La Escuela Nudista 1.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, mi nombre es Iván.
Cuando tenía 17 años, por ciertas razones tuve que ira vivir con una prima llamada anabelle.
Bien, el título es, escuela nudista, la verdad es que nunca entendí de todo la razón del porque, pero la escuela a la que nos mandó a ir mi prima, era nudista, al menos para los hombres.
Era por algo religioso, algo de una religión neopagana que adoraban al culto femenino y bueno, yo estaba en último año.
El día antes del inicio de clases, mi prima Anabelle, me hizo bañarme frente a ella para asegurarse de que fuese muy limpio a mi primer dia en la nueva escuela.
Nunca en mi vida había estado desnudo frente a una chica y nunca había tenido tanta pena, aunque al día siguiente tuve más pena todavía.
Llegué al colegio diez minutos antes de que empezaran las clases.
yo iba a tener que desnudarme,.
Una profesora bajita y de grandes tetas no recibió.
—ohh! Eres el chico nuevo? Iván, cierto? —quitate la ropa aqui y guárdala en el casillero A21, tu clave es 3496.
Los casilleros de los chicos van junto a la entrada, aunque hay pocos chicos, tu eres el único de los años mayores, los demas son de primaria o de primero y segundo de secundaria…
De mala gana me quité la ropa, lo hice lento y antes de terminar, dos niños de primarias que llegaron despues de mi, se desnudaron sin problema y se fueron por el pasillo con sus pequeños penes pálidos.
Quedé desnudo.
Me cubrí el pene y menos mal que lo hice, porque en ese momento pasaron dos chicas de 15 años y me vieron riendome y yo me puse mas rojo todavía.
Sonó el timbre para entrar a clases.
La profesora baja y tetona me guió a mi salón y pasé desnudo delante de muchas chicas que me sonreía.
—es este —dijo y se fue.
Yo me quedé un momento sin moverme, pues no quería entrar ya que estaba desnudo y adentro habría muchas chicas de mi edad (16—17 años).
De repente, escuché un ruido, me volteó y veo a una señora mayor, recogiendo utensilios de limpieza del suelo, era la conserje, allí volví a mi e instintivamente la ayudé a recoger todo y ella me sonrió y dijo gracias.
Me voltee yo y vi a tres chicas parada junto a la puerta del salón.
Dos bonitas y de cabello negro.
La otra, era la chica mas linda que habia visto en mi vida, flaca y blanca, de cara muy bonita, cabello castaño y estaba sonriendome directamente a mi.
Me quedé viendola con cara de idiota y sentía un calor dentro de mi, entonces miré hacia abajo y vi mi pene erecto y duro por aquella chica hermosa.
Me cubri.
La Chica hermosa me miró extrañada y luego sus amigas la arrastraron hasta el Salón.
Luego entré yo al salón trapandome el pene erecto y me senté lo más rápido que pude.
La clase comenzó y como en todos los colegios, la profesora nos hizo pararnos y presentarnos.
La chica hermosa se llamaba Laura, y sus dos amigas era Gabriela y Josibel.
A mi, no se conformó con que me parase y dijera mi nombre, sino que me hizo pasar al frente.
—hola… soy… so… soy… Iván —me presenté yo tartamudeando por la pena.
—Sr.
Iván, no le han enseñado que es de mala educación cubrirse mientra habla con las personas.
Así que enfrente de todo mi nuevo salón, todas chicas,me tuve que dejar de cubrir el pene y dejar mi pene flacido a la vista.
Varias chicas se rieron.
Continuamos el resto de la clase.
Fue una clase normal como en cualquier otra escuela, como que era el primer día, no hicimo mucho y la mayor parte del tiempo fue hablando.
Yo tenía mucha pena y casi no lograba articular palabras.
Pero aun si varias de mis nuevas compañeras trataron de hablarme.
Terminó la primera clase y tuve que salir del salón cubriendome el pene.
Me senté sólo en un banco que había en el pasillo.
Chicas y niñas de todo los años se me quedaban mirando (el colegio era de penúltimo de primaria a ultimo de secundaria), creo que era por que yo era el único de esa edad en el colegio.
La chica linda que me había provocado la erección antes, Laura, se me sentó a lado junto una de sus amigas, Josibel.
Muy simpaticamente, ambas comenzaron a hablarme.
Yo al principio tenia demasiada pena, hasta que después de un rato hasta me olvides que estaba desnudo.
Josibel se levantó porque le sonó el telefono y se fue a contestar.
Me quedé solo con Laura.
Estuvimos hablando un rato y habíamos conectado.
Después de unos diez minutos ella dijo:
—eres nuevo en nuestra religión, verdad? —y me volvió a dar pena.
—eehhh… si…
—y nunca antes habías hecho nudismo?
—no…
—umm, con razón tienes tanta pena —Me dijo— pero no tienes porque tener, además, tu pene es lindo…
Allí, Laura bajo su mano y acarició mi pene.
—es cabezón—dijo riendo y mi pene se puso erecto entre sus dedos— jeje, ni siquiera es pequeño, es de tamaño normal.
debe medir uno… umm, 15cm asi erecto…
Mi pene estaba erecto y duro y Laura me lo acariciaba.
Ella acariciaba mi pene caliente con sus dedos fríos, acariciaba el tronco y con el pulgar acariciaba la punta de mi pene.
—hey! —exclamó una chica de nuestro salon, yo me sobresalte pero Laura no.
Tanto fue el susto que tarde un momento en darme cuenta de que la chica no llevaba ni camisa ni sostén, iba con las tetas al aire como mi pene.
—Te llamas Iván?
—ehh, si…
—jajaja, porque te pones rojo?
—ehhhh ehhhh hhhh…
—jajaja, bueno… hice una apuesta con una amiga, la que perdiera debía hacer una rusa al nuevo y… perdí yo…
—una rusa…?
—es masturbarte con sus senos —aclaró Laura.
—vamos! —dijo Paola y me levantó jalandome de las manos.
Enseguida, Paola se puso de rodilla frente a mi pene.
Ella era un poco tetona y se notaba que muy voraz.
Acarició mi pene erecto como había hecho Laura.
Entonces, por primera vez en mi vida, una chica lamió mi pene.
Paola sacó la lengua y levantado mi pene, lamió el tronco y luego chupo la cabeza.
Se lo sacó de la boca y me sonrió, luego puso mi duro pene entre sus tetas de 17 años.
Apretó con sus manos sus tetas contra mi miembro y empezó a pajearme.
—acaba pronto que tenemos más clases —me dijo.
Sus tetas se movían frenéticamente masturbando mi pene, que ardía de excitación.
—apurate!! Acaba ya! —me dijo cuando ya llevabamos unos diez minutos así.
Yo intenté aflojarme para eyacular, y en unos diez minutos mas (ya el timbre había sonado) empecé a sentir el semen y poco después salió disparado de la punta de mi pene.
El semen cayó todo en el cuello y barbilla de Paola y un poco en sus tetas.
—aahhh —gemí yo.
Paola se paró riendose, me dio un beso en la boca y al salón con su cuello lleno de mi semen.
—vamos —me dijo Laura y nos fuimos juntos al salón.
Yo ya no me cubría el pene porque me olvidé momentáneamente de la pena.
En la pared frente a nuestro salón, había una niña de unos 12 años, desnuda de espalda y detrás de ella un niño de la misma edad, también desnudo que la penetraba con su pene aun no desarrollado.
—entra rapido! —me ordenó Laura cuando yo mequedé en shock con esa imagen.
En el resto del día no pasó nada en especial, me la pasa hablando con Laura y sus amigas.
existe esto?