Familia Corrupción y Sexo 28.5
Dany se puede tomar un descanso con Eve tras salvarla de la Isla, pero la locura sexual no ha terminado….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…
13.5
No habían pasado más que unas horas desde que Dany regresó de su viaje, pero notaba que Eve no se sentía del todo bien, después de esa noche de pasión con Rene, en la que hicieron temblar la cama al sentir sus cuerpos chocar en constante calentura sexual, liberando una pasión extrema, pero al despertar le dolía un poco la cabeza, deseaba aire fresco, sin pensarlo mucho la quería llevar a pasear, cosa que aceptó su mujercita, aunque la menor no podía seguirles por unos deberes, así que antes de salir, el chico fue a ver qué paso con la pobre Elisa, quien dormía en medio de las 3 pequeñas muñequitas sexuales, estas le habían hecho correrse tanto, que por momentos el olor de ese cuarto le recordó el de la isla del placer, la pobre estaba perdida, inconsciente, pero con un gesto de lujuria que apenas cabía en sus labios, aun sonrojada por la pasión sentida, mientras que triunfales, a su lado Mar, Luna y Dayna, yacían sudadas envueltas en jugos de las 4 aferradas a su cuerpo incluso aun babeándolo, no tenía ni idea de lo que paso, aunque notó como Rene miraba todo, se había levantado a desayunar, pero al ver ese cuarto, inspirada por la lujuria sus manitas comenzaban a tallar su pequeña vulva, sonrojada, deseando soñar con aquel contacto intensamente sexual que volvía erótico a quien oliera esa esencia en el aire, haciéndole delirar con escenas de sexo intenso, tratando de averiguar qué tan dura fue la faena sexual para dejar ese resultado, aunque a su lado se hallaba Melina, durmiendo, y Dany notó que había grabado todo, como se lo había pedido, por lo cual tomó su celular y revisó.
En escena vieron como de costumbre le comieron las 3 esa conchita sacándole sus orgasmos, dejándosela tan sensible, si usaron un juego de lengua con dedos, difíciles de resistir, sobaron su cuerpo con tal maestría, en especial las tetillas, las cuales chuparon o lamieron como si desearan sacar leche, también le obligaron a comer sus conchitas, haciendo que se corrieran en su boca, fueron tallando sus sexos en cada centímetro de su piel para impregnarla con su esencia a sexo que parecía volverse sudor, sacándole fuertes gemidos de placer, que se preguntaron ¿cómo es que no les oyeron? En el video intercambiaron besos apasionados, en un juego constante de las 3 contra una, que ciertamente no supo cómo es que soporto la pobre chica a tan abrumadora avalancha de erotismo, quien yacía con una cara de satisfacción, igual que Rene quien volviéndose una verdadera pervertida, miraba el celular, tratando de correrse, pero Dany detendría el video.
No hermanito, no me dejes así – suplico la niña.
Tranquila, yo te arreglo eso – dijo dany y le entregó el celular, para comenzar a comerle la vulva con un gusto, pues como siempre, el saborcito de su linda hermana le encantaba tanto, que no podía dejarla así, y verla deseando placer, era una señal que hacia hervir la sangre del muchacho, empezando a probar aquel cuerpo que escurría erotismo prohibido.
Un contacto bucal bastante fuerte, si parecía estarla penetrando con su boca, intentando llegar lo más adentro posible, haciéndola gemir, en un placer tal que calló y clavó sus deditos al sillón, empezando a gemir hasta que una descarga invadió su cuerpo, miraba encantara a su hermano besar su intimidad, deseaba continuar pero todo acabó cuando Eve llegó para notarla algo perdida, no tenía ánimos, le dolía la cabeza, de lo contrario seguramente hubiera querido su parte, pero no fue así, preocupando a Dany, así que tras darle un orgasmo a su hermanita, ambos salieron esperando que un paseo le hiciera sentir mejor a la chica. Eve se veía nostálgica en varias partes, incluso llegaron al orfanato, donde Julia abrazos a su amiga, haciéndola sentir mucho mejor, pero también le recordó algunas cosas, por lo que volverían a salir. Era un pedido especial por parte de Ella, no sabía que fue de su casa de acogida, pues había salido antes, por ello cuando se enteró del destino del lugar no lo pensó mucho antes de pedirle a Dany, que le llevara.
