EL PODER DEL DESEO 2ª PARTE
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Román estaba trabajando hacía un par de horas que habia enviado aquel hola cuando sonó su teléfono, miró ¡ ERA EL! le habia contestado con un hola guapa, sus dedos temblaban al igual que su cuerpo, aún le ffaltaba un par de horas para terminar, le quitó volumen a su movil, aunque de nuevo salto un nuevo mensaje
– Me defraudaste, esperaba me contestaras a mis mensajes, creí habiamos llegado a un acuerdo, gordita
Román no sabía que contestarle, además parecia que sus dos compañeros en aquella oficina supieran que hacia auqnue solo era imaginaciones suyas, ahora bajo las ropas de Román de hombre en realidad estaba Carmen, en segundos estaba excitada, solo con haber leido, que se dirigía a él como guapa o gordita, Román contestó al tiempo, sin mentiras, pues era incapaz de mentir.
– Yo te dije sobre mi toda la verdad, pero me da miedo quedar una segunda vez, yo nunca había hecho nada, con otro hombre,
– Si, pero no puedes negar que te gustó, todo lo que te hice, lastima que no tenía mas tiempo como te dije, pero has sido desobediente conmigo, eso no suelo perdonarlo.
– Lo siento,
– Bueno y si me has llamado entonces para que es
– No lo se la verdad, simplemente quería hablar contigo
– No lo sabes? yo te lo diré
– He de dejarte estoy trabajando, viene el jefe
– Si sabes por que me has llamado – Roman ya había guardado su movil en su pantalón – Te gustó y es porque eres sumisa una perrita sin collar, que necesitas que te eduque te enseñen a comportarte cuando estas ante un macho, tu lugar es ese verte bien sometida y dominada por el macho y no puedes evitarlo, naciste asi para eso para que te someta el macho, para obedecerle, para ello has de ser educada y ya te dije que lo haré porque sabes que desde ese día me perteneces, por eos me has llamado porque es tu naturaleza, sabes que me perteneces desde ese día aunque lo intentes negar.
Roman no leyó el mensaje hasta media hora después sin contestarle, al fin terminó el trabajo, en casa lo releyó una y otra vez, ya vestida ya siendo Carmen, su cuerpo temblaba de excitación lo releía para finalmente contestarle esa noche y comenzar una fluida comunicación ese miercoles y jueves, hasta llegar el viernes.
VIERNES 20 DE JULIO DE 2.
018
El maduro se llamaba Miguel, de 54 años, viudo, viviendo solo, con unas medidas de 1,86 de altura y 104 kilos, velludo pelo canoso, algo barrigón pero muy fuerte, fisicamente dotado con una verga de 23 cms
Era las 23 horas, Carmen salío de su apartamento, una sensación una mezcla de miedo deseo espiritu de aventura, la inundaba por primera vez en años, tenía algo que hacer, un viernes, vestido de hombre como Román, bajaba en el ascensor, su vida era tan gris tan insulsa, no sabía a que iba que ocurriria solo llevaba una bolsa deportiva con ropa de mujer pintalabios y una cita en el coche de él tras decirle donde recogerlo, su cerebro le decía cada dia que siguiera como estaba sola sin problemas, ocultando a Carmen, pero su instinto la impulsaba a que Carmen quería salir y Carmen quería ir con aquel tipo, ver que ocurria, y Carmen pudo mas que Roman finalmente, este caminaba por su calle hasta la parada del bus, dobló la esquina, las piernas le temblaron al instante en la parada estaba el coche que le habia dicho, parado esperando un todoterreno, a cada paso que se acercaba a él, su cerebro le decía que huyera pero su cuerpo parecía no responderle caminaba y caminaba hasta que casi llegando, Miguel bajó del coche lo rodeó abrió la puerta del pasajero y Carmen entró, el coche arrancó y comenzó a ir en una dirección.
