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Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por fanny9506.
Hola soy Stephanie, es mi nombre de mujer, actualmente soy una chica transexual de 24 años, mido 1,68 cm, soy delgada, mi pelo es de color negro ondulado largo que me llega a la mitad de mi espalda, tes blanca, un culito redondito gracias a que tengo una dieta equilibrada y una rutina de ejercicios, mi nombre de niño que casi la mayoría de la gente desconoce es Luis, ya que mi transformación fue desde muy tempana para ser precisos a los 12 años.
Mi madre se llama Martha, ella me tuvo bastante chica con tan solo 17 años y ahora tiene 41 años, su forma de ser es muy liberal en cuestión de sexo y algunos taboos que la sociedad ha impuesto para mi parecer y gracias a ella puede tener mi transformación de niña.
Ella tiene una figura envidiable que hasta ahora yo también la envidio, pero para mi suerte tengo algunos rasgos de mi cara a la suya, ella es bastante delgada, su trasero es redondito y busto mediano, tiene una melena de color negro bastante ondulado que le llega a la mitad de la espalda.
Su manera de caminar es muy sensual, dejando a los hombres con la verga parada.
En mi infancia mi madre en ocasiones andaba en poca ropa que hasta llegaba a andar en ropa interior, a lo que yo le decía que quería vestirme como ella, a lo que mi madre me decía que no podía porque era niño.
Era muy apegada a ella, me dormía con ella y por ser tan mimado me daba pena socializar con la gente, a lo que siempre estaba tras ella.
Casi no tenía amigos, pero conocía varias niñas que me juntaba con ellas e incluso jugaba con ellas a las muñecas, y conforme iba pasando el tiempo iba tomando actitudes de niña, y hasta cambie mi forma de hablar.
En la hora del receso me juntaba siempre con niñas y jugábamos a las muñecas u otro tipo de juego.
En la casa casi siempre estaba sola porque mi madre trabajaba así que en una ocasión me había terminado de bañar, así que iba a dejar mi ropa sucia en el cesto, y me di cuenta que estaba una tanga negra de hilo casi saliéndose de un pantalón de mi madre la saque y me la lleve, cuando entre a mi cuarto la saque, me quite el short junto con el calzón y me puse la tanga, al principio lo sentí algo raro, pero después me puse el short y me la deje hasta el día siguiente sin que mi madre se diera cuenta de que la tenía puesta.
Cuando llegaba de la escuela, ya que mi madre no podía ir por mí por el trabajo, por que trabajaba la semana y descansaba los fines de semana, me venía con una de sus amigas porque también iba por su hijo y pasaba por mí.
Cuando llegaba corría a mi cuarto y sacaba la tanga y me la ponía y así andaba hasta al día siguiente cuando tenía que cambiarme por el uniforme.
Todos los día hacia lo mismo, hasta entre al cuarto de mi madre y abrí su cajón de lencería y lo que vi me dejo impactado por que tenía tangas de diferentes colores, brassieres, ligueros, así que saqué algunos y me las probé, en su cuarto tenía un espejo de cuerpo completo y me veía y me quedaba muy a mi medida, porque por mi fortuna tenía una nalguitas muy redonditas y paraditas, en la silla estaba colgado una falda blanca y una blusita rosita con tirantes, saque un brassier del cajón de mi madre y con trabajo me lo puse porque no tenía idea de cómo hacerlo, cuando al fin lo hice me puse la falda y la blusa y me ve vi la espejo y parecía niña totalmente, porque mi cara era muy finita y además muy delgado, pero me faltaba el pelo largo a lo que encontré la solución, me acorde que en el año pasado salí disfrazado de un monstro para pedir calaverita y el disfraz ocupaba una peluca negra, así que fui a mi cuarto porque ahí lo tenía guardado y efectivamente ahí estaba, era negra un poco larga que me llegaba hasta la espalda.
