EMPUTECIDA POR UN MACHO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Con 17 años salí con mi primera y única chica, durante 4 años, di mis primeros besos mis primeros escarcéos sexuales aunque al principio no me acomplejaba mi pene además de que mi novia me hacia sentirme bien a su lado, con el tiempo empecé a acomplejarme, a la vez ella a cambiar como cambiamos todos, claro, no andaré por las ramas empezó a buscar "algo mas" es decir una polla mas grande, tras 4 años, lo dejamos, siempre supé por que fue no tuvo por que decirmelo tan friamente, fue un golpe durisimo escuchar a una mujer, decir que me dejaba porque con quien estaba tenía una polla de verdad.

Me encerré en mi mismo, de nuevo, empecé a masturbarme metiendome mis dedos, a tener sueños eroticos cada vez mas alejados de la heterosexualidad, hasta que con 25 años, un día me decidí conocí a un chico por internet, quedamos, tenia una pollita pequeña, algo mayor que la mía, hoy se que era tan pasivo como yo, aunque hice mi primera masturbación, todo muy aseptico, como dos "niñitos" asustados, a partir de ahí y sobretodo por mi seguridad y miedo a ser descubierto además a ser penetrado, empecé a quedar con ese tipo de hombre, y siempre haciendo de pasivo, todo rápido en el coche en una casa, hasta que hice mi primera felación, ellos quiero hacer imcapié en esto, estaban tan asustados inseguros y pichicortis como yo, pero mi verdadero placer estaba en irme después a casa, masturbarme con mis deditos metido en mi ano.

Una noche quedé con uno en su apartamento, cuando empezamos, me dijo le gustaba vestir en "lencería femenina" él me prestó mis primeras bragas y sujetador, que sensación me puse "cachonda", nada mas sentir aquel suave tejido lamiendo mi piel, tenía un gran espejo, en el dormitorio, pareciamos lesbianas, él tenía un pene pequeño, como todos los que elegía yo, fue el primero que me penetró apenas duró dentro dos minutos apenas sentí nada, solo un atisvo de placer anal que fue cortado por masturbarme, pues estaba cachondisima, y me corrí.

No volvimos a quedar pero él me había hecho descubrir el travestismo la feminización, aunque al estar viviendo con mis padres me era algo dificil de llevar a cabo, salvo cando mis padres se iban de fines de semana, gracias a dios cada vez mas asiduamente, pero no en esos momentos, así llegué, a mi siguiente paso.

El no tener a mi disposición una casa, me hizo ser creativo, a la vez mi estilo en parte cambió, si era y sigo siendo varonil para todo el mundo, pero me depilé totalmente el poco vello que tenia en mi cuerpo, me dejé el pelo más largo y él no tener casa lo solucioné, yendo a zonas que antes jamas habia pisado zonas de citas al aire libre, yo no las buscaba para citas, pues ahora ya no me interesaba el sexo con cualquiera de los que habia estado, hacer unas caricias y unas masturbaciones, no me excitaba tanto como, vestirme como lo digo literalmente de "mujer".

La primera vez hace unos 3 meses, o algo más, fuí nervioso, me temblaba todo, me adentré en el descampado, era tarde mas de las doce de la noche un sábado esperaba no hubiera nadie pero al final habia un coche bajo unos árboles tenía tanto miedo que a pesar de estar lejos de ellos esperé un rato a que se marcharan, cuando ocurrió me vestí nervioso, me di cuenta habia elegido bien las tallas me quedaba perfecto todo, el corpiño las bragas las medias y el vestido, paseé siempre cerca del coche, con una excitación exhacerbada, que noche fue magíca y siguieron otras, así, me paseaba sentia las prendas el aire entrar entre mis piernas el vestido apretando mis caderas, resaltando mi culo, aguantaba hasta que iba a casa y alli me masturbaba un par de veces cayendo rendido, otras me masturbaba en el mismo coche la primera vez y las segunda en casa, siempre mi culito bien limpio interiormente, antes de salir de casa, fueron unos meses de enorme excitación, de compras clandestinas de ropa de mujer, de aprender a andar en tacones de pintarme los labios, no pasaba de ahí de soltar mi pelo de su cola.

