David y Evelyn 1: Mi primera vez con una chica Transexual
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Davidcdmx5.
Hola! Me llamo David y tengo 25 años, mido 1.70 soy de piel clara y me gusta mucho el deporte, uso barba y cabello negro ondulado medio largo en un peinado como ese que usaba una tal Miley Cyrus, me considero sapiosexual de genero fluido, por que la vida me ha llevado a compartir sabanas con mujeres, chicos y chicas Transexuales, y hoy les quiero contar esto que paso un día como cualquiera en CDMX.
Fui a comprar ropa al centro en unas tiendas que conozco desde hace mucho, hoy había conseguido una chamarra de piel sintetica de buena calidad, un pantalón de mezclilla de talla 30 que me encanta sentir como se me resbala por las caderas, y cuando uso cinturón, me aprieta el pene y las nalgas y las piernas que entreno en el gym, y unos tenis de gamuza color crema, ya iba de regreso para entrar al metro en la plaza de la constitución cuando vi una chica agachada, afanada en controlar una lona rebelde de esas que tienen leyendas y que usan tanto en las marchas, mientras me acerqué a ayudar no pude evitar notar el brillo plateado de una tanga asomando en la parte baja de su espalda, “yo agarro esta parte, tu arregla esta otra” le dije sin más, ella se sorprendió y tardó un segundo en comprender que de hecho alguien le estaba ayudando, era una chica transexual rubia, un poco chaparrita, de piel blanca bronceada y unos lindos pechos y unas hermosas y amplias caderas, cuando estuvo terminada mi labor le guiñe un ojo y me dispuse a seguir mi camino, cuando escuché su voz, con un acento que pronto aprendería que es de chihuahua “me puedes ayudar, quiero llegar a Tlatelolco pero no se como” me detuve a pensar cómo llegar desde ahí mientras ella me comentaba que iba a una marcha junto con unas amigas y que ellas ya estaban allá, yo empecé a darle las indicaciones pero iba a medio camino y nos dimos cuenta que era muy intrincado llegar desde ahí sin saberse la ruta de antemano, así que decidí acompañar a Evelyn (asi me dijo que se llamaba) mientras caminamos me decía que se sentía aliviada que la acompañara en ciertas partes que le daban miedo, yo le platiqué de detalles históricos del camino para distraerla y cambiarle el humor lo cual efectivamente la hizo sentirse mas tranquila.
Cuando llegamos a Tlatelolco habían docenas de contingentes, Evelyn me dijo que tenia que encontrar el contingente con el que venía, y en eso nos llegó una reportera, me sorprendí mucho al ver que cada pregunta que la reportera hacía, Evelyn respondía diestra y directa, luego empezó a comentar todo lo que esperaba que se lograra con la marcha y empecé a sentir como mi pulso se aceleraba, al verla tan inteligente mi parte sapiosexual se activó y empecé a verla con nuevos ojos, cuando la reportera se fue a seguir su reportaje Evelyn me miró todo asombrado, se sonrió un poco ruborizada y le pregunté mas cosas, nos distrajimos lo suficiente para que cuando se desató un sorpresivo aguacero, ya no había lugar donde guarecernos de la lluvia, así que primero nos cubrimos con la lona pero cuando arreció mas y más, tuvimos que irnos acercando hasta que quedamos bien abrazados, cubiertos por la lona que difícilmente podía detener el agua y nuestros pies y tobillos absolutamente empapados, a mi que me exitan los besos bajo la lluvia esta situación me provocó una solida erección y una respiración entrecortada, Evelyn quizá se sentiría igual cuando me dijo “te puedo besar” yo no pude mas y solo empecé a besarla por la comisura de los labios, nos besamos de piquito un par de minutos y ella pudo sentir mi erección que se alojaba entre sus piernas, yo no pude sentir nada ahí, como si fuera una chica “normal”.