– Hola – dijo Carmen al entrar –
– No quiero que hables, – Dijo Miguel frente al volante – por ahora será tu castigo por haberme hecho esperar tantos dias y no contestar, entendido no quiero repetir la orden
Carmen calló, veia los semaforos los coches pasar hasta que el coche paró en un oscuro aparcamiento, Miguel solo dijo
– Pasa atrás
Desde el asiento delantero pasó al trasero sin salir del coche Carmen, Miguel se quedó delante
– Vistete – le dijo Miguel –
Carmen obedeció se desnudo rapidamente abriendo la bolsa se colocó el corpiño negro, las bragas las medias las cogio a los ligueros del corpiño se colocó un vestido negro, elastico corto ajustado, finalmente se pintó los labios moviendose hacia delante para verse en el espejo pequeño de la parte del coche, ante la mirada de Miguel este pasó atras, junto a ella, no hubo palabras como la primera vez ni nada solo la cogió con cierta rudeza la puso sobre su regazo levanto el corto vestido y la azotó, esta vez fue mucho mas fuerte que la primera vez, le daba con todas sus fuerzas a la vez que ahora si hablaba escuchando los gritos de Carmen
– Toma – le daba un fuerte azote tras otro sin compasión seguido – esto te hara aprender q no desobedecer a que esto no es un juego, perra, – a su vez Carmen gritaba todo lo que le era posible por el dolor, se fundia con el llanto finalmente – esto no es un juego, perra, esto te hara saber lo que te espera sin desobedces lo mas minimo, ademas de hacerme esperar tu respuesta, te habras comido alguna polla en estos dias verdad guarra, por eso no me contestabas estarias puteando, pues eso se va a acabar, vas a estar encerrada en casa, me pediras permiso para todo a partir de ahora, o ya saes que te espera, vas a terminar bien educada bajo mi mando, cabrona,
A Miguel solo le interesaba los azotes sobretodo en nalgas, en cuestión de someter, lo demas no le iba, como le habia dicho le gustaba hacer lluvia dorada y tener a la perra lamiendo sus pies cuando lo deseaba.
Al fin la soltó, la escena siguiente fue Miguel pasó a la parte delantera, frente al volante mientras que Carmen quedo tendida sobre el asiento trasero con el vestido levantado hasta la espalda, en bragas boca abajo gimiendo de dolor sin parar, Para Miguel aquella escena era fantastica excitante, se relamía de gusto viendola así.
Carmen sentía de nuevo sus nalgas arder, gimoteaba aun de dolor, alli humillada y azotada por Miguel, pero a la vez no era como la primera vez, a la vez le gusto verse observada así humillada dolorida no le importo que él escuchara sus lamentos de dolor aún despues de soltarla, como le dolía las nalgas como le ardian y sin embargo habia un gran placer en sentirse asi usada, la escena aun duro varios minutos, hasta que Miguel habló.
– Pasa delante no quiero una palabra y cuando te deje hablar te dirigiras a mi como Señor entendido
Carmen pasó al asiento delantero a la vez que asintió con la cabeza, salieron del aparcamiento, Carmen pensaba la llevaria a las afueras muy cerca de ahí, cuando empezó a comprender y se le vino el mundo abajo, no sabía que hacer Miguel no iba a las afueras Miguel la paseó dentro de su coche por toda la ciudad Carmen vestida de mujer en el asiento, veia los coches paraba en los semaforos al igual que ella veia a los conductores se imaginaba ellos la verian ella miraba al frente para evitar con miedo alguna mirada, literalmente estaba siendo exhibida por Miguel, por la ciudad, este se daba cuenta del nerviosismo de ella pero lo hacia aun peor, cuando mas o menos llevaban unos diez minutos recorriendo la ciudad Miguel le espetó
– Van a ver todos que eres una hembra, una perra,
Carmen fue exhibida mas de media hora, por toda la ciudad, aunque en realidad nadie reparaba en ella, tras el cristal, sin embargo ella tenia un miedo atroz pero a su vez, aquello la excitaba sn poder remediarlo a su vez su culo sobre el asiento le ardia, le recodaba que era propiedad de él, Carmen interiormente pensaba en todo ello y lo iba aceptando tanto que a final del trayecto ya no le daba tanto miedo ir vestida de mujer, en aquel asiento recorriendo la ciudad.