Era una casona vieja, pero sus cimientos eran fuertes, el chico tuvo que dar un golpe para abrir la puerta, dejándole entrar, el lugar era un desastre todo quemado por un incendio aparentemente, pero se notaban rastros de violencia, ¿Qué paso? Lo ignoraban, y poco importaba.
Los que estaban aquí, eran un tanto molestos, apenas y los traté, yo iba a durar poco, por mi edad seguro que luego me dejarían marchar al ser adulta, pensaba en buscarte, la verdad es que me hiciste feliz cuando me propusiste en juego que fuéramos novios, pensé que de esa forma estabas declarándote, fue tan lindo que no me resistí, me gustas mucho – decía Eve muy contenta.
Ay Eve, no soy tan noble, nunca lo he sido, en verdad soy un degenerado caliente que no tiene perdón de nada, pero te diré una cosa y que sea nuestro secreto, cuando acabe la carrera me caso contigo, tengo que verme como el bueno de la historia, tal vez suene hipócrita, una mala broma después de lo que has visto, pero te quiero a ti en el papel de esposa en este juego perverso – dijo Dany algo sonrojado, porque no le gustaba quedar expuesto.
En serio, pero y las demás – dijo Eve sonriente.
Preciosa, de una vez te adelanto que pienso quedarme con todas, no soy puro, ni noble o parecido, sin embargo tu sí, piénsalo chiquita, Jenny, es una pervertida, lo sabes, Rene, no puedo casarme con ella, igual que con Jane, tienen el papel de lindas hermanitas, o al menos así nos manejamos, Sora y Jade, bueno ya veremos, debo encontrarlas pronto, en todo caso tu eres perfecta para ser mi mujer – dijo Dany viendo a Eve con cariño.
Y con esas palabras derretía el corazón de la chica, sonrojándola, quien le miraba contenta, se le abrazaba para besarlo apasionadamente, pegando su precioso cuerpo al de su macho, quien al sentirle no podía detener sus manos deseando absorber aquel calor tan embriagador, besándola con una intensidad casi salvaje, deseando un lugar para poder beber de las mieles de esa hembra que le volvían loco, aunque serían interrumpidos por el mismo viejito loco de la ultima vez, que iba acompañado de su nieto, un gordito sin chiste:
Eve, preciosa, estas viva, perfecto, déjame te presento a mi nieto, serían una excelente pareja – decía el viejito algo torpe para no darse cuenta de la situación.
Hola – diría nervioso un joven de seguros 16 años con acné, gordo, bajito, y más consciente de lo que veía enfrente, una preciosa joven en brazos de otro, por lo que se sentiría incomodo.
Don Tomas, le dije muchas veces que tengo novio, y se me está proponiendo – dijo la chica abrazando a Dany haciendo entender al anciano finalmente la situación.
Eso acabaría un poco con todo intento del viejito, quedando como una anécdota divertida, al menos para la chica, pues esta deseaba hacer algo y no podía perder tiempo, recordaba que había dejado unas cosas, Dany no entendía nada, pero seguía a su chica para ayudarle, y es que pronto comprendió todo, oculta como una especie de capsula del tiempo, los chicos de acogida guardaron algo, una caja de metal enterrada en el jardín de la casa, ya nadie la recogería, parecía ser que los otros habían sido mandados muy lejos en su ausencia, así que ella tomaría aquel recuerdo como suyo, adentro había cosas de valor sentimental, hasta una curiosa foto donde ambos salían juntos, Dany se sorprendió porque parecían estarse por casar y la chica le dijo que fue una foto trucada por una amiguita, que ella valoró tanto, aparte que era parte de su sueño, entendiendo cuan valioso era lo que le acababa de decir a la chica, aparte ante eso, el joven no pudo evitarlo, besaría intensamente a su mujer, y aprovechando que estaban entre unos árboles, reviviría un viejo recuerdo.