Era viernes, hace 4 semanas ya, el llegar ya me era rutinario, como el salir es decir ya no tomaba tantas precauciones como al principio, mis padres se habian marchado ese viernes hasta el domingo por la noche, lo que además, me hacía estar mas eufórico y por ende confiado, aparqué mi coche, en el lugar de siempre el mejor para mi, una vez ya conocido bien la zona en esos meses, pronto estaba paseándome con corto vestido de color morado metalizado, bajo él un corpiño blanco, ligueros y ligas, bragas a juego en blanco todo, al igual que las medias transparentes pero blancas y zapatos de tacón negros, el vestido si me apoyaba como lo hice en el guadabarros de mi coche un pie y me inclinaba para colocarme mejor las medias desde atrás se tenía de mi uana imagen de todos los muslos y parte de mis nalgas, al aire, junto con las ligas, parte de las bragas, me toqué atrás una de las nalgas, imaginando la imagen oh, que morbo.

Mi coche estaba bajo unos arboles, yo, en el borde exterior, en el cual había mas luz, siempre sabiendo que podría refugiarme en las sombras de los arboles hacerme invisible y entrar en mi coche, caminé alejandome de él ya hacia tiempo, me alejaba bastante siempre por el borde de los arboles, después volvía al coche volvia a hacer el recorrido al sentido contrario así una y otra vez sintiendome libre, sin imaginar que esa noche estaba siendo observado, totalmente, desde el primer momento, él habia venido antes, en bicicleta, estaba entre los árboles cuando llegué se escondió, simplemente me observó, sin yo imaginarlo, iba yo por el borde de los árboles ya había dado varias vueltas, era más de la media noche nadie por allí, si quizas hubiera venido alguien se hubiera parado al principio al estar tan solitario, mi seguridad en que estaba solo, era total, aún me quedaba 20 metros al menos para llegar a mi coche, sn yo saberlo él había elegido el lugar, en el que me abordaría, yo caminaba miré hacía atrás hacia la salida a ver si venia alguién lo hacia de vez en cuando, a su vez escuché unos pasos pero ya muy cerca de mi, al mirar al frente me vi ante él.

Era bajo, ahora si se sus medidas, mide 1,69 74 kilos, pero no de un hombre gordo sino, de ese tipo de hombre mas bien bajo si pero de espaldas anchas, musculados, del que yo al menos no me pelearia con ellos, pues ese era él me asaltó mirandome mientras yo simplemente quedé en shock, no tiene otra palabra no sabia que decir que hacer como reaccionar, me invadio, miedo, verguenza, inseguridad, cuando le escuché decir.

– Hola guapa
Simplemente no dije nada, era incapaz de decir nada, él iba con una cazadora negra, unos vaqueros y zapatos, yo, quieto siquiera era capaz de proseguir a mi coche, pero todo esto apenas duró 5, 10 segundos, larguisimos infinitos, esperando él que yo dijera algo, en mi estado, solo sentí, una mano fuerte cogiendo mi brazo por la parte superior, desnudo y tiró de mi hacia el interior de los árboles, lo hacia con una fuerza muy superior a la que yo hubiese deseado y esperado, el miedo se apoderó de mi totalmente, de forma infina tanto que era incapaz de articular palabra, tiraba de mi yo andaba detrás de él unos centimetros, quizás medio metro lo más, contando su alargado brazo, mi euforia habia desaparecido mi, excitación también, pasamos bajo las sobras de los arboles unos 8 , 10 pasos no mas, asi, silencioso, sin reaccionar en absoluto mientras él decidido tiraba de mi, apareció la otra parte sin arboles de nuevo más luz, un pequeño claro sin ya los pinos piñoneros, unas matas altas, cubrian el otro borde hacian invisible esa parte para esa zona en medio de esas matas una zona totalmente despejada, junto a las matas una gran rama caida ya hacia mucho de un arbol piñonero, paró, todo ello habia transcurrido en segundos, se apretó a mi cogiendo sus manos mis nalgas, empezando a decirme
– Que putita mas rica estas hecha solo hago seguirte desde que llegaste
Sentí sus manos sobre el cortisimo vestido apretando fuerte mis nalgas, nadie me las habia apretado de esa forma, fuerte firme, era distinto muy distinto a los que yo habia estado, todos digamos como he explicado de mi estilo, mi miedo, siguió no mentiré pero a la vez, me excitaba verme cogido así, no podía negarlo resistirme, sus manos subieron dificultosamente mi elástico vestido, sentí el aire en mis nalgas habian quedado al aire, ahora las apretó, de nuevo sus manos sin mi vestido de por medio, me apretó que me hizo dar un jadeo de dolor, yo era mas alto que él, sin embargo sentia como tenia mucha mas fuerza que yo y eso me excitaba sin poderlo remediar, sin haber nunca conocido, sentí como me quitaba una de sus manos y me dio en mi nalga derecha un azote asi de pie,jamas me habian dado un azote, asi de fuerte, me habia dado algun azotito, nada casi caricia, pero al recibir ese azote di de nuevo un jadeo, pero mi cuerpo, sintió recorrerle electricidad, mi vientre por dentro parecía tener moviendose millones de mariposas, él se quedó quieto, si soltarme, se separó de mi sin soltarme, escuché un.

