ESPIANDO A MI MUJER
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando ya habíamos acabado de cenar, mi mujer se fue al lavabo mientras me traían la cuenta, me la trajeron rápido, no como la comida, y aproveché para ir yo también.
Los servicios estaban al final del pasillo, al fondo de la trastienda; estaba todo oscuro y olía a meados; había que franquear previamente una puerta para acceder a los lavabos; la puerta estaba entreabierta y me pareció ver una sombra.
Me detuve mientras mis ojos se acostumbraban a la penumbra, y observé a un hombre arrodillado enfrente de la puerta del water de señoras; por debajo de la puerta salía luz, y también de un agujero que había en la misma, y a la que aquel hombre tenía el ojo pegado; su mano se perdía en la entepierna; supuse que quien estaba en el water era mi mujer, y me imaginé que estaba sucediendo; al ruido de la cadena se levantó y franqueó la puerta cruzándose conmigo; no se había percatado de mi presencia; mi mujer abrió la puerta, me fui hacia ella, y le dije:
– no, no cierres la luz
Cerré la puerta con la luz encendida y me arrodillé poniendo el ojo en el agujero que era de un centímetro, suficiente para ver el interior; donde justo enfrente se ubicaba la taza del water, ¡¡que cerdo; el muy cabrón había visto mear a mi mujer!! que pilló un cabreo de narices; a mí al principio me molestó, pero luego hasta me dio morbo el pensar que el tío se había puesto las botas, al verle el coño depilado a mi mujer.
¿Os ha pasado algo parecido alguna vez, en algún vestuario de tienda de ropa, etc.?
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