a la playa con una amiga.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por rutas21.
Lo prometido es deuda, hoy os contaré el día que fui a la playa con esa amiga que os dije, esto ocurrió hablando un día con ella, le dije que solía ir a una playa semi-nudista y ella puso mucha intención en poder ir un día conmigo. Y así fue, al llegar ella se quedó sorprendida al ver la playa llena de dunas y gente y me preguntó, ¿esta es la playa tan tranquila que me dijiste? yo me eché a reír y le dije, tenemos que ir bastante más lejos, y separarnos de todas estas familias, verás si es tranquila.
Al ver cómo nos alejamos de toda esa gente y empezar a ver los primeros nudistas, ella empezó a reír con picardía y me hizo un comentario de un tío que estaba boca arriba con una buena verga (habrá muchos de estos por aquí) yo reí también y le dije, alguno que otro ya los verás, en el momento que vi una pareja de unos 40 años, (son los más liberales) la propuse ponernos a una distancia prudente, ella me dijo, donde tú quieras y así fue, mientras estirábamos las toallas me dijo que si yo me pondría como aquel tío, le pregunté ¿como? y me dijo como él, sin nada, le respondí, si a ti no te molesta eso suelo hacer en esta playa, ¿A mi molestarme? Para nada, mis pensamientos empezaron a ponerme cachondo y le pregunté ¿y tú? Ella me contestó, me da vergüenza, nunca lo he hecho yo me quedaré en tanga, ok le dije.
Os describiré su cuerpo mientras se quitaba la ropa, 1,70 de altura, delgadita, un par de tetas de infarto y un culo para no dejar de chupárselo en todo el día, cuando la vi ya en tanga, mi polla engordó un poquito y me dije, ahora o nunca y empecé a desnudarme, cuando me quité el calzoncillo pude ver como ella miraba disimuladamente y eso me puso a cien, mi polla estaba un poco más grande de lo normal pero eso a mí me gustó para que pudiera disfrutar y poder compararme al tío ese.
Ya tumbados en la toalla decidí ponerme crema y en seguida ella se ofreció a ayudarme, le dije de acuerdo y luego te ayudo yo a ti, y así fue, mientras ella me ponía crema no dejaba de mirar a todos lados en ese rato vería unos diez rabos pasar cerca de nosotros, le pregunté ¿estás incómoda? Ella me dijo, ¡que va! lo que pasa que nunca había visto tanto rabo a la vez, jajajaja para eso yo todavía no he visto un chochito de cerca, jajaja quizás no tardes mucho me dijo, y le dije ojalá y otra risita, empecé a darle crema por la espalda y al llegar al culo me corté un poco pero ella me ayudó y me pidió que le bajara un poco el tanga para que no le quedara la marca, dicho y hecho lo bajé bastante donde podía verle todo el culo.
¡Que culo! Ahí me recreé un buen rato, mi polla se puso como una piedra, pero ya me daba igual, mientras yo le daba crema ella no quitó ojo a la otra pareja que se estaban poniendo a cien y me dijo, mira como se están poniendo tío, y le contesté, todavía no has visto nada, no jodas tío, con un poco de suerte les verás follar, y tú siendo un tio ¿como lo aguantas el ver eso?
Me tiré a la piscina y le dije, cascándomela mientras los veo, ella se empezó a reír y me dijo, creo que estoy haciendo el ridículo, soy la única que tengo el tanga, así que voy a dejar de hacerlo y tiró del tanga para abajo, no me lo podía creer, ver ese chochito bien depilado junto a mí, te dije que no tardarías en ver uno ehhh, jajaja, se conoce que ella decidió jugar y ya no se cortó un pelo en mirarme la polla descaradamente, está bien gorda chaval, así es le dije, y creo que así va a estar todo el día, pues crema tendrás que ponerte ahí para que no se queme, ¿eso no lo hacías tú? le dije, y sin cortarse un pelo empezó a ponerme crema en toda la polla, no le quedaba más remedio que subir y bajar la mano por toda mi verga, sus piernas se abrían y se cerraban nerviosamente, al mirar su chocho lo vi bastante abierto del calentón que tenía.
Yo la dejé actuar todo lo que quiso y la otra pareja se quedó con el cuento a los cinco minutos empezó a salir mi leche por toda su mano, ella enseguida quitó la mano pero se lo pensó otra vez y me la cogió con más fuerza hasta que salió la última gota, sus pezones se habían puesto durísimos, no me corté y se los toqué con mucha calma, ella se tumbó y mis caricias llegaron al chochito, ella abrió las piernas y me dejó hacer. ¡Que rajita madre mía!
