LA ZORRITA DE MI MUJER

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola me llamo Dagoberto y mi Mujer Aurora, pasamos de 40 años, y vivimos muy felices, mas ahora que hemos disfrutado más del sexo, esta fue nuestra iniciación en estas actividades.

Resulta que un día mi ahijado de 20 años se quedo a dormir en la casa, esa noche tomamos mucho licor, y platicamos, hasta que Alberto mi ahijado se quedo dormido, lo recostamos en la sala y nos fuimos a acostar, pero después de un rato mi mujer se levanto de la cama, y al ver que tardaba demasiado fui a ver que pasaba y la descubrí haciéndole una puñeta a Beto, quien dormía profundamente, pero no fue impedimento para que tuviera una erección

Me excito demasiado ver como Auro le mamaba el fierro y se lo jalaba con una pasión, me gusto ver como se lo metía todo en la boca hasta llegar a las bolas y lo succionaba como a mi me lo hace, debió haber sentido lo rico que yo siento cuando Au me lo hace, esos besitos y lamiditas que da, a cualquiera lo hace venirse de inmediato, y después de un pequeño rato de chuparsela Beto se derramo en la boca de Au, quien no desperdicio ni una gota de leche

Así continuo masturbándolo hasta que se le bajo la verga quedando flácida, ella se incorporo y al volver a la habitación se llevo una sorpresa al verme, quedo muda y no hallo mas que decirme perdón, y le respondí que solo la perdonaría si me la mamaba así de rico en ese momento

Una sonrisa picara dibujo en su rostro y de inmediato se prendió a mi verga que estaba a punto de estallar, y nomás aguante dos chupadas para derramarme en su boca pero ella continuo chupando y lamiendo, hasta lograr otra erección de mi verga, se puso de perrito y me dijo que la chiquitiara, rápidamente se la metí por su culito y le bombee sabroso, así permanecimos en ese mete y saca, hasta que ambos llegamos a un mega orgasmo, desde ese día disfrutamos mas del sexo, y le di permiso a mi mujer para que tenga romance discreto con su jefe.

Y estamos en espera de animarnos a invitar a otro hombre para penetrarla entre ambos.