Mi primera vez como travesti, me hizo su zorra y me encanto
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tenía todo preparado para darme un atascon yo solito, claro y mi otra yo, llegue a un hotel, como a eso de las 12 del día y me instale, llevaba conmigo en la maleta de viaje, un traje sastre, zapatillas, medias, maquillaje, aretes, pulseras y todo lo necesario para travestirme en una tarde estupenda, solo me faltaba ir a realizar un pago al banco, así que salí del hotel y camine,
Al llegar la cola era grandísima y pues yo realmente había preparado ese día con anticipación, y no tenía prisa, me forme y después de mi llego un chavo como de unos 20 años, más alto que yo y más o menos bien parecido, lo mire y en ese momento no pensé nada, al poco rato me toca la espalda volteo, y me dice -oye se te cayo tu credencial- volteé al piso y la vi, me agache para juntarla y sin querer le di un buen arrimón con mis nalgas, insisto fue sin querer, ahh también le di las gracias, nos reímos juntos, me pregunto si era de ese lugar y le dije que no, que solo estaba de paso, y que iba a estar unos días ahí, yo le pregunte que a que se dedicaba y me dijo que era estudiante y precisamente iba a pagar su colegiatura y que tampoco era de ese lugar, debo confesar que nunca coqueteé con un chavo y pues no tenía nada que perder, le pregunte si en la noche haría algo y me dijo que no entonces no dude en invitarlo a mi cuarto de hotel, para tomar algo y salir a conocer y me dijo que si (obvio no le dije mis intenciones, pero creo, ya se había dado cuenta)le escribí el nombre del hotel el # de cuarto, y me dijo que pasaría como a las 6 de la tarde, seguimos platicando hasta llegar a las cajas, después nos despedimos.
Yo me regrese al hotel, comí en el restaurante y me fui a mi habitación, dieron las 6 y no llego nadie y dije –Ok, esta bien no va a venir- me recosté un rato a ver la tv y me metí a bañar, al salir ya totalmente convertido en Ella, depilada, perfumada y con un muchas ganas de travestirme, comencé a sacar mis cosas de mujer, me coloque mi fajita para esconderlo a “el”, que es la misma que me acentúa la cintura además me permite ir al baño es decir deja destapado el trasero, mis pantis negros, brasier con rellenos, mis medias y ligero, zapatillas de 8 cm y un traje sastre con falda corta, blusa blanca y saco, comencé a secarme el pelo con la secadora me lo esponje y lo peine, me pinte los ojos, rímel ,delineador, base maquillaje ligero, labial, aretes, pulseras, uñas, desodorante y perfume de chica, debo confesar que me encanta transformarme y mirarme al espejo incluso tomarme fotos, estaba convertida en toda una “ejecutiva” de alto nivel, me excita verme así y comienzo a juguetear con el espejo ya tomar poses sugestivas, y hecho a andar mi imaginación y me invento situaciones con algún desconocido y eso me súper prende, y cuando ya estoy muy excitada me pongo gel lubricante en el recto y mi consolador y me atravieso, e imagino que estoy con alguien,
Justo en el momento en que me acababa de meter el consolador tocaron a la puerta, eran casi las nueve, me puse nerviosa pues nadie me había visto así, rápido me lo saque y lo envolví en papel, volvieron a tocar y grite con voz temblorosa -¿Quién?- no respondieron, pero volvieron a tocar, me acomode la falda, mis pantis, me di un ultimo chequeo al espejo y dije -vamos a ver qué pasa- abrí y era el chavo del banco que al verme, no me reconoció, se disculpó dándose media vuelta, -dijiste que vendrías a las 6, yo creí que ya no vendrías- le dije-, volteo a verme muy sorprendido y con su cara de sorpresa lo invite a pasar, cerré la puerta detrás de mí, le pedí que se sentara mostrándole una silla y lo hizo seguía pasmado y lo único que dijo fue -eres hermosa,- preguntó- eres, ¿eres mujer?- -¿tú que crees?-respondí, -que sí- dijo el, -pues entonces sí, soy mujer- nos reímos, y yo me senté en la cama, lo que pensé fue que lo tenía en mis manos y ahora en vez de coquetearle al espejo , pues le coquetearía a él, la simple idea me recorrió como escalofrió, y me éxito, me levante al espejo y me incline para mostrarle mis curvas, tomando mi labial lo mire en el reflejo mientras me pintaba, funciono, me miro el trasero y sus ojos brillaron, volví a sentarme frente a él, cruce las piernas y me tumbe en la cama, lo vi cómo me recorrió con la mirada, sin decir nada, me incorpore y me dije – es el momento-, le pedí se sentara en la cama y así lo hizo, yo me volví a levantar al espejo y esta vez me acomode las cejas y por el reflejo vi como no dejaba de verme las nalgas, me pare frente a él y simplemente le pregunte –te gustan- haciendo un movimiento con mis manos para alzar la falda, me vio a los ojos y tartamudeo -es que eres preciosa-, camine asía él y lo tumbe poniendo mis manos en el bulto que tenía entre las piernas le dije -¿puedo?- Intentando desabrochar su cinturón y con mis grandes uñas no pude, el no dijo nada , solo asintió con la cabeza, -entonces ayúdame – le dije, y con rapidez desabrocho su cinturón y bajo su cierre, yo me las arregle para sacar su pene del bóxer,
