Marcelo, mi primera vez

Soy Isabel, una travesti de closet. Aca relato mi primera experiencia.
Soy Isabel, una travesti de closet.
Actualmente tengo mas de 60
A la fecha de este relato tenia 40 añoa aprox. y conocia a Marcelo hace unos 2 meses, a traves del sitio Yahoo Groups
El es un amigo especial, con el que salia habitualmente.
Yo había descubierto mi femenino una noche en un chat del tipo Latinchat, cuando la internet estaba en pañales acá en Chile.
Tratando de captar atención femenina, que no llegaba, decidí entrar con un perfil femenino. Así nació mi Isabel
Ahí me di cuenta que me gustaba de asedio masculino. Porque era asedio
Interactúe mucho rato y cada vez me sentía más cómoda siendo Isabel, haciéndole gambetas a las propuesta y embestidas masculinas
Paso tiempo y deambule por sitios buscando contactos virtuales. Descubrí los Cyber-cafe. Descubrí Yahoo Groups, en donde me suscribi a grupos de contactos travestis y gays.
Me sentía emocionada. Me sentía tan identificada con mi nueva identidad, que me emocionaba
En esos andares aparecieron varios pretendientes con los que hice contacto virtual con algunos me junte pero no pasó nada.
Eran muy directos para mi, y la verdad es que me daba mucho miedo
Un día apareció un amigo sin intención, con el me junte un par de veces en lugares públicos a conversar
El era gay y la verdad es que no me atraia. En realidad, ninguno de los pretes que había tenido me atraia, Bloqueaba esa posibilidad, siempre la bloquee
Ese amigo se llama Marcelo, el sin intencion, porque decia que solo queria amistad
Un día Marcelo me invita a juntarnos en un cyber-café a mirar páginas interesantes con temas eróticos y travestis
Estábamos ahí cuando Marcelo se me declara, me dice que le gusto. Pero yo sabía que le gustaba como hombre, no cómo Isabel
Pucha!, dije – Gracias!
Quedamos en nada. El y yo atragantados. El por esperar mi respuesta y yo por no decirle que el no me gustaba. Nunca se lo dije
Un dia nos juntamos en un cyber-café. Conversamos respecto de mi identidad de genero y sexual. El se declaro abiertamente gay, y criticó mi aparente ambigüedad, y me desafió a qué yo no sería capaz de darle un beso.
Y como no me gusta perder, rompí todos mis temores y, se lo di
Para mí fue casi un piquito, pero para el fue casi un besote. A la salida del lugar nos percatamos que los cubículos tenían cámaras, asi que, lo mas probable, es que ese beso furtivo lo haya visto el administrador del local. Nos reimos de buena gana. Despues de eso nos fuimos y nos despedimos. Como si nada hubiera pasado, pero ya había cruzado un límite que dejaba abierta la puerta de la libertad de ser más lo que yo quería y sentía.
Otro día nos juntamos, ya tarde, a un cafe conversado.
A eso de las 22:00 íbamos caminando cuando me dice, Oye, me das otro beso?
Yo me rei nerviosa, porque estábamos en mitad de una calle
Cómo se te ocurre!, le dije, Estamos en medio de la calle!
No anda nadie!, me dice
Verdad que no había nadie a 100 mts a la redonda
Lo pense un momento, mientra caminaba coqueta. Bueno, le dije
Entonces, casi sin darme cuenta, me toma por la espalda, me acerca a él y me lleva hacia la pared de un edificio
Acerca su cara a la mía y roza mis labios. Sentí su cara, su aliento a tabaco, su barba rala y dura raspando suavemente mi piel.
Puso su mano en mi cara y me beso. Me relajé y cerré mis ojos
Me deje llevar. Respondí a su beso imaginando que iba vestida de chica y el era el hombre de las fotos que miraba
Relajé mis labios y dejé que su lengua invadiera mi boca, y aprendí a disfrutar de esa sensacion de ser dominada por una hombre, nueva para mi.