– Ven aquí
Apenas dio dos pasos, tirando de mi, con su brazo, me hizo colocarme frente a él, ya metido en la zona de las matas, totalmente su mano fue por detras de mi espalda hasta alcanzar mi cabello todo en segundo como os cuento, sentí el dolor, al tirar de mi pelo, solo emitií un AAAAYYY rápidamnet él dijo
– Calladita, eh no quiero que hables, calladita y obediente, vamos ve arrodillandote
Pensé querría se la chupara, me fui arrodillando, hasta quedar frente a su entrepierna de rodillas creyendo sacaría su polla.
No, no fue así al estar arrodillado él se sentó en la gran rama, a la vez me agarró la mano que tenia libre de mi cabello rodeando mi cadera y tiró hasta ladearme, para después colocarme a 4 patas, yo era incapaz de rebelarme algo dentro de mi me lo impedía, me hacia quedar quieto, hasta que quedé atrapado entre sus piernas las mias, volvió a subir ahora bien subido el vestido sentí el aire en mis nalgas hasta la espalda.

PLAAAAAAS, AAAAAAAAYYYYYY – no hubo palabras, de ningun tipo, solo intenté moverme sentí como sus piernas volvian a apretarse aún más, aún me vi mas inmovilizado, a su vez, su mano tiraba aun mas fuerte de mi cabello que al principio, ello me hacia gritar fuerte, de dolor, nada más afianzar la postura de nuevo- PLAAAAAAAS AAAAAAAAYYYYYY
PLAAAAAASSSS AAAAAAYYYYYY PLAAAAAAAAAAASSSS AAAAAAYYYY AAAAYYYY – me encontré en instantes llorando, inmovilizado sin poder hacer nada, pero a la vez no intentaba hacer nada, solo aceptaba, paralizado en todos los aspectos, hasta que él al fin paró, me vi en la situación mas humillante de mi vida, incapaz de cambiarla, sentí como aflojó sus piernas sobre las mias, me hundió la cabeza hasta que esta tocaba la tierra, escuché su voz.

– Bien ahora así quieta que yo te vea, sin moverte eh perra
Yo quedé quieto, se escuchaba abiertamente mis lamentos de dolor, mientras que él se levantó y parecía inspeccionarme, ahora si hablaba, tocando mis nalgas él de pie le escuchaba decir entre mis sollozos
– Buenas ancas, si señor buena "yegua", a ver ese chochito
Sentí sus dedos recorrer, la raja de mi culo sobre las bragas desde el empezar en mi espalda de forma brusca hasta llegar esos dos o tres dedos a la altura de mi ano, empezó a frotar la braga contra mi ano con sus dedos.