Besaría a Eve con pasión, tratando de sentir su interior con toda la fuerza que despertaba tenerla a su lado, le era especial de forma distinta a las otras, si por ello le hizo el juego de la novia, tenerla tan sexy ahora le hacía hervir la sangre despertando un semental de lujuria, aunque usara una playera de manga larga y unos jeans ajustados que no eran sexys, no le importaba, necesitaba hacerla suya una vez más, no se resistió, pronto sus pechos fueron puestos a la vista de aquel jardín, su mano tocaría aquel rincón especial, con un interés fijo, dejando que fluyera la miel de la pasión desde el primer momento, haciéndole pensar que debía marcharse de inmediato, porque no podían hacerlo ahí, aunque eso no detuvo a Dany de sobar aquellas carnes que conocía bien. La idea de jugar un poco en ese terreno en medio de los arboles le daban un gustito especial, pues tanta pasión en la isla le hizo sentirse enseñoreado con su hembra, quien no podía negarle nada al hombre que amaba, si hasta fugazmente se bajaría el pantalón para que pudieran sus partes más intimas tocarse brevemente, no fornicando, pero si masturbándose mutuamente al rosar de forma erógena, en un juego intimo que los acercaba más entre sí, sintiendo un calor bastante peligroso, pues podían ser descubiertos, escuchaban como Don Tomas pendiente en la entrada, incitando a su nieto a pelear, pero el chico no está seguro, dándole gracia a Dany, quien se sentía mucho mejor a saberse dueño de Eve, quien entre besos ahogaba sus gemidos para seguir en el anonimato lo hacían sentir más importante, llenándose de la fragancia de la lujuria de ese cuerpo tan hermoso, sus muslos, espalda, sintiendo los pechos que eran grandes y suaves, sus brazos aferrados a él buscando tanto su cariño como la pasión, ella gozando como le apretaban sus muslos la verga que se ponía babosa, humedeciendo aquella tanga sexy, tan perdida que parecía dispuesta a todo, tanto que antes de darse cuenta se empezaba a correr, sorprendiendo al chico quien aun le faltaba, así que comenzaba a acelerar su ritmo, pero en su afán de placer, la chica volvía a correrse momentos después, algo estaba pasándole, así que este le diría sugestivo:
Vámonos, aquí no estoy cómodo para mimarte hermosa, volvamos a casa – palabras de Dany que alegrarían a Eve haciéndole seguirle con un gesto enamorado.
Después de ello salieron, y para sorpresa de los vecinos metiches, el pobre chico lucia menos motivado pues siendo algo cegatón, al ver mejor a Dany se daría cuenta que este le sacaba al menos 20cm de altura aparte que se le notaba mucho el musculo en comparación de su vientre abultado, lo que no le gustó nada, así se despidieron, seguramente no los volverían a ver, e Eve se tranquilizaba un poco, respiraba agitada, y veía la caja de recuerdos que tenía, encontrando fotos de muchos de los niños que estuvieron ahí, algunos le conocían, otros no, aunque ya había visto varias fotos, pero entre estas noto una con una niña oriental de nombre “kimiko”, parecía que alguien llegó en su ausencia, pero no le prestó más atención.
Mientras tanto, pasado el rato, mientras Dany seguía pasando tiempo de calidad con sus hembras, un encuentro inesperado se daba en el bar, al viejo Razo le llamaron para ir a ver a cierto cliente, que no se dejaba ver muy a menudo, menos cuando tenía una deuda grande, por lo que fue a encararlo, sin embargo el pobre anciano ya no imponía tanto, aunque al lado de los guardias, eso cambiaba, aparte que estaba en la zona VIP, y al llegar notó que el tipo estaba gozando de una linda criatura, de piel cobriza, de algunos 9 años, delgadita, pero de cara muy bonita, estaba vestida de mesera, con minifalda, medias arriba de las rodillas, camisa clara, fina que parecía poderse transparentar, muy bella la cría, si el tipo la estaba manoseando a sus anchas subiendo sus manos por sus piernas mientras la hacía sentir su verga por el culito.
Veo que estas disfrutando, pero, recuerdo que aun debes bastante, y no es que te tenga en mala fe, pero este es un negocio y las niñas quieren su ganancia – dijo Razo viendo al “cliente”.
Perdón tío, pero no me puedo resistir, está en especial se parece mucho a mis gemelitas, y quiero practicar para cuando las haga mías – dijo el tío Nico con una cara de enfermo sexual.
Sigues buscando el dinero del viejo Geno, verdad, no te culpo, pero al menos espera a que dejen de ser tan pequeñas, que no tienes gracia para seducir, ya me lo contó Rita, papa fofito – dijo Razo un poco fastidiado.