Introduje dos dedos poco a poco, ella no dejaba de mover la pelvis, se tocaba las tetas, se pellizcaba los pezones, cuando noté todos mis dedos húmedos y ella dejó de moverse, vi que se había corrido y su boca estaba abierta como pidiendo mi verga, todo esto con la pareja de mirones cerca, ella se quedó inmóvil, yo me fui subiendo poco a poco hasta poner mi pollón, que ya estaba otra vez en forma, cerca de su boca, cuando se giró un poco y vio esa verga cerca de su boca se fue acercando, poco a poco sacó su lengüita, la pasó por todo el capullo despacito, estiró su mano para cogérmela otra vez y empezó a comérsela sin prisas.
Yo veía como entraba toda mi polla en su boca y salía,saboreándola enterita, en ese momento me dice que día más rico me estás haciendo pasar, y que coste, me gusta más tu pollón que todas las que he visto hoy, nunca imaginé que tendría mi verga en tu boquita uff ¿y te gusta? Solo tienes que ver lo contenta que está mi polla, pues que sepas que esta polla tiene que entrar en todos mis agujeritos, ¿no me digas que te la meteré en ese chochito y por el culito? primero tendrás que meter un dedito en el culo para ver si dilata.
Así hice, mi dedo entró constándole un poco, ella me sacó la mano se la llevó a su boca y estuvo chupándome el dedo un rato, prueba ahora, entró sin ningún esfuerzo, lo sacaba y lo metía hasta que probé con dos y solo sentir los dos dedos en el agujero de su culo y mi polla en su boca decidí correrme sin avisarle, mi leche le escurría por toda la cara, me daban espasmos con cada chorro que salía, una de mis corridas más grandes que recuerde, creo que necesito un baño, tú no crees, me dice mientras se limpia la lefa de su cara, esa fue la mañana.
Luego vimos follar a otras parejas que estaban escondidas por las dunas, ella me decía si me lo cuentas no lo creo lo que pasa aquí, pero gracias por enseñármelo todo pero todo, jajaja a mis amigas les contaré solo parte, pero como es tu polla de grande será lo primero que les diré.
Ya no nos cortábamos nada y si estaba una pareja dándole al manubrio allí mismo nos poníamos a meter mano, un chocho como ese no creo que vuelva a tocarlo, me dice, ¡Mira que dunita para ponerme a cuatro patas! Echó a correr y yo siendo muy pillo fui despacito para poder verla con el culo en pompa, no solo vi eso, sus piernas estaban bastante abiertas y también se veía todo su chocho abierto para mí, me quedé un rato mirándola mientras me cascaba la polla, ella sonrió y me dijo, cuando esté a punto la quiero dentro, ¿quieres que esté a punto? le puse la polla en la boca y le dije, chupa guarrilla, esas palabras la pusieron a cien, me la comía, la mordía, la quiero en mi culo, fóllame, mi polla estaba chorreando de su saliva, me dirigí a ese culazo en pompa, busqué con los dedos el agujero del culo y me dijo, ¡ahí quiero esa verga!
Mi polla entró en su culo una y otra vez, notaba como me iba a correr otra vez y decidí meterle los dedos en su coño, ella empezó a encular con fuerza, me corro le dije, Siiiii, córrete en mi culo y luego verás como sale tu leche de el, porque me lo dejarás bien abierto, eso hice, le tiré mi leche en su culo ella se quedó en esa posición con el culazo en pompa, su agujero se abría y se cerraba, creo que ya va a salir, mientras salía la leche yo se la extendía por el coño, no pares, sigue así.
Empezó a gemir como una loca y a decir, me corro, me corro, quiero que me chupes el coño, mi polla seguía dura oyéndola decir eso, empecé a movérmela mientras le chupaba el coño con mi leche por ahí, todo ello con ella a cuatro patas, me estoy haciendo una paja a tu salud cielo, pues esa leche la quiero en mis tetazas, ya sabía como ponerme a 100, ¿Quieres mi leche guarra?, si ahora mismo me dejaría follar por dos tíos a la vez de cómo me estás poniendo cabrón, mi mano no me daba abasto a mover mi polla.
¿Quieres que te la chupe para que te corras?, decir esas palabras y darla la vuelta, ponerla de rodillas, yo de pie y apuntando con mi pollón a su cara y sus tetas empecé a correrme…como mola eso ver la cara de ella esperando la leche y diciéndome guarradas, córrete en mi boca vamos córrete.
Cuando íbamos para las toallas me dijo, repetiremos, ¿verdad?, ya lo creo siempre que quieras y si te portas bien, lo mismo no vengo sola. Estoy esperando que me llame.
Un saludo…
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