A los 15

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, tal vez este parezca el típico relato de sexo lleno de cliches pero pues siendo adolescente esto fue lo que paso la primera ves que estuve con un hombre:

Tenía 15 años y ya tenía tiempo vistiéndome de nena (empecé como a los 9-10) siempre me había excitado sobre todo usar medias y tacones altos y el acceso a la ropa sexy era relativamente fácil pues vivía solo mi hermano, mi mama y mi abuela que eran bastante jóvenes tenían bastante ropa que a mí me volvía loca y cada vez que podía me vestía de nena, así llevaba ya varios años y nunca había tenido ninguna sorpresa hasta que una ocasión que en teoría estaría sola todo el fin de semana, asi que recuerdo perfectamente que me puse un calzoncito y brasier negros de mi mama, unas medias color piel con unos ligueros estilo años 60, un vestido de cocktail a medio muslo de color negro, una peluca negra y unos zapatillas negras con morado con el tacón bien alto; y asi estaba mas que feliz paseándome por la casa soñando con salir así a dar una vuelta a la calle

Asi que estaba en la cocina cuando se oyó la puerta de la entrada, trate de subir rápidamente para esconderme pero con los tacones y los nervios solo llegue a la mitad de la escalera cuando mi hermano me vio (yo tenia 15 y el 16) primero fue el momento mas vergonzoso que he pasado en mi vida, yo ahí vestida de nena lo mas sexy que había podido y de repente estaba mi hermano frente a mi, me quede de piedra sin saber que decir y me limite a terminar de subir las escaleras para ir a cambiarme cuando mi hermano me grito “culo, culito, que rica estas” volví a quedarme de piedra y el me dijo que me veía bien sexy que lo dejara verme asi, yo trate de balbucear alguna escusa pero me dijo que no fingiera y que me quedara vestida asi, que el no le diría a mi mama ni a mi abuela, fue uno de los momentos mas excitantes y difíciles de decidir, pero era tanta mi excitación que acepte fingiendo pudor.

Primero solo bajamos a la cocina para tomar algo, mientras el me decía que le sorprendía lo bien que me veía, que de verdad parecía mujer y además muy sexy, pasando los minutos me fui relajando y enviciando de sus halagos, la verdad me encantaba oír que parecía una mujer sexy , de modo que asi estuvimos un buen rato hasta que el empezó con la idea de que quería salir conmigo asi a la calle para poder andar de la cintra con una mujer sexy, se imaginaran que no le costo mucho convencerme, asi que accedí con la condición de esperar a que se hiciera mas tarde.

Estábamos haciendo tiempo cuando el me dijo que para salir me cambiara los zapatos que tenia (ahora se tipo pump) y que mejor me pusiera unas zapatillas de esas con cintas que se amarran al tobillo y que me pintara las uñas de los pies, eso me éxito muchísimo, pues además de querer hacerlo estaba disfrutando mucho hacer lo que mi hermano me decía y mas cuando me dijo que con esas zapatillas parecía una putita, eso me hizo sentir como humillada pero a la vez me encanto, asi que sin esperar ni un momento subí a pintarme las uñas y a cambiarme los zapatos (desde ese dia me excita mas usar sandalias que pumps)

Asi fue mi primera salida a la calle vestida de nena, vivíamos en la colonia roma en el d.f.
y mientras caminábamos por insurgentes el me decía que le encantaba que pareciera que yo era su puta y que le exitaba como se me quedaban viendo los hombres que encontrábamos a nuestro paso, yo me limitaba a sonreírle y decirle que a mi también me gustaba, y en un momento me detuvo y me dijo que regresaríamos en taxi a la casa porque quería hacerme su putita de verdad y que no solo lo pareciera, en ese momento yo ya estaba completamente desinhibida y muchísimo más que excitada, me sentía como humillada y completamente dominada a sus deseos y esa sensación me encanto, tanto que no que como le hice para tener valor de contestarle que prefería regresar caminando para estar mas tiempo en la calle vestida de nena porque me gustaba mucho como se sentía caminar con tacones y porque me gustaba que la gente que encontrábamos de verdad parecía tomarme por mujer, asi que regresamos caminando con la condición de que le fuera platicando como era mi fantasía para que me cogiera, sentí que se me derretían las piernas cuando me dijo eso de lo caliente que estaba, asi que comencé a decirle lo que tanto había fantaseado no necesariamente con el sino para mi primer encuentro, asi que le dije que me excitaba muchísimo estar en la calle vestida asi porque el me lo había pedido, le dije que me había exitado que me pidiera cambiarme los zapatos porque yo también pensaba que asi me veía mas como una putita, y que me encantaba sentirme como humillada y deseada a la vez, que me encantaría que me amarrara a la cama, que me tocara las nalgas y me diera besos en el ano, que después me desatara y me hiciera mamársela metiéndome su pene hasta la garganta pero suave y después me lo hiciera con las piernas sobre sus hombros.

Fue realmente sorprendente como se notaba que el se excitaba con lo que yo le decía y lo único que me dijo es que de verdad no se había imaginado que yo fuera un travesti pero que le gustaba haberme sorprendido porque hiba a ser el primero en tener mi culito.

Cuando llegamos a la casa me dijo que antes que mi fantasía cumpliríamos la de el, y a mi no me importo de lo que se tratara hasta que me di cuenta de que lo que haría era grabar en video nuestro encuentro, tuve algo de miedo pues pensé en el peligro de la evidencia pero no me importo y le dije que haría lo que me pidiera, asi que me llevo a la sala y me hizo posar y bailar frente a la cámara mientras me decía como moverme y que seria su putita de ese momento en adelante me hizo decir a la cámara que quería mamársela, que quería ser su puta y sentir su verga rompiéndome el culito; seguir las ordenes que me daba me volvía loca de placer, me sentía de verdad como una putita y eso me fascino.

Me hizo chupársela como le dije que lo había deseado y asi estuve chupando su pene un rato que se me paso volando, cuando me separo y me dijo que me lo haría allí mismo y parada, me hizo poner mi culito a la altura conveniente para que me penetrara y yo no lo podía creer, estaba allí empinando el culo para que mi hermano me penetrara.
Me sentía casi de verdad como una mujer, fue sensacional.

Asi que asi fue como perdí la virginidad de mi culito, el momento en que de verdad sentí mas placer, no solo físico sino mental, fue cuando me pregunto si ya quería su leche, que le dijera que quería su leche dentro de mi uffffff ese momento fue maravilloso, el hecho de tener que decirle que quería su leche en mi culo será el momento cumbre de ese dia para toda mi vida.
Y no pude contenerme de decirle también que no quería fuera la ultima vez que yo seria su putita siempre que el lo quisiera……