Así estuve toda la tarde hasta que llegara mi madre de su trabajo, acomode todo y me lleve una tanga que me gusto a mi cuarto.
Todos los días en las mañanas espiaba a mi madre cuando se cambiaba y también cuando se bañaba, para darme idea de cómo vestirme en las tardes y la forma de ser de una mujer, imitando sus movimientos, modo de habar y caminar.
Cuando cumplí los 12 años estaba un poquito desarrollada de mi cuerpo, mis nalguitas aún se agrandaron un poquito, que algunos de mis compañeros se burlaban de mi por ser nalgón.
En el tiempo de la secundaria conocí un amigo que se llamaba Victor, y con él me llevaba bastante bien.
De hecho, con el inicie a ser mujercita y fue mi primer novio.
Con el me la pasaba casi todo el tiempo en la escuela, y hasta nos poníamos de acuerdo en salir a jugar videojuegos en un local donde atendía un señor bastante amigable era “Don Toño” que siempre nos apartaba una consola.
Victor era bastante cachondo, pero nada vulgar, hasta eso lo disimulaba cuando veía a una mujer, sea niña, joven o hasta madura.
En una ocasión, salimos como de costumbre a jugar videojuegos, estando ahí en el local, paso una señora bastante buena, que de inmediato paramos el juego porque incluso yo no dejaba de mirarla por espectacular mujer, fue tanta la impresión de Victor que no podía jugar augusto, que hasta nos fuimos temprano de lo normal, me dijo que tenía ganas de masturbarse y ya no podía aguantarse más, a lo que buscamos unos baños públicos, llegamos y pagamos para entrar a lo que yo también tenía ganas de hacerlo, nos metimos pero para nuestra mala fortuna, todos estaban ocupados y solo había uno, así que él se metió pero enseguida me jalo metiéndome junto con él, así que se bajó los pantalones junto con calzones y vi un pene por primera vez, fue tan la impresión que me quede viéndolo, como Victor se empezaba masturbar, a lo que me pregunto de que miraba, yo sin responderle me dijo que me hincara, pero para su sorpresa me hinque y el de inmediato puso su mano en mi cabeza y acerco su verga a mi boca, a lo que yo la abrí y sentí por primera vez un pene en mi boca, una vez eso se lo empecé a chupar solamente la punta como si estuviera comiéndome un helado, no tardo ni 5 minutos a lo que sentí su semen en mi boca y me lo trague enseguida y por estar haciendo eso se me olvido que yo también lo iba a hacer pero se me fue la excitación.
Victor: pinche Luis, me la mamaste muy rico.
Yo: si, pero no se lo digas a nadie por favor.
Victor: si, pero con una condición
Yo: ¿qué quieres?
Victor: que me la sigas mamando
Yo: está bien
Victor: ¿te gusto, Luis?
Yo: la verdad sí, no pensé que alguna vez lo hiciera
Victor: pues para ser tu primera vez no lo hiciste tan mal
Yo: pues, si gustas lo seguimos haciendo
Victor: por mí no hay problema.
Así que me pare, acomode mi ropa y salí, y note que ya no había nadie, le hice la señal a Victor de que saliera, salió y para mi sorpresa, me tomo de la cintura y me dio un beso en la boca.
Victor: va a ser nuestro secreto
Yo: claro
Salimos de los baños y nos fuimos al parque a ver como de costumbre a ver culos que pasaban ahí, nos dieron las 6 de la tarde y nos despedimos y cada quien se fue para su casa.
Cuando llegue me fui a mi habitación, me cambie de ropa y me puse a hacer la tarea en el comedor.
De pronto llego mi madre, y me pregunto cómo me fue en la escuela, le conté que fuimos a jugar videojuegos como de costumbre a lo que después me fui a mi cuarto a hacer mi tarea
Al día siguiente me aliste para ir a la escuela, pero con la emoción de que iba a ver a Victor, llegue a la escuela y cuando entre al salón, él estaba sentado a un lado de mi lugar, me acerque y lo salude como de costumbre, durante las clases no dejaba de mirarlo ni el a mí, termino el día y seguíamos con nuestras rutinas del día.