hasta que Miguel volvio a aparcar, esta vez en una calle oscura a la vez que le dijo
– Te has portado bien te voy a hacer un regalo
En instante se vio tendida desde su asiento con la cabeza sobre el asiento de migel a la vez que este reclinaba el cuerpo y buscaba en la guantera, sintio sus dedos lubricados en su ano para poco despues, sentir como le era introducida unas bolas chinas, tras ello le coloco bien las bragas y la ordenó sentarse de nuevo, de nuevo arrancó, al principio, las bolas les parecio incluso un poco molestas a Carmen pero cuando realmente se acomodaron Carmen se iba excitando mas y mas, a la vez la excitación la hacia deshinirse mas de ir vestida de mujer en el asiento del copiloto, a su vez Miguel sin dejar de conducir le tocaba el muslo desnudo le cogió la mano y la guió al enorme bulto que delataba el pantalon, Carmen poso la mano allí, él la dejo solo la mano de ella, al principio solo estuvo posada pero al poco Carmen acariciaba suavemente el fino tejido del pantalón sintiendo aquel enorme bulto, Carmen estaba exitadisima, en un estado que desconocia hasta ese momento, cada minuto cada segundo vivido en aquel coche desde que subio le habia producido una sensación nunca indiferencia le habia producido miedo dolor exictacion placer, verguenza sometimiento humillación, a la vez todos ellos ahora le producia una fortisima excitación sentia su ano, vibrar de gusto, que le subia hasta su pequeño pene, el deseo la estaba enloqueciendo la espera a su vez la hacia subir mas y mas los grados de su calentura a la vez que deshinibiirse mas.
Miguel, estaba muy excitado pero sabía autocontrolarse, sabía cuanto más subiera la temperatura de lo por él ideado mas facil le sería despues hacer con Carmen lo que quisiera, no lo engañaba, sabía que ya la iba teniendo donde él quería, Miguel era muy experto, siempre aunque casado tuvo contactos gays, pero de incontables contacto solo tenía el reecuerdo de uno, siendo mucho mas joven tuvo durante unos meses a una travestí, desde ahí siempre supo que era lo que le gustaba, aunque nunca habia vuelto a encontrar otra hasta ahora, se habia conformado con gays, que siempre intentaba dominarlos, pero que realmente no le llenaban, para él, en una relación tenía que haber un macho, él y una "hembra" sin equivocos, ahora creia haber encontrado lo que buscaba y no pensaba "soltar" a su presa, no creia eso de que no habia estado con nadie antes, pero si se veía inexperta y sobretodo le habia impresionado ver la vez que estuvo con ella, como se comportaba el ano de esta, era literalmente un "coño", solo de pensarlo Miguel se calentaba al recordar como la tuvo gimiendo con sus dedos y como no habia engaño en ello, sentia los espamos de su ano, a la vez que sus gritos y gemidos de placer, a su vez, veia en Carmen a una hembra sin poder evitar esta comportarse como tal, a la vez que no imaginaba que era lo que él buscaba, durante años, tener una "hembra" sumisa que sintiera como tal no que actuara que interpretara como habia tenido a muchos gays sino que sintiera como tal y Carmen sin saberlo lo era él lo habia visto desde el primer momento, que era sumisa, que actuaba como una hembra de forma natural, que si iba a su fisico tenia unos muslos riquisimos cuando los habia visto solo en bragas, como sus nalgas.
Durante los dias previos que ella no le contesto se habia desesperado pero eso no debía saberlo Carmen, como no debia saber, que cuando al fin le contestó, a sus mensajes, se sintió como un chico de veinte años con su primera novia, no, no pensaba dejarla escapar.
El coche seguí sin rumbo fijo por la ciudad, sin nadie imaginar que en el interior la temperatura sexual y el deseo estaba en su maxima expresión, Miguel pensó en llevarla a su casa pero finalmente decidió primero llevarla a las afueras, nunca habia llevado a su casa a nadie, aún era pronto pensó, finalmente, la llevó a un descampado de tierra, acomodó los asientos del coche para quedar en la parte trasera un gran espacio Carmen estaba fuera del coche, temblando al fin la cogió, aún fuera la hizo arodillarse s sacó la verga y se la metió en la boca a Carmen esta la recibió con alegria interior con deseo, rapidamente se adueño del glande, en su boca lo deseaba, a su vez Miguel se quitó el pantalón los zapatos, se desabrocho la camisa aunque sin quitarsela, despues la hizo levantarse, metió la ropa y zapatos en el asiento delantero, abrió la puerta trasera la sentó lateralmente quedando Carmen con las piernas fuera del coche, le levantó todo el vestido, quedando sus nalgas al aire con las bragas, se agachó atrapo el hilo de las introducidas bolas, las movió, pero a su vez hundió su rostro en las nalgas, lamiendo las bragas las doloridas nalgas, hasta lamer su ano, la sensación que recibio Carmen ante aquello fue como una fuerte carga de electricidad, en segundos estaba gimiendo, él separó la lengua de su piel, Carmen escucho su voz