Asumí por primera vez en mi vida una actitud pasiva, y sentí sus manos apretandome, y sentí su sexo duro bajo su ropa rozar en mi pierna y mi pubis
Yo solo atiné a poner mis manos sobre su pecho como buscando un lugar donde ponerlas
Ese beso duro una eternidad, y otro mas, y otros mas.
Como resistirse a un beso apasionado con el que has fantaseado tantas veces? Como no dejarse llevar por ese sabor a prohibido y deseado?
Nos separamos lentamente, y no tomamos de las manos. Me sentía en las nubes. Me abrace a el buscando un poco de refugio, pues me sentía completamente expuesta y vulnerable, pero feliz de haber dado ese paso, y sentirme un poco mas mujer. Marcelo me preguntó tiernamente, Te gusto?. Le dije que si, y no pude contener mi rubor y mi sonrisa
Igual era como comer ese tipo de chocolate que tanto te gusta, pero de otra marca, no la que buscas, pero chocolate al fin
Nos fuimos de ahí caminando. Yo agarrada y pegada a su brazo como solian hacer las chicas enamoradas en el cine romantico aprovechando la soledad de la noche hasta despedirnos.
Paso un tiempo de encuentros sin que pasará nada
Un día, un amigo tuvo un grave accidente en auto. Quedó postrado en cama por un par de meses, por lo que hicimos turnos entre amigos para cuidarlo los fines de semana
Cuando llegó mi turno, el otro amigo que iba conmigo tuvo un problema, por lo que no podía llegar a las 20, hora en que se iba a la cuidadora de lunes a viernes
Iba a poder llegar a las 03 am, así que hicimos acomodos cosa que llegando el me iba yo
Así quede prácticamente sola con mi amigo en su casa
Habia que vigilar si despertaba, por qué estaba sedado y debía dormir hasta las 06 am aprox
Cuando quede sola prepare algo de comer y luego subí a la pieza de mi amigo
Por curiosidad, lo toque y lo moví para ver si despertaba y nada
Levanté la ropa de cama para ver cómo había quedado por el accidente, igual con un poco de temor por si despertaba
Doble hacia abajo los cobertores pero no tenía indicios visibles de accidente
Baje un poco más la ropa y me lleve una sorpresa enorme, porque su miembro era enorme, y yo no sabía que estaba sin ropa interior
Subí los cobertores rápidamente y un cosquilleo recorrió mi cuerpo
Me puse inquieta, mi corazon acelerado, y una idea morbosa se fijó en mi mente. Me aprovecharia de mi amigo postrado?
Busque en su closet ropa de su novia y algo encontré, aunque no mucho, porque lo que había no me quedaba
Me desnude me puse una tanga pequeña y una camisola muy delicada y sexy, y me senté en el piso al lado de la cama pensando en como llevar a cabo mi idea.
Quería hacer algo, pero no me atrevía, me senti culpable.
De pronto, me vino a la cabeza Marcelo
Lo llamé, le dije que estaba sola, que me acompañara
Yo sabía lo que quería hacer con Marcelo, pero no sé lo iba a decir abiertamente
Paso un rato y Marcelo llegó
A todo esto, yo me había puesto, sobre la ropa femenina que llevaba puesta, un buzo deportivo de mi amigo
Al llegar, Marcelo se extraño del lugar y las circunstancias del encuentro. Se quiso ir, porque desconfiaba de la situacion, pero logré convencerlo de que estábamos seguros ahi
Lo invite a sentarnos a conversar en el sofá: picoteamos algo, nos tomamos una cerveza y hablamos de cosas triviales
Nos reímos de bromas y chistes.
De pronto Marcelo me llama por ni nombre masculino y me dice, Chris, me gustaría continuar lo que dejamos pendiente el otro dia
Me chocó que no me llamara Isabel, pero bueno, para mi el fin justificaba los medios
Me rei nerviosa y le dije, Qué tenemos pendiente, fresco?