Cuando terminó la lluvia, tomados de la mano buscamos la comitiva lgbt+ y buscamos cualquier excusa para que la acompañara, el resto de la tarde transcurrió genial, convivimos con la gente de la comitiva y disfrutamos del evento hasta bien llegada la noche, eran eso de las 11 pm y ella me dijo que era muy tarde para que yo me regresara hasta Iztapalapa, y que quería pagarme la ayuda que le había ofresido ese día, en casa había algo de comer y podría poner mi ropa a secar, yo acepté y llamé a casa para avisar que me había ido a la marcha y me quedaría la noche en casa de un grupo de amigos.
Luego fuimos juntos hasta puente de Alvarado, abrazados como novios, me embriagaba su aroma y sentir su trasero contra mí, cuando llegamos al edificio donde vivía me dijo que vivía con varios romees, y subimos hasta el tercer piso, saludamos y nos pasamos directo a su habitación para que me pudiera quitar la ropa.
El lugar no era de lujo pero estaba arreglado con muchas ganas, había una cómoda con un gran espejo y una litera que en ocasiones compartía con su mejor amiga, pero esta noche estábamos solos.
Yo me disculpé y me senté de espaldas a ella en la cama, para quitarme la playera y los tenis, me cubrí con una toalla que estaba cerca y me di la vuelta para buscar mi ropa nueva, justo a tiempo para ver como se levantaba la blusa y sus pechos bellísimos saltaban a la vista, sin darme tiempo a reaccionar y con destreza se quitó el brassiere y reveló unos preciosos pechos con pezones pequeños y hermosos, ella no parecía tener problema alguno al estar desnuda frente a mi, me sonrío y luego se bajo los pantalones, volví a ver la tanga plateada, unas piernas bellamente torneadas y unas nalgas de infarto.
Se presentó tan solo con esa tanga plateada ante mí e instintivamente me acerqué a ella, su sonrisa era grande y cuando estuve suficientemente cerca pude sentir de nuevo su aroma embriagador y al tocarla, su piel tersísima, la agarré por la cintura y acercamos nuestros cuerpos, acerqué mi boca a la suya y sentí su aliento, luego la besé, y empecé a recorrer su cuerpo con mis manos mientras ella recorria el mio con sus manos, nos agarramos las nalgas y mi toalla cayó al piso, mi erección se incrustó entre sus piernas y pegue su cuerpo al mío, nos fuimos a la cama donde me puse encima de ella besándola y lamiendo su cuello su piel, ella me sentó en la orilla, se bajó y empezó a darme un delicioso sexo oral a mi ya duro fierra, mi pene es de tamaño un poco mas grande de lo normal, grueso, y ella se lo comía con maestría, en un momento se metió todo mi pene en su garganta hasta el fondo y luego sacó la lengua y empezó a lamer mis huevos, yo sentía que me iba a correr en su garganta en cualquier momento, pero quería que esta noche fuera mas larga, asi que la levanté y juntos fuimos bajando su tanga, entre sus piernas su pene empezó a revelarse, estaba perfectamente oculto entre sus nalgas y se iba desdoblando revelando su gran y hermosa extensión.
Era un pene hermoso, largo como de 20 cms y grueso, desprendia un delicioso aroma a pene limio y su forma estaba genial, su glande asomaba parcialmente fuera de un prepucio suave como la seda, lo agarré con una mano y ella reaccionó, lo olí y me encantó su aroma, luego mirándola a los ojos me acerqué a la punta de su pene y con mi lengua apenas lo roce, haciendo que ella volviera a dar un brinquito, luego cerre mis ojos y me meti toda la cabeza de su pene en mi boca, lo empecé a chupar con el prepucio encima, y fui metiendo mi lengua bajo este poco a poco, recolectando el delcioso sabor de esta hembra con pene, busque que su sabor y aroma se me impregnaran en toda la boca, y luego volví a pararme y a besarla con el sabor de nuestras vergas que hacia aun mas deliciosos nuestros besos.
