aventuras bixes
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, mi experiencia en el sexo era todo lo extensa que puede ser dentro de la vida matrimonial, de una pareja joven que experimenta todo aquello en lo que nos poníamos de acuerdo. Aun no gustándole ha mi esposa probamos el sexo anal no sin antes llegar ha un pacto, yo debía probarlo también, fui ha comprar un consolador para que ella me lo hiciese ha mi y sentir lo mas parecido ha lo que ella sentiría.
Esa noche comenzó bien ha ella la gusto el consolador, se hecho a reír diciendo.
– ten en cuenta que todo esto te lo voy ha meter en tu culito.
Jugamos un rato y llegado el momento cojimos el lubricante y empecé ha ponerle en su culo, una vez bien preparado, después de haber metido dos de mis dedos en el me dispuse ha follarle el agujero prohibido hasta ese momento, primero le dolió pero al rato su culo se acostumbro y dejo de quejarse, cogio el consolador lo puso en marcha y se lo empezó ha pasar por el clítoris hasta correrse, en ese momento se aparto de mi diciendo.
-Esto no me lo vuelves hacer jamás.
-¿no te ha gustado? -pregunte sorprendido después de oír los gritos de su corrida-
-No, el culo solo me duele la corrida ha sido gracias al consolador, pero ahora vas ha comprobarlo por ti mismo. Ponte ha cuatro patas.
Me hecho lubricante y empezó ha pasar la punta del aparato ya en marcha, la sensación era de placer y excitación al mismo tiempo, note un pinchazo cuando sin avisar introdujo mas de la mitad de un solo golpe, y me dijo.
-Que putita, la sientes dentro pues tómala toda.
De otro empujón la metió entera, la dejo metida mientras se metía debajo de mi para chupármela, pasados cinco minutos volvió ha mi culo diciendo.
-Esto te gusta he putita, se te ha puesto mas dura que nunca, pues te vas ha enterar, te voy ha dejar el culo que no te vas ha poder sentar en un mes.
No se si me excitaba mas lo que me hacia o lo que me decía, cogio el consolador y empezó ha meterlo y sacarlo como si tuviese que desatascar el fregadero, pero mi sensación y el placer junto con sus palabras soeces tratándome de puta y tocándome la polla llegue ha una corrida bestial.
Esto lo repetimos casi siempre ahora tenemos consoladores de varios tipos un par de ellos con correa para ponérselo ella y otros que los utilizamos según nos apetece, pero eso si jamás me ha dejado volver ha darle por el culo.
Pero mi ultima experiencia no fue esta, ni con mi mujer, es la que paso ha relataros ha continuación.
Mi jefe, es un poco capullo, como la mayoría, pero ese día se supero cuando ya estábamos terminando la jornada del viernes y dispuestos a pasar un tranquilo fin de semana me llamo para decirme que un cliente de Vigo necesitaba el material que tenia el camión cargado para ponerlo en la tienda al día siguiente, mi jefe me suplico que lo subiese yo por que sabe que si conduzco no me puedo quedar dormido ya que son mas de 700 Km., los que separan Vigo de mi ciudad.
Sin apenas ganas, se lo dije ha mi esposa me prepare ropa limpia y una mochila para cambiarme y salí de viaje. Después de una noche entera conduciendo y parando para lo justo, llegué demasiado temprano para descargar la mercancía pero tarde para dormir, deje el camión aparcado en la puerta del cliente y me dispuse ha buscar una cafetería para tomar algo, después de media hora de caminar encontré una. Dentro había de todo, dos borrachos que se retiraban de una noche de juerga, un grupo de hombres que se disponían ha salir ha trabajar, pero lo que me sorprendió fue la chica que se encontraba sola en una mesa con un café con leche y cara tristona. Después de tomarme mi café con dos donuts pagué invitando a la chica y salí en busca de mi trabajo sin decirle nada.
