Mi primera vez "de verdad"

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por VerooGabbyTv.
Cuando uno quiere bloquear su mente, lo mejor, en definitiva, es recurrir a una de las cosas más instintivas del ser humano; el sexo y el placer.

Así una difícil semana se convirtió en una penosa excusa de bloquear mi mente, y por primera vez, tener algo erótico.

Esta si fue mi primera vez, esta vez no fue desagradable.
Lastimosamente, esta vez no fue 100% como yo quería.

Hola de nuevo.
Soy yo, Nuevamente no me denomino con un nombre, ya que muchas cosas ocurren.
Pero mantengamos algo de consistencia y usemos el nombre que se me dió en un relato previo, Valeria.

Los que no saben de mí, soy un joven heterosexual de actualmente 24 años de edad, que se considera a sí mismo un tanto adicto al sexo.

No alargaré detalles de mí, pasaré directamente a mencionar que esta semana fue difícil.
Revelación: Cuando quiero bloquear mi mente hago algo muy tonto, busco placer erótico, funciona demasiado bien.

Toda la semana he conversado con gente para intentar tener otra ocasión erótica, sin éxito, todas las personas transexuales o travestis que realmente me llamaban la atención cobraban un monto bastante alto y terminaba rechazando sus ofertas sin importar cuantas ganas tenía de "relajarme".

Hombres no me gustan, pese a que he charlado con varios e intentado tener algo con alguno (Un previo relato que ya lo publiqué aquí)

El día de ayer desperté con un enorme deseo, preocupado por ello, ya que no sabía que hacer, comencé a estúpìdamente ingresar a charlar con personas para ver si alguien quería "Un mañanero".

Comencé a hablar con esta transexual (O al menos eso creía), pero desde mi cuenta de varón, ella se me insinuó repetidas veces, a lo que después de una conversación corta, accedió a verme; lastimosamente me revela que cobra, un monto razonable pero aún así, yo no tenía ese monto.

Dejamos de hablar por bastante tiempo, a las 2 horas será que me vuelve a hablar, al parecer, ella tenía ganas de tener algo, entonces me pregunta cuánto dinero tengo, le digo un monto a lo que replica que podría cobrarme la mitad de lo que en principio me dice, acepto.

Para no alargar este relato que de por sí será corto, hubo un pequeño percance con el precio, y lo volvió a "bajar" (no entraré a detalles más que me lo aumentó para luego decirme que sí podía cobrarme lo que en segundo lugar me dijo).

Después de quedar la hora (todo otro problema), me dirigí a darme una ducha.
Estaba emocionado, ella dijo ser versatil, sus fotos se veía muy sexi y provocativa,el único problema era que mis deseos más grandes eran estar vestida yo también, pero esta vez era ir de varón o no ir.

Omitiendo más problemas que tuve para llegar a su "pieza" y para entrar, perdiendo toda la discreción que quería mantener (me pidierón identifiacción para entrar), llegué.

Toco la puerta, espero unos muy largos segundos y me abre la chica de las fotos, cabello y rostro muy parecidos a las fotos, obviamente las fotos tienenfiltros y la hacían ver más fina, pero igual se veía bien.
Morena, de espalda bastante ancha, iba con una pieza erótica encima de unas medias, hilo y brassier.
El brassier.
Vacío, en sus fotos ella tenía senos, pero me engañaron; tenía mucho relleno, pero aunque sea pechos medianos.
No.

Hundido en nerviosismo y timidez, logro sentarme a su lado y conversar un poco.

Hablamos para "calmarme", yo temblaba, lo cual la hizo reir bastante, me dijo que jamás tuvo un cliente que fuese tan pero tan tímido, seguimos conversando y me pregunta qué quisiera hacer.

Después de pensarmela, me salen las palabras, le revelo que me gustaría intentar ser de pasivo y probar un miembro, accede a mi curiosidad.

Mató un poco el ambiente al decirme "Me estás pagando, asi que podemos hacer lo que quieras", más allá de sentirse mal dicha cosa, no pude hacer de todo.
Verán.