– Te gusta eh, te gusta que me coma este "coñito" que tienes, – no soltaba sus dedos el hilo, Carmen escuchaba entre gemidos- este coño va a ser solo para mi, entendido
– Si, respondio tenuemente Carmen
Miguel fascinado siguió lamiendo a la vez que manejaba las bolas, esta vez volvio a sorprenderse, Carmen enpezo a gemir Miguel a sentir las contracciones de su "coño" a traves del hilo de las bolas, sus gemidos pasaron a ser unos grititos Miguel le habló
– Grita perra no te cortes nadie te va a escuchar y quiero oirte gritar
Carmen se deshinibió totalmente no se reprimio mas gritaba y gritaba entre contracciones de su "coño" a su vez Miguel removia a traves del hilo las bolas lo que le era posible ante las contracciones deCarmen hasta que sus gritos fue cesando hasta ser inaudibles quedndo hipando, él se introdujo en el coche tras meter las piernas de ella, ahora Carmen estaa totalmente indefensa incapaz de moverse, a la vez que se vio manejada por Miguel como le quitaba el vestido ella tumbada ahora hacia arriba, él le acercó su polla se la metió de nuevo en la boca él se movia por el suelo del coche, de rodillas, la hizo volver a chupar, pero apenas un minuto, mas bien la verga quedo resguardada en la boca de Carmen solamente esta incapaz aun de reaccionar, Miguel volvio a moverse, ahora a los pies de ella le sacó las bolas chinas, se incorporó se puso encima paseó su polla dura por la raja de Carmen una y otra vez a la vez esta empezó a decir
– No por favor no me da miedo, por favor no,
Miguel alargó la mano hasta el suelo allí habia depositado lubricante, alli habia caido las bolas chinas cogió el lubricante se lo hecho en la polla sin decir nada de rodillas ante Carmen esta tirada con las piernas abiertas, él se cogia la polla con su mano lubricandola a la vez que ella miraba y seguia suplicando a la vez,
– No por favor es muy grande me da miedo por favor, – en un ultimo intento suplico – dejaame te la chupe como la otra vez si quieres te corres en mi boca por favor
Miguel no dijo nada su enorme cuerpo se tumbó sobre ella empezó a acomodarse a buscar su verga el coño de ella que seguia implorando metió sus manos entre las nalgas de ella las levantó aún mas ella siguio pidiendo clemencia, ofreciendole su boca, pero Miguel, ahora con las nalgas bien levantada ella, por la mano de él guio con su otra mano su rabo de nuevo a la raja la paso una y otra vez cada vez deteniendose mas en el coñito que deseaba estrenar, hasta que finalmente su grueso glande quedó allí en la entrada y empezó a "empujar", Carmen empezó a gritar, Miguel se separaba unos escasos centimetros para volver a empezar asi varias veces asi sintiendo que cada vez su glande iba milimetro a milimetro ganando camino hasta que volvio a intentarlo y ella a gimotear Miguel no fue hacia atras sino que dió un pequño empujón ella dio un grito sus manos se puso en su pecho intentando separarlo pero era imposible Miguel dio un segundo golpe de verga y esta empezó a entrar, a la vez Carmen a gritar a golpear el pecho pero cada vez con menos convicción sin apenas fuerza y sin sentirlo siquiera miguel que a su vez decía mientras le metía su verga
– Si perra si como te entra en ese coño, que rico, toma,
Carmen paso a quedar quieta gimoteando fuerte sintiendo en su interior como iba moviendose la verga de Miguel entrando mas y mas sintio como sudaba, gimoteaba le dolia se le pasaba el dolor hasta que finalmente escuchó
– Si hasta los huevos cabrona, te he pegado a mis huevos como una buena perra,
Carmen esta algo mareada quieta no por que ella quisiera sino al haber sido clavada en la verga de Miguel, parecia no poder moverse, solo jadeaba y sus piernas ahora levantadas sintió como Miguel pasaba la mano por ella y queria que las enroscara en su cuerpo, Carmen lo hizo se sintio mas comoda asi, sentia el respirar de MIguel a su lado su rostro, sentia el enorme peso de su cuerpo, y sobretodo sentia que estaba "abierta" y clavada como una perra en la polla de miguel, pero a su vez, todo le parecia un sueño, solo se escuchaba el jadeo de ella, mientras Miguel tambien se habia quedado quieto una vez la clavó, un largo tiempo, hasta que empezó a moverse.