– Tiene que estar bueno este coño, – frotó unos segundos las bragas metidas en mi raja, con sus dedos contra mi ano, empecé a sentir de nuevo, aquella electricidad, en contra de mi voluntad escuchandome aún sollozar y a la vez, sintiendo como me "tocaba" a su antojo, como si fuera "ganado", se escuchó algun ruido, sentí por primera vez lubricante en mi ano, nunca lo habia usado, mi braga apartada, incapaz de contenerme empecé a pasar del medio sollozo ya a un cierto gemido de placer, incluso en contra de mi voluntad, hasta que me introdujo primero uno de sus dedos di un bramido de placer, lo hacia lentisimamente, suavemente, de nuevo los dos callados, después masajeó, gemí, su dedo se retiró y empezó a lubricar de nuevo y penetrarme con dos.

Pasé sin darme cuenta de mis sollozos a jadear como una perra a escuchar aquellos y os juro que parecian de otro que no era yo, no me reconocía, él por su parte no hablaba, nada de nada, solo se centraba en aquello, sentí los dos dedos sus yemas, sobre la parte superior dentro de mi ano, yo jadeaba, graznaba, a veces él tenía que aguantar con su mano libre mi cadera y decir
– Quieta, buena potrilla, – parecia estar obsesionado con esas frases de compararme con animales -.

No volvia a hablar y proseguia consegui con mi mano derecha coger mi pequeño pene, empecé a acariciarlo pero instantes despues lo tenia cogido abiertamente masturbandome dandose cuenta él, cogió mi mano, la apartó con brusquedad, a la vez que me decia
– Te voy a dejar en celo, hasta el limite para despues "montarte" bien
Mi cabeza volvio a pegarse a la tierra esta vez de lado mis manos junto a ella a uno y otro lado y yo ofrecido en pompa sin poder contenerme me ofrecia como una perra, mi vientre, empezo a recibir aquellos millones de mariposas, para esta vezno quedarse a ir sino ir bajando a traves de mi cuerpo, hasta parecer estar todas junto a sus dedos, jadeé y jadeé, fortisimo, él me aguanto firmemente con su mano libre la cadera, sin sacar sus dedos, fue inexplicable lo que sentí, largo parecian punzadas de intenso placer miles de agujas placenteras, pero sus dedos seguian dentro, yo parecía haber perdido mis fuerzas, él volvió a mover los dedos, casi al instante, mi ano le replicó, con placer que él lo recibió, empecé de nuevo a sentir aquello de nuevo volvia lento pero imparable, de nuevo perdí de vista los arbusto todo, solo oia, me oia a mi, jadear y los dedos de él, el climax llegando inundandome y mis nalgas en pompa ofreciendome, en pleno climax en plenos jadeos él hablaba.

– mmmmm uuuuf menudo coño tienes uuuyy pero que rico pero que es esto, que pedazo de "yegua".

Sus dedos se quitaron, me cogió del pelo de nuevo, pero yo ya estaba entregado, me puso de rodillas él de pie, se bajó los vaqueros, apareció, una enorme verga caída aún pero muy larga y gorda, me la pasó por mi rostro y me la metió en la boca, sentí mi boca llena de su nabo, parecia una masa,que yo iba endureciendo en mi boca, tenía miedo mucho miedo de esa verga si me intentaba penetrar pero a la vez no podía resistirme, resistirme a obedecer, se puso dura (21 cm) apenas la tuvo dura, vimos un coche y venia hacia nosotros, él dijo.

– Recoge tu ropa, vamos a otro lugar o a esperar, él se subió los pantalones recogio su cazadora y yo iba sin vestido, me dio la cazadora, me la puse sobre la ropa interior y entré rápido en el coche, efectivamente aquel coche venia hacia nosotros, él llegaba y me ordenó irnos nosotros me fui así, con él sentado a mi lado, yo conduciendo mi coche, me llevó a otro lugar del descampado, me hizo salir con la cazadora puesta, apoyados en el coche comenzó a sobarme a decir.