Me dijo, No te hagas el leso si sabes que es
Me daba rabia que no me hablara en femenino, pero me deje llevar y le segui el juego
Baje mi cara y le mire coqueta
Me tomo la cara con sus manos y beso mis labios suavemente. Cerré mis ojos y pense, Aquí vamos
Nos besamos apasionadamente
El se tiró sobre mi y quede de espaldas sobre el sofa
Abrí mis piernas para que se acomodara sobre mi mientras el pegaba su pubis sobre el mio
Abrí aun más mis piernas y levanté un poco mis rodillas, queria imaginar que era una chica con su chico, mientras los besos apasionados continuaban
Su lengua se apropio de mi boca, Yo saboreaba sus besos
Pronto sentí su sexo endurecerse bajo su ropa. Me emocionaba sentirme en esa posicion
De pronto se detuvo. Se incorporó en el sillon y yo lo segui un poco confundida
Me miró y me dijo, Te atreverías a tocarme? Luego me pidio, Tócame, por fa, quiero que me toques
Quedé paralizada por la solicitud. Imaginar llegar a ese punto y enfrentarse a el era distinto
El se dió cuenta. Se acerco a mi, me beso intensamente
Tomo mi mano y la llevo a su sexo por sobre su ropa
Me deje llevar, era lo que quería que pasara, solo que necesitaba ese empujon
Una vez que tuve mi mano sobre su miembro erecto, lo recorrí como si mi mano y mis dedos fueran un pincel deslizándose con trazos largos sobre una tela
No tenía seguridad de lo que debía hacer. La verdad es que estaba muy excitada, nerviosa y emocionada
Las manos de Marcelo fuero más decididas. Recorrió mi cuerpo bajo mi ropa sin limitarse
Sentir sus manos tan rudas y posesiva era nuevo para mi, cómo todo lo que estaba sucediendo.
Tome valor y decidí incursionar bajo su pantalón
Cuando lo hice, un quejido de placer escapó de su alma
Recorri su sexo a ciegas con caricias firmes pero suaves, provocando espasmos en Marcelo. Fascinacion es la palabra que describe lo que yo sentía
Mi mano no alcanzaba la longitud de su sexo que parececia no tener fin bajo su entrepiernas
Al tocar su miembro, mis emociones se multiplicaron por mil
Todas esas sensaciones me estaban llevando a un estado de placer y deseo intenso e inesperado
Sus manos se adentraron bajo mi pantalón y recorrieron inquistivamente cada espacio, cada pliegue de piel, cada punto de placer, que me impulsaban a retribuir en intensidad cada beso y caricia recibida. Mi cuerpo se iba acomodando automaticamente para dar paso libre a su exploracion
Ya completamente despojada de temores y pudor, empujada por la emocion y un deseo lascivo, busque instintivamente los botones y cierres de su ropa y los desarme ansiosamente
Lo desnude muy rápidamente, como una experta y le ayude a quitarme mi ropa
En ese minuto se produjo un quiebre.
Me quedo mirando y casi burlonamente me preguntó, Por qué estás vestido así? Se refería a mi ropa interior femenina
No hice caso de su burla y le respondí con firmeza, Sabes que es lo que me gusta y lo que soy. Lo tomas o lo dejas
Titubeó un par de segundos y respondio Ok, no importa
Nos volvimos a besar. El completamente desnudo y yo solo con mi diminuta tanga y la camisola lila graslucida
Volvio sobre mi dejandome de espaldas sobre el sofa. Lo volvi a recibir abriendo mis piernas y flectando mis rodillas, apoyando mis talones en su espalda
Tenía la idea de lo que quería que pasara, pero no sabía como sería posible. Aún con mi tanga y mi camisola
sentía una barrea que limitaba mis posibilidades de sentir, pero me emocionaba estar con un hombre, teniendo intimidad, vestida de esa manera, y era lo que quería hacer
Me excito mucho sentir su pene en mi entrepiernas, rozando su sexo con mis movimientos pélvicos como queriendo lograr penetración
Luego se incorporo y me llevo hacia él sentado en el sofá y yo sentada de frente sobre sus piernas.