Llame al numero del cliente, en poco tiempo tenia el camión descargado y listo para volver a casa, pero aunque aguanto muy bien el sueño ya eran muchas horas trabajando sin dormir. Así que decidí buscar un lugar donde dormir un poco y poder darme una ducha, el dueño de la tienda me dio un par de señas pero después de ir ha ambos lugares no tenían habitaciones vacías. Al salir del segundo hostal me encontré de cara con la chica del bar y me paro para darme las gracias y preguntarme que estaba buscando, le conté lo que buscaba y me dijo que ha esa hora no me seria fácil encontrarlo pero que si yo quería podía ir ha su casa, ya que vivía sola. Teniendo encuenta que las alternativas eran pocas accedí, aunque me parecía un tanto violento por mi parte, pero como fue ella quien se ofreció acepte.
Llegamos ha su casa, era la primera de una urbanización, una vez dentro me dijo que se iba ha duchar ya que la noche habia sido muy larga y poco fructífera, me dijo que tardaría mucho, pero cuando salio ya me habia dormido en el sofá.
Me despertó un agradable aroma ha comida, me frote los ojos y la vi mirándome fijamente.
-hola me llamo Victoria pero todo el mundo me llama Viki, esta mañana con tu cansancio y mi enfado no nos hemos presentado.
– yo me llamo Raúl, mucho gusto en conocerte.
– ¿quieres comer ya o te duchas antes? Me dijo con una sonrisa.
– para ducharme tendría que ir al camión por mi ropa.
– si te acuerdas como ir, te espero.
Tarde unos quince minutos en volver, entre me señalo la puerta del baño y me di una relajante ducha. Al salir, me invito ha sentarme en la mesa para comer, todo transcurría de forma muy normal, hablamos de mi trabajo y mi vida, de su trabajo y su vida etc. Terminamos viendo la TV con un café y una copa, pero desde que recogimos la mesa mi polla estaba nerviosa debido a su bata de andar por casa y mas cuando se sentó ha mi lado en el sofá, Viki se dio cuenta y se tapo, pensé que no quería nada comigo y le dije.
-Perdona si te ha molestado mi forma de mirarte pero con ese cuerpo es difícil contenerse.
-no tranquilo lo que me molesta es hacerme ilusiones y después quedarme con las ganas.
-por que te vas ha quedar con las ganas?
-con todos los hombres con los que parece que conecto y creo que puedo tener sexo acaban saliendo corriendo.
-eso lo veo difícil, que problema tienes?
-yo con ellos ninguno.
Me acerque ha ella le puse una mano en su cuello otra en su rodilla y le di un tierno beso en los labios, el siguiente fue de los que te quema la boca y seguidamente nos estábamos metiendo mano, casi me saco la ropa ha tirones y ha ella comencé ha chuparle los pezones que estaban duros como piedras, poco a poco fui bajando y cuando le quite las bragas me dio, me dio en toda la cara una polla casi como la mía. Levante la cabeza la mire y le pregunte.
– este es el motivo?
– si, me imagino lo que estas pensando.
– no creo que lo sepas
Su cara se transformo cuando baje otra vez la cabeza y empecé ha chuparle la polla con muchas ganas ya que después de probar sexo anal con un consolador mi maullar fantasía era poder hacerlo con un transexual por gusto que no pagando y aun no teniendo experiencia se que le gustaba por que se lo que me gusta ha mi, nos fuimos ha su dormitorio donde continué chupando hasta que me puse sobre ella y me la metí de un solo golpe, la estuve cabalgando un rato des pues ella me la chupo y me cabalgó a mi, después me puso ha cuatro patas y me follo el culo de forma salvaje diciéndome.
-te gusta mi polla putita?
-si me encanta
-tu gusta que te de por el culo?
-siiii
-este culito tiene ganas de polla he zorra pues toma polla
-si dame rómpeme el culo
-eres mas puta que yo
Después cambiamos las posiciones y acabamos haciendo un 69, cuando estaba a punto de acabar me aviso para que me apartase pero yo no quise, al notar su corrida en mi boca yo también me corrí y seguidamente nos dimos un beso intercambiando nuestro líquidos.
Hablamos un rato de lo sucedido pero yo tenia que irme, me dio su dirección y nº de Telf. Para estar en contacto.
Cuando llegué ha casa se lo conté ha mi esposa y esa noche follamos como locos, de esto hace 7 meses hoy Viki vive con nosotros, pero esta es otra historia real que ya os contare en otro momento….
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!