Soy una persona algo tonta y pesada, pero creo que lo erótico empieza con roses, caricias y besos apasionados.

Comienzo a tocarla y ella inmediatamente pasa de mi torso a mi pantalón, en eso saca mi miembro de a poco, yo decido sacarme pantalón e interior, así tiene la libertad de jalarlo.
Yo hago lo mismo, se baja su hilo y veo su verga.

Limpia, rasurada y sin malos olores, siento confianza.
Se lo jalo y ella a mí.
Yo por timidez tengo el miembro como una tortuga asustada, ella lo tiene regular, semi erecto.

"Quieres chuparlo?, puedes hacerlo si quieres" me dice.

"Uhm.
Si" respondo timidamente.

Mientras me animo a hacerlo, le digo entrecortado si puedo besar, tengo que repetirselo porque lo digo con voz muy baja.
Me dice que no, que cualquier lugar menos la boca.

entiendo perfectamente, no es muy agradable besar así como así a un extraño, y peor (como ya me ha pasado) si besa desagradablemente.

Mientras pienso si besarla, me acerco lentamente a su verga.
Siento el olor a verga, que siento incluso de la mía, me detiene un poco, pero ya lo tenía ahí, me sigo acercando y siento como levemente me empuja para acercarme, pero sin hacerlo forzado.

Lo tengo a centímetros de mis labios, pienso a mí mismo "Ya, hagámoslo", abro la boca y me acerco, lo meto.

Siento un sabor no muy agradable, que alguna vez sentí al probar los propios jugos de mi pene, pero continúo intentando, lo chupo solo la cabeza y cuando comencé a sentir que ese sabor desaparece, me animo a realmente lamerlo.

Lamí la cabeza, con ligera intensidad, ella mientras tanto jalaba mi todavía asutado pene; me metía su verga a la boca, de a poco lo meto más y más, alternando con lamidas a la cabeza e incluso cuando lo chupo meneo mi lengua teniendolo dentro.

Sin la seguridad de hacerlo bien o no, continúo, lo chupo más y más, creo haber hecho algo bien desde que sentí como su verga se enduraba, no paré de hacerlo, chupaba, lamía y ella agarró mi cabeza y me hizo hacerle garganta profunda, me atraganté y eso me desanimó un poco, pero solo por un momento, continúe chupando su verga, que no era demasiado grande más bien.
Ante la anción ella comienza a meterme el dedo al ano, ella parece que tenía experiencia en hacer eso, ya que lo hizo con cuidado y de a poco, fue ligeramente agradable.

Se la chupo más y más, se lo lamía mientras lo tenía dentro, a momentos me animaba a hacer garganta profunda, o lo llevaba hasta el fondo de mi boca pero de costado haciendo que mi chachete se infle por dentro, continué y continué por unos extensos minutos mientras ella preparaba mi ano.
Debo admitir que uno de esos momento mi verga se enduró bastante, realmente estaba exitado, no sé si por el pene o por el morbo, pero votaré por el segundo.

Cansado, me detendo, a lo que me pregunta

"Quieres que te lo meta?"

"Uhm.
Sí" Digo entrecortado, tímido, incluso indeciso, por lo que debo repetírselo más rotundamente.

Saca un condón y su lubricante, se pone el condón y lo lubrica mientras se masturba, me pone de a cuatro.

Siento como agarra mis nalgas, las abre, rosa su pene entre mis nalgas, cosa que me exita, y luego siento el lubricante y sus dedos por mis nalgas y mi ano, eso me exita nuevamente.
Intenta metermela, con cuidado, rosando mis nalgas, parecían más caricias que penetración, siento lo tibio del lubricante bajar por entre mis nalgas, comienza a intentar meterlo, introduciéndolo de a poco a poco a mi recto.

Lo logra, y comienza a embestir, me acomodo porque se snetía raro en un principio, ella continúa, intento disfrutarlo.