Sentí que le incomodaba el roce con mi ropa así que corrí mi tanga para que su pene tocará mi piel. Que intensa sensación sentirlo ahi, desde la base de mi escroto hasta el acceso de mi ano
Eso había querido sentir desde hace demasiado tiempo, y ahora estaba ahi, intentado cabalgar y ser penetrada
Envalentonada por el deseo me decidí a tomar iniciativa y comencé a bajar con mi boca y lengua por su cuello
Común bajaban mis besos por su cuerpo me deslice hacía abajo, sintiendo su miembro duro rozar y dejar una estela de liquido preseminal por todo mi cuerpo, mientras me deshacia de mi camisola, hasta quedar de rodillas en el piso y mi boca a la altura de su pubis.
Tome su pene con mis manos y lo comencé a masajear mientras lo miraba y olía sin atreverme a besarlo
Marcelo tenía sus ojos cerrados y su cabeza levemente hacia atrás descansando sobre el borde del respaldo de sofa, mientras yo acariciaba su pene con mis manos y besaba sus vellos púbicos acostumbrándome al aroma de su miembro. Baje con mi boca hasta su escroto y lo bese lascivamente
Marcelo se estremecía con pequeños espasmos y quejidos de placer. No hubo palabras en ese eterno momento
Tome valor y puse mi boca en la base se su pene. Bese jugosamente todo su miembro sin llegar al glande, saboreando y disfrutando intensamente todas esas sensaciones
Me decidí a pasar mi lengua por la punta de su pene, justo ahí donde brillaba una gotita de su líquido preseminal. Otro espasmo y otro quejido de Marcelo
Recorrí su glande con mi lengua completamente y luego lo envolví con mis labios. Lo introduje lentamente dentro de mi boca haciendo suave presión con mi lengua sobre su frenillo. Marcelo exhaló un suspiro de placer miéntras se estremecia.
Yo adivinando, probando y estimulando ese pedazo de cuerpo de sabor insípido que me hacía sentir tan identificada con el rol que soñaba para mi.
Nuevamente seguí mi instinto. Subía y bajaba mi cabeza tratando de darle todo el calor y suavidad de mi boca, queriendo provocar placer. Y los espasmos y quejidos de Marcelo me decían que lo estaba haciendo bien
De pronto su pene tenía pequeños y bruscos movimientos y cambios de volunen
Estuve así un rato, sin nocion de tiempo, solo disfrutando del placer de dar placer
Cada cierto rato la pelvis de Marcelo se elevaba y parecía que el me penetraba en mi boca
De pronto Marcelo me detiene, Para, para!.
Que pasó? Te dolió? Le pregunto.
Me responde, No quiero acabar en tu boca
Ven ponte aca, me ordena
Me pide que me monte en el brazo del sofá mirando hacia atras. El brazo era redondo, firme y bastante ancho.
Apoyo mis brazos en el borde superior del respaldo y Marcelo me toma de las caderas me tira hacia el y empuja mi espalda, quedando mi cuerpo arqueado y mi trasero totalmente expuesto hacia él y me despoja de mi tanga.
Se acerca hacia mi por detrás, pega su pecho en mi espalda, apoya su mano izquierda en el respaldo del sofá y comienza a rozar su pene duro en mi ano, lubricando con su líquido seminal mi acceso anal
No pude ni quise evitar soltar un suspiro de intenso placer, placer se sentirme deseada y estar en esa situación que había soñado vivir tanto tiempo
Apoyé mi cabeza en mis brazos, sobre el borde del respaldo del sofá, relajé mi cuerpo y me deje poseer
Marcelo me guiaba, sabía que era mi primera vez. Relaja, suelta, puja suave, me decia mientras intentaba romper la resistencia de mi esfinter.
Entre suspiros le pedi, casi preguntando, Usa condón, por favor. Tienes?,
Ok, me dijo, seco. Si tengo.
Me dolió esa pausa. No quería detener ese intimo e intenso momento
Me sentía tan halagada, tan apreciada y por supuesto deseada, que habría muerto en esa exquisita sensación, de manera que fuera la última vivencia que tuviera en mi vida. Que nunca nada podría superar ese momento
Marcelo se separó de mi, y fue a sus cosas. Yo me incorpore y fui a las mias. Y luego fui al baño
Dónde vas??, me preguntó alarmado.