Evelyn estaba tan exitada que sin decir nada me puso en la cama bocabajo, yo me dejé hacer, ella se puso un poco nerviosa y me dijo que si me habían hecho beso negro antes y le dije que no pero que quería experimentarlo, entonces Evelyn me hizo parar mi culo me sentí sonrojado y como una puta mientras mis nalgas eran abiertas por sus manos y su goloza lengua daba placer a mi ano, Evelyn lamió hasta estar satisfecha y yo super exitado, con ganas de entregarme como una puta, ella no tardó en hacer realidad mi deseo, puso su gran pene en la entrada de mi culo y poco a poco empezó a presionar, primero pensé que me estaba empujando con el codo o algo, pero sentí su prepucio deslizarse y me entró un poco de miedo no sabia si era posible coger con un miembro asi, pero con un poco de saliva mi ano empezó a ceder, su cabezota estiraba mi apretado ano y pronto empezó a expandirse como nunca antes en mi vida, pensé que mi ano iba a reventar y luego todavía se abrió más, hasta dar cabida al enorme invasor, sentí un click y pensé que ella ya estaba dentro de mí, pero cuando empezó a empujar me di cuenta que apenas era su cabeza la que había entrado, Evelyn empezó a decirme lo mucho que estaba disfrutando de mi ano y todo lo que yo le gustaba y empezó a empujar mas y mas, yo sentí que entraba una cantidad imposible de pene y verga en mis entrañas, no sabia a donde estaba yendo toda esa carne, hasta que sentí una punzada en mi estómago, me tenía totalmente empalado en su tranca, y luego continuó penetrando más, sentí aun mas la punzada en mi abdomen y luego sentí un cosquilleo, finalmente, sus huevos estaban tocando los míos, me sentía aliviado de poder albergar esa verga dentro de mi, y luego Evelyn empezó a bombearme lentamente, pero con cada movimiento mi ano disfrutaba y empeaba a pedir que le dieran mas verga.
Mi boca no tardo en confesárselo y Evelyn empezó a darme lo que quería, pronto sus huevos hacían como palmadas contra mi culo y me daba nalgadas macizas que me dolían pero igual me dejaba nalguear por que esa verga lo valía, Evelyn me jodió el culo con mas fuerza y pronto me agarró de los hombros y fuertemente me penetró hasta el fondo, yo sentía que me atravesaba el abodmen y luego las punzadas de su mástil bombeando y expulsando su deliciosa leche en lo mas hondo de mi interior, cuando sacó su verga de mi ano sentí que se me había quedado abierto y ella escupió dentro de mi culo, me metió la verga una vez mas y luego de sacarla se acostó a mi lado.
Platicamos de lo que nos gustaba uno de otro y me quede abrazado a su cuerpo, no podía dejar de agarrarle sus preciosas tetas o sus fantásticas nalgas, entonces me entro la exitacion y le di la vuelta, con su culote para arriba, me bajé y repetí lo que ella había hecho conmigo, su culo estaba perfectamente limpio y cuando metí mi lengua entre sus nalgas su ano estaba muy sabroso que me daban ganas de comerlo durante horas, pero mi pene estaba durísimo y deseaba follarla ahí mismo, ella se puso un poco nerviosa pero se tranquilizo y me entrego su culo, puse mi pene en la entrada de su ano y sentí lo apretado y delicioso que estaba, pronto mi glande cruzó hacia su interior y el resto de mi verga siguió el mismo camino, estaba riquísimo su culo, apretado, suave y caliente, asi que la tuve que follar lo mas duro que pude, me atrinqué en su culo y me agarre de sus caderas tan fuerte como pude, y bombeaba con todas mis fuerzas, haciendo sonar nuestros testículos mientras chocaban, Evelyn gemía muy fuerte mientras le daba en esa postura, ver su culo entregado a mí fue demasiado y me corri en un gran orgasmo llenando de leche su culo, sintiendo sus nalgas conta mi abdomen, fue riquísimo sentir su recto apretándose exprimiendo mi verga aun mas, buscando recibir cada gota de mi leche, después de esto nos quedamos dormidos en la cama, bien abrazados y satisfechos, pero esta no seria la única ocasión que disfrutaría de un delicioso sexo con una verdadera mujer transexual.
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