No sentía nada especial, tal vez incluso, algo de molestia, pero de a poco en mi sentido de querer disfrutarlo, comienza a ser meramente agradable, en especial cuando me agarró de las caderas, cuando me apretaba las nalgas mientras lo metía.

Continúa, yo literalmente muerdo la almohada, no necesariamente de placer, pero finalmente era agradable.

Uno de esos momentos siento mi pene endurarce, realmente me estaba gustando ser penetrado, su pene rosaba una parte de mi recto el cual era más agradable que al principio que parecía que sólo entraba al recto, el sentir sus manos en mi cadera, en mis nalgas, exitante, y también en los momentos más altos, cómo su cuerpo chocaba a mis nalgas y hacía un ligero sonido de choque entre su torso y mis nalgas.

Continuó y continuó, yo comencé a disfrutarlo de verdad, sentir todas esas cosas, los roses, los choques, las manos, mis nalgas, y su pene rosando mi interior siendo agradable, volví a sentir como mi pene se enduraba, hasta creí que iba a acabar, me dejé llevar un poco más y gemí levemente.

De estar así por un escaso par de minutos, siento de nuevo desagrado, al parecer mi ano se comenzaba a cansar, pero a la vez, mi recto cedía, sentía como se aflojaba de a poco.
Se detuvo y sacó su verga, se sacó el condón y limpió su verga.
Creí que ya había terminado, pero al parecer sólo sintió que debía dejar descansar mi ano ya que se aflojaba y si salía algo no sería agradable.

Me ofreció que se lo chupe, lo hice de nuevo sin tanto miedo, más por si iba a terminarme en la boca, después de buen rato comíendome su verga, me ofrece ser penetrado de nuevo.

Acepto.

Me pone de a 4 de nuevo, con cuidado lo inserta y me penetra de nuevo, no de manera muy agradable, mi recto se acostumbra y comienzo a disfrutarlo pero ligeramente, mi pene no se endura realmente pero está semi erecto indicándome que tampoco estoy en desagrado.

Me penetra más y más, aumentando la fuerza, yo no siento desagrado por esos momentos, incluso le ayudo y muevo mi cola hacia ella, haciendo que cuando me penetre yo lleve mi culo hacia ella.

Unos 30 segundos fueron realmente placenteros y exitantes, mi verga semi erecta, yo dejándome penetrar fuertemente ayudando con movimientos d emi cola, sus manos en mi cadera y nalgas, unos gloriosos 30 segundos donde realmente me daba fuerte y yo lo disfrutaba, no demasiado, pero era agradable.

Pasados esos escasos segundos de gloria, comienzo a sentir dolor, mi recto colapsaba y sentía como se soltaba.
Ella seguramente lo notó igual, porque no pasó mucho antes de que me lo sacara y sintiera como si yo estuviera defecando, snetí incluso olor.
Y mucha verguenza.

Me ofrece limpiarme, después de ella hacerlo, y botar el condón, entro al baño a hacerlo, realmente estaba con rastros de.
Líquida, me dolía un poco el recto, pero nada grave.
Todos los sentimientos se acumularon, y mi pene se puso como tortuga de nuevo.

Una vez limpio, salí del baño y nos manoseamos un rato, el pene de ella estaba semi erecto, me dijo que podía seguir chupandolo, obedecí.
Pero el mío.
El mío ya no daba más, ni siquiera había eyaculado pero lo sentía exhausto y ya no quería ni ser manoseado, pero con la esperanza de que cambiara, no dije nada y comencé a chupar.

Lo hice con mucha fuerza, incluso uno diría confianza, lo lamía la punta, lo chupaba y hacía pajas a la par, por lo menos me tragaba la mitad de su verga, no quería preguntarle si ya iba a terminar, porque no quería que lo haga en mi boca, pero yo quería que terminara aunque sea sobre la cama.
Lo tonto es que eso fue por un sentimiento de culpa, de no complacerla.

