UNA NOCHE CON UN NEGRO
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mido, 171 cm.
peso 67 kilos, pelo negro largo rizado, labios gruesos y culito prieto, iba vestido con una camisa blanca a rayas muy finas celestes y un pantalón gris claro holgado aunque a estilo de vaqueros, pero lo mejor era mi interior, para mi unas braguitas, celestes, lastima que no podía llevar el sujetador a juego pues cantaría mucho.
Cuando entré en el pub sobre las una de la mañana ya, estaba semi vacio, cerca de mi apartamento, allí estaba él sentado a la barra, solo, cerca hay un pequeño hotel que suele estar lleno de gente de paso, él era uno de ellos, siempre he tenido ese sueño aunque realmente no lo he buscado con ahinco por internet, cuando lo vi bajo el foco en el techo de la barra, a su vez se cruzó con mi mirada, yo me senté en una mesa, pero pronto me di cuenta que él no dejaba de mirar disimuladamente, pronto me di cuenta que él iba buscando algo, me fue entrando una "calentura" cada vez mas, yo a veces lo miraba para que él siguiera el mismo juego y si lo iba siguiendo, así estuve sentado unos 15 minutos, hasta que me fui al servició, son servicios de dos urinarios y dos wateres, como temblé al ver que él tambien fue hacia allí tras de mi, nervioso me puse a orinar en uno de los urinarios él entró se puso al lado a orinar pero mirandome, tengo un pene pequeño, madre cuando sacó aquella manguera, negra mezclado con rojizo, aun sin estar en plena fuerza y ya era muy gorda y larga, nunca habia visto nada igual, él simplemente orinaba me miraba volvía a lo suyo y yo me decidí, me desabroché el pantalón lo justo para que él me viera las bragas yo habia terminado de orinar hacia como el que me arreglaba el pantalón pero realmente le enseñe toda mi braga por otras por mi culo, sentí en un instante su mano, carnosa apretando, al instante me arreglé ya todo estaba claro pensé y habia acertado, que "cachonda" iba cuando salí del baño solo, él fue de nuevo la barra, cogió su copa y se sentó a mi lado presentandose, yo también a él, me dijo que estaba de paso por trabajo en el hotel cercano, pronto fue al grano preguntandome, le dije que era travestís a solas, le puso aún mas pues me dijo era hetero casado.
Salimos del pub pero a mi apartamento primero no queria me vieran en un hotel tan cercano dos no admitirian compañias lo mas probable o habria que dar explicaciones, además de tener que ir yo a mi apartamento a por ropa, llegamos, a mi apartamento, antes de llegar ni me tocó, pero ya dentro todo cambió, esta impaciente, le dije que debía esperar un poco si queria ver mi "transformación", aunque yo tenía miedo interiormente por el tamaño de su rabo, me fuí al baño, dejandolo con una cerveza en la cocina y al fin salí, con un vestido rojo muy ajustado, medias bragas y un corsé, majillada de ojos y labios nada mas, él en el saloncito ahora al verme me devoró con los ojos pocas veces habia visto una mirada así, me agarró y me besó en toda la boca una lengua carnosisima, sentí unos brazos muy fuertes y sobretodo un rabo, pegandose a mi bajo vientre, que parecia no tener fin, me cogió y me puso a 4 patas apoyada mi pecho sobre el sofá, sin yo saber que esperar y me derretí, en un instante, me levantó el vestido, me lamió mi culito, terminé cachondisima, loca intentando cogerle el rabo pero él apenas me dejaba, parecia quererme tener así bien cachonda, así me tuvo, me quitó el vestido, me dejé colocarme entre sus piernas a su vez él ya solo en boxer, con una trompa marcada acojonante, no lo esperaba, PLAM me plantó el primer azote, fuerte grité giré la cabeza, pero de pronto me vi cogida por mi melena haciendome volver la cabeza al sofá como recibí un nuevo y mas fuerte azote, grité de nuevo pero a la vez tras gritar, empecé a tner la sensació de placer de que empezaba a gustarme y así fue, me azotó, si, lo que se le antojó y yo lo disfrutaba, ese placer por primera vez, me lubricó, me azotaba volvia a lubricar mi ano cada vez con mas dedos en mi interior, me habría si y ni me daba cuenta, simplemente lo deseaba, respiraba agitadisima fuera de si, cueleba buscando sus dedos, como una perra en celo, me ardía mis nalgas y me gustaba sentirlas asi y saber que habia sido él y yo no podia hacer nada, me daba igual lo que me hiciera, estaba cachondisima ya a esas alturas y aun me gustaba mas pues él mantenia totalmente el control sobre todo.
Se levantó al fin y se bajó el boxer, impresionante tanto de largo como de gorda aquella verga, al cogerla mi mano sentí su enorme peso, me encantó, al fin la tenía para mi manos para mi boca, me esforzaba en abrir bien mi boca para tenla dentro, que rica, se sentó como un emperador en uno de los dos grandes sillones que tengo y me la dejó comer, un buen rato, él quieto pero dominador, a su vez, mi mano aferrada a su verga la parte que no cubria mi boca, que era mucho mas de la que tenia dentro, me la quitó y empezó a lubricarse desde abajo a arriba quitandome la boca de su polla vi como se lubricaba me dijo me levantara, me dijo la mejor manera era me la metiera yo, lo usé ahora yo como si él fuera el sillón, que artista, no se movia, me dejaba trabajar su verga di grititos me la sacaba volvia a probar hasta que al fin, me fue entrando, yo gemia como una perra me la saqué un par de veces volvi a meterla hasta que él ya si me la metió toda, finalmente grité, ese instante él paro me tenia pegada hasta sus huevos, así quedé quieta y él tambien pegada a él, gimiendo sin parar, hast que empecé a moverme lentamente y muy poco, me masturbé y corri con mi pijito sin estar en erección, pequeño asi me corrí cerré mi esfinteres y gritaba de gusto con aquella verga metida, hasta que quedé quieto reventada, él me sacó de su polla, empezó a pasarmela por la cara yo de nuevo de rodillas a espabilarme y de nuevo me la metio esta vez si me montó en toda regla moviendose con lentitud y a mi gusto tambien pues me hizo pronto gemir como una perra, esta vez él se corrió y dentro, yo tambien tras de él, estaba toda abierta semejante verga y me entrba y salia ya con muchisima facilidad.
Bebimos otra cerveza nos duchamos me dió una lluvia dorada, le comi la verga pero sin llegar a mas, salimos me dijo me pusiera unas bragas, en mi dormitorio y alli volvio a follarme esta vez tranquilamente, cambiandome de posturas dandome mis azotes, lo mismo estaba arriba que abajo de él, lo mismo a 4 patas que encima de espaldas jadeando y deseando tener esa verga dentro sin correrme si pero disfrutandolo como una perra de gusto que me daba, hasta que descargo en toda mi boca, tras mas de una hora follandome, me volvi a correr detras de él, metiendome su polla sentandome encima y masturbandome en nada estaba gritando corriendome y él dandome ademas algun azote a su vez, era ya mas de las cinco y media de la mañana cuando se fue al hotel intercambiamos telefono por si él volvia por aquí, dormí como un lirón en mi vida habia dormido como dormi pensando en que habia sido pero bien follada de verdad, al otro dia aun lo eché mas de menos, pensaba cualquier momento y me ponia cachondisima, igual que ahora, vaya pedazo de amante.
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