Mis días de princesa (otro relato)
Seguimos con mis travesías carnales y en como obtuve mi primer pago de meretriz .
siguiendo con las remembranzas toca decir como me convencieron a pasar de una adolescente vestida e inexperta a la meretriz que fui hasta mis veintitantos.
para estas fechas mi libertinaje había subido bastante: ya empecé a llegar mas noche a casa, 10 u 11 p.m., ya no me limitaba a solo las noches cuando mi madre se iba de borracha sino que la buscaba mas seguido para abusar de ella y su cuerpo, recuerden que siempre dormiamos en ropa interior asi que solo era hacerlos de lado y dejar salir la perversion en mi para vaciarme en ella (en otro relato mas detalles), tambien empece a usar la ropa interior que ella dejaba en el cesto de la ropa sucia, manchados y olorosos eran los que preferia usar (hoy en remembranza lo veo de lo mas bizarro, me sentia mas mujer con la ropa de la mujer que me hacia mas hombre…loco no?), o la que me regalaron entre fer y sergio, me la ponia en la mañana antes de irme a la secundaria y si tocaba deportes la usaba abajo de mi boxer; con fer era de vernos casi a diario en su departamento donde ya me vestia completamente de señorita y en la estetica habia aceptado ir a la bodega con el amigo de fer quien tambien agradecio mi ayuda con su dolor huevatico (aquel que me presento cuando fue mi primer vez con sergio, en mi ultimo relato) y se volvio en cliente recurrente, mi primer cliente en si. lo llamo cliente porque aunque las primeras veces fue por «amor al arte», era con fer que me dejó dinero por el sevicio y ya al irme me lo dio asi que en realidad si le cobre desde la primera vez y obvio los siguientes años y es de él este relato.
detalles mas o menos: señor (para mi edad) de unos 35 0 40; llenito casi gordito con piel morena quemada por el sol y cara cacariza, sus manos eran (son porque aun vive) asperas y duras manos callosas por el trabajo duro, trabajaba de cargador en la central de abastos y con una verga normal la podia cubrir con mis dos manos pero con un aguante… neta sin broma una vez fue que me hizo venir dos veces solamente dandome pito y el aun nada que se viera que terminaba, para cuando lo hizo me dejo rosado y adolorido (del dolor rico) el culo. la primer vez con él yo traía unos cacheteros negros de mi mamá que lucia muy bien pero me hizo cambiarlos por unos calzones de niña y un corpiño que eran de la hija de sergio, pidio que lo montara de frente en la orilla de la cama y luego con ambas manos me sostuvo de las nalgas, como toda trepadora lo abrace con las piernas y brazos, en esa posicion muy tierno me daba de besos mientras sus manos acariciaban mis nalgas (mas bien lijaban), cual quinceañera le llene de besos el cuello y lo que podia de su pecho por la pose, me pidio que no le dijera por su nombre sino «papito» o «papá» y me llamaba por el nombre de su hija (hijastra en realidad), para cuando terminó se salieron todos sus deseos de cogerse a su entenada como la copiosa cantidad de mecos llenandome los intestinos y calentandome por dentro, les recuerdo que durante años nunca use preservativo y con el nunca, antes de que me la sacara lo recoste para que disfrutara sentir mi orgasmo dandole los ultimos apretones a su fierro que lo hicieron estremecer, creo que con eso me lo gane de cliente, aproveche que solo me hizo de lado el calzon
– caray mi niña, eres lo que me receto el doctor para mis dolencias, mira que bien curaste este dolor huevatico, con este trato seguro que regreso pronto. se chispa de mi interior y se viste rapidamente para salirse mientras me quedo cambiandome de ropa y limpiando mi culo.
para cuando salgo se ha ido y fer se burla de que aun sali toda roja de la cara.
– igual de colorada te han de haber dejado el culo, o dime que no? el es un amigo muy especial para mi por eso le hable de ti como quien podria quitarle su dolor de entrepierna.
conmigo ya no es lo que quiere pero seguro que vuelve.
– me sentia muy raro cuando me pidio que me pusiera ropa de niña en vez del cachetero que traia pero me encanto la experiencia; le dije. y quien es la fulana que me llamaba?
– es su hija, le trae ganas pero no se atreve a cogersela por eso contigo se desquito las ganas. me habia pedido que lo ayudara con eso pero creo que tu seras su medicina a partir de ahora
nuestras citas siempre fueron en la estética, al principio una vez a la quincena, pero a los meses de empezar me entere que se separo de la que era su mujer asi que luego fue de cada semana que me daba mis visitas para dejarme el gasto consistente parte de carne, leche de papito y dinero (como lo ordena la canasta básica)
Besos a todos y mil bendiciones
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