Continué chupando, con algo de gusto debo admitir, lamiéndoselo, intentando complacer a esta travesti tan amable que me acogió (he ahí un chiste), me atreví a hacer garganta profunda de nuevo, varias veces seguidas, sintiendo la cabeza de su pene al fondo de mi garganta y a veces empujando mis cachetes fuertemente.
No dejé de chuparlo, pero tampoco veía algún avance enq ue ella acabase.

Me tomó del cuello y lo empujó para que me tragara su pene, lo hizo un par de veces y me dió un descanso, tomé aire muy rapidamente y continúe chupando su pene.
Agarró y volvió a empujarme a que me tragase su entero pene, lo hizo hasta el fondo que me atragantó, intenté aguantar y logré hacerlo por un par de segundos, estando consciente de lo que me estoy comiendo y que tan profundo está en mi garganta, ella una vez más me empuja, ya teniéndolo hasta el fondo de mi garganta, o al menos hasta donde todavía lo sentía relativamente cómodo, y lo introduce más.
Aguanté alrededor de 5 segundos, después me atraganté de tal manera que tuve que apartarme a tomar aire.

Todo eso ocurrió mientras mi pene estaba totalmente flácido.
Ya me sentía agotado, que posiblemente no llegaría a hacerle acabar, quedándome con las ganas de penetrarla yo, me quedé masturbándola unos momentos, pero yo ya sabía que esto se iba acabando, mi pene flácido, el suyo semi erecto mientras miraba su celular de rato en rato.

Me detuve, y ella lentamente hizo igual, respondió unos mensajes de su celular.

"Ya nos vamos, no te parece?" me dice.

Acepto, me visto rapidamente, entro al baño a enjuagar mi boca, el sabor a pene estaba fuertemente impregnado.

Le pago, me agradece y me despido con un gesto de mano saliendo de su pieza.

Después de pelearme con el cuidador del lugar por no querer devolverme mi identificación, volvemos a su habitación y arreglamos el asunto (esto no es relevante, pero bueno).

Finalmente salgo del lugar, sintiendome asqueado, estúpido por haber gastado dinero en algo así.

Llego a casa a lavarme los dientes y la boca, mi rostro y mis manos olían a pene, pude sentir todo eso camino a casa, por eso apenas pude me asee haciendo locuras como comiendo jabón (si, soy exagerado).

Siento culpa (No pienso explicar por qué), estupidez por el gasto insulso de dinero, incluso asco.

Pasó el resto del día, no sentí mucho dolor en mi ano, a las pocas horas del encuentro ya no sentía nada más que mi recto algo suelto, sentí mis labios y boca en genera extremadamente secos, en la noche acumulé saliba y sentí como algo espeso sabor a pene, hacía eso para deshacerme de ese sabor (Algún lector que me pueda explicar esto?).

Pero al final del día, pese a todos los sentimientos negativos, terminé sintiéndome.
Diremos "Tranquilo", puedo decir que fue una tarde agradable y de experimentación interesante, recordé como mi verga se enduró al chuparsela, como incluso le chupé intensamente, como me agarraba de la cadera y nalgas, y por supuesto las embestidas, que como siendo penetrado mi verga se enduró al punto de que sentí que acabaría.

Debo admitir.
Fue agradable y lo repetiría.

entre las cosas más estúpidas, está el hecho de que tengo intenciones de escribirle a esta travesti, para agradecerle el buen trato e incluso tal vez decir que lamento no haber sido el mejor cliente.
Eso también me hace sentir estúpido, pero en fin.

Considero esta vez mi primera real experiencia, ya que la última vez no fue para nada agradable, pese a estar vestida de mujer, esta vez si me exité, si lo disfruté y casi acabo según entendí en el momento.

Sigo bloqueando mi mente, mientras escribo esto.
Ignoro e ignoro, me hundo en estos deseos que solo aparecen por mi inconsciente que quiere que distraiga mi mente de la realidad.

Qué más ocurrirá?:.
Espero algo bueno, pero más sinceramente, espero detenerme lo más pronto posible.

Gracias por leer.