– vas a ser mi hembra, tenia muchas ganas de coger a una buena "yegua" como tu y "domarla" a mi gusto, eso voy a hacer contigo, como m pone las hembras grandes como tu, cabrona,- me sobaba a la vez como si fuera una chica yo y me lo fui creyendo, hasta que volvio a bajarse sus pantalones, quedé en cuclillas, chupando su polla- despacio me gusta la chupes bien despacio, nada de rapidez.

Obedecí, no tuvo que decirlo dos veces, de repente escuché otra voz no la de él que decía
– Joder tio que bien te la esta mamando esta zorra, podemos follarla los dos.

Vi sus manos bajar, pero para subirse los pantalones, me levanté muerta de miedo, digo muerta de miedo, pues cada vez mas me sentía una chica, una hembra como él decía, yo seguía con la cazadora, aun puesta al fin vi al otro, de unos 55 años lo mas, algo mas alto, si era el del coche lo habia dejado lejos y habia venido andando para sorprendernos pero él le dijo.

– Fuera de aquí no queremos compañia
– Joder tio, nada mas que me la chupe y tu la follas, si quieres, vengo super caliente no hay nadie
No me lo esperaba yo quedaba entre los dos aunque un poco ladeada él se fue hacia el otro con cierta violencia chocando su hombro con mi cuerpo me apartó con el empuje y le dijo
– Que fuera de aquí, tio, fuera
estaban los dos a centimetros, el otro le fue simplemente a dar un empujón pero al ver alzar la mano le empujo antes fuerte, quien estaba conmigo, cayó el otro hacia atrás trastabillandose me puse en medio, entonces él e cogió, del pelo
– Venga dentro venga dentro pero ya, llevandome a la puerta la abrió y me hizo entrar, mirandome de tal forma que me dio panico.

El otro se levantó, este lo miraba y empezó el otro a decirle
– Tranquilo tio estas loco tranquilo venga ya me voy
Lo vi alejarse desde mi asiento dentro del coche, hasta que desapareció en la noche, él vino, abrió la puerta yo sentada su mano, se puso en mi cuello sin yo esperarlo lo asio fuerte pero sin hacerme daño, aunque inmovilizando mi cabeza, diciendo.

– Cuando yo te digas que te vayas te vas, obedeces y punto, te enteras
– Si si, – logré susurrar
Estaba de pie inclinado la puerta abierta su mano en mi cuello, empezó a aflojar la presión, con la otra mano vi como se volvia a bajar los pantalones, su nabo, estaba erecto, durisimo, quitó de mi cuello, su mano finalmente, su polla a un lado de mi él fuera ahora de pie, fui yo, no podia resistirme, volví totlamente mi rostro primero empecé a pasar mi lengua por su enorme tronco, él quieto ahora, callada, acomodé mi cuerpo sacandolo sin dejar de estar sentada, fui lamiento lentamente su polla, sus gordisimos y voluminosos huevos, lentamente, sin la mas minima prisa hasta que llegué a su gordo capullo abri bien mi boca lo engullí lo alojé y saboreé con mi lengua con lentitud, hasta que él me sacó del coche, esta enervado, intentó penetrarme así, di gritos de dolor incapaz de conseguirlo él hasta hacerme volver a la mamada, literalmente me baño la cara en su leche, con su polla, nunca habia visto echar tan gruesos, largos y abundantes chorros, de leche, parecian quema mi rostro al tocarme para enfriarse rapidamente en mi rostro, me pasó, su polla mojada en su leche por mi boca me la metió la saboreé sentía mi culo algo dolorido por intentar metermela pero solo habia sido el impetu en ningun momento habia entrado un milimetro.

Se sentó, era mas de las dos de la mañana, yo estaba cachondisima pero intentaba ocultarlo, él empezó a preguntarme sobre mi vida fui incapaz de engañarlo, le conté mis "escarceos", como habian sido con quer tipo de gente y "pollitas", pues le interesaba eso mucho, hasta que me dijo vistete, vamos a buscar mi bici, lo hice me puse el chandal que traia para el cambio rapido, aunque me hizo dejarme la ropa interior bajo él fuimos él se subió en su bicicleta, me dijo
Esperame en la salida – obedecí -.

Cuando llegó me dijo.