En nada Carmen empezó a sentir como aquella verga se movia en su interior, sin rapidez y sin pausa, un cosquilleo le inundo todo su vientre, empezó a ir creciendo, hasta que se encontró primero jadeando para ir gritando y gritando sin parar, mientras Miguel la follaba, sintió como si fuera a morir, a enloquecer a desmayarse, el gusto le iba del bajo vientre a su coño como lo denominaba Miguel, de ahi a su escroto de ahi a su pene pero sin soltar el mas minimo liquido enloquecia una y otra vez perdio toda nocion de todo, solamente inundada por aquel inmenso placer en el que se ahogaba una y otra vez, solo se escchaba sus gritos como los golpes de los huevos de Miguel sobre su coño, CHOP CHOP CHOP, el cerebro de carmen estaba en blanco todo era instintos, sentia él pecho de Miguel su barriga sobre su corpiño, sentia como estaba pegada a él, sentia como su respiración sus frases humillantes a veces
– Toma puta,
– Buena yegua, si señor
– Asi como debes estar pegada a la polla del macho
Miguel se quitó, sin oposición la volteó en centesimas de segundo, quedando Carmen a 4 patas ofrecida su coño frente a el de rodillas en el asiento ahora, la acomodó a su verga le dió dos buenos azotes rapidos fuertes y tras ellos la clavó, empezó a moverse hasta que Carmen gemía de nuevo, él paró y la movio por las caderas hasta que Carmen era la que se movia como una perra, sobre la polla de Miguel, este miraba aquel culo, pensabdo que era de su propiedad suyo, Carmen volvia a gemir a jadear a gritar Miguel de nuevo quedo fascinado por como se corria Carmen no habia engaños o podia engañarlo era evidente raro excitante pero ahí estaba se corria como una perra en celo aquel "chocho" que lo tenia fascinado, gritaba y gritaba Miguel le ladeo la cabeza diciendole
– Asi quiero ver como gritas y la cara de pua que pones cuando te follo zorra
Carmen obedecia a la vez ser tratada asi aun aumentaba mas su ya de por si enorme placer, gritó y gritó hasta que cayó hacia delante en estado de semidesmayo, Miguel de nuevo se fue al suelo del coche rapido busco su boca se la metió, se masturbó a la vez, ahora él gruño jadeo y gritó mientras la leche era recogida en la boca de Carmen él la obligaba a tragarla ella como pudo terminó tragandola hasta que él le quitó la polla y le dijo que terminara de tragar todo, ella obedeció la tragó la digerió, tragó una y otra vez hasta que no quedó restos Miguel encendio la luz del coche la sentó sobre el asiento la hizo abrir la boca para ver que lo habia bebido todo, como así fue, su mano la asió del cuello con fuerza Carmen casi no podia respirar, él le dió un beso metió su lengua hasta lo mas profuendo ella se dejba hacer sentia la mano asida a su cuello con fuerza empezó su lengua a respondr a la lengua de Miguel, el verse cogida asi le empezó a excitar, mas que a tener miedo, se sentía que pertenecía a él, a su vez parecia que Miguel le estaba leyendo el pensamiento, le dijo tras separar la boca
– Me perteneces, de los pies a la cabeza tu cerebro todo me pertenece de ti, ya no decidiras por ti decidire yo por ti, me obedeceras, si te veo mirando a otro hombre te mato cabrona, no me va ser cornudo ni tener una puta, la puta lo eres solo para mi, entendido
– Si
– Si ¿que?
– Si Señor
– Estas cansada?
– Si Señor
– Quieres irte a casa?
– Si señor
Tengo ganas de follarte otra vez pero por ser el primer dia y por haberte portado bien te daré ese premio.
Carmen estaba acostada en su casa, no estaba tan cansada como habia aparentado sino que tenía miedo eran demasiadas cosas a la vez para una sola noche, todas nuevas para ella, necesitaba estar sola y recomponerse toda pensar y sopesar, todo era una locura cuando lo pensaba si, pero lo que habia sentido esa noche sabia que no lo sentiria de otra manera con otra persona, empezó a pensar en Miguel, en su beso,le gustó, pero sobretodo se sentia una hembra con él, Roman siquiera era recordado, cuando habia estado con Miguel, sntía que él la trataba como a una hembra, como Carmen y eso quería Carmen, tener una vida como la tenía Roman, solo que mas rica, mas atractiva mas coloreada que la gris vida de Roman,
FIN SEGUNDA PARTE
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