Breves de nenes
El drogadicto y el nene de la tortillería.
A un lado de una escuela primaria había un estacionamiento público de vehículos y enfrente del estacionamiento una tortillería. Detrás del estacionamiento vive un tipo de 30 años, de 2 metros, robusto, moreno, y que siempre consumía mariguana.
Entre semana dicho lugar estaba saturado de gente pero los fines de semana no había casi ningún alma por ahí, solo los domingos se llenaba el estacionamiento aunque la gente dejaba sus coches por lo menos 5 horas y después se volvía a quedar solo el espacio. El estacionamiento era en realidad un terreno baldío que la gente aprovechaba con tal fin.
La tortillería era atendida por un señor y su hijo de 9 años, un nene muy amistoso, juguetón, solitario y casi siempre se le veía jugar o estar rodeado de adultos. Los domingos el papá dejaba al nene un par de horas solo, para que el nene atendiera el pequeño negocio, mientras el señor se perdía, los vecinos decían que se andaba comiendo a una vecina de por ahí así que aprovechaba dejar al chamaco en la tornillería para el ir a coger jejejej.
Varios domingos encontré la tortillería vacía y el nene jugando entre los coches del estacionamiento; varias veces le dije que no hiciera eso ya que le podía hacer algo el mariguano y el nene siempre respondía: es mi amigo, no me hace nada malo.
El nene no era guapo pero cada bien, era simpático. Siempre andaba en pantalones deportivos ajustados y playeras con imágenes de super héroes.
Uno de esos domingos, fui por tortillas y el nene no aparecía por ningún lado, decidí observar entre los coches y cuál sería mi sorpresa que en una esquina del lugar entre unas camionetas, el mariguano tenía sobre el cofre de un coche al nene y se lo estaba cogiendo, sí, cogiéndoselo. La escena fue muy bizarra, y se veía que el nene ya estaba acostumbrado por que el mariguano se lo cogía violentamente y el nene sin quejarse recibía el vergón del mariguano.
Las piernas del nene se movían al ritmo de cada metida de verga que le deba al mariguano. No pude evitar quedarme viendo la rica y agresiva cogida que el mariguano le propinaba al culo de ese nene. Solo se escuchaban en la calle el golpear de la pelvis del mariguana en las nalgas del nene, el bufido del mariguano con cada empuje y el gemido tímido del nene.
Voltee a ver a todos lados y las calles estaban vacías, solo este par de amantes y yo. De pronto el mariguano dejó de bombear el culo del nene, saco el vergón del culo de éste, y la verdad se le veía grande y gorda, lo que me llevó a confirmar mi teoría que no era la primera vez que se cogía al nene, ya que aguantar una de esas por primera vez seguro llevó al nene a gritar a más no poder al sentir como le reventaban el culo. Pero bueno, volví a la realidad cuando el nene se bajó del cofre y comenzó a mamarle la verga al mariguano. No duró mucho el nene comiendo verga por la boca, ya que el mariguano rápido acabo, y lo infiero por qué agarró al nene por la cabeza y lo clavó completamente a su pelvis, y el nene solo le limitó a tragar y tragar semen.
El mariguano sacó el vergon de la boca del nene y éste seguía chupando la cabeza, hasta que el mariguano lo apartó. El nene se acomodó la ropa y corrió a la tortillería. El mariguano ahí se quedó echándose un churro.
Me acerqué a la tortillería y le dije al nene: donde andabas y él se limitó a contestar: jugando. Eso me dejó caliente. Ya que al nene le gustaba comer verga.
como sigue
ohh que rico, me encantó
eso si me gusto mucho las cosas que pasa en la vidad verdad ufff rikisimo, sigue contando bro.
Dale junto con el mariguanero a ese pequeño puto👍