Yo comparto piso, a veces mi compañero se va el fin de semana, podemos quedar sin problemas, tu tienes piso.

No, yo vivo con mis padres
Trabajas
Ahora no, ahora estudio -empece a darme cuenta que de nuevo él estaba calentandose, pero que ya pasaba de hacerlo o en coche o allí con la humedad y el frio, entonces de mi boca pareció hablar otra persona – yo hoy tengo mi piso solo para mi
Pues vamos, yo vivo aqui cerca dejamos la bicicleta y vamos
Callé y obedecí, estaba en el barrio cercano al descampado, lo seguí hasta aparcar donde él me indicó siguió, y volvio a parecer minutos despues, ya sin bici subio al coche y lo llevé a mi piso, aunque no muy segura, cuando bajamos del coche cogi la ropa interior que tenia escondida en mi coche pues era donde escondo la ropa estaba recien lavada y la tenia en un bolso, la subí entramos en mi casa, me pidió ducharse le indique la ducha, pero me quedé fuera y él no dijo nada, salió con una toalla ahora lo vi bien a la luz una espalda poderosa, un pecho ancho, con algo de vello, era fuerte si bastante fuerte, entré me volvi a lavar interiormete aunque no salió nada, pero por si acaso, salí, no sabía que haria conmigo ahora mi ropa interior era negra, corsé, bragas y medias, él ahora no se dedicó a azotarme, sino me hizo indicarle mi dormitorio, fuimos, pronto me tuvo en la cama lubricandome ahora a conciencia y yo jadeando, esta vez me lubrico y dilató, sin prisas él, pero que cuando me dejó yo ya me habia "corrido analmente una vez" y estaba caliente como una perra, esta vez, me tumbó, tras colocarme uno de los cojines de mi cama al final de mi espalda se puso encima mia y .
me dio un pollazo que me volvio loca literalmente, me hacia perder la cabeza una y otra vez, yo gemia jadeaba gritaba me cambiaba de postura, a 4 patas, ya abierta por su polla me ofrecia esperando recibirla jadear, me corría me tenía en el climax perpetuamente, hasta que me puso él tumbado yo encima dandole la espalda y frente a mi mi espejo grande, me ví, en cuclillas vestida de mujer, cogiendo con mi mano su verga metiendomela en mi "chochito" y moviendome como una loca entre jadeos me parecia ser una puta de una peli porno, cuanto mas lo pensaba mas me movia mas jadeaba mas guarra me volvia, empece a escuchar
– Asi cabrona mueve ese chocho, eso es buena yegua asi bien montada en mi polla que te creias que ibas a follar con uno de tus mariconas, ya te hacia falta que te montara un macho, que te dejaras de jueguecitos de nenitas y que te follen vbien y sepas como debes follar con un macho guarra, que voy a hacer de ti toda una guarra eso es mueve bien el coño y esas nalgas perra, AAAAYYYY ESO ES AAAAYYYY NO PARE AAAYYYY NO PARES GUARRA AAAAYYYYYY TOMA UFFFF QUE POLVAZO TOMA TOMA PERRA TRANQUILA YA ME HAS ORDEÑADO BIEN COMO DEBE HACER UNA HEMBRA COMO TU QUE CHOCHO TIENES CABRONA VA A SER SOLO PARA MI.

Asi a sido, me volvio a follar el sabado desde la tarde hasta que se fue el domingo en la mañana, de mi casa, lo demas pues o en su apartamento cuando hemos podido o en el coche, tiene ganas de follarme otra vez en mi dormitorio y yo que me folle ahi, pero vamos a las conclusiones, soy su yegua su putita, sometida a él, por mi voluntad, claro, pero sometida a él, me azota me domina, para terminar follandome y dejandome loca, pues no hay otra palabra, siquiera imaginaba que e "pegaran" un macho y me hiciera en realidad ponerme tan caliente por ello.

Mi experiencia, aunque aún soy una "aprendiz" espero vivir mas aventuras de este tipo, con él, terminar siendo bien educada por él y sobretodo como me dice bien preparada para satisfacer a un macho (los verdaderos machos claro).