Los días pasaban y nos ingeniábamos para tener nuestros encuentros un poco íntimos que en este caso eran que yo le mamaba la verga o solamente nos besábamos.
Un día que no había escuela por motivo de puente salimos y no fuimos a los videojuegos de Don Toño, llegamos y había pocas personas en el local, cuando vimos ya no había gente en el local, a lo que Don Toño se nos acercó y nos dijo que nos encargaba el changarro, a lo que le dijimos que sí, se fue y Victor se me acerco y me dio un beso lo que le reclame que no podía por que podrían cacharnos, a lo que él siguió insistiendo, pero de tanta insistencia me deje hacer, cundo de pronto.
Don Toño: ¿pero qué carajos están haciendo?
Victor: perdón don Toño, pero no le diga a nadie que nos encontró así, por favor.
Don Toño: no manches, pero como se le ocurre hacer tal barbaridad, mínimo váyanse a otro lado, pero aquí no, no me
importa si son gays o no, pero aquí no
Yo: entonces no se enojó por lo que vio.
Don Toño: claro que no, además eso no me asusta, y así como está la juventud tan alocada y que hacen puras estupideces pues no me sorprenden.
De hecho, se les veía que eran parejita, ya me lo esperaba.
Victor: pues muchas gracias Don, espero y nos comprenda, pero por mi parte le juro que no lo volveré hacer en su negocio.
Don Toño: pues que le diré, yo también tengo un hijo que es gay y pues ahora es totalmente mujer, y ya está juntada, así que no es sorpresa para mí.
Yo: pues muchas gracias don Toño, pero mejor nos vamos.
Pagamos el tiempo que estuvimos y nos fuimos al parque.
Victor: no sabía que Don Toño tenía un hijo más bien hija
Yo: yo tampoco, pero que bueno que no hizo mucho alboroto.
Victor: sí, que bueno.
Vamos a mi casa
Yo: ¿A qué?
Victor: pues a jugar o no sé.
Yo: pues déjale márcale a mi madre si me deja.
Victor: está bien, mientras que yo también a la mía que si puedes ir
Le marque a mi madre, a lo que me dijo que si, y que llevara la ropa de la escuela por si me quedaba.
Le dije que si me había dejado ir, tomamos el transporte para ir a mi casa y tomar mi ropa de la escuela e ir a la casa de Victor, cuando llegamos a su casa estaba su madre en la cocina, a lo que la salude y después fuimos a su cuarto a jugar según, ya en el cuarto de él, Victor me lanzo a la cama y se puso encima de mí y besándome la boca a lo que le decía que no porque su madre ahí estaba, entonces se separó de mí y se sentó aun lado
Yo: ¿oyes crees que deberíamos de dar un paso más entre nosotros?
Victor: mmm ¿cómo qué?
Yo: que para la gente es muy difícil ver a una pareja del mismo sexo besándose, aunque sean pocos los que lo admitan, pero sé que no importa la opinión de ellos, pero creo que debemos de hacer algo para estar un poco más tranquilo y que no lo sigamos haciendo a escondidas bueno en este caso besarnos.
Victor: ¿cómo qué?
Yo: pues, no sé, que te parece que me vista de niña, es más te tengo que confesar algo.
Victor: ¿qué?
Yo: que desde un tiempo para acá y antes de tener nuestro primer encuentro en los baños, yo me visto de niña en mi
casa.
Victor: ¿enserio?, no lo sabía
Yo: si, me gusta vestirme de niña, estando con estas ropas no me siento comodo, pero espero que algun dia pueda salir a la calle vestida de niña.
Victor: ¿ y porque no lo haces?
