Me bajaron los pantalones

Pantalones bajados hasta los tobillos .
«Mi nombre no es lo importante sino una experiencia que tuve en la escuela preparatoria o instituto tecnico de bachillerato y mi experiencia fue en el bachillerato, normalmente estábamos divididos en dos grupos que según nosotros éramos bandos, entonces yo entre al salón porque llegué primero y me esperaban 3 chicos del bando contra que siempre intentaron intimidarme pero nunca me deje, llegué al salón, deje mi mochila en mi pupitre y dos tipos me agarraron por detrás y el tercero bajo mis pantalones y calzones mostrando mi pene a ellos, senti el aire golpear mis genitales, nalgas, piernas, algo que sacudio mi ser como un escalofrío aunque no precisamente de frio o miedo era, sino algo mayor algo casi, casi inexplicable pero no senti que fuera un sentimiento negativo o malo o algo parecido por el estilo, entonces en ese momento vi la cara de envidia del tipo que tenia en frente pues la verdad tenía yo un pene bastante grande, así que me llene de valor y cuando me soltaron en vez de reclamar o subirme mis pantalones, puse mis manos en la cintura para que se levantara mi playera y se viera más mi pene, ahí le dije al bato, que envidia, no te gustaria tener una del mismo tamaño, no les di gusto y empezó a caminar con los pantalones bajados a los tobillos arrastrandolos por el piso hasta mi pupitre y postre mis nalgas desnudas en el frío banco, ellos se fueron desconsoladamente ante mi falta de vergüenza y dure así hasta que de lejos vi a una chica del aula llegar, entro y me vio sentado con los pantalones bajados hasta el piso, trate de ignorarla pero era muy visible mi semidesnudezy ella ya estaba adentro mirandome, me dijo porque estaba semidesnudo, en eso me puse de pie y empecé a explicarle lo que paso, aun con mis pantalones en el piso y camine unos pasos al dededor del aula arrastrando mis pantalones sobre el piso y yo mire hacia abajo y vi mi pene flacido y mis pantalones en el piso, la volte a ver y le explique lo que habia pasado, ella dijo, entiendo, mal nacidos esos tipos, agradeci y camine aun arrastrando mis pantalones hasta de nuevo a mi pupitre cuando la volteo a ver nuevamente despues de volver a poner mis nalgas desnudas en el asiento y me dijo pero ya puedes subirte los pantalones senti que tal vez se sinto ofendida, que aproveche el momento para andar de exhibicionista o yo no se, me agache y subí mis pantalones de a poco, la verdad hasta me hubiera gustado quedarme así pero no podía buscarme problemas,»