no quería que se me cayeran la uñas así que le pedí se bajara los pantalones y el bóxer quedando descubierto todo ese gran pene ennegrecido, que tenía esa cabeza tan grande y morada, lo tome con mis dos manos y comencé a masturbarlo woow se sentía rico tenerlo entre mis manos, me pregunte que sentiría tenerlo entre mis labios o mejor aún entre mis nalgas, seguí masturbándolo y comencé a ponerle un preservativo, lo mire y le dije me encantaría conocer su sabor pero no quiero remordimientos, termine de poner el condón y lo metí todo en mi boca quería sentirlo en mi garganta y aunque provoca nauseas es exquisito, busque sus manos y las puse sobre mi cabeza, mientras yo seguía dándome un atascon, se la chupe y lo masturbe , el no dejaba de verme y cerrando sus ojos, dando un gran gemido se vino , sentí con mi lengua como se llenaba el condón, muy calientito hasta que el mismo me aparto, trague saliva y le pase un papel, se levantó y frente a mí se quitó el condón y lo echo a la basura
Después se limpió y se subió los pantalones, me sentí un poco apenada y le pedí disculpas, me dijo que no había problema y que la verdad esa había sido la mejor mamada de su vida, seguimos platicando y riéndonos y yo no dejaba pasar ninguna oportunidad para coquetearle y obvio que mi parte masculina sabe lo que un hombre quiere de una mujer e hice precisamente eso, me agache frente a el para acomodarme la zapatillas, me cruce la pierna no sé cuántas veces y cuando note que estaba al 100, le pedí se levantara, lo tome de la mano y lo puse detrás de mí, de modo que me abrazara y moví sus manos por todo mi cuerpo y mi trasero sobre su pene que ya se sentía explotar, su respiración estaba muy alterada, la sentía sobre mi nuca, comenzó a besarme la espalda y a mordisquear mis orejas, intento desvestirme y le dije que no, porque soy mujer por lo que traigo puesto si me lo quitas ya no lo seré, déjame interpretar mi papel que te juro no te arrepentirás , así me tuvo por un momento fue entonces cuando el tomo las riendas de la situación comenzando a dar tremendos arrimones y a acariciar todo mi cuerpo estábamos a punto de explotar, volví a buscar su pene y lo saque de su pantalón, me aparte un momento, mientras el se quitó los pantalones yo busque otro condón, lo destape y se lo puse, a la vez que le puse lubricante, también me puse en mi entradita, esta sería la primera vez que un pene me atravesara, y se lo hice saber, le pedí que fuera tierno conmigo y me diera tiempo, sé muy bien lo que un hombre quiere y te lo voy a dar, me alce la falda y baje mis pantis que cayeron sobre mis pies, los moví para dejar que salieran, tome su pene para ponerlo en mi ano, y lentamente lo abrí para dejarlo entrar, sentí como tenia urgencia por hacerme suya, había logrado mi cometido tenia a un hombre excitadísimo por mí y eso me bastaba para estar excitadísima también, solo faltaba lo último por culminar, ser poseída por el, para ser totalmente una mujer, me incline para poner mis manos sobre la cama y recoger mis pantis que estaban el, suelo mientras el me tomo por la cintura y siguió metiéndose cada vez más yo sentía todo mi interior completamente lleno, al principio me dolió un poco, pero pude experimentar mucho placer, aunque ahora sé que el mayor placer es sentirse completamente deseada, realizada y atravesada.
Me comenzó a bombear y me empujo para delante de modo que subiera mis rodillas a la cama quedando en cuatro patitas, me jalo las manos y las puso en mi espalda de modo que mi cara quedo pegada al colchón, es un poco dolorosa esa posición porque llegaba hasta el fondo de mi recto, además de sentirme vulnerable era completamente suya, me sentí indefensa , realmente en el sexo las mujeres somos muy vulnerables a lo que nuestro macho desee, pero me encantaba sentirme mujer y me fascina la idea de ser poseída por un macho salvaje y a la vez tierno, después me empujo más hasta quedar completa mente recostada boca abajo y el sobre mí, con sus piernas me abrió las mías y siguió cogiéndome y mordisqueando mi espalda, dando los últimos empujones terminando dentro de mi completamente exhausto se tumbó sobre mi espalda, solo sentía su respiración muy agitada, se salió y se levantó dirigiéndose al baño para limpiarse
mientras yo me acomode la falda que estaba hecha un asco, al salir me dijo que tenía que irse, se despidió de mi con un beso, yo le di las gracias, no nos pedimos ni el numero ni nada, los dos sabíamos que esto fue solo de un rato.
Al cerrar la puerta busque mis pantis y nunca los encontré, seguramente se los llevo como recuerdo, yo seguía excitadísima, así que aun vestido de mujer, saque mi pene me puse en cuatro patitas y me masturbe para terminar con la velada, me desvestí me metí a bañar y ahí la deje justo en el lugar donde había llegado ese día, al salir ya era de nuevo el, me recosté y me quede completamente dormido y lo que hoy les platico es uno más de mis exquisitos recuerdos.
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