Al baño, le dije, vuelvo altiro
Me unté lubricante y use el asa de una aspiradora para dilatar mi esfinter. Jajajaja. Si, es una locura, pero quería facilitar la labor de Marcelo
Rápidamente volví, lo note contrariado. Lo bese apasionadamente, lo lleve de la mano, y tome mi posición anterior sobre el sofa.
Marcelo, ya con su miembro enfundado volvió sobre mi presionó levemente y se abrió paso dentro de mi
Despacio, le suplique, me duele.
Perdón!, me dijo.
No, está bien, vuelve a hacerlo pero más suave
Volvió a empujar, ahora más suavemente, y mágicamente fue apropiandose de mi, de mi ser más íntimo, de mi voluntad, de mi deseo, de mi amor sexual. Lo ame en ese momento. Mis gemidos de placer lo encendian aun mas
En su primera incursión se detuvo a medio camino, retrocedió y volvió a empujar hasta llegar a lo más hondo que su ser podía alcanzar
Mi mente estaba nublada de emoción y placer, mis balbuceos se transformaron en profundos y encendidos gemidos
El tomó ritmo rápidamente. Me hizo suya en cada embestida y yo me entregué a el en cada choque de nuestros cuerpos cuando llegaba a tope
Su ritmo intenso y sus jadeos me tenían en el cielo del placer emocional, psicológico y fisico. No pude contener mi pasion y le dije entre jadeos y suspiros, Amor, te amo… te amo… te amo
Esa era la que yo había querido ser, esa hembra que el estaba descubriendo, liberando. Lo amaba por eso
Estuvimos una eternidad. Sentía su sexo rozar mis paredes íntimas, y extrañas y deliciosas sensaciones me recorrían entera
Mi excitacion aumento y aumento. Nuestros sonidos posesos, contenidos, ahogados, inundaban nuestro intimo universo. Casi no podía respirar, mi corazón a mil, hasta que un líquido orgasmo me sorprendió casi al mismo momento que Marcelo exhalaba un casi último aliento y se echaba sobre mi espalda y sentí las palpitaciones de su cuerpo cavernoso mientras bombeaba
Todo se confundió en ese momento lleno de emociones y sensaciones intensas
Marcelo, pegado sobre mi espalda y con su sexo aún dentro mío, teniendo pequeñas palpitaciones y espasmos de placer
Penetrandome hasta el tope como queriendo quedarse dentro de mi todo el resto de vida que nos quedaba
Acariciaba mis pezones y besaba mi espalda, mientras yo estaba en un estado de total relajo, sin atinar a nada, recuperando el aliento.
Me tomo por la cintura y nos tumbamos sobre el sofa, sin despegarnos, y riendonos bajito.
Sentía que no me separaría nunca mas de el
Relajamos nuestros cuerpos y Marcelo fue saliendo de mi suavemente. Senti intensamente cada momento de esa separacion. Casi un sentimiento de perdida, dejarlo ir, sin saber si lo volveria a tener. Lo sentí mío y lo estaba perdiendo.
Una vez separados, me tire de espaldas en el sofa y Marcelo se arrodillo en el piso mirandome casi extasiado
Le devolvi la mirada, sabiendo que lo que el veia en mi no era lo que yo queria que viera. Pero habia sido todo tan mágico, tan bello, tan sexual y romantico para mi, que lo tome por la nuca lo atraje a mi y lo bese intensamente
Gracias, le dije. Este ha sido uno de los momentos mas felices e intensos de mi vida y fue gracias ti
Me dijiste que me amabas, me dijo. Si, le respondi, Te amo por todo esto que senti contigo. Te amo con todo mi sexo y mi deseo.
Sonrio y me dijo, Es verdad, lo se. Quieres mas?
Ay amor, me encantaria seguir pegada a ti, le dije, pero el tiempo avanzo muy rapido y no nos dimos cuenta
Uy, es verdad! exclamo.
Nos incorporamos lentamente. Recogimos nuestra ropa, dejamos todo en orden y se fue, con un tierno beso en la entrada del jardin a la luz de la luna.
Volvi a recuperar mi ropa para esperar al amigo que debía llegar a reemplazarme.
Me tire en el sofa y una sonrisa de satisfaccion me lleno el rostro recordando todo ese magico y eterno momento.