa y su voz son sexys con su acento) pero también se sorprendió, pero claro. Una chica de grandes senos, cabello castaño, ojos cafés bien delineados, en ropa interior negra, de piel blanca, grandes pechos y un trasero que da algo que desear son extraños.

–Puta madre.
–¿Que pasa?
–Eres super sexy.
–Gracias, lo mismo digo.
– ¿y si me modelas tu ropa interior?
–Solo si me enseñas ese enorme miembro después
–Claro que si, ahora levantate y modelame tu ropa intima.

Le obedecí sonriendole, me paré enfrente de la camara, movia mi trasero a los lados, abría las piernas apoyandome de la cama, me puse en cuatro dejando que viera mis pechos.

–Desnudate para mi, amor.
–¿Y mi enorme polla?
–Hazlo anda. Te enseñare mi pene después.

Seguí sus ordenes, baje mis bragas inclinandome un poco, dejando que él viera, desabroche mi sosten aprovechando que estaba de espaldas y lo retiré mandándole un beso, me senté en la cama abriendo las piernas y jugando con mis pechos. El hombre tenía una cara de goce que reventaba.

–Ven aquí hermosa, lo prometido es deuda.

Bajó la vista de la camara dejándome ver de su cintura para abajo, tenia una gran erección, su miembro se sostenía dejándolo parado sin que él lo tocara, me moje, pase mis manos a mi vagina, acariciándola sin meter ningún dedo, jadeaba un poco, él empezó a masturbarse.

–Dejame ver como lo haces amor.
–Esta bien pero acerca más la cámara.
–Mejor te haré sentir que te lo vas a tragar, así como te gusta amor.
–Si, te haré un oral G.

Tomó su cámara mostrándome su miembro mas de cerca, seguía sin meter un dedo, mi boca estaba echa un mar, el movía su cámara como si sujetase mi rostro y me hiciera chupar su miembro una y otra vez mientras se masturbaba, me imaginé a mi lamiendo el largo de su pene, saborando ese delicioso y enorme miembro, metiéndolo a mi boca para chuparlo mientras él jadeaba, jadeaba y se apretaba el cabello, me exitaba tanto pensarlo, lamía y mordía mis labios una y otra vez, él empezó a masturbarse mas rápido. Igual que yo. Duramos unos 10 minutos.

–Tu boca amor. Ahh.
–G correte, correte en mi boca.
–Michy, michy me corro. Ahhh ahhh.

Me dejó ver como los chorros de semen le empapaban el estonago, salieron unos 4 chorros cargados en su totalidad, al verlo me corri, mi primera corrida en semanas, me limpie con una toalla, él se limpió con una camisa y me miro sonriendo.

–Te toca.
–¿Ah?
–Acerca la cámara a tu vagina. Te haré un oral.
–Lo haré amor.

La acerqué, empape mis dedos rn saliva para aparentar su lengua, el jadeo mirandome.

–Mirala esta tan mojada.

Empezó a mover su boca, fingía chupar y lamer, meter su lengua dentro, mi mano le seguia sin parar, me sentía en la gloria, como si realmente me hiciera un oral, a veces él jadeaba, sonreia, se mordía los labiod, eso me calentaba aún mas. Él moviendo su lengua dentro mio, chupando toda mi vagina, eso era el paraiso.

–Amor mi vagina ahh aah
–Estas chorreando amor. Me encanta como sabe.
–Chupa mas aahh
–Eres deliciosa

Seguimos así, unos 13 minutos hasta que no pude mas, mis dedos masajearon mi clítoris sin piedad hasta venirme, explote otra vez, cansada, muy cansada, pero mi vagina aún quería mas. Mucho más.

– ¿Cansada preciosa?
–Un poco, pero quiero tu pene dentro.
–Jaja yo quiero sentir tu vagina… Ya sé! Pon tu cámara entre tus piernas, lo vamos a hacer, amor.
–Lo haré con mis manos, sé que quieres hacer.
–Te follare muy duro amor, así como te gusta.
– Mnhh si, follame duro mi vida.

Se levantó de la silla, se desnudó, Dios era tan sexy, su pene seguia erecto, él sudaba, empezó a masturbarse agitando su pene, yo movia mis dedos acariciando mi vagina, dandole pequeñas palmaditas al ritmo de él, movió su pene que si entrara lentamente, metí tres dedos, era tan delicioso, se movía en círculos, yo le imitaba con los dedos, lo saco y metió fuerte, mis dedos le imitaron haciendome gemir, él echo su cabeza para atras sonriendo y se movio rápido una y otra vez, mis dedos se movían rapido dentro de mi vagina mientras mis gemidos y jadeos se hacían presentes. El se movía cada vez mas rapido y duró, me encantaba, deliraba de placer, él igual, dejo de sostener su miembro y empezó a fingir que me penetraba salvajemente, podía sentir sus embestidas fuertes y sin piedad dentro mio, me volvía loca, me encantaba, gemí su nombre, el jadeo el mío. Seguimos hací un largo rato hasta que le supliqué que lo acabará, Él se movió tan rudamente que sin meter ni un dedo gemi por ultima vez antes de correrme otra vez. Mi cuerpo no daba para más, él se vino enseguida de mi, se tiró en la silla cansado, escuxhaba su respiración agitada y veía como su semen salia a montones de su miembro, resbalándose por este.

–Tu vagina es deliciosa amor
–Tu pene es la gloria cariño
–Vayamos a dormir, estoy cansado.
–Yo igual
– ¿Dormimos juntos?
–Claro.

Esa noche lo vi dormir, hasta que tuvimos que colgar, a la mañana siguiente me dejó un mensaje diciendo que me visitaría pronto. Espero su llegada ansiosa. Quiero probar esa polla.