Yo: por miedo de que alguien me reconozca y le diga a mi madre de que e encanta vestirme asi.
Victor: mmm vamos, yo te apoyo, es mas tengo la curiosidad de verte asi de niña
Yo: ¿enserio?
Victor: ¿te animas?
Yo: bueno que te parece si salimos este domingo al cine, ¿va?
Victor: si claro, me gustaría, ansió ese día
Nos pusimos a jugar videojuegos los dos y en vez en cuando nos dábamos un beso chico, al poco rato toco su madre a que bajáramos a cenar, a lo que en un rato bajamos y nos sentamos en la mesa, comiendo empezamos a charlar a lo que su madre me preguntaba de donde era y cosas por estilo para conocerme, tiempo después de que termináramos de cenar y un poco de charlar ella se levantó a recoger los platos y se fue a la cocina a dejarla y vi que se le olvido un vaso a lo que me pare, lo tome y me fui a la cocina y cuando iba entrando ella estaba agachada tratando de sacar algo de la parte de debajo de un mueble y vi que salía una pequeña parte de su tanga de encaje negro a lo que me quede un poco sorprendido por ver eso, pero reaccione rápido para que no me cachara por verla, a lo que le dije que ahí estaba un vaso que se olvidó a lo que me lo agradeció, fui al comedor y después ella llego y nos dijo que nos fuéramos a dormir porque ya era tarde y teníamos que ir a la escuela y me dijo que podía quedarme con Victor a dormir porque su cama es bastante amplia, a lo que hicimos caso y nos fuimos antes de despedirnos de ella, entramos al cuarto y entramos a la cama y Victor saco su verga y yo se la empecé a chupar.
Victor: te verías genial como niña, espero con ansia el domingo para poder verte como niña.
En lo que yo le estaba mamando su verga, en empezó a acariciar mi culo a lo que metió su mano de mi pantalón y con un dedo medio saco un parte de mi calzón tipo cachetero de color azul.
Victor: ¿traes ropa de mujer?
Yo: pues sí, siempre cargo uno debajo del pantalón ¿te gusta?
Victor: claro quítate el pantalón ¿no?
Me quite el pantalón y también mi playera dejando solo el cachetero, me voltee y el me empezó a manosear.
Victor: no mames luis estas bien nalgón, me gustan tus nalgas, ¿oye que te echas que huele rico tu culo?
Yo: es que me hago enemas para limpiar mi culo, antes de salir contigo me hice uno y huele a rosas ¿verdad?
Victor: no manches huele delicioso
Victor acerco su nariz a mi culo y con su lengua me empezó a lamber sobre el cachetero, a lo que sentía rico, en eso me empezó a manosear y yo seguía de espaldas tratando de reprimir mis gemidos, cuando sentí se acostó encima de mí, y quedándose desnudo de la parte de abajo, e hizo movimientos como si estuviera cogiéndome y sintiendo su verga rozando sobre mis nalgas y lo que impedía a que me penetrara era el cachetero, el seguía con movimientos suaves.
Victor: tengo ganas de metértela luis, tienes unas ricas nalgas, me gustan
Yo: yo también, pero hay que dejarlo para cuando estemos más que listos para tener nuestra primera vez, y lo que quiero es que sea yo vestida de mujer completamente.
Al poco ratito sentí algo caliente en mis nalgas, era el semen de él, a lo que se quitó de mí y se puso a un lado, y nos dimos un beso, me pare y me fui al baño a limpiarme, cuando tome el resto del semen de mis nalgas me lo lleve a la boca para terminar de limpiar mi cachetero, me lo puse y sentia humedo mi culito, me termine de arreglar y regrese a la cama con Victor, y al poco rato nos dormimos para en la mañana irnos a la escuela.
En el siguiente relato les contare como estuvo aquel dia con Victor y como fue que me descubrio mi madre, ese fue el momento de mi trasformación.
Besos.
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