El dinero, las nenas, ambas cosas están bien para mí – dijo Nico desesperado por tocar a la niña.
Mejor cálmate, estas demasiado impaciente, mejor dime ¿Qué pasa con Eddy? será un crio estúpido, pero me preocupa, lo dejaron a cargo de la isla del placer demasiado joven, y ahí están las consecuencias, alguien le robó el dinero de sus sobornos – dijo Razo con fastidio.
Eso hay que investigarlo bien, por eso estoy de un lado a otro, tratando de averiguarlo, pero no encuentro nada, supongo que las fuentes podrían haber actuado mal, deberías revisar los intermediarios – dijo Nico empezando a sobar a la nena por debajo de la ropa.
Si, por eso es que tomaste el carro de Dany, le debes la gasolina también, mira, más vale que arreglemos esto, la isla del placer es un centro turístico muy importante para el club y el gremio, no podemos perderlo, así que compórtate, bueno, te dejo, que a mi edad no es bueno estar fuera, por ahora te dejare eso como un adelanto a tus servicios, pero más vale que encuentres el problema – dijo Razo con molestia a su sobrino quien parecía perdido en la lujuria.
Nico, una vez que el anciano se fue tomó a la niña para acomodarla sobre la mesa, haciéndole a un lado su calzoncito, viendo su pequeña concha con un deleite que parecía volverlo más loco, incluso la olio por unos segundos, como si fuera el éxtasis, le comía la conchita con un desespero total, saboreando la piel o el interior de la nena que se perdía en esa devorada de concha tan lujuriosa, sentía como se le iba el aire en cada lamida que trataba de entrar tan profundo como le era posible, sacándole fuertes gemidos a la criatura.
Señor cliente eso está muy bien – apenas dijo la cría excitada.
Dime papi pequeña puta – dijo Nico obsesionado.
Ay papi, eso se sintió muy bien ¿Qué me estás haciendo? – dijo la niña sabiendo que el “cliente” quería un juego de roles.
Mm, te gusta verdad pequeña puta, voy a hacerte gemir hasta que caigas rendida – dijo Nico mientras le metía un dedo por el culito.
Eso causaría un chillido de dolor, pero no le importó a la niña, quien seguía recibiendo esa lengua con gusto, mientras el tipo se preparaba para lo que seguía, se sacaba su verga, sabiendo que ahí estaba seguro, le encantaba la idea de cogerse a sus hijas, pero estas eran demasiado pequeñas, si les metía la verga de seguro las lastimaría, así que hasta que pudiera, las estaba pervirtiendo, aunque no le salía bien, les despertaba el morbo, pero no con él, buscaban algo mas, por ello en desquite estaba ahí para cogerse a una mini-puta, soñando con hacer suyas a sus niñas.
Ahora si pequeña putilla, te voy a violar – decía el tío Nico mientras sacaba su verga, apuntando sin temor a esa pequeña gruta, y antes que la nena respondiera en su juego, era penetrada con cierta violencia, con un furor bastante grave, si el tipo dejaría los ojos en blanco por el gusto.
Después de eso comenzaría a penetrarla con desespero, haciéndola gemir en una mescla de dolor y placer a la pequeña, quien recibía esas embestidas, con todas sus fuerzas, pues Nico estaba poseído por la lujuria, disfrutaba de las pequeñas tetas, cuyas puntas sobresalían un poco, sintiéndose perdido en la gloria de empalar a la nena, quien llegaba a llorar mientras la hacía suya, abriéndola más al separar sus piernas, saboreando cada parte de su cuerpo, aunque su uniforme estaba desarreglado, pero con ello se sentía mejor, tan caliente, que no podía más que bramar como bestia en celo el tipo mientras se entregaba a la pasión del momento.
Así pequeñas putas, así me las voy a coger, van a gozar la verga de papi, serán todas mías – se burlaba el tío Nico mientras cogía a la nena, quien era sacudida con cada movimiento de cadera.
Tan perdido estaba que se corrió sin darse cuenta, y su verga perdió fuerza, pero seguía metiéndosela con la verga algo blanda, lo cual le permitió a la nena gozar un poco, aunque al ver eso fastidio un poco a Nico, quien sacaría unos billetes y se largaría sin decir nada, dejando a la niña sobre la mesa recuperándose…
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!