Lo hice.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por danielgarcix.
Después de la experiencia increíble de sexo que tuve con una transexual tenía dudas, no sabía si quería volver a ver una ya que mi ano seguía siendo virgen, y a penas pude probar su miembro.
Tras varias semanas dudando sin saber qué hacer seguía mirando la página de contactos, viendo algunas transexuales increíbles con las que me gustaría quedar, y hacer lo que a mí tenía inquieto, seguía masturbandome mientras las veía, con sus curvas y sus penes enormes

Andaba ya que no podía más, tenía que terminar con tantas dudas ya, salí de mi casa busqué la página de contactos y encontré una transexual con unos pechos impresionantes y una dotación enorme, pero a mí desgracia no estaba disponible, seguí buscando y encontré a otra transexual, con unas tetas grandes y también de una dotación importante, me dijo dónde estaba su piso, me puse en marcha.

Aunque con un mar de dudas en la cabeza, y sin saber qué hacer cuando estaba ya al lado la llamé y me abrió la puerta, aún dudaba mientras subía las escaleras, una parte de mí no quería, pero al final ganó la que lo pedía a gritos, pasé y allí estaba, un monumento, femenina a más no poder, esas tetas y ese culo firme, unos labios carnosos y ojos azules, me invitó a desnudarme cosa que accedí rápidamente, ella estaba preparándose, y cuando salió, madre mía, ya se notaba mi polla a mil, se acuesta en la cama y me pone su polla en la cara, y me pregunta retóricamente que es lo que quiero hacer, por qué los dos sabíamos que esa polla iba a acabar en mi boca, su pene estaba totalmente flácido, me lo empecé s meter en la boca, besando la cabeza, chupandosela como nunca, con cuidado, a una velocidad endiablada ella se estaba empalmando y gimiendo del gusto, empujándome la cabeza y pidiéndome y suplicándome que siguiera.

Cuando estaba a punto de irse me pidió que parara empezamos a besarnos y que nuestras pollas se rozaran, las dos estaban al máximo pero la suya media unos 26 cm, era inmensa y yo me la había metido en la boca, dejé de ser yo, estaba en otra dimensión, en la que solo me importaba esa transexual, por fin llegó el momento, el que tantas dudas me había creado me pidió mi culo, me dijo que le había dejado la polla como nadie y que me acostara y relajara por qué me iba a gustar, empezó a preparar mi culo, acariciandolo con la puntita, lamiéndolo y mordiéndolo, me puso un poco de lubricación y empezó a meter la punta, en seguida noté el dolor del principio ella seguía y seguía, hasta que la metió entera y fue un dolor incontrolable pero aguanté y poco a poco se meneaba y yo no me lo creía, una transexual me estaba dando por culo, y estaba empezando a gustarme, me giraba y veía su cara de gusto mientras estaba detrás de mí culo, el gusto era inmenso, ella estaba empezando a gritar y gemir, le estaba encantando mi ano y le estaba produciendo un placer que no era tan habitual en ella, gritaba: ¡Qué rico joder! Si, por favor si, que rico niño, sigue, aguanta.

Siguió dándome placer y empezó a darme muy fuerte, me estaba encantando y de repente se vino en mi culo, fue una sensación inolvidable, le limpié la verga y ella enseguida fue a por la mía, me hizo la mamada de mi vida, probablemente el mejor orgasmo que he tenido, fue increíble, aunque con todo eso me quedé con ganas de que se corriera en mi garganta para poder saborear todo ese jugo, a sí que aún me queda una cuenta pendiente con los transexuales que pienso cumplir